No he escrito nada en mucho tiempo, lo sé. Pero por si les interesa en cuanto tenga tiempo seguiré mis otros fics ( eso será como a final de año ). De ninguna manera los he abandonado!
Naruto no es de mi propiedad.
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Capitulo
Uno.
Wasteland.
Tal vez fue la mirada en sus ojos. Tal vez fue como bajaba la vista y presionaba sus labios en una triste línea. Tal vez fue como sus ojos blancos se iluminaron al verlo gritar entre el grupo.
Tal vez fue ese gesto, esa mirada adolorida y de ilusión frustrada, tal vez fue como se mordía las uñas ingenuamente, tal vez fue como desaparecía por la puerta al verlo junto a ella riendo y jugando.
O tal vez nada… No, estaba convencido de que era ese gesto en particular. Ese pequeño gesto de sus manos.
Ahora sus manos toman su cuello con gentileza y es sólo en sus manos donde ella puede distinguir su fuerte necesidad y ansiedad. Sus ojos no traicionan nada cuando se acercan; acechando, absorbiendo cada movimiento de su boca temblorosa. Ahora sus labios rozan peligrosamente la piel de su mejilla y observa con intensidad como aquella piel se vuelve cada vez más roja. Ella no puede dejar de notar el aliento caliente en su cara, lo está haciendo a propósito, es claro y la pone cada vez más nerviosa. La respiración de él es lenta y quieta, casi esperando, torturando hasta el minuto donde ella explote, pero mientras espera aprovecha de pasear su boca suave y rigurosamente por el resto de su cara.
Justo cuando está al borde de su oreja ella no puede evitar cerrar los ojos y dejar que aquel escalofrío la recorra entera. Él no se mueve ahora, la tiene aún atrapada del cuello y se extiende alto y autoritario en frente de ella. Ella ya no tiene nada más que dar, nada más por lo que aspirar y su cuerpo se disuelve entre sus manos, lo único que la sostiene ahora son sus manos en su cuello, el calor de su cuerpo tan cerca del suyo.
No puede dejar de pensar en lo fácil que puede llegar a ser.
La suelta.
De la nada, la suelta. Ella está punto de perder el equilibrio y puede finalmente volver a respirar. Respira profundamente y no es capaz de mirarlo a los ojos. Es como si en ese mínimo y casi absurdo momento de intimidad entre ellos hubiese pasado mucho más que un simple casi-beso.
No se había dado cuenta pero los minutos no fueron sólo minutos. En aquella hora, en aquella pieza color naranja por el sol de la tarde pareciese que ambos dos se conocieran de toda la vida. O al menos esa era la impresión que debía dar. Pero ella no puede evitar sentirse incomoda bajo la intensidad de sus ojos.
¿Qué quería? ¿Quería humillarla como el resto? ¿Quería burlarse de ella? ¿Quería usarla?
Todo parece estar en una espantosa cámara lenta. Lenta, muy lenta, naranja y tierna por el sol detrás de las cortinas cerradas. Pero no estaba bien. Ya no se sentía bien.
"Por favor, Sasuke… no lo vuelvas a hacer" dijo en un suspiro para luego salir sin darse vuelta de la habitación.
Y ahí estaba ese gesto de nuevo. Algo había en ese gesto, no podía entender bien qué pero le provocaba una presión fría en el pecho. Sin duda, esto no era por lo que estaba buscando cuando volvió a Konoha. Y no, no le gustaba para nada. Odia las cosas que no puede entender.
No pudo dejar de notar como el calor se iba extinguiendo de sus manos.
"Hn…" fue lo único que pudo decir luego de sentarse, apoyar el mentón en la palma de su mano y mirar aburrido las cortinas cerradas.
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Espero que les haya gustado! Reviews por faa :D!
