Capítulo 1
Encuentro
Misaki, ¿podrías sacar un juego de copias? –preguntó Aikawa al joven castaño quien, desde hace un par de días, trabajaba como su asistente en la editorial.
La alegría de Misaki por ingresar a trabajar en la editorial Marukawa se había visto opacada por un detalle: trabajar como asistente de Aikawa implicaba estar en el departamento de novelas BL.
La oficina de la pelirroja y el área en general se encontraban decoradas con imágenes de las novelas BL más vendidas…eso incluía obviamente los de su casero el gran Usami Akihiko.
Claro, iré en seguida. –respondió el menor y salió rápidamente de la oficina de la pelirroja.
El castaño no podía evitar ruborizarse al ver los afiches de la versión pervertida que Akihiko había creado de los dos. "Bueno, él sí es un pervertido", había pensado el menor al verlos por primera vez.
Cuando las chicas del departamento señalaban el gran parecido que tenía uno de los protagonistas con Misaki, e incluso que tuviera su mismo nombre, Aikawa sonreía y comentaba que el autor se debía de haber inspirado en alguien muy parecido a él y que ese nombre tenía gran popularidad. De esta manera sacaba del apuro al castaño y se aseguraba que la identidad del autor de los mangas BL más populares se mantuviera en secreto.
En lo que se refería a las novelas BL Aikawa mantenía gran hermetismo sobre el autor pero en lo que respectaba a los otros trabajos de Akihiko nada era un secreto. ¿Quién se iba a imaginar que la misma persona podía crear obras tan distintas entre sí?
Disculpe, ¿sabe donde hay otra máquina copiadora? –interrogó el castaño a un empleado. La máquina que iba a utilizar llevaba el cartel "fuera de servicio".
Mmm la de abajo está también en reparación…la más cercana está en el piso de arriba pero está al lado del departamento de manga shoujo...–respondió el empleado no muy seguro de dar aquella información. Estaba indeciso entre decir algo más o no pero el castaño no esperó.
Muchas gracias. –dijo Misaki y partió rumbo al piso de arriba.
Lo que el empleado quería advertirle era de la presencia del equipo "Esmeralda" más conocido como equipo "Doncella" uno de los equipos encargado de la edición de mangas shoujo. Cierto tipo de leyendas se habían tejido de este grupo gracias a las cuales los empleados de otras áreas los evitaban.
Buenos días ¿No hay problema si uso la máquina? La de mi piso está averiada. –explicó Misaki a un joven empleado que se encontraba revisando algunos papeles al lado de la copiadora
El joven era parecido a Misaki, también tenía los ojos de color esmeralda pero su cabello era de un castaño más claro y su rostro era el de una persona madura.
Claro, puedes usarla. –fue la respuesta que obtuvo Misaki.
El mayor se quedó un poco sorprendido de su parecido con el empleado que acababa de llegar "tiene la mirada que tenía yo hace diez años" pensó.
¿Eres nuevo? ¿En qué departamento trabajas? –preguntó a Misaki intrigado por que no evitara su presencia, ni el estar en ese piso, como normalmente hacían todos los empleados de la editorial ante un miembro del equipo "Doncella".
Misaki se puso rojo, decir que trabajaba en el departamento de novelas BL no era algo que se le hiciera fácil.
Estoy en el piso de abajo…–dijo después de pensar bien su respuesta y preguntó lo mismo para salir del tema– ¿Usted?
Ahora fue el turno de la otra persona de ponerse un poco roja.
En este piso…–señaló incómodo, tampoco se le hacía fácil decir su área de trabajo, el cual era manga shoujo, a personas desconocidas.
Luego, cayó en cuenta de algo.
Creo que olvidamos presentarnos, mi nombre es…–empezó a decir el mayor pero fue interrumpido.
¡Onodera! –gritó de una persona de cabellos negros– Si tienes tiempo para hacer nuevos amigos deberías de trabajar más.
El azabache caminó hasta quedarse al lado de Onodera y examinó aquella nueva presencia.
No tienes por qué gritarme de ese modo. Estaba terminando de revisar estas copias. –dijo irritado Onodera levantando los papeles que tenía en la mano.
Mi nombre es Onodera Ritsu, un gusto de conocerte. –se presentó finalmente ignorando la presencia del azabache.
Yo soy Takahashi Misaki, mucho gusto. –respondió el menor quien se dirigió tanto a él como a la otra persona que había gritado hace un momento.
Yo soy Takano Masamune, editor en jefe del departamento "Esmeralda". Onodera está bajo mi mando y, en este momento, está muy ocupado. –dijo de manera autoritaria.
Ambos castaños se quedaron viendo al azabache. Misaki incómodo y Ritsu con cara de "¿quién diablos te crees?".
Bien…Tengo que entregar estas copias así que ya me voy. Gracias por todo. –dijo Misaki para poder salir lo más rápido de ahí, el ambiente estaba tenso.
Cuando iba rumbo a las escaleras escuchó las voces de Ritsu y Takano a lo lejos, al parecer empezaban a discutir.
Luego de una mañana de trabajo la hora del almuerzo llegó. Aikawa, debido a un improviso, no pudo acompañar a Misaki.
El castaño estaba comiendo en la cafetería de la editorial cuando una voz que le pareció conocida le habló.
Disculpe, ¿las sillas están ocupadas? –quien preguntaba era Ritsu. La cafetería estaba llena y no había muchos asientos libres.
Hola. Están libres, puedes sentarte si lo deseas. –respondió Misaki feliz porque tendría algo de compañía.
Gracias. Lamento lo de hace un rato. –dijo Ritsu en alusión a lo sucedido con Takano.
No te preocupes soy yo quien debería disculparse. Fue por mi culpa que te gritaron. –
Luego de aclarar lo que sucedió, que en resumen para Onodera fue "mi jefe es un gran idiota y se entromete en todo" comenzaron a charlar acerca de cosas de la editorial. Misaki escuchaba atentamente a Ritsu, sentía que podía aprender muchas cosas de él.
¿No hay problema si los interrumpo? –preguntó una voz de repente.
Onodera la reconoció al instante.
Ricchan, qué malo fuiste. No me esperaste para comer. –dijo un joven de cabellos negros y ojos vivaces a la par que se sentaba en una de las sillas vacías sin haber esperado respuesta.
Luego de que Ritsu presentara a Misaki y a Kisa, y que este último decidiera llamar a Misaki como Misachan la conversación se reanudó. La química entre los tres fluía.
Misachan ¿tú tienes pareja? –preguntó pícaramente Kisa de un momento a otro ocasionando que Misaki se atragantara.
Yo…–la cara de Misaki estaba roja.
No preguntes cosas de ese tipo no es de buena educación. –intervino Ritsu.
Tanto andar con Takano ya se está pegando lo aguafiestas…–dijo Kisa.
¡Yo no ando con ese sujeto! –gritó enojado Ritsu.
De pronto, el celular de Misaki sonó. Era una llamada de Akihiko. Misaki no tenía más opción que contestar, si demoraba sabía que Akihiko se pondría inquieto. Desde que el castaño inició su trabajo en la editorial el escritor estaba mucho más pendiente de él.
La bruja de Aikawa recién me avisa que se fue a una reunión y que no puede almorzar contigo. Puedo estar ahí en 10 minutos para que almorcemos juntos. –dijo Akihiko.
Concéntrate en terminar los manuscritos. No soy un niño que no pueda andar por su cuenta. Espero que no estés pidiéndole cosas a Aikawa como el tener que andar a mi lado. –comentó Misaki quien se olvidó que estaba delante de Ritsu y Kisa al empezar a exasperarse por la actitud de su casero.
¿Dónde estas ahora? –preguntó el escritor. Su voz podía ser escuchada claramente por Ritsu y Kisa.
Ritsu intentaba concentrarse en su comida para no invadir la privacidad de Misaki mientras que Kisa no ocultaba su interés por la conversación.
En la cafetería almorzando. –
¿Estás solo? –
No…estoy acompañado…–dijo Misaki recordando que no estaba solo.
¡Misachan! Di que tienes nuevos amigos que te quieren mucho. –gritó juguetonamente Kisa lo suficientemente alto como para que Akihiko escuchara al otro lado de la línea.
Misaki lo miró aterrorizado. Akihiko le pediría muchas explicaciones al llegar a casa…
