Conejos

Por Nochedeinvierno13


Disclaimer: Todo el universo de Harry Potter es propiedad de J. K. Rowling.

Este fic participa del minireto de octubre de "La Copa de las Casas 2014-15" del Foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".

Personaje: Lord Voldemort.


Es una mañana calurosa de verano cuando Voldemort piensa en qué tiene de malo para que hayan elegido a Harry Potter como el chico más guapo del siglo veinte.

¡Si será escurridizo el chiquillo que todavía se atreve a seguir vivo y a arrebatarle el premio!

—Quizás es porque es mucho más guapo que yo. ¿Tú que piensas, mí querida Nagini?

—Yo creo que nadie puede ganarle en cuanto a atractivo, mi señor. Es decir, ¿quién podría resistirse a su calvicie y a su nariz reptílica? ¡Es lo último de moda mágica!

—Tienes razón, mi querida Nagini. Tú siempre tienes razón.

—Colagusano se encuentra detrás de la puerta —le dice la serpiente en pársel.

El hombre con rostro de roedor entra en la estancia cargando una caja con él que deja encima de la mesa.

—Amo —habla haciendo una reverencia—. Sé que usted está muy afligido porque ese tonto de Potter le ha ganado el premio del hombre más atractivo del siglo, por eso he ido a comprarle un regalo.

—¿Un regalo? ¡Los regalos siempre me ponen de buen humor! ¿Qué es?

—Huelo carne desde aquí —comenta Nagini a su lado.

—¿Un muggle para torturar? Comienzo a tenerte en más alta estima, Colagusano.

—Me temo que no es un muggle para torturar, mi señor. Pero seguro que le alegra más que un asqueroso muggle.

Colagusano abre la caja y pronto se escuchan varios chillidos. Pequeñas criaturas de pelajes blancos y marrones comienzan a moverse por la habitación y Voldemort grita cual niña asustada.

—¡Nagini acaba con ellos!

—Pero mi señor, ¿qué tienen de malos los conejos?

Voldemort se cubre los ojos para no tener que ver las grandes orejas que saltan de un lado para el otro y ahoga otro grito agudo.

—¡Me da fobia cualquier tipo de animal, inepto! Ahora Nagini procede a buscar tu cena.

—Pero Nagini es un animal, una serpiente.

—¡Ella no es solamente una serpiente! Ella es mi compañera, mi más fiel amiga, por lo que el concepto animal no se aplica en ella.

Colagusano aprende a base de crucios por qué a su no debe regalarle conejos a su amo.