Disclaimer: Lamentablemente ninguno de los personajes me pertenece, son propiedad de JK Rowling.
Este es un fic 100% romántico...
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Capítulo 1: "Y así fue..."
Se econtraba sentada en uno de los grandes butacones de la sala común de Gryffindor. Observaba el crepitar de las llamas en la chimenea, pensando en como le diría a sus amigos lo recién acontesido.
-Flash Back-
-Sólo dime por qué lo hiciste-le insistió la muchacha al joven que se encontraba de espaldas ante si.
-No me pidas explicaciones Granger-le respondió el muchacho, arrastrando las palabras-Ni yo mismo sé porque lo hice.
-Eran mortifagos Malfoy!!!-grito Hermione, obligando al chico a que se diera media vuelta para poder mirarle a los ojos. Esos ojos en los que ella deseaba reflejarse-Se supone que tu...
-No. Espera. Que te quede claro una cosa maldita "sangre sucia"...YO NO SOY UN MORTIFAGO Y NUNCA LO SERÉ-y con eso el chico se encaminó hacia la puerta de salida
Hermione no queria quedar con la duda, y menos después de notar ese brillo en los ojos grises de Malfoy. Corrió para poder alcansarle, pero no tubo que hacerlo por mucho tiempo ya que el chico la esperaba a la vuelta del pasillo.
-¿Por qué me sigues?-preguntó el muchacho
-Porque quiero saber la verdad. Algo te debió haber impulsado a que me ayudaras-dijo Hermione.
-Parace ser que tu no te convenses asi como así-dijo Malfoy dibujando una sonrisa en su rostro-Siempre buscandole la quinta pata al gato.
-Cuando se trata de cosas importantes siempre...-se detubo, no se dio cuenta de lo que decía, sólo se dejó llevar.
-¿Cosas importantes?-dijo Mlafoy volteandose hacia ella-Que, ¿acaso soy importante para ti Granger?
-Ee...este, yo...no-estaba demasiado nerviosa, y se puso más aún al notar que solo pocos centimetros la separaban de chico. Podia sentir la respiración del Slytherin en su naríz. "Dios, huele a menta" pensó.
-Por qué tan nerviosa?-"Es hermosa" se dijo para si Draco. No lo pudo evitar. Empujó a Hermione contra la pared y la aprisionó con sus fuertes brazos.
-Po...por favor dejame-dijo Hermione en forma de susurro, pero en el fondo era lo que menos deseaba.
-Tu cuerpo me dice todo lo contrario-dijo Draco susurrando esto último en el oido de la chica, sentía como temblaba por la cercanía-y ahora sabré si tus labios dicen lo mismo- Y sin más previo aviso la besó.
-Fin del Flash Back-
Aún no se explicaba como es Malfoy la había besado, y menos aún porque ella respondió a su beso.
-Espera-se dijo-Lo sabes perfectamente. Ahora la cosa es como se lo dirás a Harry y a Ron.-pensó en este último, lo que menos quería era dañar sus sentimientos.
Recordó en lo que su pelirojo amigo le había dicho unos días antes de lo acontecido con Malfoy. Él se le acercó y le confesó sus sentimientos. Hermione se hubiera sentido la mujer más feliz de la tierra si las palabras del pelirojo las hubiera oído mucho antes, pero ahora era demasiado tarde...sin darse cuenta de cómo y por qué, se había enamorado de Draco Malfoy...su peor enemigo.
Ni ella misma se lo creía, si lo que más había resibido por parte del Slytherin fueron insultos y humillaciones no se explica como empezó a sentir eso por él. Ella culpa a las rondas que hacían juntos por las noches, cumpliendo su funsión de prefectos, culpa también a los trabajos que a ambos les hacían hacer en conjunto y se culpa a ella por econtrarlo tan atractivo.
Enismismada en sus pensamientos ni cuenta se dió cuando dos personas irrumpieron el silencio que gobernaba a la torre de Gryffindor.
-Conque aquí estabas-escuchó una voz femenina- Te estube buscando por todas partes y nada. Con decirte de que hasta Harry y Ron te buscan como locos-continuó la pequeña pelirroja- Estan muy preocupados y tu aqui, muy...
-Ginevra, por favor callate de una buena vez- dijo Hermione bastante molesta. En esos momentos Ginny le recordó de sobre manera a la señora Weasley, igual que como regañaba a los gemelos cuando estoso se desaparecían.
Ginny, un poco avergonzada tomó asiento al lado de la castaña.
-Te juro que en estos momentos me recuerdas mucho a tu madre- dijo Hermione con un tono de burla. La castaña vió como la pequeña Weasley se ponía muy colorada- Pero bueno. Lo lamento, no te debí responder así.
-No, disculpame tu a mí. No tengo por qué pedirte explicaciones- dijo Ginny sonriéndole a su amiga. Hermione le devolvió la sonrisa
Un incómodo silencio las invadió, silencio que se vió corrompido por un joven alto de ojos verdes.
-Veo que la has encontrado- dijo exausto sentandose frente a las muchachas.
-¿Y mi hermano?- preguntó Ginny
-Aún debe estar buscando a Hermione- dijo Herry mirando a su amiga y sonriendo de manera malvada.
-Deberías ir a avisarle de que estoy aquí- dijo Hermione molesta.
-¿Para qué?-dijo Harry alsandose de hombros- Además, eso le sirve para estar con Luna.
-¿Perdón?- dijo Ginny
-Sí, con Luna- dijo Harry mirando a Hermione, esperaba encontrar una mueca de molestia en el rostro de su amiga al decirle que Ron se hayaba con Luna, pero no, parecía que Hermione ni si quiera le había escuchado.
Al parecer Ginny entendió las intensiones del moreno, le miró de forma severa y reprochante. Harry no entendió el mensaje y siguió:
-Él le preguntó si había visto a Hermione, y ella le dijo que no y se ofreció para ayudarle- continuó Harry- la última vez que los ví iban para el lago.
-Sabes perfectamente que a mí no me gusta ir al lago- dijo Hermione aterrisando- todos ustedes lo saben...
-Y aún no nos explicas por qué te desagrada ese lugar, si antes te fascinaba- le dijo Ginny.
Hermione no quería responder y se quedó en silencio. Recordó los hechos anteriormente acontesidos en ese lugar...recordó la manera en como Draco la había salvado de manos de los mortífagos. Inesperadamente se puso colorada y muy nerviosa.
-¿Te pasa algo?- le preguntó Ginny- Estas temblando y muy colorada.
-No, no es nada, me acordé de algo- dijo Hermione
-O de alguien??- dijo la pelirroja con una pícara sonrisa.
-No..No...Que cosas dices Ginny- dijo Hermione poniendose se pié.
-A dónde vas?- le preguntó Harry
-Voy a buscar a Ron, se me hace muy injusto estar aqui mientras él me está buscando- respondió la castaña.
-Oh, vas a acabar con toda la diversión- dijo Harry un tanto desepcionado.
-HARRY!!!- le gritó Hermione desde el retrato de la señora Gorda, y con esto úlimo salió de la sala común.
Hermione salió del Castillo e inmediatamente se arrepintió de haberlo hecho. Había olvidado que se encontraban en plena época estival y ni si quiera tomó una chaleca para protegerse del frío.
Caminó hacia el patio principal, para ver si hayaba a Ron, pero nada.
Fue hasta la cabaña de Hagrid para preguntarle si le había visto, este le respondió con una negativa. Hizo que la chica pasara, le dió una taza de té y le ofreció un chal, la chica lo rechazó amablemente al ver el tamaño de este, paraceía una frasada y notó que estaba bastante pesada.
Agradeciendo a Hagrid por haberle proporcionado un poco de calor reanudó la busqueda.
Tomando en cuenta el cometario de Harry, muy a su pesar se dirigió al lago.
Estaba totalmente desierto. Escuchó unos pasos por entre los matorrales. La muchacha aterrada dirigió su vista a donde provenía el ruido. Casi se cae cuando de entre los matorrales salen unos niños.
Los pequeños, al ver a Hermione se asustaron.
-Casi me matan de un susto!!- les dijo la chica
-Lo sentimos- dijeron los tres pequeños al unísono
-¿Qué hacían?- preguntó la chica
-Nos escondíamos- dijo una niña rubia de ojos marrones- jugabamos a las escondidas. Nos internamos en el bosque, escuchams ruidos, nos asustamos y corrimos.
-Pues eso está muy mal- dijo en tono severo la castaña. A los pequeños se les vino a la mente la profesora McGonagall- Ahora vayan al castillo antes de que les quite puntos a su casa.
Los tres pequeños la miraron, y al ver la severidad de su rostro se dirigieron corriendo hacia el castillo.
Hermione sonrió. Esos tres pequeños de primer año le recordaron a ella y a sus amigos hace unos 5 años atrás.
De pronto recordó a qué había ido a su lugar y retomó el camino.
Dio unos pasos y se econtró frente al lago. Este se encontraba lleno de escarcha. Se agachó y comenzó a jugar con la nieve. Recordó las pistas de patinaje a las cuales asistía de pequeña. Recordó como se divertía con sus padres, reía cuando su padre caía en la pista y lloraba cuando ella lo hacía.
Una rafaga de viento le alborotó los cabellos y la sacó de sus pensamientos y recuerdos. Un leve escalofrío la invadió.
-No deví salir así- dijo la muchacha reprochandose- pescaré un resfrío
Sin que ella lo notara, unos pasos iban quedando marcados en la nieva a medida que iban avanzando.
-Dios, pero que frío hace, y yo así- dijo mirandose. Traía solo la chaleca del uniforme, y esta muy gruesa no era.
De pronto los pasos de aquel extraño se detuvieron, quedando atrás de Hermione. La nieve los amortiguaba, por eso es que la muchacha no se percató de ellos.
-Te resfriarás- dijo la voz del extraño.
Hermione pegó un saltito. Sabía perfectamente a quien pertenecía esa voz. Miedosa no quiso voltearse para confirmarlo.
-Ten- dijo la voz mientras le ponía una capa sobre los hombros. Aquella voz que le congelaba el interior, más aún si olía a menta.
-Gr..gra...gracias- dijo la chica un tanto nerviosa. Él no supo si tiritó por el frío o por los nervios.
Draco se sentó a su lado. Miró a la chica y luego fijó su vista en el paisaje que tenía en frente. Quedó extasiado con lo que vió. A parte de que el lago se econtraba escarchado, las montañas que se divisaban a los lejos estaban completamente cubiertas de nieve. El cielo estaba grisaseo, cubierto por unas nubes oscuras que amenazaban con declinar con prontitud. Copitos de nieve comenzaron caer del cielo. Eso les alertaba de que debían volver al castillo.
-Sé perfectamente que este lugar no te trae muy buenos recuerdos- le dijo Draco a Hermione- Será mejor que nos vayamos.
La chica no dijo nada. En silencio se puso de pié. Draco comenzó a caminar hacia el castillo. La nieve caía cada vez más fuerte. Hermione iba tras el Slytherin, esta de pronto se detiene.
-Vamos, nos vamos a congelar- le insistió Malfoy- Granger, no quiero hacer la ronda solo, y si te quedas ahí parada vas a estar días en cama.
-Espera- le dijo por fin la Gryffindor- Tengo que decirte algo.
-Aquí no, entremos y me dices- le dijo el rubio reanudando el paso.
-No, tiene que ser aquí y ahora.- dijo con impasiencia la chica
-Vale, vale...pero que sea rápido- le dijo Draco
Hermione se detubo y Draco le imitó. La chica avanzó unos pasos, quedando enfrente del muchacho. Tomó el rostro de este y susurrandole un "gracias" le dió un tierno y cálido beso en los labios.
La castaña no esperó por una respuesta o comentario y largó a correr directo al castillo.
Draco se quedó ahí, petrificado. Con todas sus fuerzas quería correr y alcanzar a la chica para exigirle una explicación, pero no pudo. A paso lento se dirigió al castillo. Ya tendría la oportunidad de hablar con ella, en la ronda que harían esa misma. Y con ese último pensamiento entró en el castillo.
A unos cuantos metros de ahí, 2 jóvenes habían observado toda la esena.
-Ron, yo...-intentó decir Luna
-No...no digas nada- dijo el pelirrojo, invadido por la ira...
Fin del capítulo...
Bueno, me presento. Mi nombre es Astrid, soy de Santiago de Chile y tengo 17 años.
Disculpen si el fic es muy cursi, pero cada vez que trato de ponerle terror, misterio y esas cosas me resulta esto, y todas esas ideas terroríficas se van a mis cuentos.
Espero Reviews!!!! por favor!!!
Cualquier cosa mi mail es : shadow of eskalibur hotmail . com
(quiten los espacios entre el arroba , y entre los espacios de shafow of eskalibur va un guion bajo...disculpen las molesias.)
Disculpen si hay faltas ortográficas, pero no me dio tiempo de corregirlas.