Del Aroma de un Recuerdo, les traigo…

La sombra de mi memoria

Acaricie su cabello, sus verdoso cabellos verdes que se aferraban a mis dedos casi con rebeldía, sentía un enorme opresión en mi pecho cuando mis ojos viajaron a su ahora pálido rostro que me miraba tranquilo y levemente sonriente, sus ojos verdes hierbabuena sin brillo me destrozaron el corazón, le abracé con fuerza y sus brazos se tambalearon cual trapo ante la falta de vitalidad

─To-Todoroki-kun─ Me llamó mientras yo hundí mis nariz en su cabello intentado memorizar aquel aroma, no quería sepárame de él, simplemente no podía, me posicione en el suelo y acaricie sus risos ─Todoroki…Kun, n-no llores─ Dijo con un hilo de voz logrando que un ahogado sollozo escapara de mi garganta

─Po-por favor, no hables, Iida ya viene con Recovery Girl, solo aguanta un poco más─ Rogué sin atreverme a mirarle

─To-Todoroki-kun─ Volvió a llamarme

Su voz era débil, no energética como lo era cada día que me veía

Mire de reojo sus zapatos, aquellos zapatos rojos tan únicos, tan de él, su uniforme ahora verde oscuro resaltaba aquella figura tan delicada y fuerte al mismo tiempo, abrace su pecho sintiendo su lento y pausado palpitar, comencé a acariciar con lentitud su espalda pasando hasta su pecho topándome con aquellos fierros que atravesaban su cuerpo con descaro detrayendo su traje y su abdomen, intente contenerme cuando note su destrozado brazo izquierdo, que se desangraba con lentitud ante la falta de su mano

─To-Todorki-kum─ le ignore, negué, sabía lo que me diría, sabía perfectamente

No quiero escuchar su despedida

Fui débil, yo era su compañero, su amigo ¿Por qué no pude protegerlo? Me confié, me deje llevar por la idea de que fuera el símbolo de la paz, y eso me cegó olvidando que el fondo no era indestructible, que seguía siendo el chico de secundaria que yo admiraba y amaba, era aquel joven que amaba katsudon, que amaba los comics, las noches estrelladas, aquel que había rechazado mi amor en algún momento de nuestras vidas, para estar con ahora héroe número dos de la lista de héroes, no importo, porque era feliz

Ya no podré ver a Bakugo de frente, es mi culpa

─To…To…

─N-no─ Dije ahogado y asustado─ No lo digas

─To-Todo estará b-bien─ Musitó muy bajo, dejando que yo llorara aterrado por lo que estaba por decir ─ Ka-kacchan se e-nojara─ Noté que sonreía levemente, y yo solo mire al cielo rogando que no dejara de hablar─ D-Dile q-que no lle-llegare a ce-nar

─Se lo dirás tú─ Dije mientras mis lágrimas escapaban impertinentes, desconsideradas

─N-No, m-e odies

─¡Jamás! ─ Exclamé apresurado, dejando que mis lágrimas se saltaran ante mi movimiento tan brusco de mi cabeza─ Nunca podría odiarte, jamás lo haría ¡Tú eres mi héroe Midoriya! ─ Rio levemente, y abrió sus ojos dejando ver lo opaco de su iris, me di cuenta que su vida estaba abandonado su cuerpo─ Siempre has estado conmigo, nunca me has dejado a pesar de las circunstancias, me salvaste de mi necedad, y ahora, soy lo que soy por ti, y solo por ti

─L-Lo hi-ciste t-tú solo─ Me dijo, yo solo volví al cielo intentado que mis lágrimas cesaran como héroe que era actualmente , tengo que ser valiente, veo vidas acabar día a día, pero esto era demasiado difícil ─T-To-Todoroki-kun─ Posicioné mis dedos en mi oído, presionado el botón del comunicador

─¡Kirishima! ¿Hay rastros de Bakugo? O ¿De Iida? ─ Pregunté alterado, intentó que mi llanto no cortara mis palabras

Aún no veo a Bakugo, no logro comunicarme con él ¡¿Midoriya?! ¡Dime que sigue con vida!

─¡Si! ¡Pero dense prisa! ─ Exigí ─Él esta─ mi mano se separó del comunicados y noté pálido como la mano, la ahora única mano de Midoriya me sujetaba del brazo, negó con una leve sonrisa y yo me derrumbe─ ¡No te rindas! ¡Ya vienen! ¡Iida es el más rápido! ¡Pronto llegara!

─Él, no llegara─ dijo con tan tranquilidad que no acepte, yo solo negué ─H-Hay a-algo que q-quiero ha-agas

─¡Bakugo viene en camino! ¡Encárgaselo a él! Él hará cualquier cosa mejor que yo─ Dije desesperado con tal que se mantuviera despierto

Que se mantuviera con vida

─N-No hay ti-empo─ Su única mano viajo a sus cabellos, y confundido note que se arrancó uno, me miro y con una dulce sonrisa me dijo─ S-Se q-ue es e-xtraño lo que te v-voy a pedir, p-pero ¿P-uedes comerlo?

─Ha? ─deje escapar ante la confusión ¿Deliraba? ─ Midoriya, no entiendo ¿Por qué quieres que haga eso? No tiene sentido

─H-hazlo p-or mi─ Dijo con una sonrisa─ L-Lo ha-aras m-mejor que y-yo, K-Kacchan, te explicara se e-enojara, pero d-dile q-ue no me odie, siempre te e-envidio d-de alguna f-orma─ Una pequeña risa escapo de sus labios para acabar con un alarido ahogado de dolor─ P-or favor

─E-Esta bien, Midoriya, si eso quieres lo haré─ Lo tome aun no muy seguro, y lo trague de la forma más rápida que pude para poder continuar con lo que hacía─ Bien, listo─ Dije mientras le miraba con una leve sonrisa─ Ahora, no continúes hablando

─T-Tú y Kacchan, harán lo que y-o no p-ude

─Por favor Midoriya, deja de hablar ─Le supliqué, escuché algunas explosiones a lo lejos─ Bakugo ¡BAKUGO! ─ Grité desesperado casi como si sola presencia le curara, esto no podía acabar ahora, por lo menos debían verse

Por lo menos una última vez

─T-Todoroki-kun─ Musitó, le mire unos segundos y note como su mano se deslizaba con lentitud por su torso, cayendo─ ¿Ka-kacch─

─¿Midoriya? ─ Llamé, su sonrisa permanecía y sus ojos miraban a la nada─ ¿Mi-Midoriya? ¡¿Midoriya?!

Pero no me respondió

─ ¡¿MIDORIYA?! ¡VAMOS! BAKUGO ESTA CERCA! IIDA YA VIENE! ¡¿MIDORIYA?! ─ Olvidé su estado y comencé a menear su cuerpo levemente, su cabeza se agitada con cada oscilación provocada por mí, pero no había respuesta, no estaba funcionando─ ¡NO POR FAVOR! ¡MÍRAME MIDORIYA! NO ME HAGAS ESTO! ¡MIDORIYA! IZUKU! POR FAVOR, NO ME HAGAS ESTO IZUKU! IZUKU…─ Presioné mi rostro en su cabeza y llore desconsolado para después gritar desde lo mas profundo de mi corazón

Se había ido

─¡IZUKUUUUUUUUU! ─

Me levante de golpe, sintiendo como mi cabeza se azotaba contra algo, escuche un grito de dolor frente a mí, pero yo solo me puse de pie incendiando por accidente la manga de mi traje mire alterado de lado a lado, estaba en… ¿Mi oficina?

─Me dolió malnacido─ Miré a donde provenía la voz, y me sentí decepcionado de no ver alguna peca en su rostro─¿Qué mierda te pasa? Eres el director y te das el lujo de dormir, vaya mierda

─Bakugo─ Musité algo pesado, mire en otra dirección ─ ¿Q-Qué haces aquí?

─Entrenamiento ¿Lo olvidas? Señor heredero ─ Me sorprendí ante sus palabras y note que me miraba con suma molestia ─¿Y ahora qué?

─Nada… es solo que, recordé algo que no quería─ Dije pesado mientras veía mi mano derecha aun permanecía enyesada

─ ¿Y crees que eso me importa? ¡Ya ve a vestirte! Que si te vuelves a romper otro brazo, All Might me joderá a mí con que no te entreno bien, y mierdas así─ Reclamó mientras avanzaba hacia la puerta, me quede en silencio unos segundos

─Bakugo─ Le llamé mientras miraba el suelo, sentí su mirada escarlata sobre mí

─¿Ahora qué señor importante?

─Tal vez, esto deba ser tuyo ─Dije mientras miraba mi mano, hubo un silencio, un silencio eterno, decidí continuar─ Midoriya me traspaso este poder porque no tenia de otra o moriría con él, estoy seguro que él estará más feliz de que tú lo teng─

─No─ Levanté la mirada sorprendido encontrándome con un rostro apacible pero serio del cenizo, jamás lo había visto así─ Deku siempre fue un idiota, muy emocional y bastante estúpido─ Se cruzó de brazos y chasqueo la lengua para después mirarme de forma melancólica─, pero te eligió a ti, por alguna razón, quizás se deba a lo que dijiste, pero que importa, Deku te eligió y como el héroe número uno y como tu entrenador, te ordenó que dejes de pensar en eso, ahora mismo, con que te eligiera debería ser suficiente─ Me limite a bajar la mirada, y asentí levemente ─Bien

─Bakugo─ volví a llamarlo, Katsuki se detuvo al momento de abrir la puerta y me miro por sobre su hombro

Han pasado meses desde su partida, desde que Bakugo fue nombrado oficialmente símbolo de la paz se ha vuelto mi entrenador según petición de Midoriya, y ahora del retirado All Might. Midoriya había dejaron un camino de corazones rotos y de dolor que muchos en Japón de seguro ya han superado, pero Bakugo y yo… Estoy seguro que ambos aun sentimos su ausencia

En especial Katsuki

─ ¿Lo extrañas?

─Cada puto segundo─ Me dijo tajante, sin mirarme

La puerta se cerró, dejándome solo una vez más, me volví a sentar en mi silla y suspire pesado mientras miraba mi mano izquierda. Bakugo tenía razón, tal vez las circunstancias le hicieron tomar aquella decisión, pero si Izuku lo decidió era por que confiaba en mí, no puedo rendirme y decepcionarlo, no estoy solo

Después de todo…

─Es mi poder ahora ¿No? ¿Midoriya?─ Dije con una leve sonrisa, cerré los ojos una vez mas

Tal vez podría soñar con él una vez más, Bakugo podría esperar

.

¿Lograste sentir la desesperación de Todoroki? ¡Cuéntamelo en reviews!

Un saludo a todos y nos leemos en un próximo one-shot o en alguno de mis otros fics

¡Hasta la próxima!