1. Inicio:
Dos años atrás ellos entraban al club de tenis. La gran camada de Hyotei.
En poco tiempo demostraron sus habilidades, unos más rápidos que otros.
Con el tiempo se convirtieron en buenos amigos, o por lo menos en buenos compañeros para un partido de tenis.
El pequeño y prometedor grupo de primer año.
Un año atrás llegaban ha Hyotei lo que le faltaba al grupo para tener una formación temible.
Los destacados 4 jóvenes eran tan buenos como distintos entre ellos.
Con e l tiempo logaron acercarse a los de segundo año, y así comenzar a evolucionar.
Este año, el equipo conformado por estos diamantes en bruto, aparte de tener que confrontar la batalla de llevar a Hyotei a la cima y de hacer respetar su nombre, tendrán que lidiar con los problemas típicos de adolescentes.
Una batalla que puede ser aun más complicada.
Amistad.
Amor.
Celos.
Odios.
Peleas.
Favoritismos.
Ayudas.
Ternura.
Sinceridad.
Mentiras.
Personalidades.
El inicio a la vida.
2. Lluvia
Sabía que una tormenta se avecinaba, pero no le importaba. De hecho, le agradaban.
Por eso decidió seguir jugando con su perro un poco más en el patio.
Empezaba a relampaguear.
Vaya que le gustaba quedase mirando el cielo nublado.
Hasta que su perro lo saco de sus pensamientos.
Había comenzado a llover y el no se había dado cuenta.
Decidió entrar, porque sabía que su madre no le perdonaría que se quede bajo la lluvia y pesque un resfriado, como tantas veces ya había hecho, y mucho menos toleraría el olor que emanaba la mascota de la familia cuando se encontraba mojado por la lluvia.
Se había mojado un poco, nada que una toalla no pueda secar.
Y mientras maldecía el momento en que su perro lo saco de sus pensamientos, y también, de la lluvia, suena el timbre.
La lluvia que, que ya era tormenta había traído junto a sus vientos un regalo.
Un Ootori totalmente mojado, que pedía asilo en su casa hasta que la tormenta pasara.
Shishido, no perdería esta oportunidad.
Lo dejo entrar, y lo arrastro al patio de su casa.
"Al diablo lo que dice mi madre. Ya estoy mojado, el esta mojado, y que mejor momento para reproducir una de esas escenas idiotas de novela que ve Oshitari, que se que a él tanto lo incomodan, y al mismo tiempo le gustan."
El cuerpo de Shishido acato las órdenes que su mente le encomendaba.
Y bajo la lluvia le robo un beso a su querido Choutaro
