¡Hola a todos! Pues bien, aquí les va una nueva locura mía xD, en realidad en un principio esto iba a ser un ONE- SHOOT, pero como se me alargó la idea más de la cuenta, tube que dividirlo en dos capítulos.
Como habrán notado, el titulo lo dice todo, es la historia sobre el 27 de Marzo, el cumpleaños de James Potter, en realidad esta historia la quería subir el 27 en honor a James, pero es casi seguro que no estaré en casa para el 27 por lo que prefiero subirlo ahora, para que no me pase lo que me ocurrió en San Valentín, que tenía un ONE-SHOOT de san Valentín y nunca lo subí porque no tuve Internet en todo el verano xD. En fin.
Les dejo el primero de los dos capitulos de esta historia.
Queda más que claro que todos los personajes y ambientes salieron de la genial mente de J.K. Rowling. )
OoO
"El cumpleaños de James Potter"
Eran las 7 de la mañana y como nunca antes visto, James Potter estaba duchado y vestido frente al espejo, sonreía socarronamente mientras observaba su reflejo, y tenía razones para hacerlo, era un joven de ojos castaño claros portadores de un brillo especial que hacía suspirar a más de alguna que soportara sostener su mirada algunos segundos. Su pelo castaño, siempre desordenado le daba un aspecto de rebeldía que completaba un cuadro de un muchacho atractivo; atlético, a causa de sus entrenamientos como cazador del equipo de quidditch; inteligente, destacándose por ser de los más brillantes de su generación sin demasiado esfuerzo; y con una gran capacidad para estar en medio de las mayores travesuras cometidas en Hogwarts en los últimos tiempos, y con la suerte necesaria para no ser involucrado directamente en ellas.
El muchacho tomó un poco del perfume que siempre usaba y volteando la botella de cristal, vació unas gotas de su contenido sobre sus manos para esparcirlas luego por su cuello y rostro.
- Si continuas arreglándote frente al espejo creeré que tu lugar es en la habitación de las chicas y no con nosotros- dijo una voz desde una de las camas de la habitación, amortiguada por las sabanas bajo las que se encontraba su emisor.
James sonrió soberbiamente.
- Este es el día Canuto- dijo resueltamente el castaño.
El aludido se abrió paso entre las sabanas con expresión somnolienta, era un chico muy atractivo, de ojos grises y pelo oscuro, que contrarrestaba con su tez blanca, de facciones delineadas con perfección y un aire de alborotador muy parecido al de James.
Sirius miró a su amigo que aún seguía frente al espejo.
- ¿El día?- preguntó el chico con una sonrisa de medio lado- ¿Tus padres te comprarán la escoba que querías para navidad?
- No- respondió James mientras tomaba su corbata y comenzaba a anudarla.
- ¿Por fin accederás a hacerles la broma al equipo de Slytherin?
- No- volvió a contestar el castaño mientras ajustaba el nudo.
- ¿Convencerás a McGonagall que no fuimos nosotros los que llenamos de pus de bubotuberculo el pasillo de la sala común de Slytherin?
- No Canuto...
- Entonces me rindo- dijo el moreno mientras volvía a enredarse entre las sabanas.
- Hoy es el cumpleaños de James, Sirius- dijo una tercera voz de un chico que iba saliendo del baño con el pelo aún húmedo, mojando con gotitas el piso, pelo castaño claro y unos ojos de tonalidades doradas que lo hacían particularmente único, su nombre: Remus Lupin.
- ... y... el día en que Lily Evans aceptará salir conmigo –añadió un seguro James Potter.
Sirius saltó rápidamente de la cama y se abalanzó sobre el chico que había terminado recién de arreglarse su corbata.
- ¡Feliz cumpleaños cornamenta¿Porque no me lo habías dicho? Sabes que soy un desastre en recordar cumpleaños...
- No recuerdas ni el nombre de la chica con la que saliste ayer, es un poco difícil que recuerdes el cumpleaños de James- dijo Peter Pettigrew, que con el alboroto también había despertado, era un chico de nariz respingada y ojos pequeños, si bien era el menos agraciado del grupo, se destacaba por ser bastante astuto y de mente rápida, cualidades que los merodeadores admiraban mucho.
El comentario de Peter no pareció afectar en lo más mínimo a Sirius, al contrario, parecía satisfecho de su no habilidad para recordar nombres ni fechas.
Luego que los tres amigos hubiesen saludado a James, y con Sirius y Peter ya duchados y con sus respectivos uniformes, los cuatro bajaron las escaleras hacia la sala común, riendo y hablando animadamente.
- ¿Así que Evans aceptará salir contigo como regalo de cumpleaños?- preguntó Sirius con un tono de voz algo burlón.
- Hoy es MI día, no se puede negar- respondió James mientras se desordenaba el pelo despreocupadamente.
- Se ha negado durante meses James...- opinó sabiamente Lupin.
- Pero hoy es mi cumpleaños... me lo debe- replicó el aludido con voz resuelta.
- Tu no le regalaste nada para el suyo- dijo Peter mientras caminaba a la par con sus amigos atravesando la sala común.
- ¿Como que no?- dijo James con una fingida voz de ofensa- Le dije claramente que mi regalo era darle la posibilidad que pasara todo un día conmigo...
- ¿No es un poco soberbio auto regalarte Cornamenta?-preguntó Lupin con un tono de voz que hizo que James le mirara deteniendo su caminar.
- Claro que no Lunático- respondió Sirius por él, mientras sonreía abiertamente a unas chicas que pasaban junto a ellos y que se sonrojaron de inmediato.
En ese minuto, Lily Evans bajó las escaleras de los dormitorios de las chicas, sin saber que era la protagonista de la conversación de los merodeadores. James inmediatamente se desordenó el cabello, como siempre lo hacía antes de acercarse a la chica, y con una de sus mejores sonrisas la miró.
- Hoy no Potter- dijo la chica mientras pasaba de largo ignorando al chico quien al contrario de parecer afectado por las palabras de la pelirroja, acentuó más su sonrisa.
- ¿Que tal Evans?- preguntó con voz extremadamente casual, haciendo que la pelirroja se detuviera en seco en su caminar y lo mirara con expresión extrañada.
Sirius, Remus y Peter miraban la escena diversión, era considerada una actividad de recreación ver los intentos de James Potter para atraer la atención de Lily Evans.
- Te hace falta desayunar Potter- replicó la pelirroja con ironía- ese tono carente de egocentrismo no es típico de ti.
- Esperaba que me acompañaras a desayunar tú- dijo James acercándose a la chica, e invadiendo descaradamente el "territorio" de la pelirroja, haciendo a la chica retroceder inconcientemente.
- ¿Que te hace pensar que lo haré?- preguntó la pelirroja, con el entrecejo fruncido mientras aspiraba el perfume del chico que se encontraba junto a ella, sintiendo a su estomago dar un pequeño salto en su interior, como activando sus sentidos a ese aroma en particular, haciéndola enfadar interiormente.
- Hoy es un día especial Lily- respondió el chico con un leve retintín al pronunciar el nombre de la pelirroja, haciendo que esta frunciera más aún el entrecejo.
- ¿A si¿Hoy por fin entendiste que el mundo no gira alrededor tuyo Potter? - preguntó la chica con una sonrisa fingida y marcando el apellido del chico con notoriedad, fingiendo olímpicamente que sabía perfectamente que ese día era el cumpleaños de James Potter, y lo sabía, porque recordaba esa fecha exacta del año anterior, cuando Potter y su pandilla habían hecho una fiesta a lo grande en la sala común y la celebración había terminado con dos ventanas rotas y la mayoría de los sillones con manchas de cerveza de mantequilla.
James sonrió ante las palabras de la chica y movió la cabeza en gesto de reprobación.
- Ahora viene la parte en que le da calabazas- dijo Sirius, que se encontraba sentado en un sillón de la sala común junto a Remus y Petter, como espectadores de primera fila.
- ¡James!- gritó de pronto una chica rubia del otro extremo de la sala común mientras corría al encuentro del castaño, quien desvió su mirada de Lily para fijarla en quien lo llamaba, una chica rubia, de ojos color turquesa y una sonrisa avasalladora.
- Camille- replicó el chico mientras sentía como la chica se lanzaba sobre él y le daba un abrazo que por poco lo bota al piso.
- ¡Feliz cumpleaños!- dijo la rubia con emoción mientras le entregaba una pequeña caja de terciopelo azul.
Lily Evans miraba la escena con evidente incomodidad, conocía a esa chica, iba un curso delante de ella, se llamaba Camille Vasnier, pero lo que no sabía era que demonios hacía saludando de aquella manera a Potter, no los había visto juntos más de dos o tres veces, pero dudaba que fueran tan amigos como para que llegara gritando como desaforada por el cumpleaños de él, y menos aun con regalo... ella jamás le regalaría algo a un chico con el que apenas ha hablado tres veces, de hecho casi nunca le regalaba nada a nadie, no era de las que creía en los objetos materiales como demostración de que tan importantes era la gente para uno.
- Supongo que estoy invitada a la celebración...- dijo coquetamente la rubia mirando a James mientras movía frenéticamente sus pestañas.
- Todo Gryffindor esta invitado- replicó James con naturalidad, sin percatarse de las intenciones de la muchacha.
En ese momento la pelirroja se dio cuenta que seguía parada observando como boba a Potter con su noviecilla de turno, por lo que enfadada por haberse perdido en sus pensamientos y no haber reaccionado, se alejó a zancadas hacia el retrato de la señora gorda sin mirar atrás.
- ¡Lily!- gritó James, pero la pelirroja continuó su caminar a zancadas y en pocos segundos desapareció por el agujero del retrato.
El chico se quedó algo estupefacto por la actitud de la pelirroja, normalmente jamás se iba sin antes insultarlo unas cuantas veces llamándolo descerebrado o bobalicón, se acercó hacia sus amigos que seguían en el sillón mirándolo con expresión divertida.
- Vaya manera de conquistar a Evans- dijo Sirius mientras se levantaba jovialmente del sillón y abrazaba a James por los hombros para caminar ambos hacia la salida de la sala común.
- Pero si la chica huyó como siempre...- opinó Peter inocentemente.
- Es obvio que esta siendo irónico Peter- acotó Remus a su lado sin quitar esa sonrisa gentil de su rostro- Me pregunto James... como pretendes que Lily salga contigo si tienes a Vasnier colgando de tu cuello.
- Pero si a mi no me gusta esa chica- dijo el castaño.
- Pero pareciera que tiene un hechizo convocador hacia ti- dijo Peter riendo levemente.
- ¿Canuto?- preguntó James mientras salían de la sala común y se dirigían al comedor.
Pero Sirius estaba más preocupado de sonreírles a las chicas de séptimo que iban junto a ellos en el pasillo.
- ¿Canuto?
Sirius seguía sonriendo socarronamente y mirando con suprema vanidad por el rabillo del ojo.
- ¡CANUTO!- gritó James, haciendo que por fin Sirius le pusiera atención.
- ¿Que ocurre?
- ¿Quieres dejar de pavonearte y prestarme atención?
Sirius le miró con la misma cara como si a un niño le hubiesen negado un chocolate.
- Hoy es mi cumpleaños ¿Cierto?- dijo James.
- Cierto- corroboró Sirius.
- Y hoy es el día en que Lily aceptará salir conmigo ¿Cierto?
- Cierto.
- Pero con Vasnier pegada a mi espalda no puedo concretar mi cita con Evans ¿Cierto?
- Cierto...
- Por lo tanto tú te encargarás de Vasnier para que no me siga hoy en la fiesta ¿Cierto?
- Cier... ¿QUE?
James le miró articulando su mejor sonrisa.
- Cornamenta, hoy era mi noche con ¿...Lisa?
- Ni si quiera recuerdas el nombre de la chica de quinto Sirius- replicó James mientras cruzaban las puertas e ingresaban al gran comedor.
Pero en ese momento no pudieron seguir la conversación, ya que momentáneamente el sector femenino de la población estudiantil volteó sus cabezas hacia donde se encontraban ellos.
- ¿Algún deseo antes de morir Cornamenta?- preguntó divertido Remus, sabiendo que su amigo temía por algunas de las histéricas enamoradas de su "club de fans".
Los cuatro amigos se fueron a sentar lo más rápido posible para prevenir cualquier eventualidad, sin embargo la mayoría de la mesa de Gryffindor saludó a James afectuosamente por su cumpleaños, los chicos con choques de manos y palmadas en la espalda, y las muchachas se las arreglaron para plantar un sonoro beso en la mejilla del celebrado; los "felices 16" de James Potter no pasaron desapercibidos para nadie en el gran comedor.
Varias sillas mas allá de donde se habían sentado los merodeadores, Lily Evans entornaba los ojos en señal de exasperación, no podía entender como era posible que el cumpleaños de uno de los seres más repelentes para ella fuese considerado prácticamente un día de conmemoración nacional. Escuchó unas risas y fijó su vista en James que reía abiertamente, sin dudas por algún comentario de Sirius Black que reía a su lado con las mismas ganas, la pelirroja arrugó el ceño como siempre lo hacía cuando vislumbraba a aquellos chicos, no entendía porque siempre terminaban siendo el alma de la fiesta, especialmente Potter y Black, no entendía porque la mayoría del colegio parecía estimarles (excepto los slytherins claro esta, aunque los slytherins jamás estimaban a alguien que no fuera a si mismos), no entendía como lograban tener tiempo para alborotar Hogwarts con sus innumerables bromas y sacar excelentes notas en todas las asignaturas, no entendía porque James Potter parecía ser el novio perfecto para cualquier chica de Hogwarts, no entendía porque de un día para otro el chico comenzó a experimentar una especial reverencia hacia ella que no hacía más que turbarla, y por sobre todo no entendía porque a pesar de detestarlo tanto a él y a sus amigos (excepto quizás Remus), su corazón daba un pequeño salto cada vez que Potter se acercaba a ella con sus aires de grandeza...
- "Tal vez me es tan repulsivo que hasta mis órganos internos parecen convulsionados por su cercanía"- se repetía mentalmente la pelirroja cada vez que experimentaba uno de los "episodios Potter", que era como les llamaba a las ocasiones en que el chico parecía no cansarse de perseguirla y pedirle una cita.
- No has probado tu desayuno Lily- comentó Rocky Geller, la mejor amiga de la pelirroja.
Lily dio un respingo y se volvió hacia su amiga que la miraba con expresión preocupada, que Lily no probara bocado era señal de que algo realmente malo ocurría en el orden cósmico universal. La pelirroja se apresuró a comer su tostada y, ante una muy extrañada Rocky, vació su vaso con zumo de calabaza de un solo trago.
- ¿Vamos? No quiero llegar atrasada a Encantamientos- añadió la pelirroja levantándose de un salto y saliendo a grandes zancadas del gran comedor.
Al pasar junto a los merodeadores, James la siguió con la mirada y sintió la necesidad de seguirla, por lo que se levantó de la mesa sin acabar aún su desayuno y salió tras la pelirroja. Sabía que tenían encantamientos, por lo que caminó presuroso en esa dirección y tal como lo suponía él, no tardó en vislumbrar una cabellera color fuego junto a otra chica de cabello oscuro, la inseparable mejor amiga de Evans.
El chico se paró tras ambas gryffindors, Rocky fue la primera en verlo y le sonrió nerviosamente.
- Hola chicas- dijo jovialmente.
Inmediatamente se vio enfrentado a un rostro con el ceño fruncido y mirada asesina que Lily Evans le dedicaba solo a él.
- Hola Potter... feliz cumpleaños- dijo Rocky tímidamente, el chico le sonrió.
Inmediatamente la mirada furibunda de Lily fue de James hacia su mejor amiga.
- ¿Tú tambien Rocky?- preguntó alterada.
- Solo me esta saludando por mi cumpleaños Evans, no veo el motivo de tu enfado.
- ¡Claro!- replicó la pelirroja con burla- El gran James Potter no le ve nada malo a que su cumpleaños se transforme en el evento anual de Hogwarts ¿No? Porque sube su ego unos 100 puntos más, con todas las chicas regalándote cosas como Vasnier ¿Cierto?
James la observó serio por unos segundos, para luego articular una sonrisa de satisfacción, que solo logró turbar más a la pelirroja.
- ¿Estas celosa Evans?
La aludida abrió los ojos de la impresión mientras su rostro comenzaba rápidamente a tornarse del color de su cabello, James intuyó el gesto de la chica por lo que instintivamente dio un paso atrás.
- ¿ES QUE ESTÁS LOCO¿SORDO¿RETRASADO?- gritó la chica a medio pulmón en la mitad del pasillo.
- Lily...- dijo tímidamente Rocky.
- ¡ES QUE NO HAS ENTENDIDO QUE YO JAMÁS ESTARÍA...
- ¡Señorita Evans!- dijo una voz a espaldas de la pelirroja, quien inmediatamente interrumpió la frase y volteó para encarar a su profesor de Encantamientos.
- Señor...
- ¿Me puede explicar que son estos gritos fuera de mi aula?
Lily bajó el rostro aun enrojecido por la rabia del momento.
- Es mi culpa profesor- dijo de pronto James, haciendo que Lily lo mirara con los ojos desorbitados, y no porque encontrara noble el gesto del chico, ya que para ella estaba claro que la culpa era de Potter, lo que encontraba insólito es que por fin, de una vez por todas asumía su responsabilidad en algo.
- Si profesor, es su culpa- corroboró la pelirroja, haciendo que James la mirara algo contrariado, mas no molesto.
- ¿Y porque los gritos?- preguntó el profesor.
- Discutíamos- respondió resueltamente James.
El viejo los miró a ambos con expresión severa, si no hubiese sido Lily Evans la chica involucrada, hubiera quitado puntos sin dudarlo, pero la señorita Evans era una alumna ejemplar.
- Que no se repita- fue toda la sentencia del anciano profesor, mientras volvía a entrar a su aula.
Lily dedicó una mirada furiosa a James y se disponía a entrar a la sala tras el profesor, pero la mano del chico sobre su brazo la detuvo en su acto, por lo que solo pasó Rocky, dejándolos a ambos solos en el pasillo.
James la miró fijamente a los ojos y se permitió unos segundos perderse en los orbes verdes de la chica, de verdad que le gustaba, y mucho, desde sus ojos verdes, su pelo, sus pestañas encrespadas y las innumerables pecas bajo sus ojos.
La exhaustiva mirada que le dedicó James turbó a Lily, quien sin poder evitarlo enrojeció levemente.
- ¿Estarás en la celebración de la sala común hoy en la noche?- preguntó con voz algo dudosa.
Lily apretó los labios como siempre lo hacía cuando no estaba segura de responder.
- Claro Potter, alguien debe poner orden y sensatez entre tú y a tus amiguitos.
Dicho esto la pelirroja entro a la sala dejando a un James muy sonriente junto al aula de Encantamientos, quizás, después de todo, ese 27 de Marzo, Lily Evans si aceptaría una cita con él...
OoO
¿Y bien¿Que les pareció? Intenté ser muy fiel a los caracteres reales de los personajes, espero que lo hayan notado, bueno... si no lo notaron, quiere decir que soy pésima escribiendo y mejor me voy a vender palomitas de maíz. Pero intenté plasmar un poco de como veía a James, a Sirius, Lily, Peter y Remus...
Ojala me dejen sus comentarios para saber que tal encontraron este one shoot de dos capítulos. Por alimenten un poquito mi moral y dejen sus opiniones xD.
Agradezco desde ya sus palabras.
Un beso a todos los lectores.
Pamina Black
P.D: a los lectores de mi dramione "Frente a frente nuevamente", no me odien, pero las musas me abandonaron bastante y ninguno de los capítulos escritos me convence para subirlos aún...
