Los hermosos personaje de Naruto no me pertenecen son del fabuloso Masashi Kishimoto

Esta idea la tengo hace mucho tiempo en la mente y tenía que sacarla de mi cabeza jeje… ojala que sea de su agrado


Capítulo I "Un mal comienzo"

Era un hermoso día para hacer un viaje, pero no para todos lo ven de ese modo ya que una muchacha de diecisiete años se ve forzada en hacer un estúpido viaje en un bus, todo porque su padre impuso su voluntad, el porqué de esto es complicado ya que hay muchas teorías según la muchacha que siempre se lo hizo ver su padre como que… la muchacha esta fuera de su control porque no hace lo que él quiere, no le gusta como viste ya que uso ropa favorita está basado en el color negro, tampoco el agrado que se hiciera unos Piercing en la lengua y ombligo, pero sobre todo él odia la música que a ella ama el ¿Por qué ? ella no lo sabe pero para esta chica es refugio de todos sus problemas, es mejor que hay en su vida debido a que le dando mucha satisfacción y nunca hay desilusión solo hay renovación, es el complemente perfecto ya que cuando entra a tu vida nunca más la sacaras de ella sobre todo cuando aprendes a escucharla y tocar, si… tocarla con pación distintos tipo de instrumentos pero la batería fue lo mejor que le pudo haber pasado en su vida y sobre todo cuando eres bueno en ello ya que tuve un gran maestro y ex-novio que lo extrañare aun que seamos amigos ahora.

Viajar de Tokio a Kioto se hace eterno, pero esa fue su decisión porque no quiso irse en avión debido a que llegaría pronto donde los amigos de su padre, la famosa familia Uchiha que tanto le había hablado y son tan amigos que nunca en su vida ella lo ha visto, pero su padre se le ocurrió que pasara una temporada allá para que cambiara o mejor dicho que quería descansar de de ella porque siempre ha sido un estorbo en su vida. Pero era pasar una temporada con ellos o en un internado en Europa, pero ella acepto el viaje a Kioto, ya que negocio con el y pudo adjudicar una condición, que enviara su joyita a la casa de sus amigos, pero su joyita es una motocicleta una Harley-Davidson modificada a su medida, pero debía llegar en dos en tres días después de su llegada, si no cumplía el trato se lugar de esa casa y trataría de hacer lo que siempre ha soñado es ser libre como el viendo, pero en el fondo ella sabe que nunca va a poder serlo.


En Kioto, la residencia Uchiha se encontraba toda la familia reunida Fugaku, Mikoto, Itachi y Sasuke.

–Bueno familia los he reunido porque vamos a tener un nuevo integrante en la familia–hablo Fugaku.

–¿Qué…, mamá está embarazada?–gritaron a todo pulmón los hermanos Uchiha.

–No, nada de eso–hablo Mikoto

–Lo que sucede es que mi amigo Hiashi-Hyuga, me pidió que recibir a su hija por una temporada, así que tú Sasuke vas dormir con tu hermano y le cederás tu habitación a Hinata, pero será hasta que se termine de remodelar la habitación de invitados–

–Pero papá… –

–Nada de pero, es una orden –expresó Fugaku con voz de mando que no le quedaron más ganas de reprochar a su padre.

–Padres, es esa… familia que me llevaste conocer cuando tenía como seis años y Sasuke aun era un bebe-pregunto Itachi

–Si hijo, esa vez fuimos a conocer a Hinata ya que ella tenía solo unos pocos días de vida y como ellos son muy importantes para nosotros no podíamos perdernos el honor de conocer a tan hermosa bebita– sus facciones tienen un semblante de nostalgia al hacer recuerdo de aquellos momentos, pero vasto tan solo unos segundo para cambiar su semblante por uno de enfado, cualquiera que lo viera actuar así, diría que es bipolar, pero para los que están presente es pan de casa día –así que de ninguno de los dos, nótese, ninguno… quiero escuchar queja de parte de ella hacia ustedes–amenazo a sus hijos.

–Está bien–dijeron los hermanitos Uchiha en forma de coro.

–Cuando llega, mi pequeña hija–dijo muy animada Mikoto

–Llega hoy como a las seis de la tarde si no se pierde– dijo Fugaku

–Pero ya son las dos, tengo que apurar para hacerle un recibimiento, ah… Sasuke múdate a la habitación de tu hermano que sea rápido–

–Hmp…– Sasuke intuía que iba a odiar a esta intrusa, lo más probable que sea engreída y caprichosa ya que lo tiene todo, pero tendré que aguantar esta situación ojala que sea por un tiempo corto, justo le iba a preguntar algo cuando Itachi se me adelanto.

–¿Cuánto tiempo se va a quedar? –

–El tiempo que sea necesario, es indefinida su estancia aquí–dijo Mikoto muy emocionada ya que ella siempre quiso tener una hija y seria entretenido tener a Hinata en esta casa, pensaba que harían cosas de chicas de lo más seguro es una niña tierna y amable que va estar encantada de hacer cosas con ella, ese es su mayor deseo pero está muy lejos de que sea así.

En la casa de los Uchiha comenzaron hacer los preparativos para la llegada de la nueva integrante de la familia.


En el autobús seguía viajando la opalina escuchando a unos de sus grupos favorito Tool y… de vez en cuando se ponía a observar por la venta al mundo exterior apreciando como pasa la gente, arboles, casa, edificios eran imágenes rápidas y que la empezaba a marear, lo bueno es que pronto llegara al terminal de buses y se le pasara esa sensaciones. Ya que le quedaban unos cincuenta minutos más de viaje, le da el tiempo suficiente para pensar en cómo sería la familia Uchiha, ¿como la recibirían? Y… si son agradable, no podría ser mala onda con ellos, pero si quiere volver luego a Tokio debo ser desagradable desde un principio para que ellos la echen y pueda regresar donde esta toda su vida social, pero lo que más la tortura es que no sabe cuanto tiempo se va a demorar este viaje, sabía que… como mínimo serán seis meses ya que le queda que estudiar su último semestre de la prepa, ah… menos que ellos se aburran de esta chica y adelante mi regreso a Tokio que no sería mala idea después de todo ese es su plan para lograr su objetivo.
Aun le falta trayecto de su viaje se puso a buscar un su bolso una croquera y sus lápices se puso a dibujar lo que es otra pasión en su vida aparte de la música, como tenía a su alcances sus dos grandes placeres se sumergió en ellos olvidando donde se encuentra y la situación que le espera en su nueva vida.

Sin darse cuenta ya había llegado al terminal, una vez fuera del bus tomos su equipaje y salió del edificio en busca de un taxi para llegar a la residencia Uchiha, para su suerte afuera del edificio había un sector que se estacionaba los taxis, se dirigió hacia ellos y subió a uno , al chofer del taxi le entrego un papel con la dirección y volvió a sumergirse en la música tomando una actitud indiferente a su entorno hasta que se dé tuvo el taxi en una casa grande pero no se compara a la mansión de su padre que era mucho más grande y lúgubre como le decían sus amigos. La chica suspiro con resignación, le pago al chofer para luego bajarse del auto, tomo sus maletas camino a paso lento pensando que al momento de entrar por esa puerta su vida será peor que antes ya que empezare de cero pero sin olvidar el objetivo que es volver antes de cuatro meses a su querido Tokio.

La joven de tez blanca esta parada frente a la puerta y toco el timbre tan solo en unos pocos segundos se abrió la puerta, ahí delante de la muchacha estaba parada la señora Uchiha con una cara de asombro porque nunca había visto a una niña que se ve agresiva.

–Buenas… busco al viejo Uchiha o ah…– no alcanzo a terminar de hablar y fue interrumpida

–Tú te refieres al señor Uchiha Fugaku…–enfatizo la palabra señor… tratando de corregir a la chica.

–Ah… como sea ¿pero…está o no está el viejo? –dijo Hinata con fastidio, pero no se había dado cuenta que esta colmando la paciencia de la señora.

–A ver jovencita, vasta de ser grosera, por educación debes presentarte, como mínimo –reprocho Mikoto enfadada.

–y… porque me debo presentarme ante la criada de la casa– en el fonda Hinata sabía que ella no es la criada con solo verla se notaba su elegancia, pero lo hacía solo para fastidiar.

–Para que se pasas yo no soy una criada –a Mikoto se le veía la vena en la frente pero aun así presento un sonrisa pero bien fingida y continuo hablando –para tu información jovencita yo soy Uchiha Mikoto la esposa de Fugaku.

–Ah… igual me sirves tu, yo soy Hyuga Hinata, y… mi padre me envió a este infierno–expreso refunfuñando entre dientes.

– ¿Tú eres Hinata? – la miro de los pies a la cabeza tratando de buscar a la dulce y tierna niña que esperaba ver– ah… es un gusto conocerte – para disimular su sorpresa dio un grito y se lanzo sobre esta niña abrazándola y besándola pero la opalina trataba de quitársela de encima pero no podía, se tuvo que dejar pero de alguna forma ella le recordaba a su madre pero aun así debía ser grosera.

–Se-ño-ra… me pue-de… sol-tar… us-ted… no tie-ne… porque… ha-cer… es-to…, es mo-les-to y… me esta… asfixiando… –trato de hablar con el poco oxigeno que le quedaba en sus pulmones.

–Lo-lo… siento, pero me emocione tanto que se me olvidaron los modales–se avergonzó tantos de sus actos que lo representaba en su cara ya que está totalmente ruborizada–ah… Hinata pasa, pasa te estamos esperando hace rato–

–Ok, como no me queda de otra–refunfuño

Entro a la casa Mikoto y Hinata la siguió. Caminaron un pasillo corto que daba al salón donde estaba Fugaku, Itachi y Sasuke conversando de cosas banales, pero ellos quedaron en un silencio absoluto cuando vieron entrar a Mikoto, el ambiente se tenso mas y los muchachos se empezaron de desfigurar su rostro quedando con los ojos y boca abierta cuando vieron entrar a Hinata al salón. La miraron varias veces de pies a cabeza examinando cada detalle como su polera negra con letras de color blancas que dice "0,1% virginal" que le llegaba a la altura del ombligo dejando ver un poco su Piercing , sus pantalones pitillos (pantalones que son ajustados de cadera hasta los tobillos.) de color negro que tenía una cadena como accesorio junto con un cinturón con tachuelas metálicas y sus zapatillas regalonas unas converge que están tan gastada que tenia hasta un agujero en uno de su costado, pero lo que mas llama la atención que ella viste de una forma ruda pero su rostro no lo acompañaba mucho ya que sus facciones son fina y esta demás que decir sus ojos son hermosos y translucidos que a pesar del maquillaje de color negro igual le da un aire angelical, se puede decir que Hinata Hyuga tiene un extraña combinación de ángel y demonio, pero apariencia se va inclinada mas al lado de la maldad.

Pasaron unos tres minutos y todos seguían pasmado con la muchacha que acompañaba Mikoto, el silencio de la sala se hace más pesado para todos los que están presente, pero ese silencio fue interrumpido por la ojiperla , se fastidio de la forma que la miran ese trió de hombres, ella decidió actuar.

– ¿Qué pasa con ustedes, porque me miras de esa forma? –cuestiono a todo los que están presente pero ella iba a demostrar quién es Hinata Hyuga.

–Hay pequeña, lo que pasa es que no te esperaban verte tan pronto y por eso están impresionados– trato de suavizar la situación Mikoto pero no fue de mucha ayuda porque Hinata ya sabía de ante mano que no era del agrado de ellos pero eso ella no le importa.

–Ah… como sea–la Hyuga odia que hagan un prejuicio de ella sin conocer – a ver… por la postura de arrogancia usted debe ser el viejo Fugaku – ella lo apuntaba con desprecio al dueño de casa. La acción que realizo la ojiperla sorprendió a todos los presente ya que cada uno de ellos tiene lo demostraban en su rostros, conociendo al Uchiha mayor iba a reaccionar de mala manera y Mikoto tenía que intervenir para bajar los ánimos pero no alcanzo abrir la boca ya que hablo primero Hinata.

–Por la cara de ellos –apuntaba a los hermanitos Uchiha – estoy en lo correcto –acto seguido, avanzó hacia donde está parado Fugaku y… este no le quitaba los ojos de encima, se nota el enfado en su rostro, pero igual ella avanzo hasta quedar frente a frente. –para su desgracia y la mía… soy Hinata Hyuga. –hizo un gesto como saludo, como un desaire y continuo hablando –oiga viejo, podemos hablar en privado, ¿se… puede o no? –

– ¡Está bien!, sígueme por ahí –rugió el Uchiha mayor estaba que echaba humos por la actitud de esa mocosa hubiera sido su hija ya la desheredaría por el debió controlarse y contar hasta cien para no estrangularla. Ellos abandonaron el salón y fueron al despacho pero en silencio hasta que entraron a él.

En el salón de la casa se encontraban todos impresionados por como es la Hyuga. Todos ellos esperaban a una tierna y dulce niña, pero de eso ella no tiene nada, la vida la hizo cambiar y fue para mejor o peor ¿quién sabe, solo el tiempo lo dirá…? Todo lo que esta ahí piensas que ella es un rebelde, que van hacer con ella, etc..., pero los pensamientos de ellos fueron interrumpidos.

–Esta chica se la trae…–hablo Itachi con una sonrisa –creo que con su llegada a esta casa va a ser interesante.

–Que interesante, va a ser un gran dolor de cabeza para todos–dijo Sasuke.

–Ya dejen a un lados sus comentario, será mejor que tomen las maleta de Hinata y la lleven a su habitación–

–Está bien–hablaron a coro.

Sasuke tomos un bolso pequeño junto con la mochila e Itachi la maleta grande. Subieron hacia el segundo piso hasta el ex cuarto del Uchiha menor. El que entro primo a esa habitación fue Sasuke tiro los bolso sobre la cama pero sin darse cuenta que la mochila estaba abierta y escapándose algunas pertenencia de la Hyuga pero no le tomo importancia y salió de la habitación para luego entrar Itachi que viene apenas con la maleta, la coloco aun lado de la cama y se percato que se habían caído algunas cosas de la mochila, por ser amable decidió recogerlas, entre todas las cosas que habían algo le llamo la atención era la croquera la tomo y se puso a ojearla quedando fascinado con los bosquejo que hace esa niña quedándose viendo un dibujo en especial, era el que aparecía la madre de Hinata, su hermana y ella era un recuadró hermoso, se veía feliz todas ellas.

–Me hubiera gustado conocer a esa tierna niña que aparece en este dibujo –exclamo Itachi y guardo todo para luego abandonar la habitación.


En el despacho… aun estaba en silencio y se miraban mutuamente pero ninguno de ellos sabe como entablar la conversación para Hinata se le hace difícil porque ve al Uchiha como es ver a su padre aunque lo desafía siempre en el fondo hay un cierto temor, pero ella se tomo una bocanada de aire y le hablo…

–Esta de mas decir el porque estoy aquí , ahora dígame cual son sus reglas y que debo cumplir– lo miraba de forma desafiante.

–Eres bien directa pequeña, las reglas son la siguiente debes obedecer, pasar de año y si vas a salir por favor avisa eso sería–

–¿Solo eso? –Hinata no podía creer lo que estaba escuchando –pero si me quedo fuera de la casa… ¿me lo permite?–

–No, aunque llegues a las dos, tres o cuatro de la mañana tu llegas a casa–bueno peor es mascar laucha pensó Hinata – esas son mis condiciones, por favor no te metas en problema y lo otro que te pediré es que seas amable con mi esposa y si ella te pide pasar tiempo juntas hazlo si tu cumples con lo pactado más pronto volverás a tu casa–

–Viejo… tranqui tratare de estar fuera de problema y portarme bien aunque sea una semana– Hinata se reía pero en el fondo sabe que debe portarse bien por mientras ya que debe tantear el terreno donde pisa–otra cosa mi padre dijo que lo llamara para cerciorarse que llegue a su casa ya que no confía en mí palabra–

–No te preocupes yo hablo con él–

–Como diga, ahora sería tan amable de mostrarme mi habitación… es que quiero darme un baño ya que apesto a rayos… – Hinata se olía las axila su ropa. La expresión Fugaku era de sorpresa se dijo a si mismo que esta niña se parece tanto a su madre, pero su modales deja harto de que hablar, pero el efecto Mikoto la hará cambiar, sino resulta todo esto va ser un caso perdido para Hiashi.

Fugaku junto con Hinata abandonaron el despacho y le mostro su momentánea habitación ya que la ocupara solo por unos días ya que están remodelando su cuarto, ella no se quejo y se quedo sola en esa habitación para darse un baño y mudarse de ropa, pero como su curiosidad era lógica se puso a recorre el cuarto dándose cuenta que le pertenecía a unos de los hijos del Fugaku.
Se puso a buscar en su maleta algunas prendas, saco su ropa interior, una mini falda de mezclilla junto a una calza y polera negras tomo todo eso y se fue al cuarto de baño y se pudo dar cuenta ese baño se comparte con la habitación de al lado ya que había una segunda puerta, camino hacia ella y la abrió dándose cuenta que ese cuarto también le pertenecía a uno de esos muchachos.

Mientras tanto que Hinata se está dando un baño, toda la familia estaba esperándola en el salón para darle una verdadera bienvenida. Pero ya han trascurrido más de treinta minutos pero ella aun no baja, ya estaban todos impaciente que bajara, todos estaban molesto por la tardanza ya que los Uchiha no se caracteriza por ser paciente.

–¿Cuando se dignara en bajar esa niña? –dijo Sasuke, pero como el esta de espalda a la escalera no se había dado cuenta que ella estaba bajando por la escalera y lo pudo oír.

–Hinata, Hinata Hyuga así es como me llamo, gruñón. –se dirigió a donde esta Sasuke, este no supo que decir ya que lo pillo desprevenido y no se espero que ella estuviera cerca del.

–Hmp…– solo gruño y guardo silencio ya que la justificación agrava la falta.

–Ven para acá mi niña–dijo Mikoto y la tomo de la mano y se la llevo al comedor donde esta toda lacena servida en honor a su llegada, ella había preparado diversas ensaladas junto con una carne asada y la organización de la meza se veía todo simétrico cada cosa esta en su lugar viéndose todo perfecto.

–Pero antes de comer, quiero presentarte a mis hijos–dijo Fugaku –el que está a mi derecha es Itachi es el mayor y el que está a la izquierda es Sasuke el tiene tu edad. – ambos chico hicieron una reverencia para presentarse y Hinata solo movió la mano para saludarlos.

–Buenas….¡ Ya podemos comer! –hablo de forma despreciativa hacia los chicos, pero Itachi se lo tomo con humor porque sabe en el fondo que con ella van a ser bueno amigos. En cambio Sasuke se le atravesó la Hyuga la encuentra apática, odiosa, mal educada pero para complacer a su padre debe aguantarla. Ambos chicos se miraban con odio y están a la defensiva.

–Si…, ya es hora de comer porque hace hambre –dijo Mikoto para bajar la tensión que hay entre la Hyuga y Sasuke.

Así se fueron sentando en sus lugares quedando Hinata al lado de Itachi, y empezaron a comer en silencio. Pero Mikoto se dio cuenta que Hinata se había servido solo ensaladas verdes y nada mas. Así que Mikoto tomo la fuente con la carne asada y se la paso a Sasuke para que le sirviera a la invitada como estaba relativamente cerca, pero al momento de preguntar si quiere.

–No, no como nada que tenga ojos…–ahora todo los que estaban comiendo gustosamente la carne les dio asco el comentario, pero a Sasuke se fastidio y le respondió.

–Solo tiene que decir no gracias y… guardarte tus comentarios ácidos, date cuente que los demás están comiendo, nenita mal criada–

–Oh… que prefieres que diga, mmm…. No gracias no como cadáveres, ¿así esta mejor Don ogro?– recalco la palabra ogro e Itachi se reía de la situación y estaba fascinado con trataba a su hermano la chica Hyuga.

–Ya, basta con…–Hinata lo interrumpió

–¿Que no te gusto, la parte que dije cadáver o cuando digo ogro? –a Sasuke se le estaba hinchando la vena de pura, Hinata se reía en su cara– también te puedo decir, amargado, arrogante o tal vez… el niño feliz por tu cara eso es lo irradias. –el sarcasmo con que hablaba molestaba mas y mas a Sasuke.

–Quien habla de amargado, y… tú, ¿dónde queda la niñita que se cree mala…? –le respondió con mas sarcasmo el ojinegro.

–Yo lo asumo y no me enojo por la verdad–hablo con una sonrisa, si alguien la conoce bien sabría que es mas sonrisa es mas falsa que judas. –pero mírate tú… pareces un energúmeno por la verdad jajaja…–todos los que están presente estaban sorprendido ya que en qué momento se transformo la cenan en una batalla de insulto, pero esta situación colmo la paciencia del jefe de hogar.

–Sasuke y Hinata… se callan –gritó– ahora… se van los dos a su habitación.

Ambos se levantaron de la mesa pero la peli azul se fastidio porque odia que la manden pero en vez de ir a su habitación se dio media vuelta y salió de la casa. Todo los que estaban observando la situación no reaccionaron al ver como ella se marchaba.

–Déjenla, ya volverá…–hablo Fugaku–continuemos comiendo, pero tu Sasuke estas castigado a tu habitación.

–Como diga Otosan. –se fue a la habitación que comparte con su hermano maldiciendo a la chica de ojos claros.

La cena había termino, estaban todos preocupado porque no llegaba la joven y así trascurrió más de dos horas aun ella no aparecía solo estaban sentados esperando a su retorno pero nada sucedía. De pronto hablo Itachi sacando a sus padres de sus propios pensamientos de preocupación sobre el destino que corrió esa chiquilla.

–Otosan, voy a ir a buscarla–ello lo quedaron mirando y por la expresión de sus padres daban a entender su aprobación de que fuera en su búsqueda y así lo hizo.

Una vez fuera de la casa Itachi caminaba por las calle que estaban un poco oscuras, pero con un poco de iluminación el se imaginó donde ella puede estar ya que cerca de su casa hay un parque y lo más probable es que se encuentre ahí, camino en dirección a tal lugar. Como era de esperar ella estaba en el parque sentada en una rama de un árbol, solo se puede ver sus pies colgando para asegurarse que era ella se acerco a paso lento hasta aquel árbol donde se encontraba la Hyuga sentada.

Estaba debajo del árbol pero ella como estaba sumergida en sus pensamientos no se había dado cuenta de la presencia de Itachi, y él tampoco hizo mucho para que se diera cuenta que había llegado a su lado, pero como ya era tarde y empezaba hacer frio no le quedo de otra hablarle y llevarla a casa.

– ¿Estás más camada? –Saco a Hinata de sus pensamientos, miro a quien le hablaba y suspiro –¿quieres regresar a casa?.

–Queras decir a… tu casa, porque yo no pertenezco…–pero fue interrumpida por el chico de cabellos largos.

– ¿Porque te gusta subir a los arboles? –cambio el sentido de la conversación – pero… sin ofender, no conozco chicas que gusten subirse a los arboles y…–ahora fue ella quien interrumpió.

–Lo hago de que tengo uso de razón y… es algo simple, me gusta estar sola, aquí nadie se me puede acercar tan fácil– respondió con melancolía, porque en el fondo ella sabe que al estar sentada en un árbol le da tranquilidad debido a que le llegan a su mente unos hermosos recuerdos de su madre y es una forma que tiene para sentirse cerca de ella.

–Ah… mí me gusta estar en el tejado de la casa, mirando las estrellas ahí puedo pasar muchas horas, hasta me he quedado dormido y al otro día amanezco todo maltrecho je-je…–escucho una leve risa de parte la Hyuga.

–Vamos, hace mucho frio–ella bajo del árbol y se sacudió para continuar pero Itachi no le siguió el paso, sino, la tomo de la mano y se la llevo corriendo a unos columpios que estaban en un costado del parque.

–Aun es temprano, hagamos sufrir un poco más a mis padres jeje…, además tengo gana de columpiarme un rato…–le regalo una sonrisa de esas que solo los Uchiha tienen.

–Está bien, solo para hacer sufrir a tu padre…–lo miraba de reojo de una forma picara ya que le agradaba la idea de columpiarse, también le agradaba este chico porque se parece mucho a su primo a pesar que hace poco lo conoce siente que hay una extraña química hacia él.

Así ellos empezaron a balancearse en los columpios como si fueran niños pequeños, cualquiera que los viera diría que no tuvieron infancia. Continuaron balanceándose un buen rato pero ninguno de ellos intercambiaron palabras, solo se veían con una leve sonrisa, porque disfrutaban el momento en absoluto silencio, pero fue interrumpido.

–Sabes Uchiha no eres tan desagradable después de todo–lo dijo en un leve susurro pero que levemente percibido por los oídos del joven que la veía con una hermosa sonrisa.

–Itachi así me llamó, por favor no me llames por mi apellido que me hace sentir más viejo de los que me veo jjejeje…–

– ¡Como quieras!, Itachi–regalo una hermosa sonrisa al joven

–Te puedo pedir un favor–

–¡Eso es lo que tení…!, recién conociéndonos y ahora pides un favor– lo miraba de reojo pero en el fondo lo dice en broma.

–Para que veas que soy un sinvergüenza–Hinata lo miro con asombro– jajaja, no… es broma, solo quiero pedirte si te puedo llamar Hina -chan, ¿puedo?–la empezó a mirar con ojitos de borrego, que fue difícil decirle que no a tal expresión que hace el muchacho, dándole un toque de tierno y sexi una combinación perfecta.

–Está bien pero no abuces de tu suerte, ok–

–Solo por hoy te pido este favor, ya mañana será otro día y… veremos que sucede jeje… –

–¡Tienes razón!–Itachi miraba con cara de pregunta –en que eres un sinvergüenza de primera jajaj…

–Je-je… eso que no conoces a mi pequeño hermano él es peor–se quedo callado de pronto y recordó lo que paso horas atrás –sabes, el no es tan malo como lo aparenta–hizo un silencio–con el tiempo te darás cuenta solo tenle un poco de paciencia.

–…–no dijo nada solo omitió cualquier comentario porque esta demás hacerlo.

–Es tarde… ¿vamos? –Itachi se levanto del columpio y le tendió la mano a Hinata para que se pusiera de pie, pero ella se sonrojo por aquel gesto que hacen los de caballero, al final termino aceptando su mano para ponerse de pie.
Se fueron caminando a paso lento ya que ella no quería llegar a la casa de los Uchiha, pero tarde o temprano llegara a su destino.

Están parado frente a la puerta de entrada e Itachi se buscaba a las llaves para abrir la puerta pero antes de colocar la llave en la cerradura la puerta se abrió de golpe y salió volando el joven Uchiha por el empujón que le dio su propia madre, lanzándose sobre la muchacha que lo acompañaba.

–Mi niña, ¿Estás bien? ¿Te duele algo? ¿Tiene frio? –Hinata no alcanzaba a responder una pregunta cuando la volvió a interrumpir Mikoto con otra pregunta– ¡si… eso es…! Frio…, entre entren rápido–hacia señales para que pasaran cuando se dio cuenta que su hijo está en el suelo –y… tú ¿qué haces ahí? párate y entra rápido.

–Como digas, Okasan–como siempre tan impulsiva mi madre, se paro para luego sacudirse y entrar a la casa.

Otra vez están reunidos en el salón, pero el menor de los Uchiha no estaba presente debido que él se encontraba en su habitación por petición de su padre.

–Hinata, como faltaste a tu palabra más pronto de lo que pensé, me veré obligado a que cuando salgas de la casa tendrás que ir acompañada ya sea por uno de mis hijos. –decreto el Uchiha

–Pero… a… ¿cuál de tus condiciones falte, según tú? –reclamo con furia.

–Simple, debías avisar cuando salgas de la casa–miraba a la chica con una sonrisa burlona, que fue como una patada en el hígado para la chiquilla, porque sabía que tiene razón.

–Ok, pero… ¿qué pasa si ninguno de ellos esta disponibles o no me quieren acompañar?.

–Entonces no vas… así de simple–la miro desafiante

–Está bien, pero aténgase a las consecuencias. –lo miraba a los ojos y se dio media vuelta para subir en dirección a su improvisada habitación, pero antes de caminar –maldito viejo, esto no se me va a olvidar, sus condiciones se la puede meter donde le caigan –esas fueron sus últimas palabras continuar su camino, mientas avanzaba se podían escuchar los grito del Uchiha llamándola, pero ella no hizo caso. Cuando dejo de escuchar esa voz autoritaria fue cuando llego a su habitación, pego un portazo y se lanzo sobre la cama tomando una almohada para taparse el rostro y poder ahogar un gran grito de frustración


Ya un poco más calmada busco una polera que la usa como pijama en su maleta, pero al momento de verla recordó a su antiguo dueño, como si nada las lagrimas empezaron a salir una tras otra de sus ojos y sus sollozos cada vez se hacían más intenso que se podía escuchar cualquiera que pasara por fuera o estuviera en el cuarto del baño. Efectivamente fueron escuchados por el menor de los Uchiha quien se estaba lavando los dientes en el baño, pero no aguanto la curiosidad y la fue a verla ya que el cómo ser hombre por causa de su naturaleza odia ver llorar a una mujer, sobre todo por causa de su padre eso era lo que él pensaba pero el motivo real no andaba cerca de suposición.

Abrió lentamente la puerta sin hacer ruido y vio a la muchacha aferrada con todas sus fuerzas a una prenda de vestir como si fuera que su vida dependerá de eso , ahí el joven Uchiha se dio cuenta que la causa porque lloraba la pelinegra no era su padre , si no, por una gran amargura que tiene su corazón. Asi como abrió la puerta la volvió a cerrar sin que se diera cuenta la Hyuga.


En la habitación de los hermanos Uchiha estaba tirado en su cama Itachi analizando todo lo que ha pasado en trascurso de la llegada de la Hyuga hasta ahora cada vez le gustaba más tener una hermanita pequeña aunque sea por poco tiempo, mas le agradaba cuando enfrenta a su padres con el valor que él no tiene, pero sus pensamientos fueron interrumpidos por la llegada del su hermano menor.

–Oye dobe, ¿qué te paso, porque traes esa cara?–pregunto Itachi

–Nada que te importe… –respondió el Uchiha menor lanzándole la toalla a la cara de Itachi.

–Cambiando de tema, ¿Qué te parece Hina-chan ? –Sasuke le pareció raro que la llamara con tanta familiaridad.

–¿Cómo que… Hina-chan? –pregunto Sasuke

–Asi le digo , es… un cuento largo–miraba de reojo a su hermano– pero no te incumbe.

–Como sea... me da lo mismo–Sasuke sacudió la mano y se fue a dormir en un sofá-cama.

–Pero... ¿qué opinas de Hina-chan?–volvió a insistir.

–Es una mal criada, arrogante, pesada y tiene un carácter…–fue interrumpido.

–Carácter de los mil demonio…. Se parece a ti, pero ella es más agradable y… es bonita, tiene un físico… bien dotado–a Itachi se le caía la baba al recordar la delantera de la chica.

–Para le pervertido… no me interesa saber tus fantasía sexuales–le reclamo con enfado

–Pero… trata de negar que esta chica está bien buena–insistía Itachi –¡reconócelo!.

–Sí, es linda, pero hueca como todas las chicas que conozco–hizo una leve sonrisa que no la alcanzo a percibir su hermano mayor.

–mmm… hace un rato parecías muy interesado en ella.

–¿Yo? –no sabía de que está hablando

–Si… te vi espiándola por la puerta del baño que da a su pieza–estaba sonrojado porque lo habían pillado infraganti el menor de los Uchiha – debería cerrar la puerta cuando entre al baño hermanito…

–Hms…–no hallaba que decir por su defensa, solo le quedo gruñir, su hermano mayor seguía riéndose del.

–Sabes… lo que es mas gracioso de esto–hablo entre risas –es que… te molesta la actitud de ellas que son iguales a las tuya… jajaja…–

–Vete al diablo…–hablo con rabia, ya que en el fondo el sabia que esa chica se parece mucho a el, da por hecho que él pasara enfrentándose con ella.

El menor de los Uchiha se tiro en su provisoria cama y se tapo hasta la cabeza refunfuñando contra su hermano que lo miraba ya que está muerto de la risa por la actitud frente a la chica que atormentaría a toda su familia, de alguna forma le agradaba la idea.


Hinata se calmo después de a ver llorado por un largo rato tomo la camisa que le pertenecía a su ex amor se la puso y se metió a la cama para tratar de reconciliar el sueño pero no lo lograba se sentía incomoda durmiendo en cama ajena aun que sea cómoda pero no era su cama. Como era alrededor de la las dos y media de la madrugada decidió salir de la cama para sentarse en la ventana mirar al cielo nocturno apreciando su belleza que a muchos le fascinación. Observar el cielo la tranquiliza y la ayuda a pensar para aclarar sus ideas de estos últimos acontecimientos que cambiaron su vida. Estaba tan ahogada en su mente que trascurrió dos horas que ni se dio cuenta de aquello, si no fuera por el frio que se sentía no hubiera volvió a la cama. El cansancio le gano y esta vez cayó rendida en un profundo sueño en poco tiempo.

Continuara…


Espero que sea de su agrado este fic porfa dejen su comentario para poder mejor uno necesita criticas pero no sean tan duros jejej… nos vemos al próximo cap.

Gracias por leerlo

Aios!