Disclaimer: Los personajes de Outlast Nome pertenecen.

Aclaraciones: Inspirado con la canción "Monster" de Dev. Es la primera vez que escribo sobre esta pareja, Eddie x Lisa. Porque al principio tenia pensado escribir sobre un personaje Oc que hubiera sacado de mi galera y seria como el/la protagonista, aunque si habrá uno o dos personajes que incluya pero serian como personajes secundarios. En este fanfic, el manicomio "Monte Massive" no existe, o quizás sea un simple hospital con ese nombre. Capaz insinué algunos personajes, como al Padre Martin, Chris Walker y al Dr. Rick Trager. La historia de Eddie Gluskin va a estar alterada, digamos que no sufrirá esos traumas de su niñez como figura en el juego, es decir, que prácticamente la historia que tiene en el juego no tendrá nada que ver con este fanfic, ni siquiera va estar apegado al juego.

Papeles/ Rol de los personajes: Waylon Park es el marido y está casado con Lisa Upshur. Miles Upshur es el hermano de Lisa y Eddie Gluskin es el medio hermano menor de Waylon.

~…Flash Black…~

Clasificación: T-M, por violencia, vocabulario y posible lemmon ligero-explícito en capítulos más adelantes. [AU-Moderno] Alternate Universe, parejas: Waylon x Lisa, Eddie x Oc. [Eddie x Lisa] Genero: Drama/ Hurt-Confort/Romance.

Summary: Lisa Upshur de Park festejaba su primer aniversario con su marido, Waylon Park. Ambos tienen tantos planes desde que se casaron, incluyendo tener hijos. Ella es la abogada defensora de su cuñado, Eddie Gluskin. Más adelante, suceden algunos acontecimientos que causan un gran quiebre en su relación… ¿Qué pasaría si, la persona que amas se convierta en alguien más?


Perfect for her

[Perfecto para ella]


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Prologo

Ella revisaba uno que otro papeleo de los acontecimientos que tenía su cuñado, lamentablemente no tiene una buena relación con él. Eddie Gluskin había sido detenido en la comisaria de San Francisco figurando como agresión en los archivos de delito por dejar mal herido a un ex compañero de su antiguo empleo de mecánico.

Los investigadores encontraron un martillo con manchas de sangre de la víctima y algunas fotografías que le habían sacado a la persona que fue golpeada. Eddie también estuvo lastimado y las fotografías de su rostro mostraban los moretones, eso daba a conocer que tuvo una fuerte pelea contra el sujeto. Cumplió sesenta días del encierro en la prisión y luego le otorgaron treinta y seis meses de libertad condicional formal.

El juez declaro una orden que no tiene permitido salir del estado, no importe el motivo igual no puede salir. La única opción que tenía era convivir con su medio hermano mayor, Waylon, hasta que llegue su juicio donde se dictara algunos hechos. Mientras que con Lisa siendo su abogada la relación con su cuñado todavía sigue nula: ninguno de los dos se lleva bien. Eddie era la única familia que le quedaba a Waylon de parte de su difunta madre, no quería echarlo de la casa ya que muchos de sus conocidos estuvieron tratando muy mal e injustamente por su comportamiento rebelde.

La felicidad de este joven matrimonio está a punto de sobrellevar una difícil carga en sus vidas de un día para el otro suceda algo inesperado para quebrarse.

¿Qué pasaría si, la persona que amas se convierta en alguien más?

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I Aniversario


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Otra día más que se quedo hasta tarde en su oficina, revisando todo el archivo que figuraba el delito de su cuñado; un silencio profundo invadía por los pasillos del departamento Judicial de San Francisco, dentro de la localidad de Dubone Triangle. Muy pocos de sus compañeros se quedaron hasta tarde para resolver otros casos: se podía escuchar como las gotas impactaban y resbalaban por el cristal de su ventana, el sol ya se estaba ocultando pero mucho no se notaba ya que las nubes grises abarcaban toda la ciudad con su diluvio. Lisa suspiraba pesadamente con leer cada información, cada palabra y letra que encontraba que por sus dos años de experiencia con este empleo de ser novata en ciertos casos y con esfuerzo; se transformó en una abogada respetable y muy confiable en lo que hace por lo que solía ser felicitada. Un sonido la saco de su concentración y metió su mano adentro de su bolso para sacar su celular. Sonríe ampliamente, porque leía de quien se trataba:

"Mira tú bolso, hay un regalo para ti. –Waylon"

Ella revisaba su bolso nuevamente para buscar el regalo que le había dejado su marido. Sus ojos verdes claros se dilataron con encontrar una pequeña rosa roja y sin espinas: tenía un papelito atado en el tallo, -'Te amo, W."- Puede que sean pequeños detalles algo cursis para algunos y eso lo sabía aun así no dejaba de ser un lindo detalle. Esto siempre le alegraba su día, porque su marido era tan romántico con los obsequios que le daba. Miro por un segundo la hora y se dio cuenta que ya eran las siete de la tarde: al parecer el clima causaba que se haga más de noche, como aparentando las ocho o nueve de la noche. Luego tomo la decisión de llevarse los archivos a su hogar, donde podría trabajar cómodamente.

Lisa Upshur de Park tenía una edad aproximada a los veinticinco años; cabello castaño oscuro que llega hasta la cintura y ojos de color verde esmeralda que podía hipnotizar a cualquier hombre sin que ella lo sepa. Su estatura es más o menos un metro y sesenta, no es ni tan baja y ni tan alta. Es carismática, simpática, seria e inteligente. Waylon es tres años mayor que su esposa. Ambos son tan felices como están excepto saber que Eddie tiene que convivir con ellos como si fuera un niño grande y adoptado. Por desgracia, la joven no siente ese cariño familiar hacia su cuñado, no. Le incomoda la presencia de ese "delincuente".

Debajo de la lluvia, Lisa corrió apresuradamente hacia su auto gris focus para guardar la caja de papeleos sobre su caso; ya era hora de retirarse de su trabajo. Condujo cuarenta y cinco minutos hacia su casa, no vivía tan lejos de la ciudad solo que su territorio abarcaba parte de la ciudad y del bosque.

—Está todo oscuro —decía al mirar el patio delantero en plena oscuridad. Bajo de su vehículo para llevarse la caja hasta su hogar, abrió la puerta y con su cuerpo empujo para poder entrar adentro. Dejando el objeto sobre la mesa de café del living, lanzo su campera húmeda sobre el sillón. No escuchaba nada absolutamente nada.

De pronto, observo por la ventana que todo se iluminó de golpe. El jardín delantero se contempla en una agradable iluminación que envolvía los arbustos, los arboles y quizás las rosas del jardín. Lisa Park estaba asombrada por este detalle admirable que sabe de quien fue la idea. Escucha algunos ruidos que provenían de la cochera, camino cuidadosamente por los pasillos oscuros de su casa; pudo ver a alguien agachado arreglando el generador de electricidad. Confiada en deducir que es su esposo, se atrevió en darle un golpecito de broma en el trasero de este. Aunque para su sorpresa, ambos se asustaron por lo inesperado. No era Waylon. Se trataba de Eddie, el medio hermano de Park, esto la desilusionó.

Gluskin lanzo enfadado el destornillador al suelo, causando un sonido metálico que se perdió en el trayecto de la caída. Él se había cortado la palma de su mano con un trozo de metal afilado, su cuñada se acerco para ayudarle en cerrar la herida con un trapo húmedo que encontró en la canasta de ropa. Este ni siquiera le dio las gracias, ignoro completamente el contacto visual.

—Disculpa, creí que eras Waylon —Habló con indiferencia —, ¿Acaso no había luz?

—No, mi hermano me dijo que le ayude con todo esto —Respondió refiriéndose a la iluminación del jardín —.Creí que lo estabas esperando en el restaurante a las nueve de la noche—comento con voz arrogante. Saco de su bolsillo, una caja de cigarrillos dispuesto a fumar uno.

—Eddie, no se permite fumar —reprochó su cuñada con una mirada fija.

Este gruño molesto. Eddie Gluskin tenía una edad aproximada a los veinticinco años, la misma edad que su cuñada. A diferencia de Waylon, su hermano era un poco más alto que él.

—Bueno, gracias por avisarme —le agradeció sin mirarlo.

Lisa se apresuro para salir por la puerta de la cochera y en atravesar el mismo recorrido para llegar a la puerta principal. Vio que su paraguas estaba en un rincón al lado de la puerta y lo agarró al igual que su gabardina gris que colgaba en el perchero del living. No se dio cuenta del pastel decorado que estaba sobre la mesa del comedor. Ella quería llegar a horario para no dejar plantado a su marido.

Cuando Lisa subía a su vehículo, nunca iba a sospechar que estaba siendo observada desde la planta alta de su propio hogar...

Llegando a su destino con su auto estacionado en la vereda que quedaba al frente del restaurante: llamado "Exquisitos" un restaurante algo sofisticado, elegante y de un amplio terreno que ocupaba tanto adentro como afuera bajo techo. Con los lugares ocupados.

Ella lo buscaba con la mirada para saber si no había llegado demasiado tarde, antes era más puntual pero con los temas de su cuñado y con otros asuntos de su empleo eso la atrasaba. Sus ojos seguían buscándolo entre toda la multitud de la gente que pasaba en ir y venir por la misma vereda de donde se quedó parada, aprieta fuertemente el palo de hierro de su paraguas con la frustración al no encontrarlo. Luego vio una silueta que sostenía un paraguas del otro lado de la vereda, que se acercaba para cruzar la calle pero un auto gris toco bocina haciendo que retroceda en el intento y lo termina mojando por el charco de agua que se seguía acumulando por la orilla de la vereda. Waylon hizo una mueca mientras que su esposa sonreía ampliamente con verlo y no fue por el simple hecho de encontrarlo, sino porque le causo gracia lo que sucedió en ese momento.

—Hola amor —saludo todo empapado para entregarle una rosa roja y meterle un regalo en el bolsillo izquierdo de la gabardina gris.

Su esposa le dio un pequeño beso en los labios y le hizo una señal para que la acompañe en el auto, él la siguió para abrir la puerta y entrar.

—Supongo que el beso fue como saludo ¿no?

—Claro que si amor, vamos a casa así te podrás duchar y luego cenar—dijo la joven con encender el vehículo al girar la llave.

—Y algo más supongo—musitó este para sonrojar a su mujer—Antes de manejar, déjame colocarte tu regalo.

— ¿Regalo? —repitió Lisa al sacar un obsequio de su bolsillo izquierdo y se trataba de una cadenita de un corazón de oro— Que hermoso obsequio, Waylon, se parece al que me dio mi abuela.

—Quería encontrar uno igual pero esta cadenita es el más parecido —dijo Waylon al colocarle su regalo en su cuello.

Mientras que la joven hacia una maniobra para sacar el auto de la vereda su esposo le habla del día que paso en su trabajo y así establecieron una conversación a lo largo del camino a casa. La lluvia se detuvo cuando el auto se estacionaba bajo un techo que estaba al lado de la cochera: porque adentro estaba otro vehículo ocupando el lugar y era de Waylon. Ambos se bajaron del auto para caminar tomados de la mano hasta llegar y abrir la puerta principal, donde vieron a Eddie bostezando bajar por las escaleras y con una toalla colgada en su hombro izquierdo

—Al fin lo encontraste —se burlaba de su cuñada y ve una cadenita colgada en su cuello—. Que tierno.

—Gracias por informarme —dijo con mirarlo de reojo.

—Hola Eddie ¿vas a bañarte primero? —Preguntó, desconcertado mientras colgaba su gabardina negra y su paraguas en el perchero.

—Si, no voy a tardar mucho te aviso ahora —Comentó para girarse sobre sus talones.

—Bueno, ve grandulón —Le dijo su hermano mayor al darle un golpecito en la espalda.

Eddie Gluskin es un poco más alto que su hermano. Cabello negro, liso corto que ocupaba parte de la nuca, no llegaba ni a los hombros. Sobre su estatura es de un metro noventa y seis es un poco más grandote físicamente por los músculos que fue sacando de a poco cuando quedo en prisión y tiene varios tatuajes en su brazo derecho con frases de canciones de su banda favorita, Iron Maiden. Es rebelde, gruñón, bruto, arrogante con un sentido del humor sarcástico y poco romántico aunque si se habla de empleos trata de llevarse bien con su jefe y los compañeros. Tanto Waylon y su hermano menor son dos personas opuestas, uno es lo contrario del otro pero lo bueno es que se llevan bien. Ellos son 'medio' hermanos por diferentes padres pero hermanos por misma madre.

El sujeto no suele hablarle tan bien a su cuñada, aunque siempre Park cree que así es el cariño por la cual se expresa su hermano menor pero su esposa no lo entendería. Lisa e Eddie tenían que entenderse para ser una familia unida como quiere él. Sin embargo, hay secretos que el joven rebelde nunca confeso, secretos que se mantienen platónicos y a distancia de esa persona.

Ven Lisa —Le llamó con cierto tono suave, como invitándola a que pasara directamente al comedor.

Ella quedó atónita con ver un hermoso resplandor ante sus ojos, un pastel rectangular con las palabras "Feliz primer aniversario" no sacaba la mano cubriendo su rostro por el lindo detalle y que por dentro se sentía culpable de no haberse acordado. Su marido la rodeaba por la cintura, la joven dejaba expuesta su cuello para que él depositara unos suaves besos pausados.

Gluskin observaba todo por unos segundos desde la escalera, había dejado la canilla del agua caliente abierta para confundir a su hermano de que se estaba duchando. Hizo una mueca de disgusto ante la tierna escena, sentía envidia por él y también por ella. Dejo que unos segundos de su imaginación dieran a entender que él solo estaba abrazando a Lisa y que su hermano mayor no se encontraba en la casa, luego retomo su ducha para borrar esos pensamientos y planear desquitarse con su novia.

—Perdón por olvidarme, amor —Se disculpaba.

—No te preocupes, Lisa porque la sorpresa iba a funcionar mejor si te lo olvidabas—interrumpió este ampliando su cálida sonrisa— ¿Pensaste en tener hijos?

Esto la deja desconcertada.

— ¿Hijos? —Repite tras hacer memoria sobre el tema— ¡Oh! Se que hablamos de ese tema varias veces querido, pero tu sabes que tendré que dejar mi trabajo por algunos meses.

—Lo se cariño pero quiero tener un hijo contigo y quiero ser padre, quiero experimentar esa agradable sensación de comenzar nuestra familia —se explicaba Waylon con cierta emoción que se iba reflejando en su rostro.

—Waylon…—suspiró pesadamente porque varias veces dialogaron sobre el tema y Lisa todavía no se siente preparada para ser madre, justo ahora que tiene que ayudar a su cuñado con el caso—No me siento preparada todavía para tener hijos en este momento…

—No te estoy apurando, amor, puedo esperar —tomo una pausa para cortar un poco el pastel y darle una porción a su esposa, después se corto otro trozo para él—. Vamos a sentarnos en el sillón para ver algo…

— ¿Cómo que?

—El video de nuestra boda.

Ella lo miro con ternura y manteniendo esa sonrisa comprensiva como aceptando la propuesta de volver a ver su boda. Ambos se acomodaron en sentarse en un sillón: gris amplio de cuero que hacia un ruido rechinado. La pareja se acurrucaba en el asiento para mirar el video de su momento especial y pura felicidad. A veces durante el video se enfocaba a los invitados y luego a los recién casados que se reían por mancharse la mejilla con crema del pastel.

—Siempre adore esa parte —aclaró Park señalando la escena donde agarraba a Lisa entre sus brazos para darle un tierno beso.

—También es mi parte favorita.

Así se quedaron juntos mirando la televisión hasta que el video de su casamiento se termine.

Lisa Upshur de Park permaneció en silencio para meditar y procesar todo lo que dialogo con su marido respecto al tema de tener hijos, en el lavabo tenia dos pastillas de color rosado y al lado estaba un cepillo de dientes con pasta dental; un detalle más de su marido que siempre se encargaba de hacer todas las noches, estaba acostumbrada y además su esposo era el "ama de casa". Solo por esta vez prefirió tomarse la pastilla, se coloca una camisa azul para cubrirse toda su ropa interior con el objetivo de tener cierta intimidad con él antes de dormir. Agarra una moneda que encontró sobre los cajones del lavabo para hacer un pequeño juego con su marido.

Y así lo hizo. Bajo cuidadosamente por las escaleras para no llamar la atención de Eddie quien se supone que estaba dentro de su habitación. Lisa salió afuera para entrar a una agradable cabaña para encontrar a su esposo en la computadora escribiendo como acostumbra hacer con su trabajo. Waylon es un programador de software, en sus tiempos libres es fotógrafo y escritor. Siempre bebe café para inspirarse.

— ¿Waylon?

Este giro su asiento para poner su atención en su esposa y vio como se quitaba sus pantuflas para sentarse sobre su regazo que con picardía la miraba.

— ¿Cara o cruz? —preguntó con morderse el labio inferior al mostrar una moneda.

—Cruz —eligió Park con cierto entusiasmo en su clásico juego de intimidad. Su esposa lanza la moneda hacia el aire y cuando lo atrapa toca cruz. Este sonrió por sus adentros para jugar con ella.

Cuando se despojaban de sus ropas para lanzarlas al suelo de madera, pronto se dispusieron en quedarse en un sillón amplio que decoraba el living de la cabaña; donde sus cuerpos desnudos se conectaban siendo uno y se movían con cierto frenesí, pasión y éxtasis al tener relaciones sexuales. Sin embargo, una silueta los estaba espiando con cierto recelo pero calculaba la situación…Una situación para que aquella abogada sea suya.

Aquella silueta agarró sus cosas y se fue rápidamente de la casa para encontrarse con su novia en el departamento. Ya cumplirían dos años de noviazgo y siempre había algo que los perjudicaba en casarse quizá porque Eddie nunca estuvo tan conectado a su novia, Cinthia Jones. Pero en este caso la necesita sacar cierta sed de deseo…


Continuara…


N/A: Es la primera vez que se me ocurre escribir algo asi, más cuando se trata de Eddie y no con Waylon, sino con su mujer Lisa Park. Es mi primer proyecto de Outlast, no tendra nada que ver en si con la historia del juego pero sus personajes tendrán otros roles en esta historia. Como ya lo explique al principio.

Espero que les haya gustado.

¡Saludos y cuídense!

Atte. J.H (c)