¡Hola! :D

Bueno, estaba intentando hacer un pepsicola, cuando me harte porque no me salía y empecé a escribir este fanfic que si me intereso. La idea surgió después de leer un fanfic pepsicola llamado "1973" de renkougyoku, en donde ellos eran humanos con poderes en el mundo real, así que... este es una clase de AU Humanstuck y experimentos científicos que se pueden relacionar con la película de Wolverine. Así que es como una mezcla. Espero que les interese y le den una oportunidad. Todos los reviews son recibidos con los brazos abiertos ;u; (Incluso si son insultos (?)).

PD: Me disculpo si los personajes parecen medio OoC, estoy haciendo mi mejor intento para que se parezcan a los canon.

Todos los personajes pertenecen a Andrew Hussie

La cagaste.

Eres un maldito idiota.

Y la cagaste.

Por eso éstas corriendo como alma que lleva el diablo y te maldices una y otra vez por cada paso que das. ¿¡Cómo te habías equivocado de esa forma!? Eres un maldito idiota. Se suponía que esta iba a ser como las otras veces. Pero te encontraron. Los muy hijos de puta te lograron encontrar. Te habían encontrado en cada uno de tus malditos saltos. Aparecían frente a ti como si te dieran la bienvenida. Y entonces corrías. Al menos, las veces que podías correr y no te tenían rodeado. Por suerte esta fue una de ellas.

Tus zapatos hacen ruido contra las calles mojadas. Realmente no ves a nadie seguirte, pero sabes que no puedes parar. Apenas los hagas ellos aparecerán. Esconderse es igual de inútil, por lo que ni te esfuerzas. Pensar que tu única escapatoria es dar un salto ahora te da gracia. Al principio funcionaba, ahora estabas descubriendo que no.

El aire esta pesado, tus ojos ocultos ven todo a través de los vidrios polarizados. Las calles están vacías. A estas horas los clubs ya deben tener a toda la gente dentro, las familias normales se encuentran durmiendo, y los negocios se cerraron hace ya unas cuatro horas.

Por el amor de Dios, ni siquiera tuviste tiempo de averiguar qué día era. En qué momento del día habías caído.

Un grito corta el aire.

Un escalofrió te recorre.

Te detienes.

No te dejes engañar, es una trampa. Por supuesto que es una trampa. Deben ser las 4 de la mañana, no hay nadie en las calles. Es imposible. Es jodidamente imposible que ella este por aquí. Aun así, corres en dirección al grito. Porque eres un maldito idiota y te tienes que hacer el héroe.

Un héroe que no eres, pero que tu hermano fue.

Te concentras en correr. Este, precisamente este momento, no es bueno para pensar sobre eso.

Otro grito. Cinco pasos más. Otro grito. Giras a la derecha.

Una risa.

Estas en un callejón sin salida.

Te detienes. Realmente eres un estúpido. Le creíste. A pesar de todo le creíste. Ella se acerca a ti con una sonrisa en el rostro. No necesitas voltear, sabes que te tienen rodeado. Saltar es inútil, estás cansado de hacerlo. Un salto más y no lo lograrías. No lograrías escapar cuando te recibieran.

-Harley –la miras a los ojos verdes. A pesar de todo mantienes la compostura. Estas cansado. El día no había terminado, pero con tus saltos, habías estado viviendo el mismo miércoles por 40 horas.

-Dave –responde, devolviendo la mirada. Su sonrisa no se desvanece, pero tampoco cambia. Extrañas sus viejas sonrisas, las dulces e inesperadas.

Extrañas todo el pasado.

-Es bueno volver a verte. Lástima que ya tengamos que irnos. –se voltea a hablar con uno de los hombres de traje que la acompañan y después vuelve a mirarte. -¿Ningún otro salto? ¿De verdad? Fue mucho más difícil atrapar a John, esperaba un desafío de tu parte. Igual estoy cansada de andar persiguiéndolos. –comenta con molestia, aunque no le prestas atención. Estás muy ocupado sintiendo como tu corazón da un vuelco al oír nombrar a John.

¿Cómo era posible? El no era un fenómeno como tú.

Pero también creías eso de Jade, y ahora está frente a ti, sonriendo, como si hubiese ganado un premio. Seguro ella también podía saltar en el tiempo, por eso lograron atraparte. Era la única explicación que podías encontr-

-¿Nos harías los honores? –pregunta a alguien detrás de ti.

-¿Tengo otra opción? –responde la persona, y entonces sí sientes tu corazón dar un vuelco.

No quieres darte la vuelta. No quieres.

-No –responde simplemente Jade. –Pero un truco más y…

-No soy John, por el jodido amor de Dios. Me dejaste bastante en claro lo poco que te importa cagarla.

Jade no sonríe. Ella gruñe. Es ahora que te comienzas a dar cuenta de lo diferente que esta. De lo tanto que la cambiaron. De su mirada feroz, de sus colmillos. Por el amor de Dios, ¡tenía orejas de perro, maldita sea!

Una leve transición. Nadie más la siente, lo sabes. Solo alguien que es capaz de viajar por el tiempo es capaz de verla. Es un instante en donde eres capaz de ver todo. Como si fueras capaz de ver la línea de tiempo de ese día, y apuntases exactamente al minuto que deseas. Todo eso, en cuestión de un segundo.

El paisaje no cambia. Sigues en el mismo callejón sin salida. Sigues rodeado. Sigues cansado. Sigues odiando tener este poder. Pero ahora es de día, y la luz te encandila por unos segundos. Odiabas esta clase de viajes. Estar en la oscuridad y aparecer en medio de una luz que te encandila.

Jade extiende su mano y la ves brillar.

Entonces, el paisaje sí cambia.

Estás en un lugar completamente desconocido para ti. Todo es de piedra color violeta. Los hombres que antes te rodeaban te levantan del piso y te llevan a rastras. No te habías dado cuenta de que habías estado en el piso hasta ahora. Dejas se sentir aquella presencia detrás de ti, y entonces sabes que esa persona se ha ido.

No le prestas atención a lo que te rodea. Simplemente cierras los ojos e intentas recuperar el aliento.

Te estás dando por vencido, Strider.

¿¡Qué mierda te pasa?!

¡Pelea, todavía puedes escapar! Todavía puedes dar otro salto. Todavía tienes que escapar.

Pero pensándolo mejor… ¿Para qué escapar? ¿Para volver a ser atrapado? Por un demonio, claro que no. No pasaras por eso.

Es mucho mejor darse por vencido.

Es mucho mejor simplemente-

-¡Atrápenlo! –grita alguien. Levantas la vista y ves un grupo de hombres completamente de negro perseguir la nada. No entiendes qué demonios está pasando.

Los que te sostenían te sueltan, y vuelves a caer al piso. Al parecer no eres tan importante como aquél al que hay que atrapar. Recorres el lugar con la mirada. Esta oscuro, aunque no debería ser así. Estas muy seguro de que el viaje los había llevado a plena luz del día, y ahora, parecía que el sol se hubiese vuelto a ocultar. Todo era extraño de repente.

Sueltas un suspiro. Por dios, podrías escapar en este mismo momento… no, mejor dicho, ya es muy tarde para escapar. No tienes idea de a que parte de la línea del tiempo saltar para estar a salvo. Tu límite es el espacio, por lo que siempre aparecerás allí.

Primero, tienes que salir de ese maldito lugar. Luego, pegas el salto de tu vida y te vas al jodido momento en el que ni existías. Tal vez allí no te encuentren. O tal vez la cagues y evites nacer.

Tal vez simplemente deberías rendirte.

-Dave…

Te sobresaltas porque, por el amor de dios, que te susurren tu nombre en tu oído cuando estás en tus propios pensamientos asustaría a cualquiera.

-Vamos, Dave, levántate joder–vuelve a susurrar alguien mientras te levanta a rastras del piso. Tardas un segundo en reaccionar. En darte cuenta de quién es la voz.

-John, ¿qué demonios…?

-Ahora no, Dave. –te corta, respirando con cierta dificultad. –Primero hay que escapar y…

-¡John! –grita una voz que en su momento fue muy alegre. Jade los mira a ambos, con la boca fruncida en un gruñido, el ceño fruncido, los ojos completamente salvajes. Su piel esta gris, y te das cuenta que no habías reparado en ese detalle bastante notorio hasta ahora. Viéndola de esa forma, puedes ver su similitud con un animal salvaje. Un depredador, viendo a las que serán sus próximas presas.

Los ojos de John se abren, no asombrados, si no como si estuvieran asustados. Aunque también puedes ver el brillo que los invade. Un leve pizca de desafío, como si no pensara en dejársela fácil a Jade.

Lo opuesto a lo que reflejaban los tuyos.

El pelinegro te mira, como si esperase la misma determinación de tu parte, pero ves la decepción en sus ojos cuando lo hace. Él te conocía. Él sabía ver a través de la cara de póker. Simplemente asentiste, confirmando sus temores. Querías sonreírle, pero ni siquiera lo intestas. Ibas a fallar e ibas a empeorar las cosas. John frunce el ceño, haciendo un leve puchero, y luego devuelve la mirada a Jade.

Por supuesto que ella no estaba esperando a que se despidan. Todo lo que pasó anteriormente sucedió en cuestión de segundos. Segundos que pasaron más rápidos de lo que hubieses querido, y que se acabaron en el momento en el que Jade soltó un "BARK" y salto en dirección a John.

El pelinegro no tardo ni un segundo en reaccionar, corriendo lejos de ti y… desapareciendo. Todo John había desaparecido, tornándose aire con cada paso que daba. Aire… ¡Se había vuelto aire! ¿Sería capaz de hacerlo con otras personas? ¿A eso se refería con escapar?

¿De esto fue lo que hablo Jade?

Por dios, pero eres un idiota. Si él podía convertirte de igual manera en aire, tal vez… juntos hubiesen podido escapar. Él los llevaba, y tú los movías a través del tiempo. Si, no podías abusar de los viajes, pero nadie decía que todo tenía que terminar mal. Tal vez realmente hubo una oportunidad.

O tal vez no debía pasar así.

Retienes el deseo de dar un salto a unos minutos atrás, y escapar con John. Se suponía que no sabías de su poder, no podías volver y saberlo. O decirle a tu yo del pasado sobre eso. O simplemente involucrarte y evitar que Jade salte sobre él.

No querías crear otra línea condenada. Ya habías pasado por muchas. No querías revivirlo.

No desde lo que paso en la última.

Bueno, espero que le den una oportunidad ;u; Voy a subir un nuevo capítulo el sábado 17, así mantengo el orden y no desaparezco como hice muchas veces en otras páginas xD

Chauchiis