Digimon es propiedad de Toei.
Conjunto de drabbles y viñetas para el reto "Escribe a partir de…" del Foro "Proyecto 1-8".
Esta primera viñeta corresponde a la imagen #195.
1. Bajo la luz de las estrellas
—Se me ha ocurrido algo.
Apoyado en el balcón, Takeru sonrió y se inclinó un poco hacia adelante. No le sorprendió ver la parte superior de una cabeza cubierta por un lacio cabello castaño. Solían hacer eso todo el tiempo.
El edificio estaba construido de tal manera que la baranda de cada balcón no permitía que las personas se acercaran demasiado al borde. Takeru suponía que por motivos de seguridad. Cuando Hikari Yagami, su mejor amiga desde que tenía uso de razón, se había mudado un par de años atrás al apartamento justo debajo del suyo, habían adoptado la costumbre de tener largas conversaciones durante la noche, cada quien en su balcón, iluminados por el tenue brillo del cielo nocturno.
—¿Cuál es tu idea?
—¿Cómo va ese nuevo libro de historias cortas que estás escribiendo? —preguntó ella sin responder.
Takeru frunció los labios.
—No demasiado bien— dijo mientras jugueteaba con una de las ruedas de su bicicleta, haciéndola girar sobre su eje—. Podría decirse que estoy algo bloqueado.
La risa de Hikari fue como una campanita, tintineando en la oscuridad. Takeru pudo imaginarla sin necesidad de verla.
—Es lindo ver que te ríes de mis desgracias. En serio, si no llego a la fecha límite, lo más probable es que pierda el contrato.
—Cómo te he dicho, se me ha ocurrido algo— digo ella y él se la imaginó sonriendo.
—Ya te he preguntado y no has querido responderme— replicó él, poniéndose de puntillas e inclinándose un poco más sobre la baranda.
—No hagas eso— le reprendió ella—, podrías resbalarte y caer.
Takeru volvió a apoyar los pies en el suelo.
—Tu idea— le recordó.
—Fotografías.
Takeru sintió una ligera punzada de decepción en la boca del estómago. Por un momento, había albergado la esperanza de que Hikari llegara con alguna solución mágica para su bloqueo.
—¿Fotografías? —repitió, algo dubitativo y ella volvió a reír. Takeru decidió que, hasta cierto punto, no le importaba ser desgraciado si gracias a ello podía escucharla a ella reír de esa manera.
—Puedo imaginar tu rostro en este momento, Takeru— dijo ella, aun riendo un poco—. Seguro que crees que te estoy tomando el pelo.
Takeru hizo una mueca.
—Y ahora deja de hacer muecas— continuó ella y él guardó silencio, ligeramente sorprendido por lo bien que ella parecía conocerlo.
—No estoy haciendo muecas— mintió en cuanto se recuperó.
—Ahora no. Antes sí— dijo ella, muy segura de sí misma—. Ahora, mi idea. Esta mañana estaba organizando algunas de mis fotografías en álbumes. Tengo unos cuantos trabajos que aún no te he mostrado— tomando en cuenta que Hikari siempre andaba con su cámara colgando del cuello, a Takeru aquella declaración no le sorprendía—. Y se me ocurrió que podía enviarte una cada día y que te obligues a ti mismo a escribir una historia al respecto.
Takeru abrió y cerró la boca, evidentemente sorprendido.
—¿Sigues ahí?
Él asintió y luego, recordando que ella no lo veía, se aclaró la garganta:
—Sí.
—No pasa nada si te parece una mala idea. Es solo algo que ha estado dándome vueltas desde la mañana.
—Es que sí me parece una buena idea. ¿De verdad me ayudarás tanto?
No la veía, pero Takeru notó, por su tono, que ella sonreía cuando le dijo:
—¿Por ti? Lo que sea.
Takeru sonrió también, sintiéndose dichoso mientras, al contemplar el cielo, salpicado de estrellas plateadas, se dio cuenta de que, con todo y los problemas que creía tener, no estaba solo.
—Gracias— dijo sencillamente.
Aquí, casual, trabajando en mi capacidad de contar historia en pocas palabras y empezando con esta pequeña introducción de en qué va a consistir el proyecto. Mi idea es ir sacando poco a poco a los otros personajes, siempre centrada en Takeru y Hikari.
La imagen de este capítulo, igual que lo harán las demás, fue elegida por medio de un sorteo aleatorio. Y este es, oficialmente, mi primer longfic de Digimon. Espero que les guste.
Saludos, E.
