Los personajes de Latin Hetalia son de sus respectivos autores, al igual que los personajes de Hetalia a Hidekaz Himaruya.
"I'll always be with you. Remember, always."
Esas fueron las últimas palabras que escuchó de su boca, tal cual melodía de la que no quería dejar de oír. Su voz era la cajita musical que le hacía calmar ante cualquier situación, la desesperación, ansiedad o alguna pena que lo ahogara y no le dejara respirar incluso en los pensamientos.
Hace un año y medio que no lo ve y tenerlo en facebook, a veces le dolía. Es que ver sus fotografías en su ciudad natal, el cabello que parecía pajoso como lo recordaba, pero sabía que no era tan áspero cuando tenía la osadía de tocar las puntitas entre las yemas de sus dedos. Siempre le prestó atención a sus ojos y mierda que echaba de menos que le sostuviera la mirada por largos segundos.
Extrañamente Manuel siempre que hablaba con alguien, le gustaba admirar el tono de los ojos de la persona. Había descubierto que cada color era especial, sin importar que fueran hasta cafés. Y claro que odiaba que la gente que tuviera los ojos marrones los menospreciara, porque habían algunos que le recordaban la palabra "mediterráneo", algunas tardes de Otoño en la ciudad fría de Concepción al sur o la bebida que "él" preparaba tan bien.
Pero cuando llegaba el turno de que alguien lo mirara fijo, él se sentía aturdido y tenía que desviar la vista a los labios, la nariz, el cuello o la ropa de la persona. Menos en Arthur, porque sentía que este no le podía comer el alma y arrebatársela.
Habían veces en que se quedaba por las tardes luego del colegio, mirando el perfíl de "él" en aquella red social.
Sentía que Arthur estaba pleno viviendo en Londres, con la curvatura de los labios inclinada hacia arriba y la mirada conteniendo la altanería, que nunca supo porqué era así, siendo que su actitud, al menos con él, no se mostró de esa manera.
Pero habían veces en que dolía hasta leer una publicación en inglés con su nombre en azul remarcando y esas eran las veces en que nuevamente iba a su perfil y buscaba entre las opciones "Dejar de seguir", y así, por arte de magia, no veía sus publicaciones por días. Claro, salvo aquellas oportunidades en que él le comentaba algún estado o cuando no lograba llamar su atención, pasando apenas tres días, volvía al perfil y presionaba entre las opciones "Seguir".
Era un círculo vicioso del que estaba viviendo hace un año y medio desde la partida de él a Londres.
Algunas veces, recostado boca abajo sobre la cama y la mejilla recargada sobre la almohada, se preguntaba porqué Arthur nunca aceptó alguna videollamada por Skype, ooVoo o algo parecido a uno de esos.
Creía que quizás estaba muy ocupado con su familia o que quizás compartía con sus amigos en Londres, yendo a esos bares de mala muerte(conociéndolo) o quizás su tiempo se iba en esa novela que le comentaba algún día terminaría. También podría ser que haya comenzado a estudiar algo y ni se lo mencionó, quizás reforzó con lecciones de piano o su guitarra, quizás hasta el violín que en su momento alguna vez lo dislumbró.
Y en el peor de los casos, Manuel se ponía a pensar que era la simple razón de que no lo quería ver, doliéndole y descartándolo, pensando y recalcándose que quizás su webcam estaba rota o no tenía dinero para comprar otra.
Claro, obviando el detalle de que el inglés era de buena familia y situación económica.
Autora: Para los que le guste el ArgChi, no se impacienten uwu
