Después del final de la quinta no he podido evitar colgar este fic, perdonad si hay algún fallo de cronología, pero este fic era algo viejo y lo modifiqué para que encajara con lo que pasaría a la vuelta de los dos.
El fic consta de seis capítulos y no tengo muy claro de cuando en cuando subiré.
……………………………………………………………………
Capitulo 1: De vuelta
Temperance Brennan se levantó cansada esa mañana, el sol brillaba en Washington y la gente salía con una gran sonrisa a pasear por la calle. Afortunadamente ese día era sábado, Brennan había vuelto esa madrugada de viaje y no podría haber aguantado trabajar al día siguiente. Su cabeza le dolía y tenía los pies destrozados. Había ido a aquel lugar, aquel en el que habían quedado un año atrás, pero él no había acudido, se había quedado allí sola por más de dos horas sin encontrarse con quien deseaba.
La antropóloga se levantó costosamente de la cama para andar hasta su cocina y preparase un té. Después tenía pensado meterse de nuevo en la cama. Nunca le había afectado tanto el cambio de horario, pero ahora, ese cambio, era como una paliza para ella. Cansada y como si sus pies fueran de plomo Brennan ando pesadamente de nuevo a su cama. Allí descansó durante escasamente media hora, media hora que fue la peor de su vida. Las pesadillas se repetían una y otra vez a velocidad desmesurada, pero esas no eran las pesadillas a las que estaba acostumbrada Brennan. Ella siempre había aguantado pesadillas relacionadas con su pasado, había revivido mil y una veces el abandono de sus padres en las noches más oscuras, pero, ahora, el protagonista de sus pesadillas era su compañero. Una y otra vez el la dejaba para irse lejos pero esa vez, esa vez le veía al lado de una mujer que no era ella.
Confundida la joven mujer se incorporó en su cama, no entendía por qué había soñado tanto con él y mucho menos entendía por qué le hacía tanto daño pensar que su compañero estuviera con otra mujer.
Después de dar por echo que no sería capaz de conciliar el sueño Brennan volvió a levantarse esta vez para darse un relajante baño en su ducha. Las imágenes de sus pesadillas pasaban por su mente una y otra vez creando un notable terror en su cuerpo, sentía que algo horrible ocurría, sentía que algo horrible había ocurrido en el tiempo que había estado fuera, solo había sido un año, ¿algo tan horrible había pasado en un año? Y lo pero, ¿desde cuando Temperance Brennan hacía caso de unas pesadillas creadas por su subconsciente? Racionalizándolo todo Brennan cerró los ojos relajándose por fin. Minutos después su móvil sonó y la antropóloga salió hasta callar al menudo artefacto.
-Brennan.-Dijo la antropóloga tan fríamente como siempre.
-Soy yo.-Dijo Cam desde el otro lado de la línea.-Veras, quería preguntarte si podrías pasarte por el laboratorio sobre las ocho, sé que acabas de llegar y que estarás cansada, pero llevamos mucho tiempo con un caso y solo necesito que le eches una ojeada a un cadáver.-Brennan suspiró un momento.- ¿Qué dices?
- Esta bien.-Dijo vencida la antropóloga.-Estaré allí a las ocho.
-Muchas gracias. Bueno, te dejo descansar.-Dijo Cam, con un tono muy alegre.-Hasta las ocho.-Después de eso la forense colgó su teléfono.
Brennan volvió a meterse en la ducha después de la llamada. Llevaría ese día con una gran tranquilidad. Después del baño se puso un poco de música mientras terminaba de escribir uno de los capítulos de su libro. Para comer pidió un poco de comida tailandesa y después se echó un poco la siesta. Con pesadez apagó el despertador que la indicaba que eran las siete de la tarde y se levantó de su cama para vestirse con muy pocas ganas de ir al Jeffersonian.
Al llegar allí todo estaba en la más absoluta oscuridad, Brennan no entendía nada, ¿por qué la habían echo ir allí si nadie iba a estar? Con ganas de descansar la antropóloga se dio la vuelta pensando volver a casa, pero, los gritos de todos sus compañeros la detuvieron.
-¡Bienvenida!-Gritaron todos al unísono. Desde Cam a Ángela la esperaban allí, con una gran sonrisa. Fue la artista la primera que se acercó a abrazar a su compañera.
-¿Qué tal el viaje cielo?-Preguntó ella mientras la acompañaba al centro del laboratorio. Que se había convertido en una gran pista de baile, por no nombrar la gran pancarta que colgaba del techo o las guirnaldas que se habían quedado colgadas en las luces del techo.
-Bien, bueno, cansada.-Dijo ella sin mostrar mucho entusiasmo por toda esa fiesta. Los ojos de la antropóloga se movieron por toda la sala buscando a una sola y única persona.
-Aún no ha llegado cielo, pero, no te preocupes, me ha prometido que vendrá.-Dijo Ángela leyendo los pensamientos de su compañera.
-¿A qué te refieres Ángela?-Preguntó Brennan haciéndose la tonta.
-Tú sabes a lo que me refiero.-Dijo ella con una sonrisa picara, pero Brennan seguía con una cara de confusión.-A Booth, cariño, a Booth.
-No buscaba a Booth, solo estaba un poco sorprendida al ver el cambio que le habéis dado al laboratorio.-Dijo la antropóloga buscando una excusa-Por cierto, no hacía falta todo esto, que solo me he ido un año.-Dijo la doctora sin muchas ganas de fiesta.
-Ya, pero un año en el que te hemos echado mucho de menos.-Dijo Cam, mientras se metía en la conversación como si nada. La antropóloga la miró con cara de no creerse nada.-Se nos han atascado muchos casos.-La forense miró al suelo con una clara vergüenza en su rostro. Brennan solo pudo sonreír.
-Mirar por ahí viene Booth-Dijo Hodgins mientras también se metía en la conversación.
En ese momento, como si un muelle hubiera saltado en el interior de Brennan ella se giró. Booth estaba vestido con su traje de siempre, una gran sonrisa podía apreciarse en su rostro, todo el mundo le saludaba como si él fuera el protagonista de la fiesta y es que, él también había vuelto de viaje hace escasas horas. A Brennan solo le faltaba caérsele la baba al observar a su compañero, pero todo cambió al ver entrar a otra persona detrás de él. Una mujer entraba y seguidamente se agarraba al brazo de Booth. Ella era alta y morena, su pelo le llegaba a los hombros y sus ojos eran de un azul eléctrico que podría dejar paralizado a cualquier hombre, Brennan no podía negar que aquella mujer era preciosa, pero, sin saber un por qué, algo le decía que odiaría a esa mujer por siempre.
Fue en ese momento cuando los ojos de los dos compañeros se cruzaron. Brennan permanecía seria desde que había visto a aquella mujer y el rostro de Booth se tornó en seriedad durante un segundo para luego dejar paso a una sonrisa muy leve. Booth y aquella mujer desconocida para Brennan se acercaron a la antropóloga.
-¿Qué tal Bones?-Preguntó Booth.-Cuánto tiempo.-Claramente una gran tristeza se podía apreciar en ambos.
-Si, mucho.-Simplemente pudo decir la antropóloga. Los dos compañeros se miraban intensamente, ignorando la presencia de todos los que les rodeaban, en esos momentos solo existían en su mundo ellos dos.
-Preséntale a tu nueva novia, ¿no Booth?-Preguntó Cam rompiendo la burbuja que habían creado Brennan y Booth.
-Claro, te presento a Catherine Klein,-Dijo Booth con una leve mirada dirigida a Catherine.-Es una bióloga marina de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica-Explicó Booth mirando de nuevo a su compañera. Brennan no dijo nada.
-Encantada de conocerte, Booth me ha hablado mucho de ti, espero que nos podamos llevar bien.-Dijo ella mientras extendía la mano a la antropóloga en forma de saludo. Esta la miró de arriba abajo para luego contestar.
-Lo dudo.-Todos miraron a la antropóloga sin dar crédito de lo que habían escuchado sus oídos. Sin decir ni media palabra más la doctora se fue.
La noche pasó muy larga para los dos compañeros, ambos se enviaban miradas furtivas desde los lados contrarios del laboratorio. Ambos tenían ganas de cruzar el espacio que les separaba y unirse para bailar aquella hermosa balada que sonaba en aquellos momentos, pero algo les separaba y ese algo tenía nombre y apellido. Catherine Klein.
………………………………………………….
Espero que os haya gustado, me gustaría leer vuestra opinión.
Por cierto, hace tiempo que no tengo muchas ideas para hacer historias de estos dos así que, acepto sugerencias, sean para cortos o para historias largas, ¡me vale todo! Haré las historias que me parezcan interesantes.
Gracias por leer.
Kaksa