¿Conocen el dicho? "La historia la escriben los ganadores"… pues no podría estar más de acuerdo. Todo Thedas conoce la historia de la heroína de Ferelden, la mujer de sangre noble cuya familia es traicionada, se une a los guardas grises para detener la Ruina y de paso evitar la guerra civil… Bueno, ella se sienta en el trono ahora, pero déjenme contarles la historia, la verdadera historia, porque verán, las cosas ocurrieron de forma muy diferente a como lo cuentan los bardos… Ellos confiaron en mí, alguien debía mancharse las manos con sangre y pensé "¿Por qué no yo?" después de todo… no soy ninguna heroína…
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Crónicas de una Maleficarum
-Inicio-
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La torre del círculo, o la jaula de oro como le gusta llamarla a los magos más veteranos ha sido mi hogar desde que tengo memoria y aunque no guardo recuerdo alguno de mis padres o mi familia, no lo preferiría de otra forma… ¿Recordar qué? ¿Una pequeña pocilga en algún mugroso rincón de la elferería? ¿Una patética madre o padre que entregó a su hija a los templarios sin chistar? No gracias…
¿Mis únicas conversaciones? fácil el idiota de Jowan y la crédula Amell, ¿mi mentor? Uldred, un Gran Encantador con opiniones muy ruidosas… pero quien podía culparlo cuando creces escuchando que eres una abominación solo por haber nacido…
Hace años había renunciado a sociabilizar ya que al parecer Anders al fin había logrado escapar de forma eficiente ¿Por qué no había ido con él? Pues porque como en todo lo que ocurre en Thedas los elfos estamos varios escalafones más abajo que los humanos, mientras que ha Anders se limitaban a devolverlo al Círculo a mí no dudarían en separar mi cabeza de mi cuerpo de un sablazo… Imagino que no es una experiencia agradable…
Ese día dormí hasta tarde, al despertar la cabeza me daba vueltas y aun tenia nauseas, pero no podía verme débil frente a las 2 ratitas curiosas que interrumpían mi descanso.
-¿Qué es lo que quieren?-
-¿Te encuentras bien? Ni siquiera notamos cuando te llevaron anoche…- Decía Amelia, esa chiquilla nerviosa de piel pálida y cabello rojo como el fuego con la personalidad de una pared… y Jowan el bobo incauto que cree absolutamente todo lo que le digas…
-Y bueno… sabemos que no puedes decirnos nada pero vamos… somos amigos, además la Angustia de Amelia se acerca ¿No crees que la reconfortaría saber a qué se enfrentara?-
-Oh créeme Jowan, si les dijera de que trata la Angustia no podrían volver a dormir. Es mejor que lo averigüen por su cuenta.- Me encantaba verlos perder la cordura por nimiedades, ambos se miraron con los ojos como platos antes de informarme que Irwin quería verme.
-Oh ahí estas, permíteme entregarte tu nueva túnica y bastón, pórtalos con orgullo jovencita, ahora eres una hermana del circulo (que emoción…) déjame presentarte a Duncan, es un Guarda Gris ¿Sabes de los Guardas Gris verdad?- En todos mis aburridos años en la torre finalmente ocurría algo interesante, si había algo que hacer en el círculo era leer y las batallas más espectaculares eran las de los Guardas Grises venciendo al ejercito negro de engendros tenebrosos.
-Por supuesto, es honor el siquiera conocer a uno.-
-Bueno resulta que Duncan es el Guarda Comandante aquí en Ferelden y está en búsqueda de un nuevo recluta.-
-Saludos jovencita, como dice Irwin una guerra se está librando en el sur y es mi deber encontrar buenos reclutas con urgencia.-
-Entonces ¿De todo Ferelden no ha encontrado a nadie y el circulo es su última opción?-
-¡Azana! Cuida tus modales niña.-
-Jaja, no es eso, de hecho he encontrado reclutas muy prometedores, una de ellos me acompaña en estos momentos pero se encuentra descansando en los aposentos de invitados, ella… tuvo un viaje pesado.- Una pequeña sombra apareció en su rostro al pronunciar esas palabras.
-¿A qué se refiere? ¿De dónde vienen?-
-Tranquila jovencita, nuestro invitado debe estar exhausto ¿Por qué no lo acompañas a los aposentos de invitados? Ya podrán charlar mañana.- Irwin y su eterna calma… si yo fuera tan vieja no me tomaría tanto tiempo para hacer las cosas.
Antes de poder atosigar a Duncan con mis preguntas, pude ver por el rabillo del ojo como Jowan, Amelia y alguna loca de la capilla se dirigían a las escaleras… intrigante pero no lo suficiente como para que me involucre…
-Duncan, si no te molesta ¿Puedo hacerte unas preguntas?- Puedo ser educada cuando lo deseo.
-Por supuesto, aunque no sé qué pueda decirte que no esté en los miles de libros que hay aquí.-
-Si… es una biblioteca bastante impresionante, pero lo que he leído sobre las Ruinas y los guardas grises lo es mucho más ¿Es cierto que inició una nueva Ruina? Es decir han pasado siglos desde la última… y ¿Es cierto que los guardas grises hacen lo que sea necesario para acabar con los engendros tenebrosos? Es decir que nada se considera prohibido para cumplir con su deber.-
-Sí, bueno, aunque no es algo que me enorgullezca nosotros los Guardas Grises debemos hacer todo lo necesario para eliminar la amenaza pero es decisión de cada uno elegir qué clase de persona quiere ser… y con respecto a Ruina, si, nuestras fuerzas ya han librado algunas batallas en las fronteras de la espesura de Korcari pero temo porque nuestras fuerzas no sean suficientes para derr- Un temblor casi imperceptible me hizo perder completamente el hilo de lo que Duncan estaba hablando y ver a Gregoir e Irwin pasar a toda velocidad hacia las escaleras no apaciguaba mi curiosidad.
-Me disculpas Duncan, podemos hablar más tarde si lo deseas, por supuesto.-
-Claro, adelante.-
En el primer piso encontré al Comandante y al Encantador sosteniendo una acalorada discusión.-
-¿Qué pasa Gregoir? ¿Alguien volvió a pasarse la hora de dormir?-
-Azana… no tengo tiempo para lidiar contigo ahora, estamos intentando manejar una situación complicada aquí.-
-¿Qué? Me van a decir que al fin descubrieron que Jowan es un mago de sangre.- Mi expresión eternamente impasible enfureció a Gregoir.
-¡¿Tú?! Por qué no me sorprende que tú estés involucrada en esto.-
-Wow espera yo nunca dije que "estuviera involucrada" simplemente lo sabía.-
-Explícate jovencita.- Irwin lucia decepcionado.
-Jowan se comportaba de manera extraña así que lo encaré, le dije que lo matarían por esto y me prometió que lo dejaría, pero no confiaba en él, así que le dije a Amelia que si Jowan tramaba algo le siguiera la corriente, para obtener pruebas.- Convincente, la clave de cualquier coartada, cierta o no, es sonar convincente.
Mientras empacaba mis cosas después de que Jowan se descubriera, atacara a todos, enviaran a su "amante" a prisión y yo protegiera a Amelia, se acercó sigilosa a mí.
-¿P-por qué les dijiste eso? ¿D-de verdad sabias que Jowan era un mago de sangre? ¿Por qué no me lo dijiste?-
-¿Sabes que le gustas a Cullen? Deberías intentar hablar con él y me refiero a más que unos cuantos balbuceos, de parte de ambos…-
-No cambies el tema Azana… Podrían haberme ejecutado por encubrir a un mago de sangre.-
-¿Qué quieres que diga? ¿Qué me agradas? No, no lo hice por eso, si te ayude fue para poder salir de esta maldita cárcel, ahora yo seré una Guarda Gris me niego a pudrirme es esta asquerosa torre. Pero oye el mundo exterior no es para todos… adiós Amelia, intenta no ser tan crédula en el futuro, vivirás más… Ah por cierto la Angustia consiste en ir al Velo y derrotar a un demonio que tratará de engañarte para que lo dejes poseerte.-
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Bueno es el final de capítulo 1, como ven será más de un guarda, tendremos además de Surana a Cousland también, trataré de evitar las partes monótonas de la historia del juego que todos conocemos, así que dejen su comentario si les gustó o si cambiarían algo.
