Naruto y sus personajes no son míos.
Drabble.
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Sueño
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Se despertó apresurado con un movimiento brusco, sentándose sobre la almohada de inmediato, mientras su frente se empapaba por espeso sudor. Apenas y podía respirar bien, y acelerado comenzó a buscar a su mujer, moviéndola desesperadamente.
Cuando ella abrió sus ojos, no pudo evitar sentirse un poco más aliviado.
—¿Uhm? —bostezó y con voz soñolienta comenzó a preguntar—. Sasuke ¿qué sucede?
Antes de responder, Sasuke tomó una muy necesaria bocanada de aire, luego frunció el ceño.
—¿Quién es él?
—¿Eh? —se refregó los ojos y volvió a bostezar—, ¿quién?
—Ese hombre ¿quién es, Ino?
—No comprendo –la rubia se acostó nuevamente, restándole menor importancia, pero Sasuke consiguió jalarle el cabello. Ino se quejó, Sasuke chasqueó la lengua con semblante malhumorado.
—Tuve un sueño.
—Pues anda, te escucho para volver a dormir.
—No es gracioso, Ino. Tú estabas con otro hombre —la miró furioso, juntando las cejas con los ojos—. Él te abrazaba fuertemente y tú estabas riéndote como si fueras la mujer más feliz del mundo. Luego, ese maldito te besó en los labios y tú no hiciste nada por alejarlo.
—¿Qué? —una sonrisita divertida se posó en su rostro—. ¿Te pones celoso por un sueño, cariño?
—No estoy celoso, estoy enfadado —se cruzó de brazos—. Estoy enfadado porque eres mi esposa, y me debes fidelidad.
—¿Y quién dice que no lo sea?
—Estabas feliz con ese estúpido que te besaba.
—Fue un sueño, Sasuke. Nada es real —lo besó rápidamente en los labios—. Vuelve a dormir.
Ino se acomodó nuevamente en la cama, dándole la espalda. Sasuke sabía que su esposa tenía razón, y que nada de eso era cierto. Sabía que Ino lo amaba más que nada en el mundo, no obstante, ahora se sentía totalmente patético.
Decidió que lo mas sensato sería ignorar todo y tratar de dormir junto a su mujer. Se acostó, abrazándola por la cintura, besando suavemente su cuello descubierto.
—Sasuke, cariño —lo llamó quedito—. ¿Cómo era ese hombre de tu sueño con el que me besaba?
—¿Qué? —levantó la cabeza para mirarla, con una ceja arriba—. Ino…
—Sólo es curiosidad.
—Hnm —rezongó, pero después intentó hacer memoria—. Pues… era muy pálido. Su cabello era azabache y sus ojos también oscuros… tenía un ligero aire parecido al mío.
—¿Como Sai?
Sasuke abrió un poco los ojos.
—Ese maldito bastardo —susurró entre dientes.
Si había soñado eso, era porque aquel ninja se la pasaba mirando fijamente a Ino y la buscaba en la floristería a todas horas. Ese maldito se las pagaría.
Abrazó posesivamente a Ino.
Al amanecer se encargaría de tener una ´charla amistosa´ con el ninja raíz.
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FIN
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NA:
Gracias por leer.
