Todos Los Personajes no me pertenecen. Solo me adjudico la Historia, Todo lo demas pertenece a

Aburrido día en una aburrida ciudad, en un aburrido instituto. Nada entretenido. Ecepto ella Emily Beckett, una chica alta de cabellera Oscura, que caía hasta por debajo de sus generosos senos cada vez que se posaba frente a mi quedaba embobado mirándola pero ella huía cada vez que nos encontrábamos frente a frente

— ¡Edward! — al escuchar su voz sonreí y luego trate de ocultar mi rostro en mis cuadernos, me quede ahí hasta que estos fueron sacados dejándome expuesto

—Bella — dije con una sonrisa aun con mi cabeza recostada en la mesa de la cafetería, como respuesta sentí algo caer en la mesa y el eco llego a mis oídos

—Sabes tienes que cambiar esa actitud tuya sobre todo cuando quieres conquistar a una chica, escuche en el baño a Emily hablando con una chica y adivina— en el instante que escuche el nombre de Emily levante con rapidez mi cabeza y la mire expectante

—Bella, dime que escuchaste, prometo hacerte todos tus deberes del día de hoy — al ver su sonrisa triunfante supe que continuaría su relato

—Edward, ella te teme. La cohíbes cada vez que te le quedas mirando como un idiota y aun mas a tu reputación como mujeriego, teme ser la siguiente en tu lista de conquistas y la siguiente con el corazón roto— Termino su relato llevándose un pedazo de su emparedado a la boca

—Pero…

—Edward, come después pensaremos en algo— Dijo con simpleza mientras continuaba disfrutando su emparedado

Mire la comida que se encontraba frente a mi y al instante el estomago se me cerro en forma automática. Me levante de mi asiento dispuesto de salir de ese lugar, para buscar a la chica de mis sueños

—Bella, no puedo lo lamento mucho, nos vemos— Dije saliendo de ese lugar dejando mi amiga comiendo sola y a mi almuerzo abandonado

Camine por todos los pasillos del instituto hasta que me quede en una ventana viendo como llovía en la ciudad de Chicago, suspire apoyando mi frente en la ventana pensando en que la única chica que de verdad que quiero me teme. Suspire y camine hacia el estacionamiento

Durante mi caminata pude encontrarme con Jessica Stanley, le sonreí seductoramente y pase mi brazo por su cintura ella sonrío recargando su cabeza en mi hombro

—Te Necesito. Ahora mas que nunca —Le Susurre Abrazando su cuerpo al mío sin ningún deseo Sexual, cosa que me desconcertó

—Ed ¿Qué sucede, amor? — Me susurro tomando mi rostro entre sus manos. No le respondí solo junte mis labios a los suyos con impaciencia

La levante por la cintura y ella automáticamente enrollo sus piernas alrededor de mi cintura, la acorrale a la pared aun besando sus labios ansiando los de otra chica la cual me temía.

Jess con impaciencia comenzó a desabrochar mi Camisa, mientras mis labios hacían un recorrido por su cuello y clavícula. Cuando ella ya tenia mi camisa fuera de mi cuerpo fui conciente donde nos encontrábamos desnudándonos, me separe de ella

—Lo lamento— Le Susurre bajándola de mi cintura bese con ternura sus labios para que no se ofendiera por mi actitud

Pero ella rodeo mi cuello con sus brazo, sentí como sus labios me pedían entrar a mi boca acepte a regañadientes, su lengua entro con timidez dentro de mi boca sonreí ante su timidez, rodee su cintura con mis brazos abrazándola con fuerza aun cuando nuestros labios estaban juntos

Cuando me disponía a nuevamente levantarla sentimos un golpe a nuestro alrededor, nos separamos abruptamente. Para encontrarnos con una escena que jamás pensé que presenciaría

Emily se encontraba tirada en el piso con todos sus libros alrededor de ella mientras trabaja de ocultar su rostro. Sin mirar a mi acompañante Corrí a socorrer a Emily

— ¡Ey Que Sucede contigo! — Le grite a la chica que salio huyendo en el instante que hice acto de presencia. Suspire controlando mi rabia y preocupándome de la joven que se encontraba temblando en el suelo helado

—Emily, pequeña ¿estas bien? ¿No Te Hizo nada? — Le pregunte nervioso por su mirada perdida trate de atraerla hacia mi pera ella puso sus manos frente de ella esquivándome

—No te Hare daño, lo prometo solo quiero ayudarte por favor déjame hacerlo—Le Susurre con cariño acariciando su cabello con ternura para nuevamente tratar de atraerla hacia mi pero esta vez nuevamente me Alejo de su lado

—No por favor…déjame sola, estoy bien solo…Necesito —Susurro atropelladamente mientras trataba de recoger todos sus libros con rapidez

—Emily, por favor déjame ayudarte. Te llevare a tu casa no creo que estés en condiciones de seguir en clases— Le suplique ayudándola con todos sus libros

—No Edward, no quiero sufrir por favor, déjame— En ese instante tiro todos sus libros y se abrazo a mi para llorar en mi torso aun desnudo. Desconcertado por su confesión la abrace con fuerza sin decir una sola palabra solo acariciando su cabello que tantas veces había soñado acariciar

—No te dejare así, Por favor escúchame. No te Hare daño lo prometo, vamos te llevare a tu casa— Le asegure tomando los libros que había tirado y ayudándola a levantarse del piso

La rodee con mi brazo por su hombro en señal de protección, caminamos hacia la salida y durante el camino recogí con timidez mi camisa que aun se encontraba tirada en el suelo. En ese momento me di cuenta e que Jessica había desparecido en el mismo instante en que atacaron a Emily

Cuando llegamos a mi auto ayude a subir a una asustada Emily al asiento del Co-Piloto. Luego corrí hacia el otro lado del auto mientras me abrochaba mi camisa que se encontraba abierta luego de ponérmela cuando salve a la persona que se encontraba sentada en mi auto

—Emily, cuéntame por favor que sucedió ahí dentro, ¿Quién es ella? ¿Por qué te estaba golpeando? Confía en mi no le diré a nadie— Le suplique mientras ponía en marcha el auto saliendo del Instituto

—Mi hermana. Mi padre le dijo que no y esperaba a que yo le hiciera cambiar de opinión pero no fue así. Y mi castigo son los golpes —Confeso con lentitud mientras las lágrimas se comenzaban a asomar por sus ojos para luego bajar por sus mejillas. Trate de atraerla hacia mi pero ella no me dejo

—Lo Lamento, de verdad. No puedo decir lo mismo, mi relación con mi hermana es casi perfecta. Jamás nos hemos levantado la mano aunque ella sea la regalona e mi padre. Pero la verdad no tengo nada de lo cual quejarme — Le conté tratando de iniciar una conversación con ella

—yo no se lo que es tener una Armonía entre Hermana, cuando éramos mas pequeñas nos llevábamos bien, bueno jamás me golpeo pero cuando comenzamos a crecer todo fue cambiando se dio cuenta de la influencia que tenia en nuestro padre y lo trato de usar a su favor…

—Lo lamento no me puedo imaginar todo lo que has tenido que soportar. Pero quiero que sepas que quiero ser tu amigo. Se que hay muchos rumores en torno a mi pero quiero que sepas que no todo lo que se dice es verdad. Puedes confiar en mí. Lo prometo — Le susurre deteniendo el auto y tomando sus manos entre las mías para luego llevármelas a los labios

—Edward, no puedo lo lamento de verdad. Déjame aquí ya has hecho mucho por mi de verdad. Aquí podré tomar el próximo autobús o podré llamar a mi padre para que me deje en mi casa. De verdad, Gracias — Dijo saliendo del auto, mire por la ventana y me di cuenta que llovía aun con mas intensidad que cuando salimos del instituto

Apenas salio de nuestro refugio se mojo al instante quedando totalmente empapada. Salí detrás de ella para hacerla desistir sobre su locura y que volviera al auto para llevarla sana y salva a su casa

—Vamos Emily, vuelve al auto de verdad no me molesta nada—Le dije también mojándome a causa de la lluvia

—No vete tu a clases, no quiero que me vean contigo, que se supone que le diré a todos cuando me vean con el rompecorazones, No quiero ser la siguiente, Edward, ¡No Quiero! — Exclamo

— ¿Qué rayos te han contado sobre mi?, Ana. Lo prometo, nada de eso es cierto— Le asegure, sabiendo que todo eso era mentira

—Este seguro, por que podría jurar que antes que me ayudaras estabas con Jessica Stanley y la verdad hay que tener dos dedos de frente para saber que estaban haciendo los dos. Mi hermana me golpea pero no soy tonta. No seré la próxima en tu lista —Dijo caminado en medio de la lluvia

—Estas loca, no puedes arriesgar un resfriado simplemente por que estaba con Jessica. A parte quien te dijo que quiero ser algo más que tu amigo — Le mentí para lograr que ella volviera a subir a mi auto

Emily se detuvo en medio de la calle y se volteo para mirarme directamente a los ojos. Suspire y camine lentamente a su encuentro cuando llegue a su lado la abrase con fuerza, aun cuando nuestros cuerpos se encontraban mojados a causa de la lluvia que seguía cayendo enzima de nuestras cabezas

—Promételo, Edward, lo necesito. Necesito saber que no seguiré sufriendo— Murmuro contra mi pecho

—Lo prometo ahora vámonos de aquí antes de que los dos nos enfermemos— La abrace llevándonos de vuelta a mi auto cuando llegamos a el ambos destornudamos

—Fabuloso ahora me enfermare— Dije con sarcasmo refregándome la nariz que me comenzaba a irritar a causa del reciente destornudo

—Lo lamento por mi berrinche solo que…

—Deja de disculparte, ya lo has hecho muchas veces por hoy. Ahora déjame llevarte a tu casa para después ir a la mía y cambiarme esta ropa mojada — le dije poniendo nuevamente el auto en marcha

Durante todo el transcurso con Emily no intercambiamos ninguna palabra solo escuchaba su palabra cuando ella me daba las instrucciones para llegar a su hogar. Cuando llegamos se despidió con un seco "Adiós" y luego bajo de mi auto corriendo hacia la puerta para luego entrar a su casa sin mirar atrás

Conduje rápidamente hacia mi hogar donde entre tímidamente esperando que nadie se encontrara en casa para no tener que dar explicaciones de porque no estaba en el instituto y porque me encontraba completamente empapado. Pero para mi mala suerte mientras comenzaba a subir las escaleras sentí los pasos de mi madre detrás de mis espaldas

— ¡Edward, por dios santo están Empapado! — Cerré con fuerza los ojos, para voltearme y ver a mi madre que estaba a los pies de la escalera, con una no muy amigable expresión en la cara

Esme Cullen era en muchos aspectos una madre estricta pero muy amorosa con nosotros, Sus ojos verdes al igual que los míos eran el reflejo de preocupación. De estatura media, aunque su altura seguía siendo pequeña en comparación a la mía ya que me llegaba a los hombros

— Mamá, de verdad no es nada de que preocuparte me iré a cambiar y volveré…—Pero fui detenido por un ruidoso estornudo que fue seguido por otro

—Instituto— Dije terminando mi frase con una Sonrisa, Mi madre puso sus manos alrededor de su cintura mirándome algo molesta. Pero luego suspiro moviendo su cabeza

— Ve a cambiarte te pones pijama, bajas para que te de algo y te vas a acostar. Ah y óyeme bien jovencito, olvídate de tus salidas de aquí hasta la próxima semana— Dijo mirándome seriamente asentí sin decir una sola palabra subiendo en silencio a mi cuarto

Rayos, una semana sin salir y todo por Emily Beckett. Cuando llegue a mi habitación me tire a la cama sonriendo con un idiota al recordar su cuerpo junto al mío. Pero un nuevo destornudo me hizo recordar que aun me encontraba los la ropa mojada, me levante con rapidez sacando mi pijama debajo de mi almohada. Y me lo coloque con la misma rapidez con la que me levante de mi cama

—Ya me encuentro listo para la matanza, comienza— Le dije sentándome en una de las sillas de la cocina, mi madre no dijo nada solo se volteo a dejarme una pastilla al lado de un baso de agua

—Ahora comienza a hablar, porque no estas en el instituto. Y supongo que le avisaste a tu hermana que te venias antes—Dijo sentándose frente a mi, en ese instante recordé que era el encargado de trasportar a mi hermana de la casa al instituto, y del instituto a la casa

—Rayos, Alice— Maldije poniendo mi mano en mi frente cerrando mis ojos con fuerza para no exponerme a las recriminaciones de mi madre por mi responsabilidad con ella, mamá suspiro con cansancio

—Le avisare a tu padre para que la traiga después del instituto. Pero escúchame bien Edward, que sea la ultima vez no te acostumbres— Dijo Molesta levantándose de su asiento

—Ah, y otra cosa mas, Ed. Tu familia esta primero y tus responsabilidades con ella, no debes reemplazarlas por tus andazas con quien sabe quien— Termino su discurso con un tono molesto

—Mamá lo lamento, no volverá a suceder solo que una amiga necesitaba que la llevaran a su casa no se sentía bien y pues no pude negarme. Te lo prometo — Le dije con una sonrisa tratando de suavizar su estado de animo

—Bien, ya tendremos la oportunidad de hablar de esa amiguita tuya ahora vete a acostar, es mejor cuidar ese resfriado desde ahora que cuando empeore— Me dijo con dulzura besando mi frente. Asentí subiendo las escaleras pero mi recorrido fue interrumpido por un nuevo destornudo

—Yo no fui—grite cómicamente terminando el recorrido de las escaleras corriendo ansiando con ferocidad mi cama

Cuando por fin me encontré dentro de mi cama me tape literalmente hasta las orejas para luego comenzar a temblar a causa del frío al cual estuve expuesta. Y de pronto recordé que no le había pedido el número de teléfono a Emily, me maldije internamente

Me quede en mi cama quieto pensando en todo lo que había pasado de pronto recordé que había hablado con la chica que me gustaba. Pero no en las mejores circunstancias que huera deseado desde que descubrí que me sentía atraído por ella, no fui conciente cuando el sueño se fue apoderando de mi cuerpo hasta que me quede profundamente dormido

—Me debes un gran Edward. Vamos despierta— Sentí una vocecita muy a lo lejos pero me voltee enrollándome el doble y cubriéndome del frío mucho mejor

— ¡Edward!, vamos despierta— Esta vez la vocecita vino con pequeños movimiento. Suspire sabiendo de quien se podría tratar esos movimientos con la combinación de esa pequeña voz

—Alice, querida que deseas de mi — Susurre aun dentro de mi capullo formado por las sabanas de mi cama

—Me Abandonaste en medio de la lluvia, me sentí muy mal — Me recrimino aun dando pequeños saltitos sobre mi cama. Gruñí tratando de darla a entender que dejara de hacer eso pero para mi hermana mis gruñidos eran señal de continuar haciéndolo y más aun cuando estaba molesta conmigo

—Lo lamento Ali, de verdad se me olvido. Tuve que ayudar a una amiga y la verdad termine empapado hasta el trasero y cuando volví para cambiarme pensaba volver al instituto pero mamá no me dejo. Lo prometo — Le explique finalizando con un nuevo y sonoro destornudo

— ¡EDWARD, TE ENFERMASTE!, Aléjate de mi portador de gérmenes, ¿Dónde rayos estuviste para enfermarte?, ya sal de tu refugio en forma de sabanas, mamá me mando a servirte tu comida — Suspire. Espere a que el peso de las sabanas se aflojara para después rodar sobre mi mismo para volver a quedar libre y sentarme en mi cama

Alice, me miro con una sonrisa malévola en sus ojos y supe que lo que traía en esa bandeja no era nada bueno, pero para mi alivio el plato solo consistía en un Plato de frutas y un Jugo, suspire aliviado ante la delicia de la comida

—Y Ahora comienza mi interrogatorio, ¿Quién fue esta vez?, Jessica, Samantha o Tal vez esa chica que no te toma en cuenta ¿Cómo se llamaba?, la hermana de Julie Beckett — Dijo frunciendo el seño tratando de recordar el nombre de la chica

—Emily —Dije con simpleza respondiendo a las dos de sus preguntas, cerré los ojos con fuerza y agache mi cabeza para no tener que soportar las recriminaciones de mi hermana menor

—Por que presiento que lo supe desde un principio— Me respondió recostándose a mi lado mirando el techo que estaba sobre nuestras cabezas

—Ali, tú jamás me mentirías, ¿Cierto? ¿Qué sabes de Julie Beckett? Alice todo lo que sepas tanto lo bueno como lo malo, debes decírmelo— Le suplique mirándola directamente a sus ojos que eran del mismo color que los míos

—Ed, solo se que… ¡OH, rayos!, se que su relación con su hermana no es de las mejores. Jasper Hale se junta con ella parecen muy buenos…Amigos— Termino en un susurro apenas audible. Suspire ante la mención de Jasper

El y mi hermana habían mantenido una larga y estable relación hace un par de meses pero de la nada todo comenzó a complicarse entre ellos hasta que un día mi hermana llego llorando y fue directo a su habitación donde se encerró durante toda la noche a llorar por las ruptura del hombre que aun ama. Y hasta el día de hoy nadie de la familia sabe el porque del quiebre entre ambos

—Jasper y ella…

—Sep, La verdad no se que es lo que hay entre ambos pero de todas formas tampoco quiero saberlo ya es doloroso saber que el esta con ella— Dijo levantándose de mi cama para dirigirse hacia la salida de mi habitación

—Bella, vendrá en la tarde A que le hagas un favor. O al menos eso me dijo. Nos vemos— Dijo antes de salir cerrando la puerta Tras de si

—No es posible, Ed. Conozco a Julie es incapaz de golpear a su hermana, okay su relación no es de las mejores, como todos los hermanos cierto. Pero Jamás golpearía a su hermana— Defendió Bella a Julie, enojado por su actitud me levante de mi cama descalzo y comencé a caminar por toda mi habitación en círculos

—Bella, es verdad tanto Jessica como yo vimos como Julie Beckett golpeaba a su hermana en la mitad del pasillo y no parecía que adorara a su hermana. La chica huyo cuando fui a socorrerla — Dije caminando de un lado hacia otro como león enjaulado

—A Ver déjame ver si entendí, ¿Qué rayos hacías con Jessica Stanley?

—Eso no importa ahora lo que importa es que Julie si golpea a su hermana yo fui testigo de aquello, y aun mas al parecer ella se junta con Jasper— Dije cambiando de tema rápidamente, ya que no quería dar explicaciones sobre mi vida sexual

—No me cambies el tema, muchacho. Prometiste que no volverías a dormir con ella después de lo que sucedió la última vez o quieres que te lo recuerde. Tu nunca aprendes eres capaz de trompezar dos veces con la misma piedra— Me critico recordando algo que yo ya tenia olvidado en lo mas profundo de mi cerebro

—Bella, no volverá a suceder lo prometo. Aprendo de mis errores aunque no se note. De verdad — Le prometí tratando de dejar ese tema de lado para concentrarnos en Emily

—Bien por primera vez en mi vida te creeré. Ahora volvamos al tema en discusión— Dijo cruzándose de piernas en mi cama

—Desearía saber mas sobre ambas porque la actitud de Julie, todo esto es muy raro debe haber algo oculto—Un nuevo destornudo me recordó en las condiciones en las que me encontraba

—A la cama, Ahora

—Vamos, Bella no puedes estar hablando en serio necesito salir de aquí y descubrir la verdad de todo esto— Le dije. Nuevamente destornudando. Suspire dándole la razón y desplazando mi misión de descubrir la verdad

—Bien y ¿Ahora que? Quieres que te diga la verdad. No se que pensar pensé que al momento de querer conquistara Emily, seria de otra manera. Pero óyeme bien Bella, averiguare la verdad detrás de todo esto. Y no estaré con nadie más desde entonces solo Será Emily en mi vida — Termine mi discurso tapándome hasta las narices

—Edward, no sabes cuantas veces ya eh escuchado eso salir de tus labios. Ya no te creo con respeto a tu vida Sexual— me dijo levantándose de mi cama mirando el suelo

—Lamento que no me creas de verdad. Pero prometo que descubriré la verdad detrás de todo esto. Y óyeme bien Bella, estoy seguro de lo que vi y yo vi a Julie golpeando a su hermana. Y apenas mi madre me deje levantarme descubriré la verdad detrás de toda esta basura —Bella suspire saliendo de mi habitación cerrando la puerta detrás de si

Había pasado una semana desde que había sido testigo de cómo Julie golpeaba a su hermana en la mitad del pasillo del instituto y también una semana dese que no asistía a clases por causa de la maldita gripe. Según lo que Alice me contaba Emily seguía asistiendo a clases y más de una vez la habían enviado a casa a causa de la fiebre

—Edward, te puedes apurar. Necesito llegar temprano por primera y única vez al instituto. Y aun mas tenemos que pasar a buscar a Bella— me grito Alice desde el comedor

Salte espantado para tomar con rapidez mi gorro y una manzana. Me despedí de mi madre la cual me entrego las llaves de mi auto le sonreí como respuesta. Cuando entre al auto suspire poniendo mi auto en marcha para ponerme frente a mi casa y tocarle la bocina a mi hermana para que entrara al auto

—Bien y ahora vamos rápido por Bella. ¡Rápido!. De verdad Edward quiero llegar al instituto — Me apresuro, mi hermana dándome pequeños golpecito en mi pierna en señar que partiera con Rapidez

La mire como si estuviera loca pero ella aumento el ritmo de los golpes. Partí con rapidez para luego pasar a buscar a Bella en una velocidad record y en la misma velocidad llegamos al instituto apenas me estacione. Alice salio rápidamente sin despedirse de nadie para desaparecer con rapidez por la puerta del instituto

— ¿Qué rayos le sucede a tu hermana la enana? —Me pregunto Bella, pasando al asiento delantero y mirando hacia la puerta por donde mi hermana había desaparecido con rapidez

—Es Alice— respondí con simpleza, saliendo del auto poniéndome el gorro de mí abrigo para taparme de la reciente llovizna del exterior

Caminamos en silencio por los pasillos del instituto y yo en mí interior no dejaba de pensar en donde se encontraría Emily en estos instantes. Mientras yo me trasladaba por los pasillos del aburrido instituto

—Edward, deja de mi mirar por todos lados pareces Jirafa, te crecerá el cuello. Mira en algún momento te la encontraras. Pero mira quien viene ahí. Cumple tu promesa— me dijo amenazadoramente adelantando el paso, cuando frente a mi la imagen de Jessica quien me sonreía abiertamente

—Ahora podremos hablar tranquilamente por lo que sucedió ayer— Me dijo tomando mi mano y guiándome hacia un lugar desconocido

Me deje guiar y me di cuenta que Jessica nos llevaba hacia el estacionamiento donde por suerte hacia dejado de llover, Por un instante quise que continuara lloviendo por que Jess Tendría que hablarme al frente de todos los estudiante que de pronto comenzaron a llegar

—Jess, ¿Qué hacemos aquí afuera podemos hablar bien adentro? La verdad no quiero enfermarme de nuevo. Volvamos a dentro— Le dije un poco incomodo por la expresión de Jess

—La verdad no quiero entrar a clases, no sin haces esto— Me susurro antes de acercar sus labios a los míos. Sin pensar en lo que hacia comencé a mover mis labios al compás de los suyos

Jess me abrazo por mi cuello en el instante que yo posicionaba mis manos en su cintura. La arrincone en el que supuse que era su auto. Jess gimió en mis labios mientras abrazaba mi cintura con su pierna, baje con lentitud mi mano desde su cintura hasta su pierna sin despegarme ni un segundo de sus labios

—Edward, Por...Favor— Gimió en mi cuello cuando mis manos hicieron un recorrido por su centro encima de su ropa la cual se encontraba ligeramente húmeda a causa de su Excitación

—No tengo preservativo— respondí. Continuando con mi labor en su centro

—Sexo oral, puede ser una gran opción. Pero te lo pido no me dejes así, excitada deseando que tu pene entre en mi— Me susurro acariciándome lentamente. Gemí acercándola a mí para que sintiera como me tenía sus caricias. Como respuesta recibí un pequeño gritito que salio de su boca

Sonreí con gusto ante su respuesta, desabroche con rapidez sus jeans para adéntrame en su ropa interior para poder acariciarla mas de cerca. Jess, grito un poco mas fuerte, aun así en esos momento no había nadie en el estacionamiento. Jessica me miro desafiante y desabrocho con lentitud mi pantalón, besando seductoramente mi cuello. Introdujo su mano con lentitud para tomar mi miembro el cual se encontraba completamente excitado, comenzó a acariciarlo de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba, cuando aun se encontraba con su mano dentro de mi ropa interior

—Vamos a un lugar mas privado— Le susurre comenzando a penetrarla lentamente con dos dedos

—Aja— Esa fue su simple respuesta

Jess, dejo libre mi miembro el cual extraño al instante su contacto. Saco algo de sus bolsillos; las llaves de su auto. Sonreí sacando también mi mano de su interior, la joven cerró sus ojos ante la ausencia de mis dedos. Tome las llaves de sus manos y abrí con rapidez las puerta del auto para luego introducirme en el asiento trasero, en ese instante mi miembro me ardía por encontrarse encerrado a través de mis pantalones

—Veo que alguien se encuentra algo ansioso — dijo burlona hincándose a mi lado sacando finalmente mi muy erecto miembro de mis pantalones para metérselo a la boca

— ¡Rayos! — Grite ante las sensaciones que producían su boca en mí

— ¿Te Gusta? — Me pregunto con inocencia volviendo a introducirme en su boca. Puse mis manos en cabellera marcando el ritmo de las penetradas en su boca, Trate de controlar los gemidos pero eso fui imposible de pronto me vi dándole estocadas casi brutales a la boca de Jess y gimiendo cada vez mas alto

—Edward, tienes que tener mas consideración con una chica — Dijo un poco molesta por mi falta de consideración atraje sus labios a los míos y la levante para sentarla a ahorcada mía

Bese sus labios con lentitud hasta que me aburrí y entre con rapidez dentro de su boca sin pedir permiso Jessica gimió en mi boca cuando comenzó a refregarse en mi miembro que de pronto comenzó a volver a la vida. Levante su playera para dejarla solamente en ropa interior, bese su cuello haciendo un recorrido de el hasta el inicio de sus senos los cuales se movían agitadamente a causa de la agitada respiración de su dueña

— ¡Edward! — Me quede helado en el momento que escuche su voz

—Emily puedo…

Pero ella solo negó con la cabeza en el instante que algunas lágrimas comenzaron a asomarse por sus hermosos ojos

—Jessica, lo lamento— le dije saliendo con rapidez del auto, mientras me abrochaba los pantalones en el camino

Corrí donde hacia pocos momentos Emily había corrido a causa de cómo me había encontrada con Jessica. Camine por todo el estacionamiento pero no había señales de ella en todo tu extensión. Gruñí desesperado ante no encontrarla por ningún lado para explicarle algo que no tenia ningún tipo de explicación

De pronto mi mente se ilumino y la encontré sentada en el suelo al lado del auto de su hermana tenia los brazos alrededor de sus rodillas mientras que su cabeza la tenia entremedio de estas. Suspire acercándome a paso lento a un lado de ella

—Pequeña, lo lamento tanto. La verdad no se como explicarte algo que no tiene explicación alguna…—Le susurre sentándome a su lado apoyando mis manos en canda una de sus rodillas. Pensé que ella evitaría mi tacto pero me equivoque

—Fui una tonta al pensar que tú me podrías querer. Por favor es cosa de míranos. Somos totalmente diferentes —Susurro levantando su cabeza con lentitud sus ojos se encontraban irritados a causa de sus seguro llanto

—óyeme bien. Te quiero de verdad mucho más de lo que te puedas imaginar. Oye mi corazón— le susurre juntando sus manos y colocándolas cerca de mi corazón para que oyera los latidos de este que estaban mas rápido de costumbre

—Tengo miedo, no puedo permitirme sufrir por alguien que no vale la pena, y tú eres una de esas personas. Mi hermana me dijo…— me recrimino levantándose con fiereza

— ¿Qué demonio te dijo tu hermana? Ella no sabe nada sobre mí

— ¿nada?, te acostaste con ella hace menos de un año y ahora pretendes acostarte con su hermana menos, Que bonito— ironizo. Cuando nuevas lagrimas brotaron de sus ojos

Me congele ante la confesión de mi amada. ¿Realmente me había acostado con su hermana? La respuesta de mi cabeza que probablemente si lo había hecho. La mire a los ojos tratando de que no viera la verdad detrás de ellos

—Eres un maldito. Y temo enamorarme de ti—Me dijo hincándose a mi lado y tomando mi rostro entre sus manos

—No temas. Haré una promesa seré fiel a ti aunque aun no seamos nada formal. Te quiero y se que si seguimos así podremos enamorarnos — Dije sonriendo ante la idea

Ella sonrió besando mi mejilla con dulzura. Ahora tenía una razón más para cumplir mi promesa con Bella

Espero de Todo corazón que les guste la historia. Espero sus Opiniones para Saber Si La Continuo o simplemente dejo de trabajar en ella.

Byee, Saludos