Se que muchos se preguntan... ¿Porque una nueva historia? Bueno, eso es algo que su autora no entiende ni un poco, pero este será un capítulo pilotó. Ya lo tengo subido en facebook y hasta ahora tienen buena recepción. Dependiendo como le vaya aquí y en Fanfiction, veré si la sigo subiendo.
Todos los personajes aquí nombrados, le pertenecen a la increíble Rowling. Yo solo los tomo prestado por diversión para la escritura de esta obra, sin fines de lucró.
Capítulo 1: La invitación.
Hermione Granger se estiró para poder aflojar los músculos, luego de estar muchas horas en la misma posición haciendo su trabajo para Runa Antiguas. Tomó los libros y emprendió el rumbo de los pasillos de la biblioteca, para dejarlos en sus lugares correspondientes. Una vez realizada esta tarea, se dirigió hacia la salida y se despidió de la bibliotecaria. Salió rumbo hacia su sala común, en la torre de Gryffindor.
— Granger —dijo una voz más que conocida para ella. Al girar, se encontró a Draco Malfoy, quien se encontraba apoyado en la pared.
— ¿En qué puedo ayudarte, Malfoy?
— Como sabrás, se estará llevando próximamente el baile de bienvenida en la escuela y me preguntaba —dijo mientras se acercaba a ella. Cuando la tuvo enfrente, Hermione tuvo que levantar su vista, ya que él era mucho más alto que ella— si quieres ir conmigo a dicho baile. ¿Qué dices?
Hermione se quedó en su lugar, segura que se encontraba en la enfermería por culpa de alguna broma de alguno de sus compañeros y que estaba soñando que el rubio la había invitado a salir.
— ¿Es acaso alguna especie de broma?
— ¿Que? ¡Claro que no!
Decir que estaba sorprendida era poco, pero en realidad no lo estaba. Aun podía recordar ese día en el callejón Diagon, cuando se encontró con el rubio. Luego de lo que fueron un par de minutos, aceptó su pedido de ir a tomar un café. Entre charla, las disculpas de Draco por tantos años de maltrato y una buena cantidad de café con galletitas de por medio, ambos llegaron a un acuerdo: olvidar todo y arrancar desde cero una linda amistad.
— Yo… —trago saliva—. Claro. Me encantaría ir contigo.
Draco le tomó ambas manos, mientras una pequeña sonrisa salió de él.
— ¿En serio? ¡Perfecto! Entonces pasaré por tu torre a las 9. Nos vemos —dijo, mientras se daba la vuelta y se iba a su clase.
Hermione se quedó de pie en el mismo sitio, los estudiantes que pasaban por ahí también estaban estupefactos como ella. Dio una vuelta y siguió su camino hacia la torre de Gryffindor.
Clases de Pociones
En ese momento
Blaise Zabini se encontraba en su escritorio cuando Draco entró al salón, con un paso totalmente apresurado y con una leve sonrisa, que podría pasar desapercibida para los demás estudiantes, menos para el moreno.
— ¿Debo tomarlo como que te fue bien? —dijo, levantando sus cejas.
— No puedo creer que ella me dijera que sí.
Blaise sabía que su amigo y la castaña habían intercambiado en lo que llevaba de meses un par de palabras y que habían compartido algunos momentos cuando se encontraban en la biblioteca. Según Draco, para él el encontrar a alguien con su mismo afán para debatir las cosas. Sabía que el rubio se reprochaba todo el tiempo que habían pasado en un estado de "enemistad" innecesario. Aunque muy pocos sabían, que esa "maldad" y "desprecio" del rubio, se debía no solo por la forma en que lo habían criado, sino también, para encubrir sus verdaderos sentimientos hacia la castaña.
Cuando las clases habían terminado, Draco se despidió de Blaise, y se fue por el camino que lo iba a llevar a su sala común, en Slytherin. Iba tan perdido en sus pensamientos, recordando una y otra vez la aceptación de Hermione de ir con él al baile, que no vio a la persona recargada en la pared, hasta que al pasar a su lado, está lo llamo.
— ¡Hola Draco!
— Oh… —dijo dándose la vuelta. Fue clara su cara de disgusto al ver a Astoria Greengrass— ¿Qué quieres, Astoria?
Astoria se quitó de la pared y se fue acercando al rubio.
— Yo… lo siento mucho… solo que tengo algo que preguntarte.
Cuando estuvo frente a Draco, apoyó su mano en su brazo y posó su mirada sobre él. Draco se sentía molesto con ella, sabiendo que esa era su forma de conseguir lo que ella quería. Había terminado el compromiso que mantenían, a comienzos del año, cuando descubrió a Astoria en un momento muy "divertido", junto a Dean.
— ¿Qué es lo quieres? —dijo rodando los ojos.
— Estoy segura que me vas a invitar al baile que se estará llevando acabó prontamente, así que desde ya te digo que sí.
— Mira niñita —dijo mientras tomaba la mano de Astoria y la bajaba de su lugar— lamento que tu mundo de color de rosas se ha terminado. Pero te recuerdo que no quiero verte nunca mas cerca mio. Además, ya invite a alguien más.
Draco se dio la vuelta para seguir su camino, dejando a una Astoria en medio del camino, aún impactada por sus palabras. Cuando se dio cuenta quien estaba cerca de ahí, decidió de jugar una última carta.
— Draco —al ver que el rubio se daba la vuelta, decidió acercarse rápidamente— déjame ayudarte a cambiar tu forma de pensar —y saltó sobre él, con los brazos alrededor de su cuello, besándolo.
Él se quedo unos momentos plantado en aquel lugar, sin poder creer lo que Astoria había hecho. Su estado de shock duró solo unos momentos, cuando logro divisar un cabellera castaña yéndose apresuradamente a los lejos. Toda su vida lo habían educado para ser un caballero con las damas, una educación que mandó al diablo cuando empujo a Astoria lejos suyo, haciendo que la misma terminará con el culo en el piso. Rápidamente siguió el camino que sabía que Hermione había tomado. Cuando al fin la divisó, la castaña se dirigía a su clase de Estudios Antiguos.
— ¡Granger! Espera.
Hermione se dio la vuelta, cruzando los brazos y con el ceño fruncido. Aún no entendía porque al ver al rubio besarse con Astoria, la había hecho enojar mucho. Se supone que su plan era ser amiga del rubio, sin sentimientos de por medio ¿verdad? ¿Entonces porque aquel beso le molestaba?
— ¿Qué quieres Malfoy?
— Eso que viste hace un rato atrás…
— Mira —dijo mientras se frotaba la vista— no hace falta que me digas que no paso nada. Vi lo que vieron los demás estudiantes de esta escuela. No tienes que explicarme con quien sales.
— Espera. Astoria se me lanzó encima. Aún no supera o no quiere entender que entre ella y yo no hay mas nada. Ya va ser un tiempo que no…
— Draco, espera —dijo deteniendo al rubio de su explicación—. Se me hace tarde para mi clases. Como te dije, no necesito que me digas de tus citas y demás. Simplemente olvidalo y ya.
— Pero... ¿Que va a pasar con respecto a ir juntos al baile?
Hermione no lo sabía. ¿Aún sería su compañera?
— Si aún quieres que sea tu compañera, me lo vas a tener que demostrarlo —dijo entrando al salón, dejando a Draco parado en su lugar.
