¡Hola a todos! Y siguiendo con la onda retro, aquí vengo con otro fic basado en una canción de mi dueto favorito, Ella me hablaba de él-pimpinela, no lo llamaría exactamente song fic, pero qué más da, ahí se los dejo, aunque creo que será pequeño, muy pequeño, dejémoslo como un mini-shot XD, en fin, sin afán de aburrirlos, los dejo con este mini-fic.
Estábamos sentados frente a frente, compartiendo la misma mesa, bebiendo un café mientras conversábamos, esa se había convertido en nuestra rutina cotidiana desde que Tamaki se fue a Francia ,prometiendo volver por ti cuando terminaras el instituto, ahora yo compartía más tiempo contigo, aunque un ahora diaria no es lo que llamaría "mucho tiempo", pero los negocios de mi familia me tenían ocupado, sin embargo, a la ausencia de Tamaki, en ese pequeño lapso de sesenta minutos era yo quien escuchaba tus problemas, tus penas, tus quejas por su falta de atención, el dolor que te causaba su ausencia, todo… me hablabas de él a toda hora, nunca decías específicamente su nombre, pero, ¿De quién mas podrías hablar así? ¿Por quién mas llorarías de esa forma si no era por Tamaki? Siempre me hablabas de "el" sin saber que yo te amaba, vivías para él, mientras yo me moría tu lado…
Me notas pensativo y sin saber lo que tu caricia provoca en mi, rozas tu mano contra mi mejilla, mirándome con preocupación, preguntándome si algo malo sucedía, me escondo tras mi típica mascara de hipocresía y te sonrió igual que siempre, escondiendo el dolor que me provocaban tus palabras de adulación hacia él diciéndote que es solo estrés por el trabajo, no me crees, puedo verlo en tus ojos pero prefieres no tocar el tema, no sabes cuanto agradezco eso, sin embargo la siguiente pregunta que me haces consigue hurgar mas en mi herida, provocándome cada vez más y más dolor…
-Kyouya… ¿Cómo puedo decírselo? –me preguntas sin saber lo que en mi provocas-
-¿Decirle qué? –te respondo con otra pregunta, tratando de evadir la que me hiciste-
-Que me duele que sea tan indiferente… -me contestas bajando ligeramente la mirada- que desearía pasar más tiempo a su lado…
No supe que responderte, al igual que tu, baje la mirada observando mi café como si fuera lo más interesante del mundo, trate de sonreír falsamente como hace un momento y darte ánimos de una u otra forma, pero mi corazón se rebelo contra mí, no pude hacerlo… sentía que me ahogaba por dentro con mi llanto silencioso, guarde silencio pues solo eso podía hacer, tu seguías haciéndome preguntas, lastimándome cada vez mas sin siquiera proponértelo, acabando conmigo, matándome poco a poco…
-¿Te sientes bien Kyouya? –Me preguntas pues has visto mi semblante decaído- podemos dejarlo para otro día…
-No hace falta… -te respondo logrado esbozar la sonrisa mas falsa que le he dado a alguien- después de todo, no podemos reunirnos tan seguido como en quisiera
-Es verdad… -dices desviando la mirada hacia el jardín del lugar, esbozando una triste sonrisa-
Debes estar pensando en el, en los momentos que pasaron juntos y en los que vendrán cuando el regrese, no sabes cuánto desearía ser yo quien ocupara tus pensamientos, que soñases conmigo, yo jamás te dejaría… pero la realidad es otra, amas a mi mejor amigo y eso no puede cambiarse, decido afrontar las cosas y tomando valor de quien sabe dónde, intento hablarte de él, sin embargo las palabras se atoran en mi garganta y eres tu quien empieza a hablar…
-No sé qué hacer Kyouya… -susurras escondiendo tu rostro tras tus manos- no sé cómo decirle… como hacerle entender que lo necesito, que lo estoy esperando… que es lo mas importante en mi vida… lo amo Kyouya, el lo es todo para mi… Dime… ¿Qué crees que deba hacer?
Me miraste fijamente buscando la respuesta que tanto ansiabas, no pude hablar, esquive tu mirada al instante, no podía seguir escuchándote, había sido casi un año de reprimir mis sentimientos por ti, de tragarme mi dolor y sonreírte, reír como si nada pasara tratando de animar a tu corazón para que no pierdas la esperanza de que el volviera, era suficiente… no lo soporte mas y después de justificarme con alguna excusa barata salí del lugar, una solitaria lagrima no tardo en deslizarse por mis mejillas, la seque al instante, no podía permitirme ese signo de debilidad, no debía desmoronarme, pues mañana debía continuar con el espectáculo, reunirme con ella en el mismo café, oírla hablar de él ignorando por completo los sentimientos que yo le profeso…convertirme nuevamente ante ella en el frio y egoísta Ootori Kyouya…
Haruhi Pov
Saliste huyendo, puede que lo niegues mañana, pero se bien que no soportaste más nuestra conversación, pude verlo en tus ojos, a pesar de rehuir mi mirada pude notarlo, vi como llorabas por dentro, después de todo… siempre he podido ver a través de ti, no dijiste más que un par de palabras pero eso fue más que suficiente para mí, me dio la respuesta que necesitaba, esa que tanto había buscado, te marchaste sin siquiera escucharme, te fuiste sin saberlo, ese hombre del que te he hablado todo este tiempo, a quien he adulado, por quien he sufrido, por quien he llorado… no eras más que tu, Ootori Kyouya, y te fuiste sin saber que eres el hombre… a quien realmente amo…
Fin
Notas de la autora
¡Ya sé!, ¡Mátenme por dejarla ahí! Es que la pensé como un one shot, aunque me quedo chiquito T_T muy chiquito T_T pero con mucho cariño *0*, espero les haya gustado, si habar continuación… no lo sé… en realidad he considerado en dejarlo ahí, pues la canción termina así, pero depende de sus pedidos y tal vez la continúe, lo dejo en sus manos XD, la opción de continuar seguirá abierta , en fin siendo ya un poquito tarde en mi país, me despido, hasta la próxima, ¡sayonara! ^0^
