Atención: Nada de esto me pertenece, los personajes le pertenecen a Stephenie Meyer y su saga Crepúsculo. Solo la trama es mia.

Este primer capítulo es dedicado a Catha Cullen. Por siempre apoyarme y por ¡su cumpleaños!

"Oportunamente Padre."

Summary: AU. Hace 4 años Bella se había hecho una inseminación artificial, así nació Renesmee, pero con lo que no contaba fue que "mama, donde esta mi papa"y así ella y su amiga rose emprenden una ardua búsqueda "Edward, te busca una mujer, algo sobre una niña, muy parecida a ti" .E&B.

Capítulo I

"¿Estas Lista?"

"Por que las historias de amor encierran todos los secretos del mundo"

Bella.

— ¡Renesmee, ven a tomar un bocadillo¡—dije poniendo la mitad de un sándwich, en su plato de Bob esponja.

—Ya voy mami— dijo mi dulce hija. Arriba se oían unos pasos rápidos por el suelo de madera, supuse que corría. — ¡No corras!— le recordé, después los pasos se oían más despacio y una risita, Renesmee era muy buena chica y siempre me hacía caso, era mi dulce y linda hija, y la amaba con todo mi corazón, era mi una razón de ser.

Después la vi bajando las escaleras con pasos cuidadosos. Traía puestos sus pantalones de mezclilla y su blusita azul, su hermoso cabello dorado le caía por los hombros formando hermosos caireles que brincaban cada que bajaba un escalón. Totalmente adorable.

—Encanto, ¿todavía estas enojada conmigo?—quise saber, recordando nuestra discusión anterior, yo todavía me sentía mal, odiaba discutir con ella

—Mami, no fue enojo, ¡es que es la verdad!, yo quiero saber quién es, todos tienen papá, menos yo, ¡Jake dice que todos tienen un papi!—dijo ella triste, la verdad me mataba verla así, pero no podía decirle la verdad, era demasiado para que ella lo comprendiera no importaba lo inteligente que fuera.

—Papi, se fue de viaje, hace mucho tiempo, muy, muy lejos— mentí descaradamente.

La verdad, me dolía tanto, mentirle, pero ella apenas tiene cuatro años, no puedo decirle "Hey, tu padre puede ser cualquier tipo, que dono un espermatozoide al hospital, porque no tenía nada que hacer y yo quería un hijo"

—Ya tienes tu bolsa con tu ropa, recuerda que vas a ir el fin de semana con Abuelita Esme—dije cambiando de tema rápidamente

—¡Sí, ya quiero ir a la playa!—dijo ella sonriendo, pero yo sabía que este tema no lo iba a olvidar tan fácil, la conocía, ella era demasiado terca, igual o peor que yo.

—Esme—dije abriendo la puerta, abrazándola,— ¿como estas?, ¡te he extrañado tanto!—

— ¡Yo también cariño, te he extrañado mucho!—dijo ella

—¡Abuelita Esme!—dijo mi pequeña Renesmee, ella adora a Esme, igual que Esme a ella.

—¿Pero mira quien está aquí?, no es nada menos que mi pequeña, ven a darle un abrazo a tu querida abuelita—dijo ella tomando en brazos a mi niña

En realidad Esme, no era la abuelita de Renesmee. Esme es mi tía. Cuando yo tenía 16 años mis padres Charlie y Renee Swan tuvieron un accidente automovilístico. Cuando me entere caí en una total depresión. Dado que Esme era mi único familiar cercano quede a su custodia, ella es la mujer más maravillosa que he conocida, y ella al igual que mi madre han sido mi ejemplo a seguir. Ella junto con mi tío Carlisle y mis primos los gemelos Rosalie y Jasper son como mi familia. Esme y Carlisle fueron para mí unos segundos padres y Rosalie y Jasper siempre han sido como mis hermanos y por supuesto mis mejores amigos.

—¡Claro y a mi ningún "te extrañe mucho Rose" o "¿como estas, Rose?" "¿Te sacaste la lotería, Rose?", ni nada de eso!— Dijo una voz detrás de mí. Solo una chica pudiera sonar tan femenina y atemorizante a la vez.

—Hola Rosalie— dije rodando los ojos — también te extrañado, hace menos de 24 cuatro horas que no te veo.—

—Lo sé, es difícil vivir sin mí— y solo una chica puede tener en su voz tanta egocentricidad y sarcasmo.

—¡Que egocéntrica!—bromee — ¡O vamos ven para acá!— la abrace, en realidad si la había extrañado, pero no quería aumentarle el ego.

—¿Y Jasper?—quise saber

—En el auto, Está un poco enojado el hippie, está hablando con María, esta le reclama por que termino con ella. — Rosalie bufo. —Como si el planeara regresar con ella, ¡la muy zorra se metió con su jefe!

—Ya era hora que terminara con ella, me daba mala espina— admití.

—Lo sé, yo se lo había advertido, pero él es demasiado calmado, en serio es demasiado pacifista para su propio bien. — refunfuño.

Rosalie y Jasper Cullen, eran unos mellizos casi idénticos, los dos son de cabellera rubia, piel pálida y ojos cielo, eran completamente guapos (por no decir hermosos). Pero a pesar de ser gemelos eran completamente y totalmente diferentes. Rosalie tenía un carácter explosivo y dominante. Cuando quería conseguir algo, no lo pedía, luchaba uñas y garras para conseguirlo, seguía su instinto, le fascinan los autos y la rapidez, aunque con Titanic llora a mares. En cambio Jasper, como bien decía Rosalie, era todo un pacifista y era muy calmado, siempre podría hacer sentirte con tranquilidad y paz.

—¡Ven aquí con tu tía Rosie!,—dijo Rosalie, cuando Esme dejo libre a Renesmee, Rosalie adoraba a Renesmee.

—Creo que ya es hora de que nos vayamos—dijo Esme.

—¡Ven corazón, despídete de tu mamá!—abrí mis brazos para tomar en brazos a Renesmee.

—¡Hasta luego, mami! — dijo Renesmee ya en mis brazos, apreté un poco mi abrazo, no era muy común de mi despedirme de Renesmee, no me importa parecer una madre sobre protectora y chillona, me costaba dejarla ir.

—Hasta luego Bella, te aseguro volverá sana y salva. —Me aseguro Esme. — ¡A y por cierto!, Rosalie no vendrá con nosotros, así que cuídala de que no se emborrache y despierte en las vegas—bromeo Esme.

—¡Hey te oí!—grito Rosalie desde la cocina.

—Hasta luego— dije. Suspire mientras las veía alejarse por el jardín.

—¡Espera Abuelita, se me olido algo!—grito Renesmee a mitad de camino, luego corrió hacia mí, sin saber que podría habérsele olvidado me agache para estar a su altura

—Mami, me prometes una cosa—dijo Renesmee. Y yo sin saber por qué asentí

—Que cuando venga conoceré a mi papi—dijo ella, yo la mire a los ojos y le acaricie su mejilla melocotón.

—corazón, no puedo hacer eso—dije a duras penas, ella se encontraban con los ojos llorosos. Me partió el corazón.

—Por favor—dijo con voz quebrada, y yo no quería que llorara, no quería herirla, no podría hacerle daño.

—Está Bien—dije inconsciente de lo que acaba de aceptar.

Una esplendida sonrisa ilumino su rostro, me dio un beso en cada una de mi mejilla y se fue corriendo

—¡Hasta Luego mami, gracias, Te Amo!—grito desde la mano de Esme.

La verdad no tenía ni idea de lo que acababa de hacer, Estaba metida en un gran lio, le dije a mi hija, más bien le prometí, que al llegar conocería a su padre.

Pero había un minúsculo problema ¡No sabía quién demonios era!

—¡No puede ser!—Chillo Rosalie detrás de mí. Me pare para saber que sucedía, como si no tuviera ya grandes problemas.—¡Dime que no escuche, lo que escuche!—dijo ella

Con remordimiento, Yo asentí.

—¿Pero? ¿Por qué Bella? ¿Sabes lo que le has prometido? ¿Cómo te convenció de tal locura?— Pregunto sorprendida. Ni yo misma lo sabía.

—Yo… No lo sé, hace rato peleamos por lo mismo, luego pareció estar bien… pero entonces aparece con ojitos de corderito degollado, rompiendo a llorar…

—¡Y tú no te resistes a las lagrimas de ella! —Rose añadió. Me puse a pensar sobre eso. Era verdad no me resistía a sus lagrimas, pero mi hija rara la vez que llorara, ella más bien se defendía.

—¡Demonios! ¡Creo que me ha engañado! ¡Tenia que ser súper inteligente! —refunfuñe dándome cuenta del engaño ¡De mi propia hija!

—¡Ahora no importa eso! ¡¿Cómo le vamos a hacer Bella?! ¡No tenemos ni idea de cuál es el tipo! ¡Puede ser cualquiera! ¡Quizás está de viaje en Canadá! — grito exaltada. Y se dejo caer al sofá

—No lo sé—suspire dejándome también dejándome caer al sofá junto a ella.

—A menos que…—Un loco plan se estaba formando en mi mente. Pero la razón se había ido al supermercado y era demasiado tarde.

—A menos que, ¿qué?— Pregunto confusa.

—¿Ya saliste de vacaciones?— Pregunte. Ella asintió

—Bueno Rose ve preparando tu uniforme de enfermera—Dije mirándola cara a cara.

—Oh-Oh, ¿Hablas en serio?— pregunto.

—¡Oh Si Rose, Hablo muy enserio! —asegure.

—Mañana comenzamos—dije—¿Estas lista?—

Si cumpliría mi palabra, la promesa que le acabo de hacer a mi hija. Descubriría quien es su padre.