Duda
Alastair, el Infierno, la tortura... Castiel puede ver cada recuerdo pasar dolorosamente frente a los ojos de Dean, en interminable cascada, al escuchar su petición.
-Dile a Uriel o a quien sea que no quieren que yo haga esto, créeme.
Si el que habla no fuese Dean Winchester, el ángel se sentiría tentado de afirmar que aquellas palabras son una súplica; pero sí lo es, por lo que Castiel se abstiene de siquiera considerarlo, aún cuando no puede evitar sentir a su corazón encogerse ante la mirada desolada del cazador.
-¿Quererlo?-Contesta, intentando que su voz no muestre la desazón que siente.-No, pero me han dicho que lo necesitamos.
Ve a Dean encogerse ante su respuesta y se pregunta vagamente si estará incluso deseando desaparecer, ser una nada en el universo y encontrarse lo más lejos posible de aquella carga sobre sus hombros.
Lo observa avanzar, darle la espalda y en algún rincón de su mente se cuestiona por qué rayos hay un vacío tan absurdamente doloroso en su pecho.
-Me pides que abra esa puerta y entre.-Dice Dean. –No les gustará lo que salga de vuelta.
Castiel nota el pronombre, por supuesto. No más el "ustedes, los jodidos ángeles", sino un "tú, Castiel", que lo hace preguntarse si aquel vuelco agónico en su corazón puede ser considerado normal. También nota que esta vez no hay súplica; puede escucharlo rompiéndose en pedazos por dentro, a cada palabra, pero después de todo es un Winchester y tiene su orgullo; ya no puede suplicar, pero espera que aquella velada advertencia pueda ayudarle.
Y lo escucha, aún en el silencio, casi sintiendo el pánico de Dean correr por sus propias venas, y agradece mentalmente que el cazador le de la espalda, pues sabe que no podría resistir ahogarse en la mirada rota que, está seguro, ahora tiene.
Lo piensa un segundo, un respiro; sus superiores amonestándolo, Uriel reclamándole su fascinación por el humano y aquellas extrañas sensaciones que le ruegan que no permita que Dean de un paso más...
-Si sirve de algo, daría cualquier cosa por que no tuvieras que hacerlo.-Dice, sin pensarlo, por primera vez con el corazón en la mano.
Dean no responde y Castiel sabe que realmente no hay una respuesta; lo ve avanzar, decidido, derrotado, y piensa que tal vez sus superiores tengan un poco de razón.
Por que, apenas decir las últimas palabras, se da cuenta de que en verdad nunca ha deseado nada con tal intensidad.
Y a pesar de todo, de saber que la duda no debería siquiera tener cabida en sus pensamientos, no puede evitar preguntarse si realmente es lo correcto permitir que un alma tan valiosa se destruya a si misma de tal manera.
Titulo desafortunado, lo sé...
Es una micro cosita que tuve que escribir luego del 4x16... espero no esté tan taaaaan mal...
Y no, no me gusta shippear a Cas con Dean... soy Wincestista al 100% pero Cas se ha ganado mi corazón.. y no puedo evitar ver lo absolutamente enamorado que está de Dean...
en fin... reviews? háganme feliz *w*
Izu
