Fui a la casa de Sango, estabamos felices por ir al centro comercial a vernos con... bueno la verdad no se con quién pero no hay nada como estar con tu mejor amiga...
- Kagome! vamos 1 hora tarde! -me dijo muy afanada.
Esperé a que se terminara de alistar y salimos rápidamente a coger el transporte.
Llegamos rápidamente al centro comercial, era uno de los más famosos de tokyo y la verdad nunca entendí porque.
- Centros comerciales... pff!- dije para mí misma
- Si lo sé, pero para él era la única opción- Me respondió sin esperar que me escuchara.
"él" pensé "creí que era mujer"
Entramos Corriendo como niñas pequeñas y subimos las escaleras eléctricas hasta un local de juegos.
Un muchacho muy apuesto estaba asomado por una de las barandas cerca a las escaleras y volteó lentamente hasta dónde nos encontrábamos sonriendo de una manera peculiar. Tenía el cabello largo y plateado que brillaba con el hermoso reflejo del día soleado y con una pañoleta roja q cubría su cabeza, su mirada tenía algo especial... era demasiado intrigante, me sumergí en ella unos segundos sin poder desviarla.
-Hola!- dijo Sango algo entusiasmada.
- La famosa Kagome!- dijo dirigiéndose a mí.
- famosa?- pregunté mientras sentía como mis mejillas se tornaban de un color rojizo.
- No sabes cono Sango y Kagura me han hablado de ti!-
-En serio?- me dirigí un poco enojada hacia Sango.
- Ehh... si!- dijo apenada - Por cierto! Kagura no puede venir, se le presento un problema a última hora- mencionó cambiando el tema.
Comencé a mirar el local de juegos con el entusiasmo de jugar alguna vez sin darme cuenta que el amigo de Sango me observaba.
-Vamos!- Me dijo mientras me halaba de una mano.
Entramos y observe los precios que estaban en la ventanilla de compra.
-Wow!, Es muy costoso!- Dije sorprendida.
- Si!- Respondió Sango también sorprendida.
-No importa!- Dijo el NN.
"Su nombre" Pensé… "No se lo eh preguntado"
-Juguemos ese!- Señalo NN entusiasmado señalando un juego de disparos,
Corrí aun mas entusiasmada hacia allá.
Metimos la tarjeta y cogi una de esas grandes armas tratando de apuntar sin imaginar que fueran tan pesadas, trate de cogerla con cuidado y de repente sentí como me rodeaban unos brazos detrás mio y de repende unas fuertes manos que tocaban las mías y cogían el arma con más estabilidad.
- Te ayudo?- Reconocí quien era mientras mis mejillas de nuevo se tornaban rojas.
-Eh.. Si…- Dije nerviosa.
Y Comenzó a disparar cada uno de esos zombies, se veía como caian rapidamente, aunque NN no era tan bueno jugando como pensé.
Salimos los 3 rápidamente de ahí ya que nos quedamos sin dinero y comenzamos a recorrer el centro comercial, todo el tiempo me abrazó y me miraba de forma extraña. Estábamos corriendo escondiéndonos de Sango para molestarla y mientras nos asomábamos cuidadosamente, él comenzó a observarme y de nuevo quedé sumergida en sus hermosos ojos miel… Desvié rápidamente la mirada y comencé a correr me cogió y me abrazó, "No podrás escapar" me dijo al oído, y comencé a caminar él me siguió y me abrazó por la cintura, los dos sonriendo y yo sonrojada.
De repente sentí un beso en la mejilla.
- Cariño, despierta- Me dijo papá despertándome de mi profundo sueño. –Ya es hora de ir al Colegio-
Me levanté y me despedí de mi papá que arrancaba para el trabajo.
-Ese recuerdo…- Dije para mi misma.
-Algo que nunca olvidaré-
