Hello, bueno soy nuevo en el lugar, etc, etc, etc. La verdad no sé si lo hago bien pero me gusta experimentar de vez en cuando y esta película en particular me fascinó, en fin, espero les guste, entretenga o al menos les de algo qué hacer hehe.


-Tranquilo, vas a estar bien, te juro que vas a estar bien- Alterada, preocupada y confundida al no saber con exactitud qué hacer, una pequeña coneja de ojos color violeta corría de un lado al otro por un apartamento, mientras que un jadeante y agotado zorro descansaba sobre la cama. A penas y se mantenía consciente. Su pelaje estaba empapado en sudor (Sé que los canidos no sudan por la piel pero bueno es un fic) constantemente se sobaba la cabeza tratando de tomar aire pero le era doloroso respirar.

-Aquí estoy Nick- Dijo Judy dejando un pequeño tazón lleno de agua en la mesa que estaba al lado de la cama –Tu temperatura es muy alta… Espero que esto te ayude un poco- Dijo temerosa, tomando un pañuelo y sumergiéndolo en el agua, para después pasarlo a la frente del zorro quien se estremeció al sentir el frío liquido contra su pelaje –Sabía que algo así te pasaría… ¿Por qué nunca me escuchas?- Las palabras de Judy no reflejaban otra cosa que preocupación aunque acompañada por ira, estaba molesta con Nick.

Al notar que el pañuelo en la cabeza no era suficiente, Judy empezó a recorrer el pecho de Nick con la esperanza de que mejorase, o en el peor de los casos empeorase. Hacía unos cuantos minutos que Judy lo había despojado de su camisa, lo más importante para ella era hacer que su temperatura corporal descendiera.

-J… Judy…- Escuchó débilmente, rápidamente dirigió toda su atención al rostro de Nick, quien finalmente había abierto levemente los ojos.

-Nick… Tienes que ir al hospital…-

-N… No… E… Escúchame ¿Quieres?- Respondió limpiando las lágrimas de Judy con su mano –Tal… Tal vez pienses que soy egoísta por hacer lo que hice… Pero no iba a dejar que fueras tú quien terminara así…-

-Había otras maneras- Dijo Judy sollozando –Había un lobo y un oso polar en nuestro equipo… Cualquiera de ellos pudo haberlo hecho… No tenías que ser tú…-

-T… Tampoco tú… Pero estabas dispuesta a zambullirte en vez de esperarlos…-

-¿Por qué no dejaste que lo hiciera?-

-No… No puedo decirlo-

-¡Nick deja de ser tan orgulloso! Ningún motivo es bueno para hacer esa estupidez- Replicó Judy conteniendo el impulso de golpearlo en el rostro.

-Hehe… Te equivocas zanahorias… Tengo un muy buen motivo- Respondió Nick embozando esa típica sonrisa que solía molestarla.

Aun a pesar de lo que decía, Judy no estaba del todo convencida de que estuviese hablando con cordura, en el estado en el que se encontraba Nick podía confundirse fácilmente.

-Ya basta… No es el momento para hablar de esto… Tengo que llevarte al hospital- Una vez más Judy retomaba su firmeza. Rápidamente fue hasta el armario que estaba en la habitación y busco la ropa que ella consideró más decente, aun a pesar del mal rato que estaba pasando, seguía odiando la ridícula camisa que Nick siempre usaba. Mientras tanto, el zorro seguía luchando consigo mismo, su cuerpo no lo obedecía del todo, la verdad era que no quería alejarse de Judy, no quería estar lejos de ella, pero a penas y podía moverse.

-Ven, te ayudaré a vestirte y nos iremos ¿De acuerdo?- Al ver que Nick empezó a moverse, Judy finalmente se sintió un poco aliviada de ver a su compañero y mejor amigo salir de la cama… Pero entonces todo empeoró.

-¡Aghhh!- Se quejó Nick en cuanto se sentó. Un dolor punzante le atravesaba el pecho, sus ojos estaban abiertos como platos y su respiración sonaba forzada y limitada. Con su mano apretaba fuertemente su pelaje tratando de respirar.

-¡Nick!-

-J… Ju… Judy… A-ayúdame… Por favor ayúdame…- Decía con la voz temblorosa. Nuevamente se había recostado, el dolor no desaparecía ni disminuía, solo se hacía más fuerte, como si se estuviese quemando desde dentro hacia fuera.

-Yo… Yo… Am… Espera aquí- La pequeña coneja estaba aterrada. Rápidamente corrió hasta la sala en donde había dejado su teléfono.

"No te vayas" Pensó viendo cómo salía por la puerta "Demonios… Duele mucho… Sé que tengo que ir al hospital… Pero no quiero dejarla… No quiero que me deje… Y si… ¿Y si es la última vez que la veo? No sé si pueda salir de esta... No se lo he dicho… Pero me siento peor de lo que me veo…" – (Suspiro) Tengo… Tengo que decírselo- A duras penas, y a costa de su propia salud, Nick finalmente se levantó de la cama. Los parpados le pesaban y su vista era borrosa. A como podía avanzaba por su habitación hasta la puerta, pero entonces se detuvo al escuchar los pasos de su compañera.

-Solo espera un poco y… ¡Nick!-

-Judy- Dijo débilmente antes de desplomarse hasta el suelo.

-¿En qué demonios piensas? Escucha ya llame una ambulancia… Llegarán aquí pronto, por favor resiste- Decía mientras lo ayudaba a levantarse y regresar a la cama.

-E… Espera… Hay… Hay algo que tengo que decirte…- Respondió Nick con dificultad.

-Sea lo que sea puede esperar-

-Claro que no…- Judy aun lo sujetaba, podía sentir cómo su temperatura volvía a subir.

-Nick estás ardiendo-

-Por favor ¡Escúchame!- Exclamó con las pocas fuerzas que tenía, al mismo tiempo que se sentaba sobre la cama hasta ver a Judy a los ojos –No… No me siento bien… En verdad nada bien… Y hay algo que quiero decirte…- A medida que hablaba sentía como si fuera a desmayarse en cualquier momento –Judy yo… Yo…-

-Nick por favor basta… Tienes que descansar… No quiero perderte…-

-Yo tampoco… Pero no quiero alejarme de ti…-

-¿Por qué no?-

"Es una locura que vaya a hacerlo… Seguramente creerá que estoy loco… Qué más da… Ya no tengo nada que perder…"

-Judy yo te…- Irónicamente, en el momento en el que empezó a hablar sintió como si su cuerpo entero se congelara, simplemente se desplomó hacia el frente, al verlo Judy rápidamente lo sujetó, evitando que terminase en el suelo.

-Te amo…- Eso fue lo último que escuchó, como un simple suspiró. Judy se quedó congelada, aun sostenía al zorro en sus hombros, era un shock total para ella, no sabía cómo reaccionar, no sabía qué hacer, estaba fuera de sí hasta que escuchó a alguien golpear la puerta, la ambulancia había llegado.

Todo fue un caos desde ahí. Judy fue en la ambulancia, solo veía cómo los doctores atendían al inconsciente zorro en la camilla. Durante todo el viaje Judy no dijo palabra alguna, solo veía a Nick fijamente, sus últimas palabras antes de desmayarse no dejaban de rondar su mente una y otra vez.

En cuanto arribaron al hospital Judy corrió detrás de la camilla por los pasillos, se mantenía cerca de Nick lo más que podía hasta que llegaron a urgencias.

-Lo siento, pero no puede entrar aquí- Dijo una Leona del equipo que había transportado a Nick.

-Pero él es…-

-Sin excepciones oficial… Lo siento-

No hubo otra opción más que esperar. Judy se sentó en la sala de espera, a menudo miraba el reloj, esperando que el tiempo avanzara más rápido, pero solo parecía ir más despacio. En un intento de distraerse sacó su celular y empezó a pasear por su galería de fotos, estaba repleta de fotografías de ella y Nick y de algunas escenas del crimen también, llevaban dos años trabajando juntos en Zootopia, la mejor pareja del ZPD.

-Se suponía que hoy tú invitarías el café…- Murmuró con una pequeña sonrisa, aunque también con lágrimas en los ojos –Después de trabajar te prometí que iríamos al cine…- Entre más hablaba su ánimo decaía más y más -¿Por qué dijiste eso? ¿Era verdad o solo estabas confundido?-

-Por favor Nick… No puedes dejarme así-


Bueno eso fue todo, espero les haya gustado. Según yo vea haré los capítulos más largos, hasta otra. Paz