Disclaimer: Digimon y sus personajes no me pertenecen.

Pareja: KenXTakeru, Kenkeru, Sorato.

Advertencias: como casi todas mis historias de digimon, contiene Shonen-ai. Si no te gusta no leas. Universo semi-alterno.

Gracias.

Han pasado dos años desde que derrotaron a Malon-miotismon. Pero ahora un nuevo peligro amenaza el digimundo y la aparición de Dos nuevos digidestinados (Matt y Takeru) vienen a poner su mundo de cabeza.

Ken le observo pasar, sí, mirarlo… ese era un pequeño gusto que se daba ya desde hace casi seis meses. – Suspiro algo sonrojado - ¡No era justo! Que fueran en grados diferentes siendo de la misma edad! ¡Además el era un niño genio también!—solo que a diferencia de él, sus papás se habían negado a pasarle de año… ellos y sus ideas de que debía tener una infancia normal. ¡Sí ya tenia casi 15 años!

¿Otra vez mirando al chico Ishida?— le pregunto Davis, Ken negó moviendo la cabeza con las mejillas sonrojadas—

¡NO! — grito mientras daba un par de pasos hacia atrás—

¡Cuidado!— le advirtió Davis antes de irse de bruces al suelo—

Auch— se quejo la Castaña — te dije hace un día de estos, que este enamoramiento tuyo ¡iba a lastimar a alguien!— le susurro mientras se levantaba y masajeaba su brazo—

¡Sora!— le reclamo tapándole la boca—

Igual no se que le vez— susurro Davis divertido — observando a los dos chicos Ishida dirigirse a su salón. Ambos iban en segundo año, en primer lugar estaba Yamatto, quien debía ir en tercer año junto con Sora y Tai, pero, debido a algunos problemas, en otras palabras había reprobado, se había quedado en segundo y por otro lado su pequeño hermano, Takeru, quien había sido subido de grado, debía de ir en el mismo salón que Ken y él, pero, en lugar de eso estaba en el mismo grado que su hermano mayor.—

Era bastante raro, si le preguntaban a todos, antes del año pasado Matt había sido siempre muy tranquilo y con buenas calificaciones y de Takeru no sabían mucho por que apenas había sido transferido a su escuela al inicio del año escolar, aunque era muy inteligente, el saltar años no era una practica muy utilizada en Japón, y aun así lo habían pasado a segundo de prepa, cuando debía estar en tercero de secundaria con ellos, si fuera así, Ken no tendría esos problemas. Lo bueno es que esa escuela tenia la prepa y la secundaria en el mismo lugar.—

El peliazul suspiro derrotado— ¡jamás podré hablarle!—

Vamos, no desesperes— le consoló Davis— la única forma de hablarle, no se como no se te ocurrió antes, es por medio de su hermano—

¿Yamatto? Primero me mata, antes de que pueda acercarme— trago saliva, Yamatto Ishida era el chico más antisocial de la escuela (o por lo menos es lo que se rumoraba), el que en más problemas se metía, aunque desde que Takeru iba en su mismo salón, los problemas se habían reducido considerablemente—

tienes razón—

¿por qué no entras al club de música?— cuestiono Sora.

—Ya había pensado en eso… pero esta lleno—

estaba...— interrumpió Davis—

¿estaba? ¿a qué te refieres?—

Si ¡Habla! — le ordeno Sora

pues, a que la semana pasada, todos renunciaron… — coloco su mano a un costado de su boca, haciéndole casita— se rumora que Yamatto les corrió.— Ken volvió a pasar saliva asustado—

¡NO lo asustes!—

pero, ¡si es la verdad!— se defendió

Sí quieres, yo te acompaño al club de música— se ofreció amablemente.

¿en serio?— Ken le agradeció internamente, así no le daría miedo, además Yamatto no se atrevería a golpearlo con una chica presente ¿verdad?—

No me digas ¿qué a ti te gusta Yamatto?—

¡NO!— se sonrojo— es solo que siempre están solos—

¡POR QUE QUIEREN!— les interrumpió nuevamente.

Ken sonrió aliviado, era un mejor plan que observarlo de lejos todos los días, además, lo más probable es que una vez que confesara lo que sentía, ya podría seguir adelante. De cierta manera era frustrante no poderlo sacar de su cabeza.

Bueno— habló nuevamente Davis— como no quiero que mi mejor amigo muera solo— Los ojos de Ken brillaron emocionados— le diré a Cody que te acompañe, es bueno con el Kendo, igual y les puede defender— Rio mientras cruzaba sus brazos.

¡Davis!— le gritaron Sora y Ken al unísono.

El timbre para entrar a clases le salvo al vida al castaño que, como todos los demás estudiantes se dirigió a su salón para tomar las clases del día.

—Salón de Música— Ken releyó el cartel, y paso saliva, esperaba que todo saliera bien. Al final Cody no había podido acompañarlos.

Vamos— le animo Sora con una sonrisa

si—

Buenas tardes— saludo al momento de abrir la puerta, dentro del salón estaba Yamatto, que se encontraba tocando un par de acordes y Takeru que se encontraba sentado en el piano, tarareando algo.

Buenas tardes— les saludo el menor con una sonrisa—

Pasen— les ordeno con seriedad—¿se les ofrece algo?

Ah — ken comenzó a tartamudear

¡Queremos formar parte del club de música!— grito Sora.

Yamatto les observo en silencio, analizándoles— ¡Eso es genial! ¿verdad? Matt— le pregunto Takeru con una sonrisa, Matt asintió, sin decir una palabra.

Esta bien… ¿saben tocar algún instrumento?— pregunto.

Ah, el piano— susurro Ken, Matt levanto la ceja —

Disculpa, no alcance a escuchar— le reclamo, cruzando los brazos.

El piano— le repitió su hermano menor— ¿Ichijouji?— Ken asintió, ¿como le había escuchado si estaba mas lejos?

¿podrías tocar algo?— le pidió, con esos ojos azules brillando intensamente, se sonrojo muchísimo—

Es cierto lo que dicen de ti— rió el rubio caminando junto a el—

¿De mi?

eres bastante tímido—contesto, mientras le acompañaba a tomar asiento en el piano, el peliazul aspiro aire bastante nervioso, estar tan cerca del rubio le provocaba mucha emoción.

Takeru— le hablo su hermano, su voz llevaba un tono de advertencia— deja que Toque el piano, ¿que no vez que lo distraes?— Ken sintió sus orejas calientes, ¿era tan obvio?— se pregunto horrorizado sin saber que hacer.

Ah— suspiro decepcionado el rubio alejándose del peliazul— no creo que a Ken le moleste mi presencia— le susurro a su hermano mayor con las mejillas rosas— ¡además no soy molesto!— hizo un puchero, que sorprendió a Sora—

No dije que lo fueras— le respondió, con dulzura, Sora casi se atraganta, Nunca había escuchado a Yamatto hablar de esa manera—

¿Senpai?— era Tk

Sora está bien— le contesto con una sonrisa—

¿Qué instrumento Tocas Takenouchi?

Ah, pues…—Sora trago saliva— pues, en realidad, recuerdas que en primaria nos enseñaron a tocar la flauta— la castaña paso saliva, iba por muy mal camino— digo, en realidad no recuerdo como se toca y…—cerro los ojos, esto iba muy mal— pero,¡Me gusta la música y quiero aprender!— era mejor que un me gustas y quiero conocerte.

¡Muy bien!— hablo el menor, tomándole las manos— cuanto animo!— sonrió emocionado, Matt les observo con molestia y segundos después le arrebato las manos de sora a su hermano, empujando al rubio hacia atrás.—

¡Matt!— le reclamó molesto

Tus manos— susurro el mayor— no son tan suaves— Sora se molesto— debe ser por el tenis, pero, te ayudara a no sufrir tanto con las cuerdas de la guitarra—Sora sonrió, sonrojada—

¿Me podrías devolver mis manos?— pregunto sonrojada, Matt las soltó, y se volvió hacia Ken que había empezado a Tocar el piano.

No lo haces nada mal—

Ken observo a Tk, mirarle detenidamente.

Muy bien, están dentro— hablo Matt— seguramente ya lo saben pero soy Yamatto Ishida, El es Takeru Ishida— hablo presentando a Tk que solo les saludo alegremente— los ensayos,.. son los Lunes, Martes y Jueves, de 4 a 6 ¡No falten!

¡Si señor!— contestaron los dos al mismo tiempo.

Y otra cosa más… Bienvenidos al club

Sora y Ken sonrieron agradecidos, la fase 1 del plan estaba lista, ahora, solo faltaba planear las demás fases —

Como es viernes… y nos encontraron de pura suerte— hablo Matt sorprendiéndoles— nos vemos el lunes— se despidió mientras tomaba sus cosas— Tk, vámonos— murmuro provocando que el menor tomara sus cosas y saliera detrás de él, no sin antes despedirse de los chicos.—

¿Viste?— pregunto divertido— parecen buenas personas.

Takeru— le advirtió el mayor colgando la guitarra en su espalda.

Lo sé, lo sé— susurro, detuvo sus pasos unos momentos— ¿crees que algún día podremos tener amigos?— pregunto observando a su hermano mayor.

No lo sé— susurro el mayor— vamos a casa.

Sora observo sus manos algo sonrojada, Ken bufo molesto, no era justo, el plan había surgido para ayudarle a él y Sora ya tenía más avances con Yamatto que el con Tk.

La poseedora del emblema del amor, observo sus manos brillar de manera extraña. Esos chicos, eran diferentes a los demás humanos. Tomo la mano de Ken por unos segundos y después observo nuevamente sus manos. Ese brillo singular… solo lo poseían los niños elegidos como ella y Ken… observo la puerta, tal vez ellos eran especiales.

—¿Qué pasa Sora? Estas extraña

No es nada— le sonrió.

Vamos, los chicos quieren ir al digimundo a revisar, los digimons dicen que han sucedido cosas extrañas.

¿Otro enemigo?— susurro Ken apesumbrado— hace casi 3 años que habían acabado con MalonMyotismon— Pensé que ya no habría más batallas—

Yo también, además tal vez sea solo la paranoia de los digimon, ya ves unos buscan enemigos en todas partes.

Y no los culpo, ese mundo parece estar maldito—

No digas eso frente a los digimon, podrían sentirse mal— le regaño Sora.

Lo sé— se disculpo.

Y ambos se dirigieron al salón de informática

¿Qué les tomo tanto?

Pues, Sora sonrió triunfal— a que, están viendo a los nuevos integrantes del club de música.

Kari salto emocionada— ¡Felicidades chicos!— Les abrazo — verán que todo les sale bien.

La revisión en el digimundo transcurrió con cierta normalidad, si bien habían descubierto que el nuevo enemigo usaba la energía negativa de una forma diferente a los anteriores, pero igual transformaba a sus amigos digimon en horribles criaturas, más no utilizaba ningún aparato o artefacto como las agujas de control o los aros oscuros. Estaban dispuestos a irse cuando escucharon el sonido de una gran explosión y todos los digistinados se dirigieron al lugar a toda velocidad, se sorprendieron al ver frente a ellos aun gran lobo que parecía hecho de metal.

¡Es metal Garurumon!— grito Tentomon— está en etapa mega.

¿en serio?

¿Será nuestro aliado?— pregunto Kari.

Por la cosa horrible con laque está luchando, parece ser que si— respondió Tai, todos se quedaron en silencio al observar a la horrible criatura con la que peleaba, sin lugar a dudas un Digimon, pero uno hecho de Energía oscura.

Ken temblóinconscientemente, era demasiada energía oscura y eso le aterraba. El imponente lobo abrió su hocico y aulló liberando un rayo de energía dorada. El lugar se ilumino y segundos después todo quedo en silencio.

Metal Garurumon había desapareció y en el lugar solo había un pequeño Gomamon inconsciente. ¿Qué había pasado? Porque no había un huevo como en ocasiones pasadas.

¡¿Estás bien?—grito Agumon corriendo hacia el Gomamon que se encontraba en el suelo. El pequeño digimon hizo un suave movimiento y despertó.

¡¿Qué?— grito incorporándote.— ¿qué sucedió?

—Eso mismo quisiéramos saber—

No lo sé, yo estaba nadando cerca a la orilla, cuando sentí que alguien se detuvo frente a mi— susurro bastante confundido—

¿le conocías?— Sora hablo interrumpiéndole

No— negó intentando recordar— traía puesta una capa— parecía sospechoso, pero, algo me impidió irme—

¿Qué cosa?— pregunto Tentomon intrigado —

Su voz— susurro sorprendiéndolos— era tan amable, no podía desconfiar de una voz así— susurro avergonzado— estiro su mano hacia mí y después todo se volvió oscuridad—

Tú eras ese horrible monstruo ¿verdad?—le pregunto Tentomon, el Gomamon asintió avergonzado,

Pero, no recuerdo nada más… completo queriendo que el interrogatorio terminara, estaba cansado y quería dejar la horrible experiencia atrás.

tranquilo— le consoló Kari—todo está bien.

si— asintió mientras se despedía, quería regresar a casa y no volver a recordar eso jamás. Los digidestinados se observaron entre sí, un nuevo enemigo había aparecido, y con él la presencia de un nuevo aliado, Metal Garurumon.

Lo mejor será que regresemos a casa, ya es tarde— sugirió Davis y los demás le secundaron, estaban cansados de buscar enemigos y sobretodo decepcionados de realmente haber encontrado uno, La paz en el Digimundo se había terminado nuevamente.

—Los chicos salieron de la escuela, algo tristes, una nueva batalla significaba arriesgar nuevamente su vida, la de sus amigos y el equilibrio de los dos mundos

Ken se detuvo de pronto— ¿Qué pasa Ken?— pregunto Davis cuando choco con él.

Es…— el peliazul señalo sonrojado a los dos Ishidas. Yamatto traía de la mano a su hermano menor, prácticamente arrastrándolo por lacalle, todos observaron en silencio, el mayor lucia molesto.

Pero… ¡Si no hice nada malo!— le grito soltándose del agarre del mayor, para sorpresa del mismo Matt y de los presentes que se ocultaron para evitar ser descubiertos.

Matt suspiro tratando de tranquilizarse—lo sé, pero no toda la gente puede ser tu amiga ¿lo entiendes?— suavizo su voz, el menor bajo la mirada apenado— no puedes ir por ahí ofreciendo tu amistad a todo mundo.

—pero— Matt le ofreció nuevamente su mano— si me prometes, que no iras por la calle abrazando gente— susurro sonrojando al menor— yo, te dejare escoger un par de amigos— le ofreció conciliadoramente, Tk le observo con los ojos llenos de emoción—

—¿de verdad?— pregunto, algo renuente a tomar la mano de su hermano mayor—

—Si— el menor amplio su sonrisa y tomo la mano del mayor arrastrándolo por la calle.

—¡Genial! Tengo un par en mente, que ¡seguro te agradaran!— expreso con alegría, Matt paso saliva, no estaba seguro de los gustos de su hermano menor y menos después de prometerle una locura así. Tener Amigos ¡Era una locura!

—Sí que son raros— susurro Davis

— ¿tú crees?—Pregunto Tai, colocando su mano en su mentón— Ishida tiene razón— dijo abrazando a Kari— uno debe estar seguro de que los amigos de tus hermanitos sean los mejores—

—Ese es tu complejo de hermano mayor hablando— se burlo Vemon, y Tai tan solo respondió abrazando con más fuerza a su pequeña hermana.

—Al parecer, acercarse a Takeru es más difícil de lo que parece— susurro Ken con tristeza.

—Yo no lo creo así— Sora dio un paso adelante— Sí fuera realmente arisco, no le importaría no tener amigos y hacer lo que su hermano le dice— le guiño un ojo a Ken, quien sonrió— pero, al parecer el problema, aquí es que hace amigos con facilidad— rió divertía—y tiene un hermano sobre protector.

Ken suspiro, era mejor verlo como decía Sora, y tal vez con un poco de paciencia, Yamato le permitiría ser amigo de Takeru. Abrazo con fuerza a Wormon.

— Será mejor que vayamos a casa— todos asintieron y empezaron a despedirse, para tomar el camino a casa. Ya mañana seria otro día.