Empezaré escribiendo que no soy muy buena en esto del fanfic, tal vez muy pronto escriba una historia, me encanta amo a Lana Parrilla/ReginaMills/Evilqueen y me cae super bien Emma Swan, la amaré el día que diga que Henry también es hijo de Regina y le de las gracias por cuidarlo durante todo este tiempo y por seguir haciéndolo (aunque prácticamente acepto que Regina también era su mamá en el último capítulo).
Esta historia es una traducción, suelo ser un poco floja cuando de leer en inglés se trata, pero esta historia me atrapo de principio a fin (aun no termina) y dije "esta historia debe darse a conocer, no puede quedarse solo en inglés" quien escribe esta historia es una chica super talentosa,me encanta la manera en como escribe, me transfiere todos los sentimientos y puedo imaginar absolutamente todo, lleva mi imaginación a lugares insospechados ella es evilduckling el titulo original es "An Unexpected Visitor", espero que la disfruten tanto como yo
Capítulo 1
Emma vertió cereal en un tazón y tomó una cuchara de uno de los cajones de la cocina. Hecho un vistazo hacia la habitación y vio a Snow bajo las sábanas de la cama. ¿Cuánto tiempo iba a tomar esto?, pensó Emma. Tenía que decirle a David que parara con esos mimos, dejó escapar un suspiro y miró el reloj, eran casi las 9 de la mañana. David había ido a trabajar hace más de una hora, se llevó a Henry con él para dejarlo en el colegio. Emma iría a la comisaría más tarde, solo quería hablar con Snow sobre lo que había pasado en casa de Regina. Sabía que Regina había arrancado su corazón, pero Snow jamás le explicó la razón por la cual no la había matado. Porque matar a Mary Margaret sería algo que a Regina le habría encantado y aunque Emma estaba alegre de que su madre aun siga viva, ella necesitaba una aclaración.
La rubia camino a través de la cocina y abrió la nevera, cogió la botella de leche y mientras se servía en el tazón oyó un ruido que provenía del piso superior, congelando así sus movimientos. Sonaba como pasos, miró el techo. Henry está en el colegio, pensó. Nadie debería estar arriba, escuchó los pasos otra vez. Alguien está arriba. Mierda, Emma entró en pánico. Sin pensarlo subió las escaleras lentamente. Casi en la parte superior vio una figura paseando de un lado a otro por la habitación.
"Mierda, mierda, mierda, mierda" dijo esa persona; Emma cuidadosamente subió un paso más para acercarse. Ahí, en medio de la habitación, había una niña de cabello largo, ondulado y castaño, pantalón negro y una blusa de rayas verticales. Noto que la chica tenía una expresión de preocupación en su rostro
"¿Emma? ¿Estas arriba?" Oyó la voz de Snow desde el piso de abajo. La niña de inmediato dejó de caminar.
"Mierda", dijo Emma, dándose cuenta de que lo había dicho en voz alta; sus ojos se encontraron con los ojos de la muchacha. Sin saber qué hacer, Emma se detuvo, por un momento, la chica miró y levantó las manos en un gesto inocente.
"¿Quién eres? " "¿Y qué haces en mi casa? " Emma preguntó.
"Yo-yo-yo puedo explicarlo." Respondió la chica.
"¿Emma?" Snow estaba al pie de la escalera. "¿Con quién estás hablando? ¿Henry no está en la escuela?"
"Mary Margaret, ¡quédate ahí!" La rubia le ordeno. Se volvió hacia la niña que aún no había hecho ningún intento por escapar. "¿Quién eres tú?" Emma volvió a preguntar, caminando lentamente hacia ella. "¿Cómo has llegado hasta aquí?"
"¿No me reconoces?" La niña le preguntó.
"Acaso no te pregunte ¿quién eras?"
"No sé cómo sucedió esto."
"A menos que quieras que te lleve a la comisaría en estos momentos, es mejor que me digas qué estás haciendo aquí."
"¿Emma?" Ahora Snow estaba detrás, con aspecto perplejo. "¿Quién es ella?"
La chica dio un paso hacia las escaleras, Emma se puso las manos en una posición de defensa. "Woh, niña, tómalo con calma. No vas a ninguna parte hasta que nos digas que estás haciendo en mi habitación." Emma lo dijo enojada, sintiendo que su paciencia acababa a medida que sus preguntas no tenían respuestas.
Snow comenzó a caminar hacia la chica. Emma la agarró del brazo, pero Snow se liberó de ella.
"No vamos a hacerte daño." dijo mirándola suavemente. "¿Cuál es tu nombre?"
"Rose. Me llamo Rose." lentamente levantó la vista. Sus ojos eran de color verde con un toque de color marrón.
"¿Por qué me eres tan familiar?" Preguntó Snow. Reconoció esos ojos y sus facciones, incluso la expresión de su rostro le era familiar. Sin embargo, Snow no podía saber en dónde la había visto antes.
"Sí, ¿Nos hemos visto antes?" añadió Emma
"Sí". Respondió la chica. "Quiero decir, no, no lo hemos hecho. Pero te he conocido."
Emma se quedó desconcertada. Eso no tenía sentido. Se han conocido, pero no se han visto? Algo no estaba bien con esa niña.
"Mira… Rose, ¿no es así?" La niña asintió con la cabeza. "¿Podemos bajar las escaleras y aclarar esto? No te vamos a hacer daño y es evidente que estas tan asustada como nosotras."
Snow y Rose asintieron con la cabeza. "Y estoy segura de que mis cereales están empapados por ahora, así que por favor ven con nosotras al primer piso " Emma hizo un gesto con las manos señalando las escaleras. " Así aclaramos esto y por fin podré tomar mi desayuno.
Emma tomó un sorbo de su café y sospechosamente vislumbró a Rose que estaba retorciendo de forma nerviosa un mechón de su cabello castaño entre sus dedos.
"habla, muchacha." Emma resopló y tomó otro sorbo de café.
"Emma" Snow le dirigió una mirada a Emma para pedirle más gentileza.
"¿Qué?" Emma levantó sus hombros.
"Mira, Rose, ¿puedes al menos decirnos tu edad?"
"Tengo 16"
"¿Tenemos que llamar a tus padres?" Rose río cuando escucho decir eso
"¿Qué es tan gracioso?" Emma preguntó con curiosidad, empezando a sentirse mejor con el café en su organismo
"Nada" Rose sonrío
Emma miró a Rose, siguiendo la expresión de su rostro. Ella recordó que sólo había una persona que tenía esa expresión exacta. Imágenes brillaron por la cabeza de Emma al recordar la primera vez que la había visto.
"¿Cuáles son los nombres de tus padres?" -Preguntó Emma.
"Ray y Mona." Rose respondió rápidamente.
Emma puso su taza de café sobre la mesa y se inclinó sobre el mostrador de la cocina. "Tengo un súper poder. Me doy cuenta cuando alguien está mintiendo y tú lo hiciste."
Rose se retorció en su silla. "No, no lo hice."
La rubia suspiró. Ella iba a obtener información de esa chica.
"Voy a hacerte unas cuantas preguntas rápidas. Sólo tienes que contestarme sí o no.¿ Está bien?"
"Está bien."
"¿Te gusta el chocolate caliente? Rose alzó las cejas sorprendida por la pregunta
"Uhm, si."
"¿Te gustan los perros?" Emma la miró profundamente a los ojos
"Si."
"¿Tienes un perro?"
"No."
"Tienes un gato?"
"No."
"¿De qué color es el cielo?"
"Azúl. Pero no es una pregunta con si o no" Rose hizó una mueca
"Tienes razón" Emma suspiró. "Solo preguntas y respuestas ¿está bien?" Rose asintió con la cabeza esperando que la rubia continuara.
"¿De qué color es tu cabello?"
"castaño"
"¿De qué color es la leche?"
"blanca"
"¿De qué color es el cielo de noche?"
"Negro"
"¿De qué color es el sol?"
"amarillo"
"¿Cuál es el nombre de tu madre?"
"Regina."
¿ qué tal? ¿les gusto la historia? No olviden de dejar sus comentarios
