Mituna Captor se encontraba tranquilamente en su habitación, hablando cosas dulces con su adorada Latula por computadora, en este caso, el muchacho estaba hablando sobre un incidente que había ocurrido más temprano aquel día.
[Inicia Chat log hecho con flojera]
M: 35 QU3 3N 53R10 35 UN 1D1074, 53 P0R74 C0M0 UN0 70D0 3L 713MP0 Y NUNC4 H4C3 N4D4 P4R4 4RR3GL4RL0
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L: :? v4mos ch1qu1tín, solo qu3rí4 s3r just4
M: P3RD0N
L: pff, ok4y s3ñor, du3rm4 bien.
[Fin del Chat log]
El joven se acostó a chillar y retorcerse en su camita, pensando en ridiculeces sobre Latula y el desprecio que le tenía a Cronus. Más temprano ese día, el tonto pescado se había burlado de sus habilidades en la patineta y le dio un coscorrón por ¨subnormal¨, trató de pelear pero el otro simplemente se reía de sus patéticos intentos de atinar un puñetazo, Pyrope tuvo que intervenir para acabar la riña... fue tan humillante.
-Ya no zoy un niño... zoy un hombre grande que ze puede valer por zi mizmo- Lloraba
-¡Eze cronuz algún día me laz va a pagar y le demoztraré a Latula que puedo cuidarme, yo zoy lizto y fuerte!-
Se convulsionó un poco más y se quedó despierto hasta que sus paros cardíacos lo hicieron dormir.
Al día siguiente, como siempre fue despertado por su adorable Latula con un besito en la frente.
-Buenos días mi precioso bebé- le dijo la chica
-Eh?-
-¡Vamos a hacer muchas cosas divertidas y EXTREMAS hoy!-
-A zi, claro, pero...-
-Haremos parkour... en patineta... ¡EN LLAMAS! ¿A que no suena emocionante?-
-Zi Latula, pero por favor prométeme que me dejaráz cuidarme zolo; Nezezito un poco de independenzia, zabez? Ya zoy un adulto- le dijo el
-Oh si, como tú digas Mituna, yo te dejo ser, pero si necesitas ayuda, sabes que ahí estaré-.
En la tarde, la pareja subió al tejado de una casa del vecindario. Latula echó gasolina a ambas patinetas y con un cerillo las hizo arder, esto aterrorizó al hombre.
-No creez que ezto ya ez demaziado?- le dijo temblando
-Para nada... nunca se es lo suficientemente ¡EXTREMO!- respondió emocionada.
-No me ziento muy zeguro de hazerlo-
-Vamos Mituna... yo te doy la mano y lo hacemos-
Y así, se tomaron de las manos y saltaron del techo, la muchacha logró una ejecución perfecta acompañada de piruetas y cabriolas, un aterrizaje limpio y silencioso; Perfecto.
Por otra parte Mituna se movió mucho en el aire soltando la mano de su novia y falló el aterrizaje con una estrepitosa caída, para su mala suerte acabó cayendo encima de Cronus, que paseaba por ahí en su bicicleta.
-¿¡Oh idiota, por qué vienes a caer justo por donde yo paso?!- le gritó enojado
-Ay perdón Cronuz, pero fue un atxidenteeee- le respondió quejándose
-Acepto tus disculpas gatito, no parece que hayas dañado mi nave pero deberías tener más cuidado la próxima vez, guapo- dijo dándole un zape
-Oye estúpido marica, ¿qué le haces a mi bebé?- intervino la mujer
-Solamente estoy jugando con él, además, casi le rompe los espejos a mi moto-
-Eres un bruto, es sólo una bicicleta con espejos, una ridícula canasta al frente, una corneta y una PATÉTICA, LAMENTABLE, PENOSA y LASTIMOSA botella en la llanta trasera, es doloroso de mirar-
-Es una moto porque hace ruidos de moto. ¡Duh!-
-Jajajaja, entonzez erez puto porque hazez ruidoz de puto, jajaja- se carcajeaba Captor.
-Tú cállate subnormal, esto es para gente sana y razonable- dijo Cronus
-Cronus, de todos tú eres el menos normal, comienza a portarte como un hombre de una vez; Vámonos Mituna, no te juntes con esta chusma palurda- decía la muchacha mientras se daba la vuelta.
Mituna agarró su patineta y se quemó las manos; Empezó a dar brinquitos y agitar los brazos, el otro no pudo evitar reírse por aquella escena tan singular.
-Sin dudas eres un gatito gracioso e interesante, tu ineptitud te hace un ser misterioso y enigmático. Tal vez te escriba un poema después- exclamó. La esencia y naturaleza de Mituna siempre lo dejaban impresionado, un hombre abeja tan impredecible y estrambótico era encantador, un Kismesis perfecto que Cronus quería formar y mantener, su aversión a sus acciones y reacciones, y personalidad única alimentaban su "poder creativo"
Sin embargo no había nadie para escucharlo. Ya todos se habían ido, ignorando sus palabras, es más, había comenzado a llover, no era una lluvia suave y ligera, era un aguacero, el pobre alta sangre se caló hasta los huesos.
-Otra vez nadie... Nadie escucha cuando tengo algo bueno que decir, tal vez me lo merezca pues soy un ser asqueroso que no merece la vida- se tiró de rodillas y tomó un puñado de tierra.
-Señor, que he hecho yo para ganarme este trato, siempre he intentado ser feliz, pero jamás se me da la oportunidad, ¿¡QUÉ QUIERE DE MI, ACASO TAMPOCO USTED SE APIADA DE MI DESDICHADA ALMA!?- el troll estaba haciendo una escena, los vecinos lo miraban patalear por la ventana y soltaban miradas de lástima y rechazo.
-Ahora ustedes también... Oh por lo más divino que hay, santísima gloria de la eterna majestad de la creación del Señor rey de los cielos, soy un fracaso, nada más que un fracaso, un ser inútil, repulsivo y desagradable no soy merecedor de la existencia, estas miradas de odio que todos los días recibo, solo son gente deseando mi fin... Parezco un chiste, un estúpido atolondrado, víctima de las circunstancias, no amerito este trato, solo soy un chico inocente que busca un poco de amor, el sentirse apapachado y querido por alguien, mi error no ha sido más que el permitir que todos me lastimen, sin duda el mundo todavía no está preparado para gente como yo. OH! por todo lo que es santo, sé que nunca llegará el día que se haga justicia para mi alma que tanto sufre, pero al menos, permítanme no sentirme tan miserable, solo necesito cariño...- Gritó monologando, sus palabras se quedaron en el aire, pues los vecinos cerraron sus ventanas para no escuchar ¨al alta sangre loco¨, su berrinche lo había dejado desolado y sin motivos para continuar fuera, volvió a casa llorando silenciosamente.
Un viento fuerte y poderoso azotaba Beforus, el cielo de matices grises y negros rugía repleto de brillantes relámpagos, y truenos ensordecedores, la tierra antes tan plana y firme se convirtió en lodo, que se pegaba a las suelas, jamás se había visto algo así, y sin embargo, Cronus seguía fuera, sus zapatos se llenaron de lodo y su cigarrillo estaba arruinado, eso lo puso de pésimo humor.
-Genial, este día ha sido una mierda- masculló molesto.
Pensó en visitar a Kankri para desahogar sus penas, pero no era necesario molestarlo, estaba teniendo su troll-periodo, además le arruinaría la alfombra con el lodo y la bici. Y pues se puso a vagar por las frías calles del planeta, no podía importarle menos lo que pasara ahora.
Caminaba por las calles del planeta, y observaba las colmenas de otros trolls, la tierra no era para él, seguramente eso de renunciar a la realeza y hartar a Meenah con sus pendejadas de "humano" había sido la peor decisión de su vida. (Y si lo era, solo que es demasiado necio para aceptarlo). Entre la lluvia tan intensa pudo ver un pequeño resplandor, caminó hacia el brillo y se topó con un puesto de tacos en la banqueta de la librería, este puesto estaba seco y calientito, apenas iluminado por la tenue luz de un foco desnudo y titilante, un alegre y despreocupado troll de sangre bronce atendía, su gorrito de marinero de color blanco lucía impecable, en contraste de un manchado y grasiento delantal, sus cuernos, encontrados en su redonda cabeza de cabellos cortos recordaban a los de un chivo, como esos que se utilizan para la barbacoa, tenía un gracioso bigote hiperrealista pintado en el labio superior, era todo un personaje, el lugar estaba vacío, no había otra alma a kilómetros a la redonda, el olor a carne cocida y aceite viejo inundaba el ambiente y el vapor de las tortillas flotaba por este, quemándole la delicada cara al joven Cronus.
-Buenas noches- dijo en su habitual tono coqueto y seductor.
El tipo, que estaba mirando Fritorama desinteresadamente, apagó el antiguo televisor y dijo en tono amigable: -Buenas noches compadre, que se te ofrece-
"No puedo creer que esté de nuevo en estos inmundos puestos de comida terrestre" pensó, pero era comer tacos o mojarse para buscar comida en otros lados, y no estaba de ánimos para seguir caminando.
Suspiró y ordenó con desgano -Deme 2 órdenes de Trollpastor y una de buburemius.
Como usted quiera, honorable señor alta sangre, ¿no desea algo de tomar?
-Sí, deme una Nitri de Tamarindo por favor-
-Señor, ¿lo he visto alguna vez antes?- pregunto el taquero.
-No que yo recuerde-
-Sí, yo lo recuerdo, hace unos meses usted llegó ebrio con una chica alta sangre, de cabello corto y trenzas larguísimas, de una cara redonda y llevaba goggles, era graciosa, delgada y si me permite decirlo, bastante nalgona.-
-AH, SI! MEENAH!- vociferó -¿En serio la traje a este lugar? ¡MIERDA!-
-Sí señor, y la trató como basura-
-Raaayos, no recuerdo nunca haber tenido oportunidad con ella, hombre-
-Pues en ese caso ya perdió todas sus oportunidades, fue una cita horrorosa, jajaja- rio el troll -Pero olvidemos las penas del pasado, cuénteme como le ha ido ahora, compadre- le dijo mientras le daba sus tacos.
-...Gracias por querer escucharme... Mira, en estos días me he quedado sin esperanzas de conseguir un Matesprit, por eso quiero buscar un Kismesis, hay un troll que me gusta mucho, pero no sé cómo construir la relación, parece que en lugar de formar el ¨odio platónico¨ del que tanto se habla sólo he conseguido ser un muchacho grosero y eso no está BIEN, y ¡luego esa novia sobreprotectora que tiene me tiene harto con sus pendejadas e insultos!-
El hombre que atendía lo miró extrañado, con una expresión de incertidumbre y vergüenza.
-Mira, yo no soy ningún consejero de amor, pero afortunadamente ya llené todos mis cuadrantes, si ya te rendiste con los rojos la mejor manera de conseguir una relación negra es siendo directo y enseñarle de una vez que eres lo mejor para él, ya sabes... sé directo y rebelde carnal, y dile ¨para que no digas que no pienso en ti, aquí está tu pinche Kismesis". La verdad si, está cabrona tu situación, pero es que eres un pinche desmadre y necesitas sexo, el problema es que no sabes cómo conseguirlo, y no porque estés feo, eres un papasote, sino porque te portas como un canalla y un patán. Así nomás te lo dejo-
El pobre Cronus se atragantó con la comida, la verdad le pega muy fuerte a este joven tan sensible.
-*Cof cof*¿De verdad soy todo eso?, hieres mis sentimientos, sé que jamás he valido la pena y...-
-Si hombre, eres todo eso y deberías morir y blablablá, lo mismo le dijiste a Meenah te llamó un loco- le dijo molesto
-Ah caray- decía mientras se desatoraba con su bebida-
-Al final estaban ambos tan borrachos que fueron juntos dando de tumbos yo te hubiera tirado la salsa encima y te daba cinco cachetadas-
-Pero ya pare de hacerme sentir así, mi pobre corazón incomprendido necesita consejos- sollozaba el alta sangre.
-Mira, así de fácil está, ve a verlo y dile a que vienes, nada más-
-Perfecto, muchas gracias- respondió felizmente mientras le daba un billete de 5000 dineros. -Quédese con el cambio- Subió a la bicicleta y desapareció en el horizonte
El taquero se quedó con ojos de plato, 5000 dineros por 3 órdenes, además se fue mojándose en una lluvia tan intensa y no regresó el envase de vidrio.
-Que no es una maldita botella de plástico- fue lo primero que pudo decir después de la sorpresa.
¨Quién entiende a ese alta sangre demente, es muy idiota¨ dijo para sí mismo el bronce.
Al llegar a casa de Mituna, el joven Cronus se puso nervioso, aunque aparentara ser rudo y coqueto, era en realidad un pobre perdedor lleno de inseguridades y desesperanzado, oyó pasos cerca de la puerta y se ocultó en un arbusto convenientemente cercano, al abrirse la puerta pudo ver a Latula y Tuna conversando, parece que había sido una visita y era hora de despedirse; Escuchó con atención la conversación ajena.
-Oh, Latula, por favor... quédate más tiempo, nezezito compañía-
-Jejeje, tú mismo has dicho que necesitas estar solo un rato, ¿no es así?-Le dijo en tono burlón.
-Aw, mi amor por favor- lloriqueaba Captor
-De verdad tengo que irme, me encantaría acompañarte más tiempo abejita, pero no se podrá esta noche, no me siento bien y debería volver a casa-
-Yo puedo cuidarte muy bien, tu ziempre hazez mucho por mí-
-Tuve que venir a recordarte cómo usar el horno de microondas, cuando tu mente esté mejor y seas más estable, podríamos incluso vivir juntos-
-Dizez que zoy ineztableeEee?-
-Lo eres y bastante, sé que no es tu culpa, pero seré amorosa y cuidaré de ti mientras pueda, eres un chiquito especial que necesita ser comprendido y protegido... *sniff* me voy, creo que estoy resfriada; Ya hasta perdí el sentido del olfato. Ya sabes Tuna, te cuidas y cualquier cosa me llamas- Una vez dicho esto, tomó su paraguas y caminó a su hogar.
Cronus esperó a que la Troll estuviera lejos para tocar a la puerta del sangre dorada.
Era momento de dejar de ser el falso e inseguro Cronus Ampora por un rato y echarle ganitas al llenar un cuadrante.
NAH
