Disclaimer: Len y Rin Kagamine(aunque no sale en cuerpo presente) le pertenecen a Crypton Future Media y a Yamaha Corporation.

UNA TEMPRANA DESPEDIDA

Entré en el cementerio mientras la lluvia me mojaba por completo. Las gotas me caían sin cesar por el pelo, la cara y el traje negro que llevaba. Me sentía raro, como si mi corazón hubiera muerto, y mi cara debía reflejarlo muy bien, pues tenía los ojos vidriosos por las lágrimas que ya habían salido y las que aún estaban por salir. Caminé en línea recta desde la verja de entrada hasta una encrucijada, y allí torcí a la izquierda hasta el final, donde había una lápida de piedra blanca. Apoyé una mano en ella y bajé la cabeza, mientras mis hombros empezaban a temblar sin control. Un sollozo escapó de mis labios y fue sucedido por otros sin que yo pudiera controlarlos.

—¿Por qué...me has abandonado? —gemí, odiándola a ella por morir, odiándome a mí por llorar y odiando al mundo por habérmela quitado. Pero no podía parar, con cada lágrima que me salía de los ojos era como si me quitaran una parte de mi alma, y sobre todo, una parte de la única persona a la que había amado nunca. Me dejé caer de rodillas, abrazando la lápida como si aún pudiera sentirla tras sus pétreas paredes. Un relámpago iluminó todo el lugar, e hizo destellar la lápida, resaltando los caracteres escritos en ella. La lluvia cayó con más intensidad aún, pero a mí no me importaba. No quería separarme del último recuerdo que me quedaba de sus labios, aunque ese recuerdo fuera de frío mármol. Me sentía cada vez más débil, y sabía que no iba a tardar mucho en quedar inconsciente, pero a mí no me importaba. Dejé de llorar por un instante para pronunciar una frase:

—Rin...¿por qué me has abandonado?

FIN