Disclaimer: Amour Sucré es una creación original de la compañía Beemoov.

Advertencias: Lemon, Lime, Personajes OC, Demasiadas dosis de azúcar (?).

Aclaraciones: -Las palabras que serán utilizadas para los capítulos son tomados de la Tabla Corporal de Musa Hetaliana.

-La Sucrette que he creado para Kentin se llama Samantha Johnson.

-Según la página oficial Kentin no cuenta con apellido, o al menos no ha sido revelado, así que lo he nombrado Kentin McCarteen.

-Los capítulos se ubican después del episodio 28 de Amour Sucré.

-El fanfic respetará los eventos sobresalientes del juego pero las reacciones y acciones de Sucrette variarán de la línea de historia original.

Mucho gusto, soy aishiteru-sama y es la primera vez que estoy en esta sección. Espero que nos llevemos bien en el futuro ya que Amour Sucré ha llamado fuertemente mi atención en los últimos días, sobre todo después de que vi lo que pasa en el episodio 28.

Llegué a pensar que NUNCA sucedería, pero ahí está. Finalmente pasó y yo no podría estar más contenta, sobre todo cuando se ve en retrospectiva todo lo que ha sucedido con el chico que han elegido. Una linda historia, quizá demasiado aletargada para mi gusto, aunque sin duda emocionante.

Así que señoritas, caballeros, heme aquí siendo partícipe del mundo de Amour Sucré en FF.

En cuanto a Sucrette, la advertencia de cambios en sus reacciones es que no sería emocionante escribir sobre esto si no hubiese variedad. Las respuestas del juego son limitadas y dudo mucho que las Sucrette's sean exactamente iguales, así que me tomé la libertad de hacer cambios en su personalidad pero respetando los eventos de Amour Sucré.

Con eso aclarado, espero les guste.

*Chico elegido: Kentin McCarteen.

*Sucrette: Samantha Johnson (Ojos azules. Cabello castaño oscuro a la cintura y semi ondulado. Tiene un flequillo largo que le cae por el lado derecho de su frente y en parte de su ojo. De complexión delgada pero con busto y caderas notorias. El resto de sus características se irán revelando conforme a los capítulos).


"Notre corps, notre cœur"


01# Manos.


Sintió que tembló ligeramente.

Algo de color se instaló en sus mejillas rogando internamente que ella no lo notara.

Qué cálidas.

Casi contuvo el aliento pero se obligó a respirar para no quedar en ridículo.

Realmente eran cálidas sus manos.

Él tuvo la iniciativa, un acto reflejo cuando ella resbaló al caminar alegre por el límite de la acera.

La escuela militar le enseñó a estar atento, ser el primero en reaccionar frente a lo imprevisto pero, entre el susto de ella y su propia reacción, quedó espacio para sentir sus pequeñas manos sujetadas a las propias.

Eran cálidas, delgadas, suaves, emanaban un calor agradable y un aroma a rosas a causa de la crema humectante que seguramente utilizó.

No dijeron nada a pesar de que ella recuperó el equilibrio. Quizá fue porque ambos notaron aquel detalle y decidieron dejarlo estar, o quizá fue que estaban demasiado emocionados para contrariar. Quién sabía.

A pesar del tiempo de conocerse seguía pareciéndole un misterio lo que cruzaba por los pensamientos de Samantha.

Era transparente en muchas ocasiones, como esa en que un marcado sonrojo invadía su rostro.

A la vez era todo un misterio, como en ese momento que levantó la mirada para observarlo.

Ella era todo al mismo tiempo, una irónica y armoniosa combinación que lo dejaba como un tonto, pero que lo alentaba.

Se sintió con el permiso de seguir tomando sus manos que también lo sujetaban, y al mismo tiempo, sintió que abusaba del derecho.

Pero era ridículo, ¿no? Era bastante comprensible que se tomaran de las manos si ella resbaló. Hubiese sido terrible dejarla caer por suposiciones innecesarias.

… Y siendo honesto, no necesitaba de un incidente para sentir esas manos. Ya no.

— Gracias — Samantha rió un poco y se sintió algo más relajado — Qué tonta, no me fijé por dónde pisaba.

— Eso te enseñará a ser más atenta — respondió sonriendo un poco — ¿Algo te distrajo?

— Más bien no podía dejar de mirar a alguien.

Ella lo miró con esos grandes ojos azules que lo atrajeron desde que la conoció.

No estaba seguro, pero apostaría a que lo sintió temblar un poco por el agarre que aún mantenían.

Mucho cambió luego de que regresó de la escuela militar, más nunca el nerviosismo y la emoción de ser el centro de su atención… o al menos de la mayoría, ya que Samantha era el tipo de chica que ayudaba a los demás.

Era molesto, sentía celos que como "Ken" jamás hubiera expresado, pero entendía que no sería ella misma de lo contrario.

No podía imaginársela sin hablar con Rosalya y Alexy, o sin alentar a Violeta, sin reír con Iris y Kim; ni mencionar cuando trataba con el resto de los chicos.

Pero no había nada que temer ya que sólo él había sentido esas manos que le correspondían emocionadas.

Ambos sentía lo mismo, lo transmitían con el toque que se hizo más firme al retomar el paso con sus dedos entrelazados.

— ¿Y? ¿Quieres saber a quién miraba~?

La escuchó reír y fue como si el día mejorara un poco más, algo casi imposible ya que no podría haber nada mejor que tener una cita con su novia, con su Samantha.

Sonrió.

— No es necesario, ya lo sé~