El título de este fic viene de la canción Bad Habit de The Kooks, realmente no tiene que ver con la canción pero la encontré en internet mientras escribirá esto y me pareció un buen título.

Steven Universe no me pertenece, es propiedad de Rebecca Sugar.

Capítulo 1

Suspiré una vez más mientras miraba por la ventana del automóvil en el que me encontraba abordo en la parte posterior. Era una noche cálida de otoño, una entrañable calma inundaba la pequeña ciudad situada justo a un lado del mar, el sonido de las hojas siendo movidas por el viento me estremecía al mismo tiempo que la brisa cálida entraba por la pequeña abertura de la ventana, era asfixiante, todo estaba lleno de una agobiante tranquilidad que me evocaba a pensar que el único problema era yo.

Deseaba tanto algo que se sintiera diferente, que concordara con mi deprimente estado de ánimo, algo que me hiciera olvidar lo sofocante que se sentía estar aquí, justo ahora. Sin embargo nada cambio, el automóvil siguió su camino hasta que llegamos a un establecimiento de donas en donde mi conductor y amigo se bajó sin decir alguna palabra. Fue bastante amable para dejarme perderme en mi mente durante todo el trayecto, además de no hacer ninguna pregunta, lo cual le agradezco profundamente.

Me sorprendí bastante verlo esta mañana en la puerta de donde solía vivir hace solo unas cuantas horas. Ha cambiado mucho desde la última vez que lo vi, ahora es más alto que yo, se ha vuelto un joven robusto de musculatura considerable, tiene un pequeño rastro de barba que lo hace ver mayor pero sigue siendo el mismo niño que conocí por casualidad años atrás, incluso su vestimenta se mantiene familiar, usa una camisa rosa con una estrella en el centro, pantalones de mezclilla y sandalias.

Supongo que una parte de mi piensa que la razón por la que está aquí es por lástima; lo he llamado la noche anterior totalmente destrozada, lo que conocía parecía llegar a su fin con una simple frase, estaba desesperada, como si todo por lo que he luchado estos últimos dos años se desvaneciera, de tal manera que nunca hubiera existido, darme cuenta que tantas lágrimas, sufrimiento, angustias e incertidumbre realmente no tuvieron sentido alguno, lo único que he logrado es alejar a las personas quienes alguna vez les había importado.

Pero él siempre ha sido diferente, ha sufrido más que yo desde que nació debido a la muerte de su madre durante el parto, sé que todos lo culpan y tratan de seguir con sus vidas, pero es evidente como todos resienten la muerte de Rose y tratan de culpar a su hijo de ello, las pocas veces que he visto a su "familia" todos parecen perdidos en sí mismos. A pesar de todo eso Steven se ha mantenido optimista, siempre luchando por ser mejor y ayudar a los demás. Es increíble como alguien pueda cargar con tanto dolor emocional y ser una persona increíble.

Steven volvió al auto no mucho después, en sus manos se encontraban dos bolsas de papel, al subir me ofreció una que tomé tras agradecerle; eran donas. Entonces seguimos en silencio hasta nuestro destino, nada me hubiera gustado más en ese momento que permanecer en el auto por siempre, observando a través de la ventana e intentando darle sentido a mis pensamientos.

Algunos minutos más tarde llegamos a lo que parecía ser lugar en donde me permitiría quedarme; había sido la casa donde solía vivir su madre con sus amigas hace casi dos décadas… Viviría aquí hasta encontrar un nuevo apartamento. Tomé la maleta situada a mi lado, en la cual solo empaque lo necesario debido a la prisa que tenía de salir; no podía soportar estar en el apartamento de Jaspe por más tiempo. Ya iría por mis demás cosas al depósito que me indicara.

Steven me guió hasta la puerta, la casa era antigua y hecha completamente de madera, una vez introdujo las llaves en la cerradura entramos. Era espaciosa y tenía lo indispensable, algo que llamó mi atención era la falta de divisiones en las habitaciones. Sin embargo era agradable en especial el dormitorio que se encontraba a desnivel.

La casa estaba incompleta, según me dijo Steven tiempo antes, tenían planeado hacer las habitaciones en la parte posterior, sin embargo Rose murió antes de eso, ahora solo quedaba el espacio vacío a un lado de la cocina, el cual era un recuerdo constante a que las cosas nunca volverían a ser las mismas. –Justo igual que mi vida– Pensé.

–Puedes quedarte el tiempo que requieras, yo sé que es difícil pero… ahm… en fin puedes llamarme si ocurre cualquier cosa, hay un poco de comida en el refrigerador también, siéntete libre de tomar lo que necesites– dijo nervioso mientras encendía la luz.

–Te lo agradezco realmente Steven

–Sé que estarás bien, eres fuerte–, se despidió tocando mi hombro brevemente. Su rostro mostraba una expresión llena de confianza y optimismo. Dejó las llaves en el mueble cerca de la entrada antes de salir de la casa dándome mi espacio.

En cuanto salió me permití derrumbarme, subí las escaleras hasta la cama y me recosté en ella, las lágrimas no tardaron de salir de mis ojos, recordándome lo sola que estaba, literalmente a kilómetros de lo que había sido mi hogar, sin amigos, sin trabajo, me sentía vacía, todo a mi alrededor se sentía irreal y lejano.

Por algunos momentos pasaron por mi mente mis recuerdos con Jaspe, precisamente nuestro último año de relación, la cual decayó de manera impresionante de un momento a otro; sospecho que fue debido a que comenzó a engañarme, cada vez nuestras discusiones eran más fuertes, al principio solo eran gritos, luego comenzó a lanzar cosas y tirar muebles contra mí, llego al punto de golpearme con su enorme mano, incluso acabé en el hospital una vez debido a una luxación en mi hombro. "Fue un accidente" me repitió una y otra vez.

Siempre se disculpaba, los días siguientes a una pelea, se comportaba como la chica que conocí; de la que me enamore, dejaba de beber, incluso dejaba de salir con sus amigas, pasábamos el día juntas y salíamos a diversos sitios; siempre tenía lugares nuevos que mostrarme, me hacía olvidar que alguna vez tuvimos problemas. Por eso no importaba, era la manera en que funcionábamos.

Pero otra parte de mi mente difería totalmente, esta pequeña parte de mi ser me decía que Jaspe jamás iba a cambiar, estar con ella solo me suponía dolor, una vida a medias, algo que yo no merecía, no importaban los buenos recuerdos, importaba el presente. Este presente me indicaba que yo no parecía importarle en lo más mínimo.

Batallé hasta que no pude más para mantenerla unida a mí, hice todo tipo de cosas para permanecer con ella, pero nada importó, la perdí, ella terminó dejándome por otra chica.

Ahora que lo pienso detenidamente mi vida giraba alrededor de ella, termine cediendo a sus caprichos y su forma dominante, siempre insistía y yo siempre terminaba haciendo lo que quería… Me aleje de todo incluyendo mi familia, amigos y de las cosas que me gustaban.

Ahora era libre pero en vez de eso me sentía vacía. Me seque las lágrimas con el dorso de mi mano e intente calmar mi respiración.

El vibrar de mi teléfono celular situado en mi bolsillo derecho me sacó de mis pensamientos, era un mensaje de Steven.

***Olvide mencionarte que mi novia irá mañana por algunas cajas.

***Tiene llaves, espero que no tengas ningún problema.

***Ten una linda noche :)

***Eres una de las personas más fuertes que conozco Lapis.

Su pequeño mensaje logro alegrarme un poco, me levanté de la cama y comencé a vaciar el contenido de mi maleta; busqué un libro entre mis cosas para pasar la noche y distraer mis pensamientos mientras me daba sueño, pero no encontré ninguno, Jaspe siempre odiaba que fuera con libros a la cama…

"Tengo que dejar de pensar en ella." – Me repetí probablemente por décima vez en el día.

Puse mi alarma para temprano por la mañana, tenía que volver a rehacer mi vida, buscaría un nuevo trabajo por la zona, vería los departamentos aledaños a la zona y quizás hasta podría cocinar mañana, llevo tiempo sin comer algo que no sea entregado a casa.

Sí, quizás las cosas mejorarán pronto…

Sugerencias y comentarios son bienvenidos.