Este relato está ambientado y basado en el mundo creado por el autor Tite Kubo en su obra manga titulada Bleach. Todos los personajes a excepción de su protagonista son tomados de dicha obra. Puede encontrar algunas diferencias u otras observaciones creadas por el autor, pero la esencia es la misma.
Puede dejar toda clase de reviews. Críticas sin piedad y buenos comentarios serán bien recibidos. Espero que lo disfruten tanto como yo.
Ryoka
Matsumoto
Aquella melodía otra vez. Sabes que está cerca.
-No puede ser, a desenvainado su zanpakutoh... - Tus palabras rozaron el viento.
El silbido de Densetsu. Sólo una vez lo habías oído anteriormente.
Rápido corres a su encuentro, su reiatsu te indica su posición. Te vuelves para comprobar que nadie te sigue. "¿Qué esta ocurriendo?"
-La Zanpakutoh legendaria, Densetsu, ¿eh? Veo que vas en serio... Kirtash.
Reconoces su voz, es... ¿Gin? El nombre que pronuncia provoca una alteración en tu cuerpo.
-Llévame ante Aizen, Gin, no quiero tener que repetirlo.
-Veo que a los demonios como tú se les ha negado la capacidad de abrir una Garganta.
-No intentes burlarte, sabes que no funciona conmigo. El tema no es si sé o no abrir una Garganta, eso me da igual. Quiero que me lleves directamente frente a Aizen.
-Aizen-sama. - Le corrigió.
-No me importan los títulos, Gin.
Cuando llegas, observas como Gin muestra su habitual sonrisa y su inmaculado aspecto. Tienes que moverte para apartarte de los árboles que obstruyen tu visión. Ahí está. Es él.
-Kirtash, Kirtash... ¿A qué viene tanta urgencia?
Kirtash camina hacia su oponente muy lentamente. Sientes un acelerón en el corazón. Hacía tantos años...
-Gin, no quiero pelear. Lo sabes.
Gin suelta una carcajada. Kirtash aparta la melena de su cara con un gesto muy característico. Sus ojos como la noche del desierto miran implacablemente al sonriente capitán, o debiera decir, ¿comandante del ejército Arrancar?
-Desde siempre, Ryoka...
-¿Aún me llamáis así?
-¿Cómo quieres que te llamemos?
Recuerdas aquellos años. Los rumores de la Academia. Ryoka le llamaban todos. El cobarde que huía del combate.
-Se ve que aquí los años pasan prácticamente en vano.
-Te equivocas, los años pasan como en todo mundo, pero los pocos que te recordamos, sabemos cual es tu nombre.
-Me aburres, Gin. Siempre llevándome la contraria.
-Eres tú quien lleva la contraria a todo y a todos.
Ya está muy cerca de él. Empiezas a sentir algo por dentro, algo que te impulsa a detenerle.
-Sé que no lo harás, Ryoka. Eres incapaz de enfrentarte a nadie.
Gin sonrió más ampliamente y se dio la vuelta. Kirtash enarboló a Densetsu y cargó contra Gin con el estallido del primer trueno. Sin embargo, no había tormenta, el cielo estaba completamente despejado y cubierto de estrellas en la apacible noche.
La zanpakutoh legendaria había hablado.
El estruendo puso en marcha tu cuerpo. Incapaz de quedarte ahí parada, utilizaste el Shunpo para colocarte entre los dos hombres, con los brazos extendidos y expresión melancólica y confusa.
-¡Detente Kirtash!
Ninguno de los presentes, salvo Gin, notó la disminución de su sonrisa que por un momento casi se tornó en seriedad.
Kirtash se para frente a ti. No trata de esquivarte ni de apartarte. Oyes la voz de Gin a tu espalda:
-Matsumoto... ¿qué te trae por aquí? - La sonrisa vuelve a su rostro.
-El destino, supongo.
-Lo siento, Matsumoto, tengo que seguir con esto... - Kirtash apartó su cara desviando esos ojos misteriosos.
-Pensé que esto había quedado mucho tiempo atrás. - Terciaste dirigiéndote a Gin.
-Te equivocas, Matsumoto. Esto no es lo que tú piensas. - Refutó Kirtash.
-Claro que lo es. Quieres enfrentarte a Gin para ver a Aizen. Pero eso sólo alimentará vuestra lucha. Él no te llevará hasta Aizen, Kirtash.
-Vamos Ryoka, escúchala. Tiene razón. Has venido para luchar conmigo, ¿no es así? Para eliminar una de las piezas. ¿Justamente es a mi a quién le pides que te lleve ante Aizen? ¿O es que quieres medir tus fuerzas?
-No es eso. Pretendía que nadie más se enterase de esto. Debí imaginarme que aparecerías, Matsumoto... - El shinigami apartó a Densetsu. Pronto sólo quedó ante Gin y Matsumoto un remolino de aire de despedida.
-¿Qué es lo que ocurre...? - te preguntaste en un susurro.
-Qué oportuna eres, Matsumoto. Sabes perfectamente que este no es un intento de enfrentamiento como en la academia. De ser así, sería yo el causante - te dijo con su sonrisa.
-No lo sé... Pero sé que he hecho lo correcto. No podíais enfrentaros aquí, ahora.
Él se limitó a sonreírte, acarició tu pelo y se marchó.
Recordaste mucho años atrás. Cuando tú y Gin ingresasteis en la Academia Shinigami. Gin era un chico austero, pero bromeaba de vez en cuando. Ambos erais muy amigos en aquella época, aunque no estuvieseis demasiado tiempo juntos.
Había un chico. Kirtash se llamaba. Todos se sorprendieron cuando oyeron el nombre de su zanpakutoh por primera vez: Densetsu...
Bastó que la desenvainase para que todas las miradas recayesen en él. La melodía que brotó del roce de la zanpakutoh con su vaina impactó hasta al instructor al mando. Inmediatamente se convirtió en el objetivo de los aprendices con más grandes aspiraciones y, como no, Gin mismo fijo su mirada en él, como nunca le habías visto hacer en nadie.
Aquello fue antes de comenzar los entrenamientos con las katanas. Kirtash se negó enérgicamente.
-¡No voy a usar a Densetsu ni ninguna otra katana para enfrentarme a mis compañeros! - le bufó al instructor.
-Pero es tu deber como aprendiz en esta escuela. - Riñó el maestro.
-¡Pues olvídate, se acabó, me largo!
Aquella discusión la habíamos escuchado todos en el primer día de entrenamiento. Sabíamos que algo sucedía con Kirtash porque recibía un trato... especial. Pero no volvió a aparecer en ningún entrenamiento que implicase enfrentarse a otro compañero.
Hablabas con él en algunas clases, cuando Gin no andaba cerca. Os hicisteis amigos rápidamente. Le preguntabas: "¿Por qué no luchas como el resto de nosotros? No nos vas a hacer daño."
-Va en contra de mis principios. - Te respondió con una alegre sonrisa. Era un chico muy jovial y alegre. Te gustaba, en cierta medida.
-¡Ryoka! ¿Seguirás pirando las clases de lucha? ¡Eres un cobarde! - Ryu interrumpió la conversación. Aquel chico lo conocías, era uno de los primeros de la clase. Se metían con Kirtash porque querían vencerlo en combate.
-Lo siento, Ryu. Te patearía el culo, pero no me gustaría herir tu ego. - Dijo como si aquel chico fuese un amigo que le gastaba una broma.
Todos aquellos cafres se reían de él, pero le importaba muy poco. Siempre supo como evitarlos y rodearse de la gente más débil y humilde. A ellos los intentaba ayudar incluso en materia de lucha.
-Si sabes tanto, ¡¿por qué no luchas?! ¡¿Por qué dejas a esos fanfarrones que te toreen?! - Le soltaste volviendo al asunto y cabreada porque alguien que nunca había luchado le enseñara.
-Sabes que no es mi estilo. Quizá pronto me echen por ello, Matsumoto. Ya me han avisado varias veces que si no lucho me expulsarán y mi estatus no me librará de ello...
No sabías muy bien a qué se refería con aquello del estatus. No era muy dado a hablar de sí, pero estaba claro que le echarían pronto por no seguir la normativa, aunque tú no querías que pasase. Sabías como animaba a la gente, como te animaba a ti cuando Gin no estaba. No querías perder otro amigo.
No tardó en llegar el día en que le obligaron a hacer la misión con Gin Ichimaru. Tuviste miedo. Gin se enfrentaba a todos los alumnos con temeridad. Era superior y se graduaría el mismo año. Qué mayor contraste que juntar al alumno más dotado con el chico que ni siquiera luchaba.
Más tarde te enterarías que el Sensei había amañado la misión. Quería darles una lección a ambos. El hollow con el que se enfrentarían ellos, no sería un hollow normal, equiparable al del resto. Así, pretendía enseñar a Gin un poco de humildad en el combate y a Kirtash a luchar por su vida. El plan resultó un fracaso. Volvieron los dos intactos. Nadie sabe lo que ocurrió, sin embargo, la misión fue cumplida y actuaron como si nada fuera de lo común hubiese pasado.
No obstante, tú sabías que se habían enfrentado. Su forma de mirarse cambió, incluso Kirtash se despidió del chico con alegría y Gin respondió con su sonrisa invariable y un burlón:
-Ryo-ka.
Estaba claro que Gin quería enfrentarse a él de nuevo, cuando te dijo que no había pasado nada.
Pero Kirtash fue expulsado. Nadie sabe cómo ni por qué, pero el rumor mantuvo mucho tiempo de especulación en la Academia.
No volviste a verle hasta hoy...