Con la cara en alto
Estaba en nuestro cuarto eran mas de las doce de la noche estaba despierta sin poder conciliar el sueño aquel como era seguido ya hace varias noches la razón de mi desvelo mi novio Edward llevábamos viviendo 2 años juntos desde que nos graduamos del instituto habíamos venido a vivir a Seattle para comenzar nuestras carreras el en medicina y yo en literatura inglesa el primer año juntos fue magnifico teníamos nuestros conflictos como cualquier pareja pero lo solucionábamos de la mejor manera siempre pero desde hace unos meses se estaba distanciando de mi entendía que su carrera como medico exigía demasiado lo trataba de comprender enserio pero el ya se estaba pasando a duras penas me besaba y lo hacia mas por costumbre que por amor le molestaba todo lo que decía y a veces ni siquiera me respondía y si lo hacia era con monosílabos y eso ahora la cama era vacía sin sombra alguna de lo que éramos hace un año sabia que el no notaba cuanto me lastimaba su indiferencia me dolía en el alma de verdad. Decidí ir a su despacho para ver si ya había terminado de verdad lo extrañaba pero cuando entre escuche que estaba hablando por teléfono y lo que oí me dejo sin palabras
-tranquila amor en cuanto tenga la oportunidad la voy a dejar-esa era la respuesta a todas mis preguntas
-si ya ni siquiera tenemos sexo es como si no estuviéramos en el mismo lugar además sabes que te amo solo a ti Tanya-eso termino de romper mi corazón
Decidí salir de hay e ir al cuarto antes de que se diera cuenta tenia las lagrimas a punto de salir ya había tomado una decisión mañana dejaría de ser un estorbo en su vida me iría de esa casa temprano. Oí como entraba al cuarto y el otro lado de la cama se hundía ya ni siquiera me abrazaba como antes definitivamente no se como dejamos morir nuestro amor cada día se sentía que se escapaba mas de mis manos.
A la mañana siguiente sentí como se metía dentro de la ducha, se que sonara estúpido pero quería pedirle un ultimo beso para sentir por ultima vez que esto todavía no había terminado. Cuando salió me dijo:
-me voy no me esperes llego tarde-la típica escusa de siempre
-Ok- fue mi brillante respuesta-Edward…?
-Si?
-Me puedes dar un beso-se acerco lentamente a mi y me beso y sentí como cuando nos dimos el primero se que para el no tenia tanto significado como para mi se que el ni se imaginaba que este seria el beso que pondría final a la historia de los dos y así se fue sin ninguna ultima palabra.
Mientras empacaba sentía como las lágrimas bajaban por mis mejillas decidí dejarle una última carta de despedida y para que no me buscara y me diera explicaciones sabía que lo haría lo conocida a la perfección tome papel y escribí:
EDWARD:
Seguro cuando leas esta carta ya no estaré a tu lado no te alarmes me fue por mi propia voluntad la razón anche me di cuenta de el motivo de tus llegadas tardes de porque no pasabas tiempo conmigo tal vez no fui suficiente para ti se que para ti la vida seguirá que alguien mas encontraras y que lo nuestro simplemente será un rastro del pasado pero quiero que sepas que fuiste mi primer amor mi primer beso mi primera vez que no hubo nadie a quien amara tanto como a ti como para dejarte ser feliz aunque no sea a mi lado. Recuerda te amo pero no voy a forzarte a estar con alguien a quien no amas se feliz en serio es mi único deseo para ti pero hay que ser cuerdos por un momento por eso quería decirte adiós con la cara en alto
Siempre Tuya
Isabella
Selle la carta llena de esos días llenos de sueños en los que imaginábamos nuestro futuro junto de esas sonrisas que no volverán y de ese último beso que estuvo a punto de matar en ese día me di cuenta de que no hubo nadie a quien amara tanto como a el pero era tiempo de buscar mi felicidad y que el tuviera la suya