Si la Tierra fuera verde y azul esta historia no se hubiera creado... No todos tienen la suerte de vivir en la Tierra. Hay humanos que hace miles de años fuimos expulsados por la nueva ley del gobierno. Ahora estos humanos expulsados vivimos a kahaj. Un planeta artificial que orbita alrededor de la Tierra.
Nosotros vivíamos en una casa en la montaña antes, salíamos de excursión, nadábamos en el río, cuidábamos las vacas... Pero un buen día llego un señor. Vestía una túnica de color negro y llevaba un maletín de piel de cocodrilo, era alto, delgado y olía a plástico. Nos hizo pasar a nuestro propio comedor, saco unos documentos de el maletín y se los entrego a nuestro padre. Nos dijo que nuestro padre había estado llamado a la capital para trabajar y que juntamente con nuestra madre tenían que ir a vivir allí. Luego dijo que nosotros seriamos enviados a kahaj juntamente con otros chicos y chicas de entre siete y dieciocho años.
De repente todo se volvió oscuro.
Desde aquel día han pasado 4 años, ya nos hemos acostumbrado a vivir en kahaj. Vivimos en un dúplex mis hermanos y yo. Las chicas en el piso de arriba, los chicos en el piso de abajo. Nos levantamos cada día a las siete sin excepción. Ducharse, vestirse, almorzar esto lo hacemos en cuestión de media hora, luego el coche solar pasaba a buscarnos para ir a la academia. Allí nos entrenábamos para ser los mejores en nuestro campo.
Este día, sin embargo, fue diferente.
