Capitulo 1: Crepusculo Negro.

Era un día como cualquier otro, pero eso estaba a punto de cambiar en un solo segundo.

Estábamos almorzando en el Gran Comedor, y aunque me lo propusiera sus ojos fríos, inexpresivos para cualquiera menos para mi, eran lo único en lo que me podía concentrar.

Me sumía en sus ojos grises, no podía pensar en nada mas, en ninguna otra persona. Mis problemas quedaban pequeños al lado de esos ojos perfectos. Perfecto, él era perfecto, no había otra palabra que lo describiera mejor. Perfecto.

-Hermione! Herms! Me estás escuchando? – Gritó Harry despertándome, sacándome del hipnotismo en el que me habían puesto esos ojos.

- emm…Si Harry, si que pasa?

- Herms, hemos estado hablando del Torneo de los Tres Magos, hace como 20 minutos!. Quien crees que ganara?

- mmm… Bueno todos tienen algo a su favor – dije, intentando aparentar que había puesto atención a la conversación - Fleur es muy inteligente, Viktor es fuerte, Cedric es muy hábil, y tu Harry, tu eres especial. Si la copa te eligió a TI es porque obviamente tienes lo necesario para la competencia – esperaba tranquilizar a mi amigo con el discurso que le había dado al menos 15 veces.

- si, tienes razón. Bueno cambiando un poco el tema, en que andas Hermione? - dijo Harry con suspicacia.

- porque? – le pregunté consternada de que mi amigo, que se supodia, andaba tan distraído estos últimos días, hubiera notado mi reciente cambio de actitud.

- y lo pregunta! – dijo Ron con la boca llena de pastel de calabaza. Era la primera vez que notaba su presencia. Apenas si hablaba mientras comía.

- si Herms. Estas distraída, a veces pareciera que hubieras visto un fantasma. A veces llegas eufórica y con ganas de saltar por todo el colegio, y a veces llegas notoriamente depresiva y con lo ojos hinchados por haber llorado. – si que me sorprendió lo pendiente que había estado mi amigo. Considerando su próxima participación en el torneo, y los recientes supuesto avistamientos de señales y magia relacionados con el Señor Oscuro, era de entender que Harry estuviera mas que distraído.

- Harry no es nada en serio. Solo es que estoy muy sensible, y por eso los cambios de humor. Además con todo esto del torneo y de aquellas señales me preocupo por ti.

- Soy yo el que se preocupa por ti Hermione.

En ese momento lo vi salir. Por mas pequeño que fuese el momento, sabía que valdría la pena. No me importaba lo que fuese a pasar, que seria lo que me dijera esta vez, tenia que verlo, aunque fuera por solo un segundo.

- Harry estoy algo cansada, me iré a acostar - me excusé.

Salí, camine por el pasillo, y vi su capa doblar la esquina, lo seguí, que mas podía hacer.

Se dirigía a su cuarto, por supuesto. Ese día no habían clases, debido al los preparativos para el Torneo, y todo los estudiantes se sentían cansados, por lo que todos aprovechaban este día para descansar y terminar los trabajos atrasados.

- Crepúsculo Negro - lo oí decir, y luego alcancé a divisar la puerta de la sala común de Slytherin cerrándose, y la punta de su capa entrando en ella.

Su voz. Me encantaba su voz. Era aterciopelada, fría, baja, casi como un susurro, me helaba la piel cada vez que la escuchaba. Era simplemente hermosa.

Él provocaba tantas cosas en mí.

Me recosté en el suelo, con la espalda apoyada contra la pared, por un segundo, un segundo que me permitió envolverme en el eco de su voz que aun resonaba en mi cabeza. Un segundo, o lo que pareció un segundo, que termino abruptamente con un:

- Granger que haces aquí?