Buff, la tercera historia que estoy escribiendo ya... me voy a hacer un lío al final... :') pero bueno, el caso es que me hacía ilusión y me ha parecido interesante intentar empezar un fanfic relacionado con Cómo entrenar a tu dragón, una de mis películas favoritas (*-*)
NOTA: cuando aparezca algún nombre de dragón en cursiva con un asterisco al lado, significa que al final del capítulo encontraréis la información sobre dicho animal. Ej: Terrible Terror*
Debo decir también que, la información que uso (a pesar de que la retoque y la adapte), la he encontrado en distintas webs, cómo, por ejemplo, la web oficial de HTTYD (How to train your dragon): intl/es/mainsite/ o una web bastante completa que encontré hace un par de días y que me fue de gran ayuda: . /wiki/C%C3%B3mo_entrenar_a_tu_Drag%C3%B3n_Wiki
Os explico lo de las webs porqué soy una persona que, del mimo modo que quiere que se respeten sus derechos de autor, respeta los de los demás.
Sólo era eso. ESPERO QUE DISFRUTÉIS DEL FIC. (y que dejéis alguna review ;))
GRACIAS A LOS LECTORES 3
Diario de una jinete, capítulo 1.
-¡Nico, saca a tú estúpido dragón de aquí!
-¡No es estúpido!
Mi hermano pequeño le tiene un cariño especial a su dragón, y me sabe mal echarlo de este modo, pero ya estoy harta de encontrarme ratas, comadrejas, conejos y de más roedores muertos en mi habitación.
-¡Llévatelo ahora mismo!
-¡Está bien!
-¡Estupendo!
-¡Vale! –y en el momento en el que me grita eso, coge a su minúsculo dragón en brazos y ambos se van. Agh… parece un chihuahua viscoso y recubierto con escamas.
-Que pesado es… -me digo. –pff… y ahora a limpiar todo esto…
Tras media hora buscando y tirando roedores muertos, y aún sin haber terminado, aparece Sarah atravesando la puerta de madera de mi habitación.
-¡Buf! ¡Menudo pestazo, tia!
-A mí me lo vas a decir…
-Sal a que te toque el aire, que te vas a asfixiar.
-Primero tengo que acabar de limpiarlo todo.
-¿Te echo una mano?
-No hace falta. –pero antes de que le diga eso, ella ya me ha traído bolsas de basura y tres pulverizadores con perfume.
-Gracias…
En diez minutos el dormitorio ha vuelto a estar limpio, como siempre.
-Pfff… por fin. –concluimos las dos a la vez.
-Oye, ¿te vienes a ver a los dragones hacer prácticas?
-Sarah, no me apetece mucho…
-Tienes que superar ya lo de Sirius.
-Lo sé, pero no es fácil, ¿sabes?
-Bueno, estaré allí con Víctor. Vente si quieres.
-De acuerdo… -y nos despedimos con un abrazo.
Miro a través de la ventana y veo a mi hermano jugando en medio de las calles de la aldea con su dragón, Sparky. Es un Terrible Terror* de color verde y rojo.
Tal vez, y solo tal vez… podría empezar de nuevo… un nuevo dragón, una nueva yo… ¡No! ¿Pero qué digo? Perdí a mi dragón… no puedo sustituirlo…
Mis padres murieron cuando yo tenía tres años. Hasta ahora mi hermano mayor se ha hecho cargo de mí i de un segundo hermano menor:
Mi nombre es Leonora (aunque todos me llaman Leo). Fue un golpe muy bajo perder a mi dragón Sirius; han pasado cinco años de eso y me sigo sintiendo tan culpable de lo sucedido como el primer día… Desde entonces no he tenido el valor de subirme a otro dragón. No me apetece ni volver a ver uno; pero por desgracia vivo en una aldea rodeada de estos curiosos animales.
*Terrible Terror: Se trata de uno de los dragones más pequeños conocidos. Del tamaño de un gato, recuerda a los dragones de Jardín. Es un dragón de cuerpo gordo, con una cola fina terminada en flecha y una cabeza pequeña y redondeada; posee un cuerno en la nariz parecido a una espina, dos ojos grandes y amarillos y un par de cuernos cortos y curvos sobre la cabeza; demás de unas espinas que le recorren el cuello hasta la cola. Los hay de distintos colores: verde y rojo, naranja y rojo, celeste y amarillo y púrpura e índigo. La única advertencia que dan sobre su ataque es el sonido que hacen antes de escupir fuego.
Pd. ¿Subo el siguiente? ¡muchas gracias a los lectores!
~Tamashi neko
