Otro año escolar se acercaba, y los maestros de Howgarts se reunían para discutir lo de siempre: el furuto de Annemarie.

- yo creo, que ya es tiempo de decirle algo a cerca de su familia...

- Dumbledore, señor, usted es sabio, muy sabio, y yo no lo soy. Pero no se... si ella mal entiende las cosas y decide actuar igual que su abuelo? Ella lleva su sangre, señor!

- Si! Si! Si! Hagrid tiene razón! - Corearon muchos profesores a la vez.

- Anoche, no aguante la tentación y me introduje en las profundidades de la bola de cristal. Y saben lo uqe vi?? No, claro que no saben, si ustedes nos pueden ver lo que yo puedo -

- Sybil!! Ve al grano por favor!! - la señora Hooch ya se estaba impacientando.

- Bueno, bueno. Lo que vi es que si esta niña, Annemarie viene a Howgarts, correra sangre, moriran varios alumnos. Entre ellos Harry Potter! - al escuchar esto, una sonrisa malevola irrumpio en la cara de Severus Snap - y un profesor que no voy a decir el nombre, pero que enseña posiones tambien morira.

- Sybil! Deja esas tonterias! - Dijo Snap, al que ya lo visto en la bola de cristal no le hacia gracia.

- Profesores! Por favor! Calmensen! Albus debe tener sus razones por las cuales dice que lo mejor para Annemarie es saber la verdad!

- Gracias Minerva, tengo mis razones, y se las explicare si me escuchan. - los profesores afirmaron silenciosamente, a la espera de las palabras del director. - todos ustedes saben que el se esta levantando de nuevo, y esta fortaleciendose rapidamente. Su mente es dificil de entender, y temo que quiera reunirse con su nieta. Gente de confiaza me ha dicho que lo que queria hace luego de acabar con los Potter, era reunirse con Annemarie.

- Pero, señor... - comenzo a decir Hagrid.

- Pero nada Hagrid, pero nada. - Interrumpio la profesora McGonagall perdiendo el poco de paciencia que le quedaba.

- Querida Profesora, calmese, y escuchemos lo que Hagrid tenga que decir - dijo Dumbledore sereno, aunque poco a poco su voz perdia esa musica y calma que la caracterizaba.

Hagrid sentia intensas miradas apuntando hacia el. Penso bien lo que iba a decir, y decidio que Albus Dumbledore tenia razon, luego dijo:

- Disculpe senior por cuestionar su palabra, si usted dice que es lo mejor que ella venga, es porque es lo mejor. Disculpeme, realmente, senior.

El senor director suspiro. Todos era probemas y mas problemas. Y cada dia todo se hacia mas dificil. Tosio, y trato de disumalar la preocupacion en su voz.

- Muy bien, mejor asi... alguien tiene alguna preunta?

- Yo - dijo el profesor Filwik, quien se habia quedado en un rincon, en silenciom hasta ete momento. - como sera elegida? Desde que yo estoy en ese este colegio, nunca nadie ha entrado en otro anio que no sea primero.

- Buena pregunta profesor, buena pregunta! Lo que vamos a hacer, y espero que les parezca indicado, es llamarla antes de los de primer anio. Pero como si fuera una alumna de primero, y nos hemos equivocado en el orden alfabetico.

- Pero los alumnos no se exaltaran al escuchar su apellido?

- No lo creo seniorita Delacore, muy pocos saben el verdadero nombre de quien-usted-sabe. Usted misma no lo sabia, y tengamos en cuanta que es la profesora de defensa contra las artes oscuras - dijo Minerva, con un poco de enfado en la voz. No sabia que, pero algo le molestaba de esta muchacha. Algo raro habia entorno a ella...

- Bueno, creo que Minerva ya te ha contestado Fleur - dijo Albus Dulbledore mirando a McGonagall como diciendo: "Minerva, se mas amable por favor". - alguna otra pregunta?

- Si Albus - dijo Snape - quien le dira la verdad a esta ninia??

- Yo puedo hacerlo! - exclamo Fleur.

- Gracias, pero creo que me puedo encargar de eso - dijo Albus con un amplia sonrisa, mietras Minerva tenia un gesto en su rostro que intimidaba hasta al mas valeroso. - alguien quiere saber algo mas o decir algo? - nadie hablo y Albus prosiguio: - ahora que estamos todos de acuerdo, doy concluida esta reunion. Minerva, por favor quedate un segundito que quiero hablar contigo a cerca de la carta para Annemarie

Poco a poco, paso a paso, los profesores salieron de la habitacion.

- Minerva, mandale a Annemarie el libro "Historia de Howgarts", para que no se sienta tan perdida. Aunque a decir verdad, solo uno de neustros actuales alumnos lo ha leido.. jaja - interrumpio su risa al ver la mirada severa de Minerva, quien no entendi por que el reia si los tiempo eran tan dificiles. - querida Minerva, no reprimas mi risa. En estos momentos en que todo se ve tan oscuros, tenemos que tratar de estar bien, y reprimiendo cada gota de alegria, no ayudamos en nada!

Minerva McGonagall estuvo en selencio por un minuto, y luego dijo:

- Annemarie Riddle, bienvenida a Howgarts!

Albus asintio.