Capítulo 1

"Despertar"

Al momento en que abro mis ojos, todo está cubierto por una luz deslumbrante, siento que estoy flotando y no logro ver a donde voy, trato de girar para tratar de ver si hay algo o alguien cerca de mí, tengo una sensación de tranquilidad, como si todos los peligros que pudiera haber fueran inexistentes. Mis ojos comienzan a acostumbrarse a la luz, permitiéndome ver un paisaje conocido, puedo divisar una montaña solitaria a lo lejos, la nieve ha cubierto completamente la montaña tiene ese aspecto agresivo, lleno de picos y barrancos, está completamente deforestada y parece que lleva así desde hace muchos años. En donde me encuentro hay un pastizal vasto, en donde puedo ver un lago con animales reuniéndose alrededor para beber agua y descansar, jirafas e incluso algún elefante y su cría en el lago, todos tomando agua, refrescándose del enorme calor que hace. Hay árboles en los alrededores, son hermosos, tienen un tronco café lleno de corteza, son enormes, alcanzas alturas más altas de 5 metros, me adentro en la selva en donde encuentro con cierta tristeza que entre más me adentro al bosque la vegetación se hace menos bella y empieza a tener ese aspecto agresivo decaído sin vida como si estuviera enferma, los árboles en esta zona son más oscuros, las hojas están cayendo pero esto no impide que el follaje sea tan denso que impida al sol entrar aquí, entre más me adentro se hace más y más obscuro. Un miedo terrible se apodera de mí, pareciera como si toda la maldad del universo se hubiese concentrado en mí. Como una nube negra que baja a un valle tranquilo que no se da cuenta de la catástrofe que viene, como si toda la esperanza del mundo se hubiese transformado en desesperación y miedo. Giro frenéticamente buscando alguien que pudiera estar viéndome pero no logro nada, como de la nada algo hace que mi atención se atraiga justo en el lugar con menos luz, una cueva. Desde la obscuridad aparecen unos ojos verdes como de un felino lleno de odio, rencor y malicia; la cueva emana un olor fétido, como si hubiera cuerpos pudriéndose. Los ojos de la bestia están fijos en los míos, trato de voltear a otro lado pero me es imposible, trato de correr pero el cuerpo no me responde, me grito a mí mismo "¡VOLTEA Y CORRE! ¿QUIERES MORIR AQUÍ? ¡CORRE!

Cierro los ojos y algo frío recorre mi cuerpo como un rayo, con miedo abro los ojos y me encuentro en una habitación, mi habitación. Tomando aire con dificultad, un suspiro de alivio sale por fin y me siento sobre mi cama y respiro.

Alegre de saber que esa pesadilla acabara, miré hacia mis manos para comprobar que estaba bien. Me reincorporé con dificultad, observé mi cuarto de una forma que nunca antes había hecho, fijándome en cada detalle y cada objeto que había en él, las repisas de madera pintadas de color marrón; sujetado por 2 soportes metálicos de color negro. En la repisas había principalmente libros, libros que no había leído jamás y otros que los leía seguido, están acomodados del más pequeño, al más grande y para los que fuesen más largos tenía otra repisa en el que estaban acomodados los libros en pilas que llegaban hasta el techo. En ésta repisa se hallaban los libros que han caído en el olvido, como los libros que llegué a usar en la escuela, también hay cuadernos viejos y una que otra carpeta; Debajo de esta repisa hay otra, ésta está llena de pequeñas figurillas de varios animales, un gato montés, un mono, tres búhos. Luego de reconocer completamente el cuarto pienso "Que horrible pesadilla, lo bueno es que ya ha terminado. Pero, yo sé que jamás he estado en un paisaje igual… no se parece nada normal, de todas formas, ¿por qué se me hacía tan familiar?

Volteo a ver la ventana, todo está oscuro aún "seguramente son como las 4 de la mañana" Tomo entre mis manos el celular para comprobar la hora pero al momento de encenderlo la luz me deslumbra, tardé un rato en lo que mis ojos se acostumbraban a la luz y cuando pude al fin ver la pantalla me di cuenta de que eran las 2 de la mañana "¡Demonios! Llevo dormido tan sólo 1 hora" "Sólo tengo que cerrar los ojos y recostarme en la cama". En el momento que intenté cerrar los ojos una gran ansia se apodera de mí, la respiración que tenía fue acelerándose cada vez más, mi cuerpo estaba listo para tener una gran batalla o para salir corriendo pero nada de eso iba a suceder. Me levanto de la cama y dando pasos silenciosos deambulo por la habitación, en un intento de calmarle trato de tomar control de mi respiración para relajarla, funciona pero luego de esto un cansancio inmenso recorrió mi cuerpo, mi vista se hace cada vez más tenue, no logro ver nada excepto pequeños y cortos destellos de la realidad, luego súbitamente, nada. CONTINUARÁ…