Disculpen mis errores de ortografía. No hubo tiempo de hacer una revisión n.n
SEXO Y AMOR
Tomó su abrigo, el que colgaba del perchero colocado en la esquina de la gran habitacion. Se anudo la cintilla y cerró los botones solo hasta la mitad del pecho. Agarró la colonia que estaba sobre su mesa, aún lado de su reloj de mano y se lo puso un poco en el cuello. Ladeo el rostro solo un poco.
En ese instante descubrió una pequeña, pero visible, mancha roja. El reflejo del espejo de pronto le mostraba a una persona desconocida. Realmente no podía encontrarse así mismo en ese cuerpo delgado, con la piel sutilmente bronceada. Sus ojos azules se parecían a dos hondos huecos desprovistos de brillo. Su cabellera rubia sin embargo, se encontraba perfectamente peinada. Con el flequillo ocasionalmente tapando un ojo. La ropa perfectamente lisa y sin ninguna pelusilla. Vio mas abajo, ahí en sus zapatillas café oscuro, habían signos de un polvillo oscuro. Se tomó un segundo para coger un trapo y con ayuda de un chorro de agua se dispuso a quitar la que en su opinión fuera una fea mancha.
Cuando terminó, se aliso lo mejor que pudo el cabello y tomo las llaves del cajón de un mueble.
Tomó su cartera y se la puso en un lugar seguro, donde nadie podria sospechar siquiera que guardaba algunos billetes.
Al pasar por el pasillo que lo llevaria al ascensor, se topo con varios vecinos que lo saludaban con cariño y otros con amabilidad le decían que lucia inusualmente guapo.
El solo sonrió. Agradeciendo el gentil halago. Pronto salio del edificio en donde tenia un departamento rentado, y se subió al primer taxi que encontró. En el trayecto empezó a ver por la ventanilla sin mirar específicamente algo. Solo haciéndolo para distraerse del aburrimiento de cuarenta minutos de viaje.
Transcurrido ese tiempo, le pagó al taxista.
Sus manos le temblaban un poco, por el frio. Era de noche y el vaho que salia por su boca mas el sonido de sus plantillas al pisar le aseguraban de que ya era un poco tarde. Pero no se inmuto, solo siguió caminado mecánicamente.
Cinco minutos después, se detuvo frente a un edificio de cinco pisos. En la entrada principal había un letrero que decía "El mejor lugar para pasarla bien"
Vio que varios hombres salian de alli, todos o casi todos tambaleandose y con una botella en la mano. Además de aparetar estar ebrios, tenian la ropa desordenada y la cara tan roja, producto del alcohol seguramente.
Talvez no fue una buena idea venir. Si iba a terminar como uno de esos hombres, que mas que ebrios parecían zombies andantes. Quiso marcharse entonces. Pero una mano en el hombro derecho lo detuvo.
—Hola cariño, ¿Estas buscando diversión?
La incitante voz lo obligo a girar la cabeza, aún en medio de la noche pudo ver con el reflejo de la luna y algunas luces que se colcaban de algunos letreros, pudo distinguir a una mujer pelirroja, delgada y con ropa por demás reveladora. Unos short cortisimos ceñidos de manera tentadora, evidenciando la curva de sus caderas anchas, su gran escote se alzaba insinuante por la blusa que se ceñia al cuerpo tentador de la chica. Unas piernas tan largas y exquisitas sobre unos tacones de un zapato calado.
—¿Que pasa? ¿Te comió la lengua el ratón?—la pelirroja sonrió picaramente. E hizo una pose que simulaba el aguardo de una respuesta.
Solo entonces Naruto se irguio sobre si mismo.
—No... aunque podrías ayudarme de otra forma.
La chica entonces pestañeo coquetamente. Su dedo indice la llevo a la boca, haciendo pequeños círculos sobre sus labios rojos
—¿Para que soy buena?
.
.
.
— Es aquí.
Se detuvo al mismo tiempo que la chica, cuando ésta le instó a detenerse frente a una puerta que tenia una placa colgando que decía: OCUPADO en letras grandes.
El rubio entonces se dio cuenta del porque decía ocupado. Escucho altos sonidos de gemidos y gritos ahogados, que le hicieron trastabillar en su sitio.
—Parece que ella esta algo indispuesta.
—Ya lo note.
Naruto giró el rostro para que la chica no viera que había girado el rostro para no evidenciar su disgusto por algo que era más que obvio.
—Tendras que esperar.— la chica cambio de tema, tan pronto como vio la espalda del rubio.—Yo debo irme. Los clientes deben estar esperado.
Naruto asintió, no tenia nada mas importante que hacer, así que vio cuando la mujer se iba.
Se recargo en la pared mas próxima, observando sus alrededores.
Era un lugar agradable. Todo el pasillo tenia tres habitaciones de cada lado. La musica era relajante, aunque no sabia de donde provenia. Tenia muchas ganas de recorrer el lugar. Ocasionalmente se rascaba la mejilla, al escuchar de repente un grito que al final se convertia en gemido.
Se pregunto, donde estaba el baño. Necesitaba descargar su vejiga un poco.
Se fue entonces aproximando a cada puerta para buscar un maldito baño. Asegurándose antes de no oír algún grito o gemido delator para no entrar. Se sorprenderia si llegara a ver la escena de dos personas teniendo sexo. Definitivamente no era lo mismo ver a dos personas desnudas de carne y hueso frente a sus ojos, que a dos personas copulando frente a sus ojos, pero detrás de la pantalla de su computadora.
Entro entonces en una habitacion que no tenia ningún letrero ni alguna corbata anudada a la perilla.
Empujo sutilmente, viendo por el rabillo del ojo por la puerta entreabierta, verificando que no hubiera nadie. .
Abrió la puerta en su totalidad, metiendo su cuerpo al instante. Sus ojos se movieron curiosos por la gran habitacion, en donde había una una cama de tres plazas, bastante amplia. Una mesa, en donde habían dos botellas de champán, con un recipiente en una bandeja, la cual contenía una sustancia blanca y espesa.
Parecia ser crema de leche.
Los doseles de la cama caian como velos transparentes y delicados en forma de cascada.
La luz era escasa, apenas iluminado por la lampara y algunas velas. Daban al lugar un aspecto íntimo.
Recordó entonces que tenia que ir al baño. Se apresuro a buscar una en el fondo.
Hallo por suerte una que incluso tenia una bañera y un lavamanos.
Hizo sus necesidades y se lavo las manos, cantando una canción rítmica.
Al salir, suspiro aliviado. Iba a irse cuando escucho que la puerta empezaba a abrirse. Alarmado, se pregunto si era buena idea esconderse. Lo cual pensó seriamente, pero la desecho. El no era un cobarde.
Entonces la puerta se abrió, mostró a un chico de cabellera negra y piel blanca. Tan blanca como la crema de leche.
El moreno reparo en el rubio, quien estaba parado en medio del cuarto, primero viendo le con cara analítica y luego sonriendo y meneando la cabeza, divertido.
—Hum. ¿Ya estas aquí? Me gusta la puntualidad.
Naruto ladeo el rostro sin comprender.
—¿Perdon?
—Jamas imagine que serias hombre. Me dijo Suigetsu que eras una fiera, por eso pensé que...
—No entiendo.
Naruto hizo una mueca de confusión. Volvió a ladear el rostro. Esto hizo que el moreno sonriera mas.
—Vamos. No te hagas la victima porque no te da.
¿Victima? ¿De que demonios le hablaba ese moreno?
—Sera mejor que me vaya.
Pero antes de dar un paso, sintió un violento empujón, su brazo de pronto estaba sobre su espalda y su cara pegada sobre las sabanas de la suave cama. Sus ojos de abrieron de impresión, al darse cuenta que tenia un cuerpo sobre si.
—No te sulfures. Era una broma. Pero... —se acerco mas a la oreja del chico rubio, hablando en susurro— se que te agrada la fuerza bruta.
Naruto sintió un escalofrío recorrer su espalda. El aliento fresco le llegó tan súbitamente que no pudo evitar sonrojarse y removerse freneticamente. A pesar de tener el brazo inmovilizado.
—Aunque confieso que es bueno cambiar de rutina —continuo el moreno—Por cierto...
Anudo más las manos del chico que estaban por resbalarse.
— Me llamo Sasuke, lindura.
El rubio sintió dos cosas al mismo tiempo: pánico cuando el sujeto le besaba la nuca, y miedo cuando una mano se coló en sus pantalones.
Una sensación se instalo en su estomago, primero fue tan intenso que no pudo ahogar un grito de sorpresa, cuando los dedos cálidos de quien lo tenia sometido se movian en lentas y tortutantes caricias en su flácido miembro.
—Vaya. Estas sensible. Veamos como aguantas esto.
—¡Bastardo, detente!—grito Naruto, una vez se recupero de la impresion.
Una sonrisa satisfactoria de formo en la cara de Uchiha
—¿Acaso eh despertado a la fiera?—pregunto burlón, sintiendo al muchacho rubio que se estremecia bajo suyo.
Naruto soltó una jadeo involuntario, sus mejillas se tiñeron de un rojo intenso.
—Ah... ¡No! ¡Sueltame!
El moreno no hizo caso, incremento la velocidad de la masturbación, se daba cuenta de que el chico trataba de reprimir sus gemidos, pero no podía controlar su cuerpo, ya que la protuberancia que masajeaba empezaba a endurecerse y bañarse de una sutil humedad.
Se acerco al menor, y le dio un beso en la sensible piel del cuello, lo que ocasiono que el rubio temblara con fuerza y gimiera sonoramente
Por extraño que pareciera, ese sonido termino por excitar al moreno.
Mientras tanto, Naruto no podía pensar con claridad. Su atención y razonamiento se desviaba a la intensa sensación en cierta parte de su anatomía. Los dedos que apretujaban su hombría le cortaban la respiración y le nublaban la mente. Ya no podía contener los gemidos. Su sangre se empezaba a calentar aunque no quisiera, y su vientre sufria una muy intensa sensación de cosquillas. Sus mejillas ya no podían estar mas rojas.
Era la primera vez que sentía algo así.
—Eso es... disfruta. Ya casi te vienes.
Sasuke acelero el movimiento, sintiendo como sus dedos empezaban a mojarse por el liquido preseminal que salia de vez en cuanto del orificio que tocaba en ocasiones.
Empezaba a divertirse. Sus instintos como hombre empezaban a despertar. Nunca antes se había sentido tan dominante.
Talvez la razón era que le hacia eso a un chico. Y no a un mujer. Era completamente diferente. Y el que este aún siguiera resistiendose, le orrillaba a tener pensamientos más perversos y sucios.
—Ya casi...
Naruto se mordió el labio inferior, pero se rindió. Ya no podía contener la respiración ni los gemidos. Necesitaba respirar todo el aire que pudiera. Se estaba sofocando y el calor era tanto que le obligaba a ensalivarse sus resecos labios. Un hilo de saliva se resbalo por la comisura de sus labios, resbalando por su mentón
Soltó un sollozo. Las sensaciones eran insoportables, tanto que ya no sabia porque estaba en esas situación. Por que había ido a parar en ese sitio.
A merced de un chico que prácticamente estaba aprovechandose de el. No, ya no podía.
— ¡Arg!
Su cuerpo se arqueo involuntariamente, sintió espasmos repetidos que le cortaron la respiración. Su mente se nublo, una explosión se libero en su bajo vientre, primero sintiendo mucho calor y luego un frio electrizante. Gimio, no creyendo lo que sintió en tan solo unos segundos.
Sasuke tenia la respiración acelerada. Su mano capturo la esencia que el rubio había soltado. Veía al chico respirar de forma erratica, la cara completamente roja, su cuerpo aún temblaba. Su rubio cabello se pegaba a su frente, por la transpiración.
Esa imagen lo trastocó.
No dejo que el rubio se recuperara. Le tomó de las muñecas, obligandolo a estar boca arriba.
Naruto abria su boca, tratando de llenar sus pulmones de aire. Tenia lo ojos cerrados, pero pudo sentir las manos que lo obligaron a cambiar de pocision.
Sasuke empezó a besarle el cuello, captando de inmediato el chupeton que tenia. Por alguna extraña razón, eso le hizo sentir enojado.
—Ahora seras mío. Gatito...
Naruto reunió todas sus fuerzas para empujar al moreno. Pero solo pudo moverlo un poco, así que agarro un puñado de cabello negro y la jalo sin compasión.
—¡Alejate!
Sasuke gimio, el dolor lo obligo a sujetar al rubio con mas fuerza, ocasionando que el rubio gritara.
—¡Maldicion, quedate quieto!— rugió el moreno.
Pero naruto seguía tratando de apartarse. No permitiría que ese idiota se aprovechara mas de la cuenta. ¡No le quitarla su virginidad por nada del mundo!
Giro la cabeza, y tomo lo primero que había sobre la mesa de alado.
Sasuke sintió entonces un dolor agudo en el parietal del cráneo. Sin poder evitarlo, se desmayo por lo potente del dolor.
Naruto se apresuro a levantarse. Vio como el moreno caia a un lado suyo. La botella que había sostenido y roto en la cabeza de Sasuke empezó a mojar la cama, con un liquido espeso. Y la habitacion se lleno de un olor a alcohol.
Sintió miedo cuando vio que el moreno no se movía. Hasta parecia que no respiraba.
Con la bragueta abierta, las lagrimas desbordantes a punto de resbalar por sus mejillas, salio de ahí y corrió lo mas rápido que sus temblorosos pies le permitieron.
Una pregunta rondando por su mente.
¿Seria que había matado a una persona?
CONTINUARA?
*/* Para que vean que yo también soy una pervertida.
Siento que no eh sido muy específica en algunos detalles así que ustedes Diganme si gusto o no gusto.
Puede que haya OoC y mucho lemon. :3
¿Comentarios?
Nos leemos.