Todos los personajes son propiedad de Rumiko Takahashi.

"Hay que luchar, Nadie llega a la perfección por mera renuncia."

Mahabharata

Mejorando al estilo Saotome

Prologo

La idea

-¡¿Bruta marimacho?!- Mallusco la joven, masticando cada palabra con creciente furia. Akane tragó duro y cerro sus puños con fuerza -¡Yo no soy una bruta!- La mano de la joven dibujo una trayectoria desde su cómoda y normal posición, al lado de su cuerpo, hasta la quijada del joven de la trenza -¡NI UNA MARIMACHOOO!- Ranma sintió como su cuerpo era propulsado con la fuerza de un camión, rompiendo la recia madera de las vigas del techo para dar paso a la nula resistencia del aire a su viaje hacia el cielo.

-¡Violentaaaaa!- Fue el grito que coronó ese viaje aéreo hacia el canal de Nerima. Los patriarcas familiares se abrazaron mientras lloriqueaban algo sobre las escuelas, Kasumi retiro una de las tazas de te que llevaba a la mesa y Nabiki, con un suspiro, agrego un par de ceros a la cuenta de los gastos de la casa. La pequeña Tendo farfullo algo contra su insensible prometido y se dirigió a cambiarse para ir al dojo a descargar toda la ira contenida. Su hermana mayor la miró desinteresadamente y dibujo otro cero a los gastos.

Akane se deslizo el gi rápidamente sobre el cuerpo y saltando por la escalera se encaminó al dojo, apilo los ladrillos a la altura de su rodilla y descargó en cada montículo un golpe que habría desnucado a un buey -¡Ranma idiota!- CRACK ladrillos en pedazos, -¡Yo no soy plana!- CRACK ladrillos destruidos, -¡No intento matarte con mi comida!- CRACK ladrillos pulverizados -¡Y no soy violenta!- CRACK polvo de ladrillos. La joven examino su mano, satisfecha de no tener magulladuras a pesar de haber golpeado el concreto con la piel desnuda. Limpio los restos que abundaban en el suelo y coloco al centro uno de sus muñecos de entrenamiento, descargo una serie de patadas contra el indefenso hombre de paja, disfrutando la sensación de poder en sus músculos. Ella lo sabía, a pesar de todo lo que decía su prometido ella no era una mala artista marcial. O creía saberlo.


Ranma sacudió con fuerza su cabeza para despejarla, salio del canal de un salto, se saco su camisa para dejarla escurrir y quito una bolsa de almacén que colgaba de su oreja –Ehh, el canal no es para botar basura- Musitó mientras tomaba sus zapatos, ahora enormes para sus pies, y se ponía en dirección hacia el dojo. Salto con facilidad entre los tejados mientras palpaba su mejilla magullada -¡Rayos!, ¿de qué tiene hechos los nudillos? Esto me dejara marca- Aterrizo con suavidad sobre el techo del dojo, en el interior del edificio se escuchaban los gritos de Akane mientras entrenaba y el ocasional ruido de algo quebrándose, volvió a estrujar su camisa, se descolgó del techo enganchando sus pies para quedar cabeza abajo y observo a su prometida desde su cómoda y segura posición colgando en la entrada del dojo. La chica golpeaba con fuerza un destripado muñeco de entrenamiento, el joven Saotome observó como los golpes de la joven descargaban suficiente poder como para tumbar un elefante "Pero con esa velocidad no es capaz de conectar a ningún artista marcial que se precie de serlo", el joven soltó sus piernas y aterrizo con una mano, usando la otra para impulsarse cayó cerca de Akane. La chica no se dio vuelta a mirarlo, indignada aún por su discusión, el la ignoro y empezó a ejecutar una de sus katas más difíciles, saltando hacia todas partes y enfrentando diez enemigos imaginarios a la vez.

Akane detuvo un momento sus ejercicios para observar de reojo a su prometido, el joven ahora mujer saltaba hasta rozar el techo con una sencillez asombrosa calculando cada uno de sus movimientos con gracia y estilo, haciendo parecer que el arte marcial era en realidad un juego de niños. Una puntada de envidia hizo que girara su cuerpo violentamente, usando el impulso del giro para lanzar una patada hacia donde aterrizaría Ranma, patada que la pelirroja esquivó rodando hacia el suelo y levantándose para seguir con la kata.

-¡Ranma, entrena!- La chica intento alcanzar a su prometido con otra patada, la joven Saotome salto sobre su cabeza y le saco la lengua, ella giro lanzando su puño en su dirección golpeando el aire, Ranma volvió a esquivar moviéndose ligeramente. Akane le lanzo su mejor serie de golpes, patadas y llaves, pero ninguno de sus movimientos llegó a rozarla. La chica sudaba copiosamente y jadeaba, Ranma aún sin detener su kata seguía esquivando sus ataques -¡Maldición Ranma tómalo en serio!-

-No es necesario, eres muy lineal Akane y leerte no es un problema- La chica lanzo una patada alta hacia atrás mientras paraba un puño de la joven Tendo con su mano, empujo ligeramente su hombro para dejarla de espaldas y con el pie presiono levemente la pantorrilla de Akane, logrando que ella cayera al suelo. La chica se levanto pesadamente y se limpio el sudor con la manga del traje.

-¿Ves?, eso sucede porque eres una marimacho- Ranma sonrío con suficiencia, esperando que Akane se diera vuelta para que lo golpeara, pero la chica se encogió de hombros sin mirarlo y se marcho del dojo cabizbaja. La joven observo incrédula como su prometida se retiraba y la siguió de cerca –Ehhh, Akane ¿Qué sucede?, Akane, Akane, Akaneeeee- Inquirió mientras pinchaba con un dedo su espalda.

-¡Déjame tranquila!- Ranma volvió a surcar el cielo, aunque esta vez solo aterrizo en el estanque de la familia, la chica lo observo con una mueca de frustración y se alejo hacia el baño "Wow, ella esta cansada y frustrada, es la única razón para volar tan poco" pensó Ranma mientras enderezaba su cuerpo y sacaba los restos de roca de su cabello.

La joven entro sin prisas al baño, abrió la llave de agua caliente y se dejo conducir por el tibio baño a un lugar más tranquilo, un lugar que era su hogar antes de que llegará Ranma a su vida "Lo peor de todo es que no me he hecho más mala, simplemente nunca he estado a la altura de algo que pueda llamarse artista marcial" se recogió sobre si misma, buscando fuerzas dentro de sí. Talvez si le pedía a alguien que la entrenara, pero su orgullo se lo impedía, ella había afirmado por mucho tiempo que era una artista marcial completa, y no le pediría a nadie que la ayudara a mejorar. Tendría que buscar otra manera.


La cena transcurrió silenciosa para la familia Tendo, Ranma de vuelta su forma normal noqueo a su padre para no pelear por cada grano de arroz y nadie emitió comentario por la sepulcral Akane que apenas probaba su comida. La menor de los Tendo excuso su presencia y se retiro hacia su habitación. Su prometido, engullendo la comida que ella dejara, la observo preocupado. No era normal que Akane se comportara así y el creía saber la razón. Giro levemente su cabeza mientras meditaba sobre el tema, era obvio que Akane quería mejorar pero ella no le pediría ayuda por el maldito orgullo y el sería incapaz de dársela también por el maldito orgullo y su bocaza. Aún así se sentía intranquilo por lo ocurrido en el monte fénix "Mmmhhhhh, ¿Qué haré?" observo a su padre, que empezaba a recobrar el sentido, con un prominente chichón en la cabeza. Súbitamente recordó sus años de entrenamiento junto a el y una idea le ilumino la noche. Trago el resto de lo que quedaba en el plato y agradeciendo la comida voló hacia su dormitorio. Registró las cosas de su padre y extrajo un viejo pergamino, lo abrió mientras fruncía el entrecejo.

-Oyaji esta loco, pero esto servirá- Se comento mientras cerraba el pergamino y sacaba las pequeñas bolas de demolición y otros artefactos de la caja. Akane era lenta, desequilibrada, torpe y obstinada, pero no existe ningún reto que un Saotome no pueda dominar, ni siquiera convertir a esa mujer en la mejor artista marcial femenina de Nerima. Sonriendo ante la perspectiva y diseñando concienzudamente un entrenamiento en su mente Ranma siguió sacando los instrumentos de entrenamiento. Esa noche Akane siguió su rutina nocturna acostumbrada, se coloco el pijama pesadamente, el entrenamiento con su prometido la había agotado "y ni siquiera intente golpearlo por más de media hora" se arropo frustrada por su evidente incapacidad de pelea frente a los demás artistas marciales de su ciudad e intento cerrar los ojos para dormir, pero esa noche en partícula Akane tuvo problemas para dormirse debido al mal presentimiento que le corría por la espalda.

Notas de Autora: Si, no he terminado mis otros proyectos, pero esta idea nació hace mpas de un año y ha estado esperando el momento adecuado para salir... puede que sea ahora. En fin vere como evoluciona esto. Si han leído hasta aquí se los agradezco y ya saben, cualquier comentario, opinión, critíca, reclamo o denuncia serán bien recibidos.