Disclaimer: Los derechos de los personajes son propiedad de Hajime Isayama y el nombre de la empresa tampoco me pertenece fue sacada de internet.
Prologo.
Más que deseo.
La mañana era tranquila y fresca, "Todo esto es tan normal", susurraba el muchacho que se encontraba tirado sobre su cama, observaba el techo detenidamente, varias imágenes cruzaban su mente pero una en especial se quedo plasmada.
-Ya van a ser 6 años ahh… - decía sin quitar la atención del techo.
Dos golpes llamaron a la puerta.
-Jove Levi? – la voz de la ama de llaves.
-Pasa. – ordeno el pelinegro sin levantarse.
-Su padre lo llama a su estudio.
-Tssk! – lo único que pudo decir al escuchar "padre" se puso de pie con fastidio y salió de la habitación.
Bajando las escaleras se detuvo a pensar que ahora esa casa quedaría muy grande, no es como si su presencia en estos años hubiera sido muy notoria, pero al menos lo seria para la única persona que realmente parecía quererlo, su pequeña hermana.
Se dirigió a la puerta del estudio y entro sin llamar, se sentó en un sillón frente al escritorio y puso su pie sobre su pierna de manera informal, el señor que estaba detrás del escritorio lo miro por enzima de los lentes mientras sostenía en sus manos unos documentos.
-Tus modales no mejoran, Levi. – dijo su padre Pixis.
-Me han dicho que quieres hablar, de que se trata? – contesto Rivaille ignorando el comentario de su padre, lo analizaba con una mirada fría y sin ningún tipo de expresión o sentimientos por la persona que tenia enfrente.
-*Suspiro*, supongo que esto no va a cambiar… Levi, te mudaras hoy verdad? Tus cosas están listas? Si quieres puedes llevar el….
-No, no quiero, y mis cosas ya están listas Mike vendrá por mi para irme al departamento. – el silencio se hizo presente unos segundos, Rivaille se puso de pie. – Eso es todo?
-Levi también quiero decirte que la empresa quedara en tus manos, es una responsabilidad muy grande y tu estas a cargo. – su voz era seria y lo miraba fijamente.
-Lo se, aun tengo al tío Hannes que hasta ahora ha estado al frente.
-Sabes que Hannes no es de mi confianza.
-Pero de la mía si, y la empresa me pertenece a mi… esta claro. – el comentario del hombre mayor lo molesto.
-Como tú digas Levi, es todo.
Antes de que Pixis pudiera decir algo más salió del estudio.
Subió a su habitación, tomo sus cosas que no eran muchas, no quería llevarse nada de esa casa que no le perteneciera. Bajo hasta la sala principal donde la ama de llaves lo encontró.
-Joven Levi. – lo abrazo muy fuerte. – Por favor no se olvide de llamar, esta bien? – parecía que la mujer estaba a punto de llorar.
-Si Rose, lo hare no te preocupes.
-Supongo que es la ley de la vida, los hijos salen del nido para encontrar su propio hogar. – la voz de la mujer acercándose los hizo terminar el abrazo.
-Así debe ser, Riko. – contesto el joven pelinegro viendo a la mujer albina que se acercaba.
-Buena suerte Levi. – le tomo una mano y le sonrió dulcemente. – Aunque no soy tu madre, estoy orgullosa de el hombre en el que te has convertido, Mina debe estar muy contenta en el cielo por tener un hijo talentoso e inteligente.
-Gracias Riko, al menos sé que eres sincera.
-LLEEEEVVIIII! – una niña de 12 años se acercaba corriendo y gritando, llego a Levi y se le aventó a los brazos. –Te vas sin despedirte hermano tonto.
-Hey! Claro que no Petra, iba justo ahora a verte pero me has ganado… ya deja de apretarme, me hostigas. – dijo con una mueca de molestia.
-Juuummm! Por eso te quiero tanto… por enojón. – sonrió la niña muy dulcemente.
-Basta pequeña zanahoria. – le revolvió el pelo haciendo que esta sacara un puchero.
El sonido del claxon se escucho desde la entrada, Levi tomo sus cosas y sin mirar atrás salió a la puerta, solo quería irse y dejar atrás esos 5 largos años que pronto seria 6.
Antes de subirse al BMW Z4 de Mike, volteo a la puerta de la casa donde lo despedían las 3 mujeres con lagrimas en los ojos, levanto el brazo ligeramente en forma de saludo y se subió al convertible poniéndose sus lentes de sol.
-Listo para la nueva vida, cowboy? – dijo el joven rubio Mike poniendo las manos en el volante.
-Vida es ese mundo de perversión en el que vives? – dejo escapar una sonrisa de aventura. – Vallamos a ella.
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.
*Toc, Toc, Toc*
*Toc, Toc, Toc*
-Hanji despierta, es hora de levantarse, llegaras tarde.
Se abre la puerta y sale un castaña toda adormilada y con la baba seca en el rostro.
-S-si, mama. – le dijo sonriendo a la pequeña chica rubia que le llamaba en la puerta.
-Anda, metete al baño, el desayuno ya esta listo… voy a despertar a Ymir. – decía Christa mientras la empujaba al baño.
-Eres un ángel Christa, sin ti yo e Ymir estaríamos en prisión justo ahora. – decía la castaña riendo en forma graciosa.
-Si, eso me queda claro. – sonrió dulcemente.
Las 3 chicas se encontraban desayunando, todas asistían a la universidad, Hanji esta por iniciar su último año en la carrera de químico farmacobiólogo. Ymir estudia administración de empresas y Christa va por la licenciatura en enfermería.
Hanji parloteaba con Christa sobre nuevos experimentos que había hecho en el laboratorio mientras recogían y lavaban los trastes del desayuno, como vivían en el mismo departamento se repartían las tareas y compartían gastos, por su parte Ymir leía el periódico en la sección de sociales cuando encontró un articulo que le llamo la atención.
"La famosa industria farmacéutica Wyeth Corporation, después de tantos años, al fin tiene presidente general y se trata de nada mas y nada menos que del joven Levi Rivaille de tan solo 21 años de edad, que ahora es considerado por los medios de comunicación y empresas de alto prestigio como el empresario mas joven y millonario en la historia, además que es conocido como el chico genio de Wyeth Corporation.
Todos nos hemos preguntado ¿Cómo ese joven ha llegado a tal lugar con tan corta edad? La respuesta es simple, su lanzo de sangre, es nieto del difunto fundador de dicha empresa el señor Wyeth, que tras su muerte su voluntad fue que su único nieto varón, fuera la cabeza principal de dicha industria, siendo asesorado por su hijastro, hasta ayer director general, Hannes."
Annie Leonharth.
-Wooooooww! – expreso Ymir. – Este tipo esta buenísimo, aparte de lo millonario que es y lo importante…. Valla que es guapo.
-Quien?! … Quien?! – se acercó Hanji con la misma curiosidad que la identifica.
-Levi Rivaille. – le dijo dándole el periódico.
Hanji formo una "o" con su boca y bajo el periódico, suspiro y se encogió de hombros como si de un príncipe se tratara.
-Otro altanero y mujeriego. – dijo resignada.
-Pero guapo. – le confirmo Ymir. – Y lo mas importante Millonariooooo!
-Si, bueno… muy lejos de nuestro alcance. – finalizo en un suspiro.
-Chicas, no quiero llegar tarde hoy en el primer día de nuestro último periodo en la universidad. – dijo Christa que esperaba en la puerta.
-Vale, vale. – las chicas se fueron a su primer día de universidad.
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Pasaron 4 días después de su nombramiento como presidente de la empresa que manejaba la industria farmacéutica, sin pensarlo 2 veces nombro a su tío Hannes vicepresidente general y su mano derecha, a pesar de ser un chico genio, aun se le dificultaban algunas cosas y aprender a manejar esa empresa en su totalidad, aunque no es muy grande, sigue siendo una tarea difícil.
Ya era 29 de agosto, un día de no muy buenos recuerdos para Levi, cada año por esta fecha, el prefería estar solo.
Ese día, Hanji había decidido saltarse la ultima clase era un día especial y tenia que ir a ese lugar. Llevaba con ella 2 arreglos de pequeños de flores cuando entro al cementerio saludando a Don Jacinto el panteonero.
-Hoy se cumplen 20 años verdad pequeña? – se dirigió a Hanji.
-Así es ya son 20… no me tardo le he traído una tarta que preparo Christa. – le dijo muy sonriente la castaña.
-Anda Hanji, tomate tu tiempo, hoy se conmemora ese día.
-Gracias.
La chica paso camino entre lapidas hasta llegar a la indicada "Marie & Peter Zoe" sus padres que 20 años atrás murieron en un accidente automovilístico, siendo ella apenas una bebe la única sobreviviente, coloco los arreglos y limpio con la mano unas hojas que estaban enzima, algo llamo su atención, a lo lejos se encontraba un joven de baja estatura, muy bien vestido y por su perfil parecía ser bastante apuesto, "Debe ser un fiel mas visitando a su difunto" ignoro al chico pelinegro que estaba a su derecha muy retirado, junto las manos y comenzó a orar.
Cuando termino se puso de pie volteo a la dirección donde había visto al muchacho y este seguía ahí, en la misma posición, de pie frente a la lapida, Hanji se frustro "Como alguien puede permanecer tanto tiempo así, en una sola posición… yo por poco y me quedo dormida hace un momento". Se alzó un poco para ver la lapida, vio que no tenia flores y parecía bastante olvidada, tomo una rosa blanca del arreglo que le puso a su madre y camino hasta donde se encontraba el chico.
Levi estaba sumergido en sus pensamientos no tenia expresión alguna, no parecía triste, no parecía feliz, no tenia ningún sentimiento reflejado, solo era su fría mirada y su rostro serio que no dejaban de contemplar aquel nombre "Mina Rivaille". Pensaba en cuando fue la última vez que su madre había sonreído, si fue antes de partir a aquel mundo. Seguía pensando mas y mas cosas que no se percato de la chica que ya había llegado hasta el.
Sus ojos automáticamente giraron a ver a la persona que se agachaba colocando una rosa blanca sobre la lapida, la mujer castaña de lentes se quedo de rodillas, junto sus manos y comenzó a orar en silencio. El chico la miraba extrañado, se comenzaba hacer preguntas como ¿Quién es? ¿Conoció a mi madre? Me conoce a mi? …. La chica se puso de pie y lo miro, le dedico una sonrisa amplia y tranquilizadora.
-La muerte no es cuando la persona se ha ido, si no cuando la has olvidado, Mina sigue viva, ahí… - señalo en corazón de Levi. – Y mientras la sigas recordando, no morirá para siempre. – Hanji termino con una sonrisa que fue normal para ella, pero no para el pelinegro.
Levi miraba atento a la chica que se retiraba del lugar, no podía entender, que es eso? Que es lo que esta sintiendo en ese momento? Que le causo esa chica? … estaba totalmente confundido, no tenia idea de porque sentía piquetes en el estomago, porque su corazón estaba acelerado, y su cara se sentía caliente, no entendía nada de eso, solo algo tenia claro, esa sonrisa fue solo para él.
Hanji salio volando de ahí rumbo a la cabaña del señor Jacinto. – Oh por Dios! Oh por Dios! Oh por Dios…. Es tan guapo! – la cara de Hanji estaba encendida y roja como un tomate. – E-esto…. Mi corazón se va salir del pecho…
-Hanji, estas bien pequeña? – pregunto el señor acercándose.
-Ah! S- si, si claro estaba distraída, vamos su tarta se va a enfriar y si no se la doy antes Christa me mata. – dijo sonriente la chica aun con el rubor en sus mejillas mientras entraban a la cabaña.
Levi salió a toda prisa, quería encontrarla, quería hablar con ella…. Sabia… lo sabia ella, esa chica despertó algo en el y lo quería comprobar. Volteo a todas partes con la esperanza de encontrarla de que no hubiera ido muy lejos, pero ya no la encontró.
-No será fácil…. No te iras así de fácil después de lo que despertaste en mi, chica de lentes, te voy a encontrar. – dijo Rivaille con una mirada subió a su coche y se alejó del cementerio.
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Taran! Ya lo se tengo proyectos en puerta pero no pude evitar la tentación de hacer uno nuevo, es cuando surgen las ideas de repente y TOMALA ya estas escribiendo algo nuevo.
Espero que les haiga gustado el prologo, es el comienzo de una serie de sucesos y aventuras, mi imaginación estuvo al mil con esta idea y pues bueno espero sus respuestas, si creen que vale la pena seguir subiendo o simplemente le dejo ahí como gusten, ya saben estoy a sus ordenes.
Gracias a mi familia pervert de Levi/Hanji del Facebook que sin ellos esto no seria posible… si me piden en su reviews que le siga le sigo!