Ella y él.

Los personajes de Yami no Matsuei le perteneces a Yoko Matsushita

Este fic no es mío, es una traducción de una amiga.(Wiz323)


Capítulo 1:

Ella lo mira pero él no se da por aludido. Sigue con su aire ausente mirando el mar.

Le había costado mucho poderle hablar. Y mucho más pedirle una cita.

Tanto tiempo observándolo. Tantos días buscándolo por las instalaciones, hasta memorizarse su horario, su rutina.

"Lo conozco mejor que nadie" piensa. Y está orgullosa de ello.

Y finalmente ha llegado el día en que todos sus esfuerzos se verán recompensados.

Lo mira otra vez. Él sigue igual, pero ella descubre un ligero rubor en sus mejillas. Y no puede evitar reír entre dientes: "es tan guapo cuando se pone rojo... aunque él lo odie y lo niegue".

Se conocen desde hace tiempo. Él no lo recuerda, pero iban a la misma escuela desde que eran adolescentes. Y aunque físicamente lo seguían siendo, psíquicamente él había cambiado mucho, pero aún conservaba aquel encanto que la enamoró.

Ella no era una chica que se dejara llevar demasiado por el pasado. Acostumbraba a ser optimista y ver el lado bueno de las cosas. Pero aquella vez fue un golpe demasiado duro para ella.

Y cuando se lo dijeron, se le cayó el mundo encima. En realidad, ni tan siquiera se lo contaron, lo oyó de refilón.

Muerto.

A partir de ese momento fue una sombra de sí misma. Intentaba sonreír, fingía que no le había afectado, pero a veces no podía evitar dejar entrever la realidad.

Y al final sucedió. Ese día llovía, se acordaba bien. Un día gris y lluvioso que reflejaba si estado de ánimo, sin viento. Solo caía una cortina de agua. Quizás por eso no lo vio. Y cuando lo oyó, ya era demasiado tarde.

Un coche la arrolló.

Siempre decía que había sido por que no había visto el coche, pero en sus momentos más bajos recordaba aquella luz rojiza que ignoró. Quizás porque estaba muy cansada y no se dio cuenta. Quizás porque en el fondo de su corazón lo deseaba

Pero ya le daba igual.

Le sorprendió cuando en medio de esa luz tan blanca y tan pura, una voz le preguntara si quería ser shinigami. No dudó en aceptar porque quería, necesitaba saber porque él tuvo que morir

Y cuando lo vio sintió como se le paró el corazón.

En ese momento a ella le estaban enseñando las instalaciones. La voz del shinigami que le explicaba en que consistía su trabajo se esfumó y sintió como si en el mundo no hubiera nadie más que ellos dos. La sensación se fue tan rápido como vino, pero fue suficiente como para que él se girase.

Y por un instante sus miradas se cruzaron. Estaba como ella lo recordaba: un poco más alto que ella, ojos de un color esmeralda precioso, su piel fina y clara y su pelo castaño claro.

No pareció que la recordara, al menos, no lo demostró ya que inmediatamente se puso a hablar con su compañero, un hombre moreno y de ojos violetas.

A partir de ese momento dedicó todos sus esfuerzos en buscar a que división pertenecía para más adelante entrar en ella. No fue fácil, pero al final lo logró.

Tres meses y vente y un días después, entró en la división de citaciones del departamento Emma.

CONTINUARÁ...


Espero que os haya gustado.

Hasta otra n.n

Por favor escribid RR