DISCLAIMER: Todo lo reconocible pertenece a J.K. Rowling, el resto es mío.
AVISO: Este fic ha sido creado para el "Amigo Invisible 2016" del foro " El triangulo donde tres están unidos".
¡Este regalo es para LilyRosie-FrikiBlack! No es mucho, pero espero que te guste :) Para los que no lo sepan, la petición 1 era: "Me gustaría un fic que cuente la historia de como Ginny se le ocurrió escribir aquel poema para Harry durante el segundo libro", así que he pensado en hacer una viñeta con un poco de humor. Algo ligero, fuera de mis esquemas dramáticos. Cualquier locura que encontréis aquí es completamente responsabilidad mía.
¿Canon? ¿Eso se come?
UN ALMA SENSIBLE (Y TENEBROSA)
Se acercaba San Valentín y Tom Ryddle lo sabía. No es que él estuviera especialmente interesado en ese tipo de celebraciones mundanas, pero no le había quedado más remedio que escuchar —más bien leer— la charla incesante sobre Harry Potter de la niña que tenía su diario. No es que los pensamientos de una niña de once años fueran interesantes, pero, según tenía entendido, la chica en cuestión era la hermana del mejor amigo de Él.
Tom había tenido la esperanza de que el diario llegara a manos del mismísimo Harry Potter, pero en vez de eso, ahora pertenecía a una tal Ginevra Weasley. Tom también había descubierto que, cuando la niña le abría su corazón y mente, establecía un canal a través del cual podía, en cierta manera, controlarla.
Su influencia sobre la chica había crecido con el paso de los meses y había conseguido que hiciera cosas que él le mandaba. Cosas bastante desagradables. Pero el Tom del diario era todavía un adolescente y, a veces, también anhelaba tener un poco de diversión.
Encontró el momento perfecto para pasárselo bien cuando Ginny empezó su charla incesante sobre San Valentín y sobre cómo Harry la ignoraba.
Al principio, solo tuvo que implantar en su cerebro una idea bastante simple: un poema.
Fue bastante divertido ver los primeros intentos por rimar de la niña, pero al final Tom se cansó de ver tan poco talento en ella.
Tiene los ojos verdes como…
Tom puso los ojos en blanco cuando la pelirroja se quedó media hora pensando una rima para ‹‹verdes››, así que decidió actuar.
‹‹¡Como un sapo en escabeche, idiota!››.
Tiene los ojos verdes como un sapo en escabeche…
Eso está mejor, pensó Tom, satisfecho de su trabajo. ‹‹Venga, a ver qué más se te ocurre, niña››.
…y el pelo negro como una… como una…
‹‹Mierda. ¿Qué rima con escabeche?››. Estuvo pensando durante las horas que pasaron hasta que la niña volvió a hacer caso al diario. Para entonces, Tom ya tenía dos líneas más pensadas.
‹‹Vamos a ver si sabes copiar al menos. Mira que dejarme a mí todo el trabajo…››.
Tiene los ojos verdes como un sapo en escabeche
y los ojos negros como una pizarra cuando anochece.
(Estaba bastante orgulloso de esta rima en particular).
Quisiera que fuera mío, porque es glorioso…
(¿Por qué no ponerla en ridículo? Al fin y al cabo, se empeñaba en interponerse entre él y su objetivo).
Pero antes de que tuviera tiempo de susurrar la última línea en la mente de la niña, la pluma de esta empezó a moverse por voluntad propia.
…el héroe que venció al Señor Tenebroso.
‹‹¿¡QUÉ!? ¡NO, NO, NO! ¡Esto no es lo que tenía planeado, niña estúpida! ¡BORRA ESO INMEDIATAMENTE!››.
Para su desgracia, sintió cómo la pluma de la niña abandonaba el diario. Si hacía eso, quedaba fuera del alcance de su poder. Maldijo un millón de veces cuando sintió que ella repasaba las líneas antes de copiarlas a limpio. Ahora ya sería imposible cambiar nada.
Bueno, al menos podía enorgullecerse de su ingenio. No todos podían presumir de tener tal dominio de la prosa.