este es una nueva historia que realizo espero que les guste, como saben star vs las fuerzas del mal no me pertenece ni sus personajes estos pertenecen a disney
Capitulo 1.- una decisión
Una decisión, puede cambiarlo todo, y en esta ocasión no será diferente. Era el cumpleaños número catorce de la princesa de Mewni, ella se encontraba emocionada, ya que era el día en que sus padres le confiarían la barita del reino, un artefacto que en las manos equivocadas traería destrucción, no solo a su pueblo, sino también a varios de los reinos aliados, pero poco le importaba eso a la princesa. Ella se encontraba en su habitación y a través del espejo hablaba con su mejor amiga Pony Head.
-Puedes creerlo amiga, hoy es el gran día, hoy mis padres me confiaran la gran barita- decía la joven, quien había estado esperando por ese día, desde que ella tenía uso de la razón-Amiga ven hoy, a la ceremonia-
-Claro no me lo perdería, por nada del mundo-se notaba la razón por que ambas eran las mejores amigas en todo el multiveso-Oye, tengo una idea, ¿Por qué no, después de que termina la ceremonia, vamos a divertirnos a lo grande?-
-¡Claro, que sí!- la princesa de Mewni, pego tal grito que lo más seguro es que la hubieran escuchado en todo el reino-Genial, hoy será el mejor día de mi vida, primero la ceremonia, después la salida contigo y después ¿Qué?-
-¿Qué tal, si probamos que hace esa belleza de barita?-
-Sí, bueno tengo que dejarte amiga, me debo a listar para la ceremonia de hoy- decía Star al mismo tiempo que se daba cuenta, que aun seguía en piyama y solo faltaban un par de horas para el evento.
-Si, tienes razón, no creo que debas llegar, vestida de esa manera a tu propia fiesta,-Pony Head le dio la razón al ver que su amiga no parecía estar lista, y menos ella, quien había recibido la noticia de un momento a otro-Bueno, adiós amiga, hasta la ceremonia-
-Hasta la ceremonia, Amiga-se despidió Star de su mejor amiga.
Una vez terminado la video llamada, Star se dirigió hacia su armario, ella ya había escogido su atuendo la noche pasada, para estar preparada. A demás de que no podía hacer nada más por la emoción. Una vez terminado de cambiarse de atuendo, la joven no podía mantenerse calmada, se movía de un lado a otro en su habitación por la emoción, no tenía nada que hacer solo esperar, ya que faltaban horas para el evento, Star ya harta de esperar, decidió que lo único que podía hacer para perder el tiempo y calmarse, era salir a dar una vuelta por las tierras de su familia.
Durante su recorrido por las amplias praderas del reino, Star no lograba calmarse por la emoción, para ella los minutos eran horas. Para calmarse decidió caminar en dirección hacia el rio que se encontraba cerca.
Ella no podía creer lo que sus ojos le decían, cerca del rio se encontraba un unicornio salvaje. Se le advirtió varias veces que estos eran peligrosos, pero poco le importaba a la princesa, ella solo necesitaba una distracción y esa era una de sus favoritas el intentar domarlos. Sin previo aviso Star salto encima del animal, la criatura se movió frenéticamente intentando liberarse de su atacante, con cada movimiento frenético provocaba una emoción en la princesa tomándolo como reto y sujetándose con más fuerza. La criatura, ya desesperada empezó a correr por los campos del reino en la búsqueda de ser libre.
Ya había pasado varias horas y ni el animal, ni la princesa, se daban por vencidos, Star al voltear la mirada noto que atardecía, eso significaba que llegaría tarde a su propia fiesta, jalando el cabello de la criatura fue dirigiéndola hacia el reino, paso por encima de puestos y en barias ocasiones casi mata a alguien. Con cada trote del animal se acercaba hacia su hogar, al entrar en el palacio, ocasiono un escándalo por todo el recinto, la criatura no disminuía la velocidad y Star al estar lo suficiente cerca de sus padres decidió saltar del lomo del unicornio, sin importarle que este se estrellara contra el muro dejando un gran hueco en la pared del palacio.
-Star…- esto fue lo único que logro escuchar de su madre que como siempre le daba un sermón de lo irresponsable que era.
Ya terminada la ceremonia la joven salió corriendo del palacio, durante la huida de este se encontró con su mejor amiga
-Hola, Star Butterfly, ¿qué cuentas?-la joven mencionada no respondió, solo basto con mostrarle la que traía en las manos, ambas solo se miraron antes de pegar un grito de emoción que se escuchó por todo el reino,-No lo puedo creer-
-Ni yo, creí que mi madre no me la daría hasta cumplir los quince o ser más responsable, como diría ella-
-No era tradición que a los catorce se heredara la barita-
-Si pero ya sabes como es mi madre-
-De aburrida-
-Oye, mi mama no es una aburrida-Pony Head solo se le quedo mirando de manera de no creerle –Esta bien puede que sea algo estricta, pero es que me quiere-
-O no confía en ti-
-Vamos, sino confiara en mí, no me hubiera entregado la varita real-
-Tal vez, espera que cometas un error-Star empezó a girar la varita entre sus dedos mientras escuchaba a su amiga
-No exageres- en ese momento la joven suelta la varita, que al estrellarse con el suelo libero un rayo, que incendio un pequeño puesto ambulante, que se encontraba cerca -Creo que mejor nos vamos-
-Estoy de acuerdo-
Star recogió la reliquia familiar del suelo los mas rápido que pudo del suelo, para luego salir corriendo del lugar seguida por su amiga, ya estando lo suficiente legos del lugar las dos jóvenes.
-Y bueno, ¿Qué quieres hacer, amiga?- Star se quedó pensado un largo rato. Tenía en sus manos un poder casi ilimitado y la joven no se le ocurría nada que hacer.-Ya se, y si vamos a la dimensión de nubes a festejar-
-No, tengo una mejor idea-
-Vamos dime, amiga-
-He pensado, que podríamos usar la varita, para mejorar este lugar-su amiga al mirar a su alrededor pudo observar, el ambiente de depresión, que invadía al pueblo de Mewni
-Sí, a este lugar no le vendría mal una arregladita-
-Vamos a mejora la vida de estas personas-dijo Star muy entusiasmada. También pensaba que si lograba una sonrisa en sus ciudadanos su madre estaría orgullosa de ella.
Star y Pony empezaron a correr por las calles de la ciudad, con la intensión de intentar ayudar a cualquiera que lo necesitara. Encontraron a un hombre triste que estaba comiendo un pan, Star pensó que sería buena idea crear un amigo para el pobre hombre, a si creo un pequeño cachorro, star creyendo que lo había hecho feliz se alegó del lugar, sin mirar que el animal le quito su comida y se echó a correr deja al pobre hombre hambriento. Star camino por todo el reino con su amiga intentado ayudar a todos los que podía, por desgracia cada vez que lo intentaba obtenía el resultado contrario. La tarde empezó a caer la joven princesa estaba segura haber mejorado la vida de los ciudadanos, decidió detenerse para ver su obra de arte, para su mala suerte fue todo lo contrario, se podía observar el caos y la destrucción gobernando al mismo tiempo. Y la pobre joven solo pudo imaginarse el regaño por parte de sus padres.
-Yo, mejor me voy, adiós-Pony head desapareció tras un portal para evitar ser cómplice de lo que podría ser un gran desastre, dejan do a Star sola
Star decidió caminar al palacio de sus padres, para enfrentar los, lo más rápido posible y olvidarlo ya estaba acostumbrada a los regaños, pero no podía dejar de sentirse mal, ella no sabía si era por todo el desastre que causo, si era por el ello de que fallo en su intento o era porque quería demostrarle a su madre que era responsable, y solo demostró que ella tenía razón.
Ya estando frente las puertas del reino, no fue necesario ni tocar ya que sus padres se encontraban en estas
-¡Star Butterfly!-se podía escuchar un tono de ira en la voz de la reina de Mewni –Me podrías explicar ¿Qué has estado haciendo, todo el día?-
-Lo siento madre, yo solo quería hacer felices a todos, nuca pese que…-
-No pensasteis, ese fue el problema-la madre de Star la interrumpió regándola-Aun que tus intensiones eran buenas, el poder de la varita no es algo con lo que se debe jugar-
-Ya lo sé, pero-
-Sin peros, jovencita. Entra de una vez tienes mucho que empacar-esto dejo sor prendida a la joven, tanto que no pudo evitar preguntar
-¿A qué te refieres madre?-
-A que mañana te iras al Reformatorio Santa Olga para princesas caprichosas-esto dejó sorprendida a la princesa
-No, por favor no me envíes-Star le rogo a su progenitora que no la enviara, a lo que consideraba un peor destino que el infierno mismo
-Está bien, como en esta ocasión intentaste ayudar no te enviare- esto alegro a la joven-Pero te daré a escoger, te quedaras pero tendrás que aprender de mi directamente o de un asistente mío, a controlar la varita, segunda te quitare la varita y no tela daré hasta que seas responsable o tercera te desterramos a otra dimensión donde aprenderás por tu cuenta a utilizarla-
-Pero…-la joven intento protestar pero ni siquiera pudo
-Sin peros Star, ya tienes suficiente con que no te envía al reformatorio, y que además te deje decidir cómo te castigaremos, si quieres demostrarnos que eres responsable comienza con esto-la decisión de la reina era absoluta, no podría escaparse de esto
-Mínimo dame hasta mañana –
-Está bien, tienes hasta mañana, pero sino medas ninguna respuesta, ya sabes-
-El Reformatorio Santa Olga Para Princesas Caprichosas-la madre de Star no dijo nada más. Ya que vio que su hija había entendido la situación, la reina y el rey se retiraron al castillo dejando a su hija fuera, esta se quedó en la entrada un par de minutos pensando en todo lo que sucedió, hasta que se decidió entrar.
Star caminaba por los pasillos del palacio, pensando en todo lo que sucedió y en las opciones que le había dado su madre, la primera no le ayudaba mucho ya que no quería que su madre la estuviera cuidando como un niña pequeña, la segunda tal vez era la mejor, pero no quería perder su poder y menos el día después de su cumpleaños, la tercera se escuchaba bien, pero estar lejos de su familia y sus amigos no la hacía feliz. Ya se encontraba frente a la puerta de su habitación, al entrar seguía sumida en sus pensamientos, no podía creer que su cumpleaños número catorce pasara de ser el día más alegre a ser lo que es ahora, se acostó en su cama boca abajo tal vez lo único bueno es que su madre le diera otra oportunidad, con lo último de su conciencia había logrado tomar una decisión antes de caer dormida.
El sol era muy brillante logrando interrumpir el sueño de la joven, con parpados pesados, logro con gran esfuerzo despertar, decidió cambiarse con su ropa habitual y después de que termino de desayunar, se dirigió a la sala del trono donde se encontraba su madre y padre, para terminar de una vez con todo esto.
Se escuchó el sonido de las puertas al abrirse, los dos gobernantes al ver que se trataba de su hija esperaron en silencio la respuesta, pero ninguno decía nada lo que provocó un silencio incomodo que fue roto por la reina.
-Y bien ya has decidido-
-Si Mama, me quedo para que me enseñes-
-sabía que tomarías la decisión correcta, hija te veré dentro de una hora en el estudio, retírate por el momento-
como les pareció esta historia critiquen, comenten y opinen a si podre mejorar y traerles un mejor contenido a antes que se me olvide estoy escribiendo dos historias aparte de esta, lo que provoca que no salgan rápido los capitulo espero que tengan paciencia hasta el siguiente agerasias por leer
