Gabriel Reyes se mantenía alejado, aunque observando sin perder ni un solo detalle, del hecho de que dos de sus compañeros, Diana y Petter Oxton, los dos mejores pilotos de todo Overwatch, sus hazañas eran increíbles en combate y eran una fuerza aérea a tener en cuenta, cuando ellos llegaban nadie les detenía, presentaban alegremente a su niña de 4 años a todos sus compañeros de la sede de Overwatch. A sus ojos y a los ojos de todo el mundo se veían radiantes, al igual que la sonrisa de su hija, Lena Oxton, que no dejaba de mirar maravillada aquel lugar, tantas personas a su alrededor que no había visto jamás y que le hacían sentir inconmensurablemente feliz por estar allí, en los brazos de su padre, sintiendo como muchas personas le acariciaban el pelo y hacían burlas delante de ella para que sonriera, aunque no había razón para hacerlo, en ningún momento había dejado de mostrar su pequeña sonrisa, ingenua y sin un ápice de maldad.

Sin embargo, Gabriel suspiró exasperado, esa estúpida fachada de "héroes" le hacía tener ganas de vomitar, y bastante se tuvo que aguantar las ganas cuando su compañero se acercó a él con el niña en brazos, que miraba de arriba a abajo su cuerpo como queriendo recordarlo.

-"Ey, Gabriel, ¿has visto a mi hija? Hemos decidido que ya es una chica mayor para conocer como trabajan sus padres"

-"Ya lo había notado."

-"Vamos, no seas tan rancio, mira que carita."

Levantó ligeramente a la pequeña sonriente en sus brazos poniéndola justo delante del rostro, pero este se apartó ligeramente en cuando Lena alzó la mano para tocarle.

-"Ya.. si… muy bonita"

Asqueroso, fue lo que pensó en ese momento, dentro de él la ira y el malestar iban creciendo y consumiéndole poco a poco, como le gustaría acabar él mismo con la vida de Oxton si pudiera. Pero tuvo que aguantarse, y ante la mirada de disgusto de Petter este se excuso para marcharse de allí de una vez.

-"Gabriel, algún día ser tú te matará… ¿lo pillas? el señor de la muerte se matará a sí mismo."

Reyes gruñó ante el estallido de risas a su alrededor que causó esa estúpida broma, a Gabriel Reyes le consideraban el señor de la muerte, no solo por el hecho de que hacía años un grave accidente resultó en que la doctora Angela Ziegler, la mejor doctora del mundo actualmente y la jefa de médicos de Overwatch, hubiera tenido que salvarle la vida a costa de graves lesiones en su cuerpo en su rostro y desde aquel momento solo portaba una máscara de calavera, sino también por su extrema ferocidad en el campo de batalla. Estúpidos de Overwatch, odiaba a todos aquellos agentes, médicos y científicos que deseaban "proteger al mundo". El mundo no debía protegerse, el mundo debía renacer, y si tenía que causar una catástrofe para que eso ocurriera, este señor de la muerte se encargaría de cumplir esa tarea.

pensando en ello salió de la base, intentando evitar toda mirada de los que trabajasen allí ¡, y rápidamente cruzó toda la ciudad hasta llegar a un enorme edificio, de fácilmente trescientas plantas, en el que trabajaba aquella mujer a la que deseaba ver en ese momento. Necesitaba su ayuda y su consejo, aunque probablemente saldría molesto, como todas y cada una de las veces que visitba a aquella mujer. Afortunamente para él el los ascensores de aquel lugar contaban con un sistema bastante avanzado y podía alcanzar la planta que buscaba en muy pocos minutos a pesar de que esta fuera la última, y al salir buscó con la mirada a la secretaria que estaba esperándole con inpaciencia.

-"Buenos días señor Reaper, la señorita Satya estaba esperándole."

Y sin mediar palabra Gabriel pasó directamente al despacho de aquella mujer.

Cuando entró pudo observar la misma escena de siempre, una elegante mujer de pelo hasta la cintura, que miraba con muy poco cariño la ciudad que tenía bajo sus pies, mientras con su mano robótica diseñaba y borraba todo lo que le pasaba por la mente en esos instantes, controlando a la perfección su tecnología de construcción de luz, aquella que le había hecho famosa y la había llevado hasta donde estaba.

-"¿Observando a las cucarachas Symmetra?"

Fue la primera frase que siempre le pasaba por la cabeza cada vez que encontraba a la mujer en ese estado.

-"Estaba imaginándome como aplastarlas."

diciendo esto cerró la mano destruyendo sus creaciones y se giró lentamente hacia Reaper, el nombre en clave que tanto le había gustado.

-"¿Has hecho lo que te pedí?"

-"¿En serio dudas de mi en esto?"

-"No, pero prefiero tenerlo todo asegurado."

-"Entiendo."

Symmetra se acercó lentamente a la mesa de hologramas que estaba en medio de la sala y tecleó varias veces hasta que encontró el archivo que estaba buscando. Al abrirlo millones de imágenes aparecieron, representando a cientos de soldados, perfectamente armados, en contra de tropas con el símbolo de Overwatch en sus ropas.

-"Como ves tu ejército superaría con creces a todo batallón que te salga al frente, todos y cada uno caerán ante tus fuerzas."

Eso causó un aumento de orgullo en el pecho de Gabriel y contuvo el aliento observando su victoria mucho más cerca, una humillación asegurada a todos y cada uno de esos "heroes" que él tanto detestaba.

-"Pero…"

-"¿Pero?"

Eso llamó la atención de Reaper, cosa que disolvió toda alegría en su interior.

-"tu querido Oxton… nadie como él y su esposa tienen las capacidades de piloto que ellos tienen, solo los dos de ellos puedes destrozar todo tu ataque, y seguramente lo harán…"

Una sonrisa empezó a crecer en los labios de Satya, cosas así le hacía mucha gracia, nada en este mundo le importaba lo necesario como para perturbarla, mientras que toda muestra de decepción le proporcionaba un placer inigualable.

-"Si Oxton participan en la batalla, tú no tendrás ningún triunfo."

x

-"¿Sliptream? ¿Qué es eso?"

Petter se mantenía escuchando atentamente las lecciones de Winston que intentaba explicarle toda la parte tecnológica y científica de la nueva máquina que estaban preparando, a lo que el señor Oxton miraba sin apartar la vista ni un segundo hasta que el gorila científico paró la explicación y se quedaron en silencio unos segundos.

-"No he entendido nada… ¿Para que dices que funcionará?"
-"... para teletransportarse en la nave Petter."

-¡eso si lo he entendido! ¿y cómo va la investigación?"

-Está casi completada, sólo necesito el visto bueno médico de Angela y el técnico de Torbjorn y podrás probarla en pocos días."
En ese momento Oxton se quedó sin habla, atragantándose con el café que llevaba en ese momento.

-"¿¡yo!?"

-"Claro Petter, eres el mejor piloto de Overwatch, sinceramente no le daría el visto bueno a este despropósito si el piloto elegido no fueras tú, eres el único al que le confiaría esta prueba."

Angela Ziegler había entrado en la habitación con su ligera sonrisa en busca de la cafeína necesaria para seguir al pie del cañón en todo aquello, a parte de por el hecho de que tenía que avisar de la confirmación a su amigo científico que solo le faltaba coger su bote de mantequilla de maní y darse un enorme atracón para celebrarlo.

-"Entonces… según tú.. no se correrá ningún peligro ¿no?"

Ante aquella pregunta Angela se sentó a su lado en la mesa y siguió sonriendo despreocupada.

-"Todas las fórmulas son correctas y no veo ningún posible fallo, así que si."
-"Bien… porque me ha dado una gran idea…"

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-"¿Te gusta la nave de papá, cielo?"

Petter se arrodilló ante Lena, que se mantenía sujetando la mano de su madre, todo mientras observaba maravillada la aeronave de alta tecnología que pertenecía a su padre. Hacía semanas que deseaba con todas sus ganas ver como pilotaba su padre, siempre había estado maravillada con su trabajo desde que veía desde tierra como su familia manejaba con gran capacidad esas aves metálicas (como ella las veía), y el hecho de poder ir con ellos era un sueño. Por lo tanto con todo eso la chiquilla no podía dejar de sonreír abiertamente a todo aquel que pudiese verla en ese momento.

-"Todo está listo Oxton, espero que vosotros lo estéis también."

Lena alzó la mano más alegre aún si cabe hacia el gran gorila que se acercaba a ellos, desde que sus ojos lo vieron por primera vez le encantaba estar al lado de ese super inteligente animal.

-"Como ves estamos completamente listos, Lena casi no pudo dormir esta noche de la emoción, aunque siempre ha sido inquieta, así que sabíamos como llevarlo."

-"Me alegro. Vas a tener un viaje inolvidable ¿eh?"

Winston acarició el pelo de la niña haciéndola reír al revolverle el pelo.

-"Confío en que vosotros estéis al tanto en la base."

-"Por supuesto, no dejaremos que ocurra nada extraño."
-"¡Bien! pues vamos allá"

El piloto joven cogió a su niña en brazos y ambos subieron a la nave, justo antes de que lo hiciera la madre, que estuvo atenta por si Lena se podía caer. Cuando por fin estuvieron listos y en sus perfectos puestos el joven Oxton activo lo necesario para poner en marcha la aeronave, a la espera de la luz verde de Winston que estaba llegando a la torre de control.

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-"Muy bien grandullón, la familia Oxton está lista."

-"Tan animado como siempre eh Petter."

El gorila científico rió con él mientras escribía todo el código de lanzamiento.

-"Suena maravillosamente."

-"Por supuesto, he trabajado yo en ello, no dudes de mis capacidades."

-"sigo pensando que eres el más de todos nosotros."

-"Te estoy oyendo Petter."

La voz de Angela se hizo notar por el altavoz de la nave, fingiendo bastante ofensa con lo que había dicho, era normal, una chica de 17 años que estaba trabajando allí como una de las mayores mentes de la humanidad debía reclamar algo de consideración.

-"Ups, mis disculpas."

-"Bien, esto está listo. Puedes despegar."

-"De acuerdo, noto a Lena impaciente, vamos a darle un buen recuerdo."

Petter levanto los mandos de la aeronave haciendo que esta se alzase lentamente del suelo a medida que el nucleo espacio tiempo iba recargándose para poder darle el poder de teletransportarse en el aire, afortunadamente para el esta simplemente era una prueba de vuelo, aunque estaba seguro de que la prueba de combate iba a ser espectacular con algo así.

Al haber alcanzado una buena altura el joven Oxton se lanzo hacia delante aumentando cada vez más la velocidad, con mucho cuidado de no acercanse a ningún cuerpo que pudiera resultar un peligro cuando usase el poder de aquella nave, disfrutando en su regazo de como Lena observaba fascinada el exterior desde tan alto, su padre rió con ella e hizo giros en aire para demostrarle toda su capacidad.

-"Ya puedes usar el teletransporte, ¿estas listo?"
-"Nací listo Winston."

Impaciente puso los dedos sobre el botón de la maquina se preparó mentalmente para lo que fuera a suceder, notando como las manos de su hija se aferraban a él, con ganas de saber que pasaría a continuación, así que en un segundo pulsó ambos botones, viendo como en una milésima de segundo una onda salió disparada del nucleo haciendo desaparecer toda la nave, para justo despues aparecer mucho más cerca de la montaña que usaba como referencia a lo lejos.

-"¡es impresionante! ¡funciona!"
Petter pudo oír las risas que soltaba su compañero primate, realmente parecía que él era el que más ganas tenía de que esto funcionase, y realmente era una pasada, era la sensación más maravillosa que había tenido, incluso su esposa e hija estaban que no se lo creían, sus sonrisas era algo que no olvidaría jamás.

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-"Veo que te lo estás pasando bien Petter."

Unas pisadas resonaban sobre la sangre de los científicos que Reaper acababa de asesinar mientras observaba divertido como su odioso compañero disfrutaba de su gran logro como piloto principal de Overwatch, podía oír incluso las pequeñas risitas de su hija, y sus gritos de alegría, pero poco iba a durar.

con parsimonia iba acariciando son sus guantes en forma de garra sobre el teclado que controlaba el nucleo espacio tiempo que los Oxton llevaban en la aeronave, dejandoles el poder de controlar el teletransporte, hasta que llegó a la computadora principal, aquella que llevaba todos los códigos, que Winston podía controlar desde el centro de mando, pero nás importante aún. Disfrutando de la ocasión puso la contraseña que le hacía falta para poder entrar y llegó directamente a los códigos que controlaban la estabilidad de la máquina.

-"Sería una pena que ocurriese un pequeño accidente, ¿no crees?"
sacó de su abrigo el artefacto que le dió Symmetra y lo instalo directamente el panel, viendo como el virus iba cambiando todo aquello frente a sus ojos, como la voz de Athena sonaba en toda la sala advirtiendo del peligro.

-"Alerta, sobrecarga del sistema, projecto Slipstream en peligro, aborten misión."

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-"¿Athena? ¿qué está pasando, como que sobrecarga?"

Winston no entendía nada de lo que estaba pasando, todo estaba funcionando a la perfección, las formulas eran perfectas, impedían que pudiera ocurrir algo como esto, era impensable.

-"Winston, tienes que cancelar la prueba, que vuelvan a tierra, no puedo entrar en el control del nucleo."
-"¿Qué está pasando?"

La voz desesperada de Angela resonaba en sus oídos, solo para dirigir la vista hacia donde estaba mirando y ver como la nave de Petter aparecía y desaparecía el aire, como si se volviese invisible por momentos, pero nada como eso, la estabilidad espacio tiempo se estaba descontrolando y parecía ser que la nave era incapaz de mantenerse.

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-"No funciona la radio, ¡no funciona nada! no puede estar pasando esto…"
Oxton intentaba controlar la aeronave, pero parecía ser que el nucleo también descontralaba la nave, le impedia moverla siquiera de aquel punto, y no era capaz de evitar la trayectoria que le estaba dirigiendo directamente hacia la montaña rocosa que estaba justo enfrente de ellos.

-"Papa…"

La voz de su hija le llamó la atención de golpe y bajó la mirada hacia ella, Lena se estaba mirando las manos, completamente asustada, viendo como su cuerpo aparecía y desaparecía frente a ella, como no podía tocar nada a su alrededor y solo podía ver como iba haciéndose invisible, y miró a su padre, con sus grandes ojos a punto de llorar, cuando intentó alzar las manos para tocar a su padre y de repente todo su cuerpo desapareció, justo antes de que la nave se acercase inevitablemente a su embestida contra las rocas.

-"Lena."