Este es otro proyecto temporal que saldrá junto con otro fic al mismo tiempo, dependerá de cuanto apoyo tenga cual para ver cuál capitulo escribir. Lo que sucede es que mi computadora se averió y ando escribiendo por Tablet, lo cual es casi miles de veces más complicado por la velocidad que mis grandes dedos escriben en la pantalla táctil.
Descripción corta del fic: Se centra absolutamente en el protagonista, todos los demás son secundarios (tratare de hacerlo así por lo menos). El prota es Badass, pero no full power o ultra poderoso que es capaz de derrotar a todos. Si te gusta la temática ligeramente oscura, este es tu fic.
Advertencia: fue escrito completamente en una tablet, sean tolerantes.
Ryūō
(Rey Dragón)
Prologo: Mi Camino Shinobi
"Fūton: Reppūshō"
Fue el grito de un niño el cual se escuchó por todo el lugar, seguidamente de un gran estruendo. Un coro de voces sorprendidas se pudo oír segundos después junto a aplausos de una pequeña multitud. Los pasos se escucharon claramente al igual que las fuertes palmas de un adulto.
"fue increíble nuevamente Naruto" Fueron las palabras de un hombre adulto que vestía la típica indumentaria de ninja nivel jounin "usar un Jutsu para elevar el poder de los shurikens requiere de bastante destreza" reconoció el jounin mientras veía el desastre de los muñecos de entrenamiento.
Un chico rubio seguía mirando el desastre que había provocado antes. Traía una chaqueta negra con inscripciones en plata junto a un par de pantalones del mismo color. Dentro usaba una camiseta blanca con un símbolo del clan Uzumaki de plata. En su mano derecha portaba un protector que cubría todo su antebrazo, era de metal o plata incluso. Su cabello rubio era tan brillante que relucía con la luz del sol y sus ojos curiosos mostraban un azulejo sin igual.
"seguro" respondió no tan seguro de sus halagos. Miro con detenimiento el muñeco y bufo molesto, algo que noto el profesor, así como todos los chicos de su edad alrededor "¿puedo irme?" preguntó mirando como había superado todas las pruebas. El maestro se rasco una mejilla y asintió, sabiendo que no había más por hacer. De esta forma el chico rubio empezó a alejarse de la academia, pensando seriamente a donde podría ir ahora
Colocando todo de perspectiva, lo mejor sería empezar por su nombre. Namikaze Naruto, hijo de Minato Namikaze y Kushina Uzumaki, el cuarto Hokage y habanero sangriento respectivamente. Era el primer hijo de la pareja más fuerte en Konoha, siendo su padre un genio en diversos artes y su madre una Kunoichi de temer.
Actualmente tenía 7 años y estaba a pasos de terminar la academia. Incluso como hijo del Hokage, se le fue dado el título de estrella prodigio nacido en Konoha, compartiendo el titulo con su mejor amigo en la academia y quien también estaba a su lado a punto de convertirse en gennin, Itachi Uchiha. Todos estaban fascinados con su increíble habilidad, su increíble destreza, TODO era increíble tanto en él cómo en Itachi.
Otra razón mas para su graduación tan rápida era la necesaria cantidad de soldados en las filas de Konoha. Incluso si tenían un talento que superaba con creses a sus compañeros, no era común que alguien se graduara a esta edad. Algunos temian alguna venganza por parte de Iwagakure, otros de una nueva gran guerra. Incluso cuando muchos respiraban tranquilos ante una posible paz, todos temían por si la guerra se reanudaba.
"Katon: Gōkakyū no Jutsu" gritó lanzando una enorme bola de fuego que lanzo desde su boca y desapareciendo segundos después "me falta más control" admitió mientras pensaba en cómo fortalecer más el jutsu. Dejando salir un largo suspiro decido probar con otro "Katon: Karyū Endan" nombró el ataque lanzando u potente chorro de fuego de su boca, el cual cubrió por completo el estanque de agua abrumado por el poder de la técnica.
"no está ni de cerca a lo que debería de ser" Naruto suspiró cansadamente cuando escuchó una voz a sus espaldas "aunque admito que fue un muy buen intento" volteó su mirada aburrida solo para ver a un pelinegro más alto que el, el cual le saludaba con una gran sonrisa.
"dejame en paz Shisui" se quejó el rubio volviendo a ver su desastre "sé que lo dominare, solo me falta un poco más de control" juró mientras apretaba los puños al ver que fue lo más lejos que pudo llegar con un jutsu de nivel jounin o más. El pelinegro suspiro negando con la cabeza.
"hay una razón por la cual Itachi es ligeramente más inteligente que tu" dijo mientras se acercaba y le golpeaba la cabeza "él sabe cuáles son sus límites, podrías haber muerto por eso" dijo regañándolo por intentar algo tan peligroso. El rubio tenía algo de decencia en sonrojarse un poco por avergonzarse de tamaño error. Sin embargo, no lo demostró y lo ignoro olímpicamente.
"sé cuáles son mis límites, solo quiero ir un paso más lejos, eso es todo" terminó mientras empezaba a moldear mas Chakra para seguir practicando. La verdad es que no tenía muchos jutsus y todos han sido dominados "¿sabes que Itachi y yo nos graduamos mañana?" preguntó elevando una ceja a su amigo Uchiha.
Shisui simplemente sonreía mientras levantaba un pulgar "claro que lo hice, todo mundo lo sabe. Tu graduación es el cotilleo de toda la aldea, dicen que se viene una época dorada para Konoha por talentos como ustedes dos" dijo riéndose entre dientes y posteriormente riéndose a carcajada.
Naruto simplemente miraba ligeramente molesto y aburrido al ver a su amigo riéndose sobre el "muy gracioso" dijo mientras volvía su mirada al estanque "realmente no me importa, simplemente quiero ser más fuerte" terminó mientras hacia un puño con su mano, cosa que el Uchiha noto.
Este mismo se le quedo mirando antes de soltar la pregunta del millón "¿Por qué quieres ser más fuerte?" le preguntó haciendo que voltease nuevamente para verle "¿Por qué necesitas tanto poder?" la siguiente pregunta nuevamente se clavó en su cabeza, quedándose sin palabras como todas las veces que se le dijo la misma pregunta.
"no lo sé" admitió mientras miraba el estanque mismo, su imagen reflejada en el agua "simplemente lo necesito, hay algo dentro de mí que me dice que vaya tras la búsqueda del poder" sus palabras no aprecian agradar en lo absoluto a Shisui, no era tan difícil de ver.
"cambiando de tema" dijo el pelinegro mientras miraba hacia otra dirección "Itachi no ha venido hoy, parece que tiene otra reunión con sus padres para hablar sobre su graduación" Naruto asintió a sus palabras, pues él sabía mejor todo eso "¿no tendrías que estar ahí también? Prácticamente eres de su familia" el rubio volvió a asentir a sus palabras, el realmente debería de estar ahí.
"lo sé, no tienes que repetírmelo" dijo todavía mirando su reflejo "solo…pensé en que tal vez mis padres querrían celebrar mi graduación" dijo recordando sus planes para llegar a casa temprano "no debería de faltar a mi propia casa" Shisui frunció el ceño, pues sabia tanto como el que eso nunca iba a pasar.
Tenía un problema familiar muy extenso, desde la poca interacción que tenía con ambos padres, hasta la forma en como su madre le ignoraba casi hasta pasar desapercibido para su vista. No cumpleaños, no fiestas, ninguna felicitación, esa fue su vida hasta ahora. No es que se estuviera quejando, ha tenido todo lo que podría necesitar, una grave falta de apoyo paternal no es ni siquiera el menor de sus problemas.
"deberías de decírselos" dijo el pelinegro con los brazos cruzados "un corto abrazo no hace daño a nadie" Naruto simplemente sonrió divertido por su elección de palabras, negando con la cabeza. Solo recordaba una vez ser abrazado por su padre y no recordaba a su madre hacerlo.
"no" dijo negando con una sonrisa "no lo necesito" dijo mientras levantaba el rostro y miraba el cielo "ellos tendrán sus razones para lo que hacen, tales como las mías. Si cuestionara su forma de actuar, solo será un gran hipócrita" terminó mientras se marchaba a paso lento para regresar a su casa, ignorando la mirada preocupada de su amigo.
Al llegar a casa se topó con la vista a la que estaba tan acostumbrada, la soledad. Aun cuando sabía que no debía de esperar nada, aun se sentía algo decepcionado, demostrando su falta de madurez y su estado como niño esperanzado. Negó con la cabeza y siguió su camino para tomar sus cosas e irse nuevamente a un lugar más agradable.
Ya teniendo todo lo necesario para pasar una noche en otra que no sea la suya, paseo por la cocina para tomar algo de comer. Tomando un emparedado a la boca, comenzó su camino hacia a la residencia Uchiha mas se topó con un obstáculo impredecible sus padres.
Aun cuando habían detenido su amena charla para tener este encuentro incomodo, nunca dejo de comer el emparedado que traía en una mano. La otra traía un futon regular para dormir en el suelo y junto con otro conjunto de ropa, tenía que hacerlo pues no le gustaba vestir la misma prenda dos días seguidos.
"oh…hijo" dijo minuto mientras se reía nerviosamente y se rascaba la cabeza "escuché que eres el mejor en la academia" Naruto asintió, todavía masticando su comida "que bien…espero que te mantengas así" dijo enseñando un pulgar, esperando que eso sea suficiente como para que la conversación termine.
"ah…gracias, supongo" dijo el pequeño rubio mientras empezaba a caminar hacia la entrada trasera, sabía que sus padres no iban a entrar por estar cerca de él y no podía salir si ellos bloqueaban el paso de la puerta. No escucho ninguna llamada de atención de su parte, ni tampoco una llamada por lo que concluyo que eso era todo.
Eso fue algo extraño para él, usualmente solo pasan de largo y lo saludaban para seguir con su día. Sus pensamientos lo trajeron nuevamente a la poca interacción que recordaba de sus padres, dudando si realmente era algo normal o simplemente eran ellos. Decidió dejarlo de lado por el momento, realmente no le afecta en lo absoluto por lo que no debería de darle tanto interés.
Dejo rápidamente la mansión Uzumaki, internándose entre lo más alejado de la aldea. El clan Uchiha vivía en un pequeño pedazo alejado de la aldea, casi como una sub aldea o un barrio alejado de todos los demás. Esta fue una acción tomada por el segundo Hokage, Tobirama Senju, quien decidió apartarlos al darle el deber como la policía militar, acto hecho para apartarlos también fuera del gobierno a pesar de haber sido el clan hermano fundadora
No fue muy difícil entrar al barrio Uchiha, casi todos ahí lo conocían como el amigo de Itachi, que a su vez es el hijo del líder del clan Uchiha. Se tardó un poco pues caminaba lento pensando nuevamente en su relación familiar, que no había mucho en que pensar teniendo en cuenta que prácticamente ni existía. Finalmente llego a las puertas y tomando algo de aire, decide abrir las puertas.
"Tadaima"
5 años después
"¡ES EL KYUUBI!"
Fue el grito de pánico de una multitud al ver una la monstruosidad naranja que se alzaba sobre todos ellos. Seguido de esto, un terrible rugido sacudió toda la aldea, estremeciendo la tenacidad de muchas personas que intentaban huir a toda costa de esta calamidad. Entre la desesperación de las personas, sobre las cosas había un niño rubio quien miraba la escena con un sudor nervioso sobre su frente.
'¿el Kyuubi? Imposible' pensó al verlo imponente en el suelo mismo, apareciendo de repente como si de una fuerza de la naturaleza se tratase 'eso fue sin duda un jutsu de invocación, ¿alguien logro invocar al Kyuubi?' siguió su línea de pensamientos al ver una gran cantidad de shinobi ir en dirección hacia la bestia.
Él sabía perfectamente del estado de su madre embarazada, el sello se debilitaría en el momento del parto, por ello se decidió mantenerlo en absoluto secreto hasta que la situación deje de ser de peligro 'los únicos que sabían la ubicación exacta eran mis padres y…' su línea de pensamientos se detuvo cuando vio que el zorro de alguna forma había dejado de rugir y lo más terrorífico de todo, miraba hacia su dirección.
Rápidamente empezó a hacer Shunshin no Jutsu a largas distancias y rodear la vista del enorme biju, mas este seguía apuntando con su hocico hacia su dirección, dándole una extraña sensación a peligro que lograba ponerle los pelos de punta 'él esta…' fue sus últimos pensamientos al ver como empezó a cargar una enorme esfera con el poder suficiente para borrar la mitad de la aldea si colisionaba.
Gruñó ligeramente asustado al verlo apuntando en su dirección, por lo que procedió a recorrer rápidamente la aldea para que no diera en su dirección, pero seguía apuntándolo hacia él. Para su suerte, sintió el Chakra de su padre aparecer en la piedra de los Hokage, por lo que intento ir lo más rápido hacia el para que desvié la esfera.
"¡padre!" gritó lo más alto que pudo con una gran cantidad de sudor corriendo por su frente. Vio la sorpresa en su rostro al verlo llegar de repente, pero lo supo ocultar bien "¡¿Qué está pasando?!" intento obtener más información a pesar de ser apuntado por la gran bestia.
Su padre iba a responder antes de escuchar como la esfera fue disparada con mucho poder hacia su dirección, pero fue detenida casi a unos metros de ellos por una barrera que la mando lejos de la aldea, posiblemente a kilómetros de distancia al poder ver el resplandor en el cielo.
"¡el parto fallo! ¡un desconocido se infiltró en la aldea, tomando el Kyuubi y a Kushina con él!" Naruto abrió los ojos ante sus palabras, todavía muy incrédulo ante todo esto "¡corre, encuentra a Jiariya-sensei y a Tsunade-sama! ¡llevalos a la zona de entrenamiento secreto de los Hokage!" Naruto asintió a sus palabras, él era el único con el conocimiento además del tercer Hokage en saber dónde se encuentra exactamente aquel lugar.
Ante que pudiera decir algo, vio a un extraño aparecer en un torbellino espacial detrás de su padre "¡Minato!" gritó haciendo que abriera los ojos e intentara atacar a su espalda, fallando al traspasarlo de largo y posteriormente estaba siendo absorbido por un torbellino en su ojo.
Naruto no lo pensó dos veces y lanzo un varios shurikens en su dirección cuando el extraño apareció "¡Ninpo: Shuriken kage bunshin no jutsu!" grito al terminar de hacer sellos de mano, alcanzó una increíble cantidad de shurikens que se crearon a la mitad de distancia del enmascarado.
Este tuvo que detener su absorción y se volvió inmaterial durante unos segundos para esquivar la andada de proyectiles. Su padre tomo la oportunidad y se libró de ser absorbido, tele trasportándose rápidamente fuera del lugar. El enmascarado se quedó solo, ahora mirándolo a él y haciendo que retrocediera un momento por verse en problemas.
El enmascarado no dijo nada, simplemente desapareció lejos enseñando algo que le dejo sin palabras, portaba el Sharingan '¿un Uchiha?' pensó absorto en sus pensamientos al no poder creer que alguien del clan al que más apego tenia, era el causante de todo esto. Sacudiendo su cabeza, decidió realizar lo que su padre le había ordenado
Para la suerte de todo el mundo, los Sannin se encontraban en Konoha. A pedido del tercer Hokage, los habían convocado para proveer más seguridad a la hora del parto. Se suponía que debían de estar durante el parto, más parece que no fue así. Su padre también le delego esta misión por tener una habilidad especial, era un sensor. Tal vez uno de los mejores que había en Konoha sin contar a los Kyuga, aunque ellos tenían una ventaja por su increíble Doujutsu.
"Jiraiya-sama, Tsunade-sama" dijo apareciendo a su lado en un estallido de velocidad. Fue una suerte encontrarlos a los dos mirando como todos los demás arriesgaban sus vidas para ganar tiempo "El cuarto Hokage lo espera en un lugar muy alejado de Konoha, presumo que intentara llevar al Kyuubi allí una vez haya terminado con un…percance" dijo de manera incógnita, anclado de una rodilla y agachando la cabeza mostrando respeto.
"¿percance?" dijo la mujer rubia a la que presuntamente podría identificar como Tsunade, era la primera vez que la ve en persona "¿Qué diablos está sucediendo? ¿Cómo pudo fallar el parto? Kushina estaba en excelentes condiciones" dijo muy molesta, mirando el horror que el Kyuubi estaba causando.
"no puedo responder sus preguntas ahora, ¡estamos cortos de tiempo!" dijo elevando un poco la voz, sintiendo la mirada del Kyuubi sobre él ahora que estaban muy cerca de su posición. Los dos Sannin asintieron y volvieron su mirada hacia él. Rápidamente empezó a saltar sobre las casas en dirección a la zona de entrenamiento.
Mientras corrían, podía escuchar a sus espaldas hablar a los Sannin, en especial a la mujer rubia quien no dejaba de preguntar a Jiraiya sobre él. El viejo sabio parecía reacio a decirle, tal vez encubriendo el hecho de que era el hijo de su aprendiz, algo que le pareció muy curioso.
No tardaron mucho, posiblemente cinco minutos como máximo. Los tres cayeron en el centro de un enorme campo abierto a las espaldas de la aldea, kilómetros en la lejanía "¡chico! ¡¿estás seguro que aquí es?!" grito el anciano mirando un poco preocupado como no habían podido ayudar a los AMBU a detener al Kyuubi en la aldea.
Naruto simplemente asintió al sentir el nerviosismo correr por su frente en forma de sudor. Incluso en la lejanía, la mirada del Kyuubi seguía sobre él, ahora en mayor profundidad. Su estado nervioso fue notado por Tsunade, quien decidió ignorarlo, después de todo era un niño metido en cosas de adultos.
Estaba profundamente concentrado en la lejanía, pudiendo sentir retazos de firmas de Chakra, más la lejanía era tan extensa que evitaba saber exactamente que sucedía. Sin embargo, un gran estruendo se escuchó, haciendo que abriera los ojos "¡ya viene!" gritó advirtiendo a los Sannin, procediendo a alejarse lo más que podía de la marca del Hiraishin oculta entre el pasto.
Estos abrieron los ojos cuando lo vieron marcharse, siguiéndolo como si también temieran por algo extraño. Fue bueno que le siguieran, pues segundos después el Kyuubi apareció y disparo otra de esas grandes esferas donde antes se encontraba, destruyendo todo a su paso.
Los tres veían a lo lejos como el disparo logro colisionar sobre una montaña, borrándola tras una explosión. Su mirada, sin embargo, se vio atrapada cuando Minato se apareció de repente, llevando a su madre y un clon suyo llevando dos bultos en sus manos.
"¡minato!" Gritaron ambos sannin al verlo totalmente herido junto a Kushina, quien parecía estar más en el otro mundo que en este. No le importo que se hayan olvidado de él de repente, estaba más enfocado al tener a la enorme bestia a cintos de metros frente suyo.
Miró con ojos abiertos como el gran zorro giró lentamente hasta poderlo tenerle en frente. El zorro abrió los ojos, dilatando su pupila rasgada y haciéndolo retroceder en pánico cuando sintió el abismal poder que portaba, eran tan inmenso que era imposible de cuantificar y le costó hallar su fin.
"…Uchiha Madara…" escuchó en su mente, como un eco que se dispersaba en su mente "tu…eres igual que Uchiha Madara" fue el eco que pudo escuchar mientras veía a la bestia gruñendo como un animal corrompido por el odio "¡MUERE!" fue lo último que escuchó antes de que vea como la bestia levantaba una de sus grandes garras, dispuesto a matarlo de un zarpazo.
Su cuerpo reacciono de inmediato, lo esquivó a duras penas, pero logró hacerlo. Gruño al ver como la bestia no pensaba en otra cosa que, en matarlo, procediendo a cargar otro ataque, más fue apresado por fuertes cadenas que salieron de la nada. EL zorro no parecía contento e intentó golpear a su madre con las colas que todavía tenía libre, los cuales fueron detenidas por el sabio sapo.
"¡niño!" escuchó a su lado, siendo esta la mujer rubia de antes "¡tienes que irte! ¡ve con el anciano! ¡abriré una brecha en esto para que puedas huir!" Naruto asintió a sus palabras y vio como ella hizo algunos sellos y abrió la barrera de su madre, dejándolo irse sin problemas a pesar de los rugidos de la bestia que ansiaban su sangre.
"¡Naruto!" escuchó una voz frente a él, siendo este el tercer Hokage junto a su elite de protección "¡eso fue peligroso! Pero, estoy orgulloso de ti hijo" dijo el anciano al verle hacer algo tan importante y tan relevante para ayudar a la aldea. El rubio solo asintió, no es que tenga algo en contra del anciano, pero tampoco lo apreciaba mucho "por más valiente y excelente ayuda que fuiste, no puedo permitir que te quedes tan cerca de la barrera, podrías-" no termino antes de escuchar otro rugido del biju, quien empezó a golpear la berrera.
"lo entiendo Hokage-sama, me retirare" el anciano asintió a sus palabras y regreso con su elite para observar la barrera. Antes de irse, dio una última mirada a la barrera pues dentro de ella nada se podía ver. Sin embargo, vio el ojo rojizo del Kyuubi todavía mirándolo con odio. Se fue con una gran pregunta en su mente, finalmente la duda le carcomía y no podía detener su reciente interés sobre si mismo.
Sacando un kunai de su muslo derecho, elevó el metal para reflejarlo con la luz lunar, enseñando una imagen de si mismo. La imagen mostró sus ojos azules bañados de un azul sin igual, como el cielo mismo. Pero de pronto, el azul fue teñido de rojo y se materializaron tres comillas negras, los cuales giraron hipnóticamente alrededor de la pupila.
"…Uchiha Madara…"
Un año después
"no lo haré"
Fue la respuesta contundente que le dio un adolecente que miraba con una profunda negación en su rostro y que tenía una armadura sobre su cuerpo, así como el cabello azabache atado a una coleta.
"No te pregunte si querías hacerlo, simplemente te dije que yo iba a hacerlo" le respondió un rubio quien usaba el mismo traje, pero portaba una máscara con forma de zorro en el "y no hay nada que puedas hacer para detenerme" dijo totalmente seguro, casi retándole a que intentara hacer lo contrario.
El pelinegro se le quedo mirando un momento, todavía con su normal rostro inexpresivo que presentaba todos los días "no, cuando te digo que no lo hare es porque tú tampoco lo harás" dijo cerrando los ojos y apoyándose en un árbol "¿Entrar a los archivos en el hospital de Konoha? ¿estás loco?" pregunto inexpresivamente, pero en su tono se podía escuchar la incredulidad.
"no tengo de otra si quiero saber la verdad" dijo el enmascarado enseñando un par de ojos rojizos "quiero saber quién soy y no habrá nada ni nadie que pueda evitar mi búsqueda de la verdad" el pelinegro se le quedo mirando un momento, todavía pensando seriamente sus palabras.
"¡hola!" ambos giraron sus miradas hacia el recién llegado, quien lucía una enorme sonrisa en su rostro "espero que no me hayan estado esperando mucho, había mucho tráfico en los arboles" se rio mientras se rascaba a la cabeza. ambos adolecentes sudaron ligeramente ante la actitud relajada de su amigo "¿y bien? ¿Qué hacen en tanto secretismo?" pregunto interesado por la reunión en secreto que tenían.
"Naruto quiere infiltrarse en los archivos prohibidos dentro de la maternidad para saber sobre él" "¡traidor!" gritó el rubio al ver que su amigo de toda la vida había revelado rápidamente sus planes de algo totalmente ilegal y que podría ocasionar que sea visto como un traidor por la aldea.
Shisui simplemente suspiro mientras negaba con la cabeza "es imposible, tu no podrás hacerlo" dijo viendo la poca expresión del rubio, quien simplemente gruño y miro a otro lado "…no solo por lo menos" dijo con una sonrisa incógnita, atrayendo la atención de los otros dos "¿Qué? Tengo curiosidad, sé que también la tienes Itachi" el mencionado bufo y miro a otro lado, no negando tales palabras.
"entonces, ¿me ayudaran?" preguntó el rubio solo para cerciorarse de que se anotarían en esta estúpida misión suicida. Los dos Uchiha se miraron un momento antes de asentir, uno derrotado y el otro con una sonrisa "genial, porque mi plan los involucraba a los dos de todas formas" dijo con un tono serio, pero hizo reír a Shisui y suspirar a Itachi.
"vamos a morir" dijo con un tono fúnebre el Uchiha con coleta, quien no parecía reflejar su miedo en lo absoluto, simplemente porque no lo tenía. Los otros dos se rieron por las palabras del Uchiha prodigio, sabiendo perfectamente que esto era una buena señal para comenzar la "misión"
"¿Qué podría salir mal? ¡somos la elite del AMBU!" dijo emocionado Shisui, elevando su puño como si demostrara su fuerza. Ambos amigos mostraron una sonrisa, aunque el rubio todavía traía una máscara sobre su rostro.
Con trece años, tanto él como Itachi habían logrado escalar tanto entre las filas que ahora eran AMBU, algo inaudito incluso en tiempos de guerra. No solamente eran buenos, eran endemoniadamente excelente en cada una de las disciplinas shinobi. A pesar de tratarse del Tanque y detonante del equipo e Itachi siendo el estratega y el de los ojitos raros, eran llamados el dúo sombra.
Dúo sombra fue uno de los tantos apodos que se ganaron entre las filas del AMBU, todo cambio cuando Shisui se convirtió en su jefe de escuadrón, terminando por ser un grupo de tres. Aun cuando su escuadrón solo contaba con tres miembros, dos de ellos muy jóvenes, fue conocido como el más letal entre todo el mundo shinobi. Las muertes silenciosas, las misiones cumplidas en la oscuridad completa, eran temidos por incluso sus compañeros.
"…ese era mi plan" terminó el rubio de contarles el plan, mirando tras los agujeros a cada uno "…plan que robé a Itachi cuando le pregunté sobre esto y lo armó involuntariamente" dijo riéndose entre dientes de la mirada del azabache, quien estaba enojado por el robo de su idea.
"si esto es todo, es hora de reunirnos" dijo shisui colocando una de sus manos al frente. Los otros dos entendieron lo que intentaba decir y colocaron sus respectivas manos sobre la de el "¡equipo Sharingan/uchiha!" gritaron los tres en desorden, perdiendo el efecto que esto traía.
"pensé que habíamos quedado como equipo sharingan" dijo el rubio mirando a los otros de forma incriminatoria. Sus compañeros miraron de la misma forma, molestos en como los otros habían arruinado el momento.
"Me gusta más Uchiha" dijo Itachi mientras cerraba los ojos y se dejaba llevar por el infantilismo del cual ya estaba acostumbrado. Le parecía divertido molestar a su amigo rubio, sobre todo cuando miraba su ceja retorciéndose por no poder soportar su broma.
Antes que Naruto diga algo más, Shisui lo detuvo "tranquilo, ya veremos el nombre luego cuando sepamos lo que sea que encontremos en el archivo" el rubio bufo molesto y asintió a sus palabras, todavía algo molesto. De esta forma los tres empezaron a irse lentamente del lugar, desapareciendo tras un umbral de luz.
"te apuesto a que nuestro equipo terminara llamándose Uchiha"
"¡callate Itachi!"
"bueno…a mí me agrada Equipo Uchiha la verdad"
Con amigos así, ¿Quién quiere enemigos?
Cinco años después
"mierda"
Fue el pensamiento del rubio, quien regresaba a la aldea junto a sus dos compañeros luego de una agradable misión. Incluso cuando había pasado un largo tiempo desde aquel momento, todavía no podía creerse que las palabras de Itachi fueran tan malditamente correctas y que ahora se estaban llamando de esa forma.
"¡Escuadrón Uchiha reportándose señor!" dijo Shisui con una gran sonrisa saludando tanto al tercer Hokage y cuarto Hokage, quienes sudaron ligeramente al ver el saludo poco formal de su AMBU. Naruto se reía incómodo y con una sonrisa muerta, tratando de ignorar la mirada de su padre sobre él y al mismo tiempo ignorando la forma en como Shisui los llamaba.
"si, bueno…" dijo Minato mientras revisaba entre sus documentos "veo que su misión clase S fue cumplida con éxito a una impresionante rapidez" divago el rubio mirando el rollo con la información "y aquí dice que el ninja rubio es invitado a… ¿su propia boda?" dijo incrédulo mirando a su hijo, quien se colocó la máscara y fingió no estar ahí.
Shisui intentaba aguantar la risa mordiéndose los labios e Itachi se reía dándole la espalda a todos, haciéndole sentir muy enojado al respecto "digamos que la princesa se tomó muy personal su rescate" las palabras del ninja pelinegro solo causaron más risas entre el escuadrón y un gruñido enojado por parte del rubio.
Minato sacudió su cabeza, precediendo con las cosas rutinarias de una misión "bueno, con todo esto hecho, tienen el día libre" los tres se miraron un momento y chocaron puños. Esta misión era especial por dos cosas, te daban un par de días libres y pagaban muy bien "pueden retirarse" los tres asintieron y empezaban retirarse por la puerta "¡espera!" grito deteniendo a Naruto, quien volteo ligeramente para verle "…Naruko-chan te ha estado esperando desde que te fuiste…quizá…" su voz se perdió cuando lo vio abandonar junto con sus amigos, haciendo que quedase en silencio.
El tercer Hokage suspiro cansado, viendo como su predecesor arrugó los papeles sobre el escritorio. Sabía perfectamente que todo esto se le había buscado por sí mismo, si no hubiera cometido tantos errores, no estaría pasando por todo este calvario al que estaba tan atado.
Mientras se retiraban en silencio, el rubio recordaba el porqué de toda esa interacción y se debía principalmente en el nombre de su propio grupo, resultaba en que si era un Uchiha. Aquella noche en el que se infiltraron en la maternidad, lograron rescatar su archivo donde contenía la información genética de su nacimiento.
Dentro de aquel documento, los tres pudieron leer quienes eran sus verdaderos padres, o madre para este caso. A pesar de saber que su madre no era Kushina sino una Uchiha, estaban muy curiosos en saber quién era esta mujer. Quedaron en shock cuando leyeron su nombre, su madre era Mikoto Uchiha…la madre de Itachi.
Ambos se miraron entre ellos sin saber cómo proceder, como actuar o como siquiera interpretar lo que ahora sabían. Ahora sabían porque su madre estaba tan contenta de recibir al rubio incluso cuando su esposo parecía a veces reacio. Ahora sabían el porqué del tanto cariño que ella le mostraba y porque la felicidad que sentía cuando el amor era reciproco de su parte.
Era una información muy fuerte y se quedaron pasmados durante un largo tiempo. Aun cuando el plan decía que debían de irse a toda prisa de ahí, la necesidad de respuestas fue más fuerte. Todavía había una pregunta más y fue aquella vez del ataque del Kyuubi.
Buscando entre los archivos y la línea familiar de los Uchiha, hallaron otra increíble verdad. Su madre, Mikoto Uchiha era bisnieta de Madara Uchiha. Decir que estaban asombrados era quedarse cortos de palabras. Lamentablemente su búsqueda del saber los desvió de la misión y fueron encontrados con las manos en la masa por su padre, quien fue alertado cuando se dieron cuenta de todo.
A pesar de la ira inicial, todo ese coraje se disolvió cuando le vio traer su archivo, el cual fue lanzado a sus pies. Sorbiendo saliva, el cuarto Hokage miro a su hijo quien lucía esa falta de expresión en su rostro. No hubo palabras esa noche, simplemente paso de largo y se fue con sus amigos sin importarle nada.
A la mañana siguiente fueron regañados por el tercer Hokage, quien junto al cuarto habían hecho que todo el espectáculo quedara en completo silencio. Nadie habló sobre el tema y se le pidió que lo mantuviesen en secreto, pues dañaría la imagen de su padre, a lo que todos accedieron.
Corrió rápidamente a la primera persona que quiso ver y fue a su verdadera madre, quien le miro algo extrañada cuando la abrazo de repente y con lágrimas en los ojos. Nunca le dijo nada, incluso cuando a veces le quería decir madre, incluso cuando vivía prácticamente como uno de sus hijos, nunca pensó en revelar que sabía la verdad.
"deberías ir a verla" escuchó a su lado a Itachi, quien le saco de su mundo de los pensamientos "si ella es como Sasuke, estoy seguro que espera tu llegada" Naruto asintió, todavía sin saber cómo responder a eso. Miró un momento a Shisui, quien asintió a las palabras de su amigo.
A pesar de estar muy alejado de sus padres, no era lo mismo con sus hermanos…o por lo menos con su hermana. Su nombre era Naruko y ahora era una niña muy linda además de tierna. También tenía otro hermano a quien le colocaron Menma. Ambos eran gemelos, pero eran tan diferentes del uno al otro que uno dudaba si esto era cierto.
Menma incluso como niño era muy arrogante, extremadamente grosero y hasta revoltoso. En cambio, Naruko fue una niña calmada, tierna, gentil y muy risueña que piensa todo el tiempo en jugar. Kushina si se comportaba como una madre frente a ellos, siempre abrazándolos y llevándolos de un lado a otro. vio con sus propios ojos como incluso los amamanta y se levantaba en la madrugada cuando se levantaba cuando eran bebes.
Tal vez eso fue lo que volvió a Menma tan vanidoso y tan molesto el día de hoy, pues su madre era muy permisiva con él. Naruko, a diferencia de su gemelo, fue criada por él mismo. Resultaba que su hermano tenia enormes cantidades de Chakra incluso como niño, mientras que Naruko tenía una reserva muy pequeña, casi del nivel que un civil. Eso la colocaba un peldaño más abajo que su hermano y viviendo un ligero olvido por parte de sus padres, aunque no tan abismal como él en su momento.
Desde el momento en que nació fue muy cuidadoso con ella, la cargaba y usualmente jugaba cuando no estaba Kushina cerca. Ambos crecieron muy juntos, tanto es el punto en que Naruko era muy apegada a él, tanto como Itachi es para su hermano Sasuke. Incluso cuando intenta negarlo, para él su hermanita era parte de su familia y se había ganado un pedazo de su corazón. Una nota adicional seria Kushina, quien todavía le miraba mal cuando estaba cerca de sus "hermanos". Es curioso porque no sabe que es el hijo de su esposo con su mejor amiga, Minato fue muy cuidadoso en esconderlo de ella.
"tal vez tengas razón" dijo admitiendo que alejarse lentamente de Naruko no estaba funcionando. Quería eliminar ese lazo de dependencia que tenía sobre él, por lo que empezó a ignorarla y no verla tan seguido como antes "solo me estaría convirtiendo en mis padres" dijo admitiendo que le estaba haciendo daño a una niña.
"finalmente te das cuenta, estúpido" dijo Itachi con una pequeña sonrisa, viendo como había logrado enfadar a su amigo "corre, seguro que espera que llegas por esa puerta, recuerda que día es hoy" Naruto lo pensó un momento antes de abrir los ojos, era el aniversario del Ataque del Kyuubi y cumpleaños de su hermano.
Asintiendo sus palabras, desaparece tras un flash dispuesto a ir a saludar a su hermana por su cumpleaños. Desde que decidió separarse de la familia Uzumaki, por ende, de Naruko, ya habían pasado 5 meses…tiempo en el que no había visto a Naruko ninguna vez desde entonces.
Apareció tras un flash blanco frente a su antigua casa, la mansión Uzumaki. Ya había pasado cierto tiempo desde que había siquiera tocado el suelo cercano, un poco de nostalgia cruzo su mente. Recordaba su primer jutsu, su primer día en la academia, la vez en la que descubrió que podía dormir en la casa de su amigo…eran demasiadas cosas por recordar.
Vio entonces, como una pequeña niña rubia con coletas miraba triste el suelo, sentada cerca de una de las ventanas. La estuvo observando un rato antes de lograr captar su atención, saludando con una sonrisa y agitando la mano. Ella no tardo mucho, rápidamente abrió la ventana y salto desde el segundo piso hacia él, atrapándola en el aire sin ningún problema.
"¡onii-sama! ¡onii-sama!" grito una y otra vez mientras daba cortos besos por todo su rostro, a la que simplemente respondió riéndose entre dientes. Había olvidado lo que era ser besuqueado por su pequeña hermana, ella se encargaba de levantarlo de la misma forma cada mañana "¡viniste! ¡realmente viniste!" dijo muy emocionada y con lágrimas en los ojos.
"claro que lo hice, es tu cumpleaños, ¿no?" pregunto con una sonrisa, haciendo que ella asiente muy enérgicamente, todavía con lágrimas en los ojos "mira, tengo un regalo" dijo dejándola sobre el suelo y sacar un pergamino de su bola, materializando un enorme muñeco de peliche de su propio tamaño "una princesa me lo regalo…dice que es por tu cumpleaños" mintió mientras le acariciaba la cabeza.
La verdad es que ese muñeco se le había dado ella para que la recuerde hasta que se casaran dentro de una semana, cosa que no iba a suceder. Vio como los ojos de Naruko se encendieron y abrazo el peluche con mucha fuerza "¡gracias, onii-sama!" agradeció con una gran sonrisa en su rostro.
"bueno…" dijo sintiéndose un poco incómodo "creo que tengo que irme, quiero…" no pudo terminar antes de sentir un par de pequeños brazos rodear su pierna. No necesitaba ser un genio para saber quién era "Naruko…" dijo con una sonrisa triste al sentir lágrimas sobre sus muslos.
"No te vayas onii-sama" dijo entre lágrimas mientras se ferraba con mucha fuerza a su pierna "vuelve…te extraño mucho, realmente te extraño" dijo mientras seguía aferrada y lloraba abiertamente. Sintiendo culpa en su corazón, lentamente se agacha y acaricia nuevamente su cabeza y vio como la pequeña niña se limpiaba los mocos "te amo" dijo ella deteniéndolo un rato "¡onii-sama te amo!" grito mientras se lanzaba y lo abrazaba desde el cuello, aferrándose lo más fuerte que podía de él.
Sus ojos se enternecieron un momento y se nublaron, solo había pasado una vez y fue cuando abrazo por primera vez a su verdadera madre. Lagrimas cayeron por sus mejillas y abrazo el pequeño cuerpo de la niña, sintiendo una pequeña llama encenderse en su corazón al escuchar esas palabras tan sinceras. De alguna forma, había resolvió una duda que desde hace tiempo le carcomía.
¿Qué se siente ser querido?
Separándose, se limpió sus propias lágrimas y limpio las de ella. Se miraron un momento y mostró la primera gran sonrisa sincera que jamás había enseñado a nadie "vamos a por un par de helados, yo invito" dijo mientras se levantaba y extendía una de sus manos, algo que la niña no dudo en tomar.
Entonces el rubio mayor la levanta y la coloca sobre su cuello, llevándola fácilmente entre los hombros "¿luego podemos ir a jugar? ¿ver una película? ¿jugar juntos? ¿cocinar? ¿jugar?" Naruto se rio entre dientes al verla enumerando tantas cosas, como si quisiera que fuera eterno para que pudieran pasar todo el tiempo del mundo. Entonces sintió como se recostó sobre su cabeza y susurro algo "no te vayas de nuevo, oniii-sama" suplico la niña, esperando que sus palabras fueran escuchadas por el rubio.
Naruto mismo empezó a dudar un momento, pues no podía prometerle nada a su pequeña hermanita, aun cuando su corazón le decía que lo haga "dime una cosa, ¿Qué harías si me fuera de nuevo? ¿Qué harías si realmente me fuera y nunca más te quisiera ver?" pregunto dudoso sobre sus pensamientos, esperando que despejara alguna duda más.
"muy fácil, ¡iría a por ti!" dijo con una gran sonrisa, no había duda en sus palabras dejándolo pasmado un momento "¡incluso si tengo que arrastrarte de los cabellos! ¡yo te traería de vuelta una y otra vez! ¡lo prometo Dattebane!" Naruto parpadeo ante se tic verbal, riéndose entre dientes al parecerle absolutamente lindo. De esta forma, ambos empezaron a marcharse rumbo a lo desconocido
"¿ah sí? ¿incluso cuando este muy, muy lejos?"
"¡si! ¡incluso si estás muy muy lejos!"
"¿enserio?"
"¡muy enserio!"
Ninguno de los dos sabía que este simple juego infantil
…se volvería realidad…
Mucho tiempo después
Un silbido se escuchaba en una tétrica habitación, una suave melodía que parecía hacer del lugar mucho mas tenebroso del que se suponía que fuese. La melodía fue cada vez haciéndose más y más fuerte conforme alguien caminaba hacia donde estaba la fuente del sonido.
Entonces pasos fueron escuchados, resonando en el suelo como si fueran pequeñas gotas que caían a un estanque en el completo silencio. Fue en ese entonces que en la lejanía se mostraba la silueta de una persona, una mujer por las curvas que traía. El rostro perfilado y hermoso que traía, junto a los ojos azulejos que mostraba una increíble bondad además de determinación, demostraba aún más el punto de ser una hermosa mujer.
Por otro lado, traía un taje shinobi algo sucio de color naranja y negro muy revelador, que no intentaba ocultar sus bellas curvas para nada. Su cabello dorado atado a un par de coletas, así como las marcas gemelas que tenía en cada mejilla podía hacer que cualquiera pueda reconocerla y también aumentaban su atractivo aspecto.
La chica caminaba lentamente por lo que parecía ser una ciudad destruida y arrasada. Había restos de casas por todas partes, edificaciones en situaciones precarias. No quedaba nada de la ciudad además de las columnas por todas partes y alguna que otra estatua. Pero, aun así, el cielo negro parecía estar siendo iluminado por fuego o alguna otra clase de luz, permitiendo observar el lugar sin muchos problemas.
Finalmente se acercó lo suficiente como para ver quién era la fuente de aquel silbido tan melancólico y aterrador. Frente a ella, había un hombre sentado en algún escombro mientras miraba el suelo. Su cabello rubio peinado hacia atrás y algo puntiagudo, junto a sus facciones faciales, le daban un aspecto muy varonil hasta rudo.
El hombre parecía vestir un raro uniforme ninja algo destruido y ensangrentado, pero no presentaba ninguna herida. Su piel blanca estaba a la vista, mostrando increíbles abdominales y también hombros anchos. Ella noto como a su lado había una katana negra la cual todavía estaba enfundada y un lazo dorado parecía sellarla aún más.
"Ryūō, rey de los dragones" susurro la chica intentando llamar la atención del hombre frente a ella "¡Ryūō!" gritó ella cuando vio que sus palabras no llegaban a él, sin embargo, con estas nuevas palabras, el rubio dejo de silbar "he venido para traerte de vuelta a la aldea" dijo totalmente segura de sí misma sacando un kunai de su bolsa "y esta vez no me dejare engatusar" Terminó mirando muy seria al respecto.
Sonriendo con la mirada gacha, el rubio levanta lentamente su rostro y sonríe hacia una de las personas más importantes para él. Sus ojos parecían estar inyectados en sangre y tenían un raro diseño en él, mostrando que estaban absolutamente corrompidos y malditos. La chica trago fuerte y retrocedió un par de pasos, sabiendo que era muy diferente a cuando le encaro por primera vez.
"Ha pasado un tiempo desde que nos vimos, ¿no es así? ¿Naruko-chan?"
…Onii-sama…
END
Esta cap saldrá junto con otro Fic de Naruto, dependiendo de cuál tenga más visitas o comentarios veré cual seguir o cual dejarlo para más tarde. No miento, tengo buenas ideas para este, pero como es un "fic de respaldo" hasta que mi computadora sea arreglada, entonces son hay mucho que pueda hacer al respecto.
Dicho esto, espero que les haya gustado, el prox cap seguramente sea el "opening" así que no esperen mucho a menos que haya mucha "demanda". Realmente fue divertido y me gustaría continuarlo, pero ya depende de cada uno (y de mi situación económica para reparar mi PC). Adiós y gracias por leer :D
