Renuncia de derechos: Harry Potter y todo su universo son propiedad de J. K. Rowling, empleo parte de ello sin fines de lucro. Por otra parte, trama y algunos personajes sí son míos, por lo que me reservo su uso.
El presente texto participa en el Mini Reto de septiembre de "La Copa de la Casa 2017–2018", del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".
Personaje seleccionado: Stebbins.
Objeto sorteado: túnica.
Uniforme y desamor.
Aunque no quería, Solomon debía ir al callejón Diagon.
El verano estaba resultando ser un asco, como para también ocuparse de la lista de Hogwarts que, además, llegó muy tarde. Sin embargo, no tenía opción: su padre estaba en el trabajo y su madre, en cama.
Tomó el dinero que su padre le dejó esa mañana y se fue por la red Flu a Madame Malkin. Sí, lo primero sería lo que menos le gustaba, así podría dejarlo pronto atrás.
—Buenos días, muchacho. ¿Hogwarts, verdad?
—Buenos días. Sí, Hogwarts.
—Enseguida te atiendo.
—Gracias.
—¡Adiós, madame Malkin! ¡Gracias por todo!
La voz Solomon la conocía bien, por lo que volteó por inercia en su dirección.
Allí, a punto de cruzar la puerta hacia el callejón Diagon, estaba Stacy Fawcett.
Ella no lo vio, por supuesto. Tras abrir la puerta, se lanzó al callejón y se marchó, muy entusiasmada por las compras.
Mientras le tomaban las medidas para la túnica nueva, Solomon pensó que esa actitud de la joven Fawcett solo significaba una cosa y dolía.
Stacy era más feliz después de haber roto con él.
–&–
Bienvenidos sean a mi segunda participación de la Copa. Si resultó algo rara, culpen a Ingrata (mi inspiración, larga historia), que me hizo aplazar este fic hasta el último minuto.
Antes de que alguien pregunte: no, no es canon el nombre de pila de Stebbins que aparece en este fic, ese se lo di yo. Y por si no fuera suficiente, lo hago toparse con la ex en el callejón Diagon cuando solo iba por una túnica a esa tienda… Pobre. Por si les interesa, la mentada ruptura aparece en "Cortando de tajo", historia presentada en la edición anterior de la Copa.
Cuídense mucho y nos leemos en octubre.