Disclaimer: Los personajes de esta graciosa historia, no son de mi propiedad, sino que de la inigualable Stephanie Meyer. En cambio, la trama es totalmente mía, es más, está basada en hechos reales xD. Así que todo lo dejo a su imaginación.
Aprendiendo a Cabalgar con Edward Cullen
Capitulo 1
BPOV
-¡Papà! hablo en serio, ¡Ni muerta iré contigo!. Tú sabes el miedo que le tengo a los animales, sobre todo a los caballos.- dije un poco temerosa recordando claramente mi temprana infancia.
A mis cinco o cuatro años de edad, cuando aún Charlie y Reneé estaban juntos, solíamos ir a hospedarnos en vacaciones a un hermoso lugar donde arrendaban cabañas, el cual conjuntamente, rodeaban una gran piscina. Todo el terreno quedaba cerca de un pequeño río el cual le encantaba a mis padres por estar rodeado de arbustos y pinos muy altos.
Existía un puente que cruzaba dicho río y guiaba a un grupo de montañas ubicadas al otro lado, y, como la caminata era muy larga, mis padres arrendaban caballos para ir cabalgando por los caminos que la naturaleza brindaba tan hostilmente.
Existió un día de esos de verano, en que lo único que quería hacer, era ir a investigar como toda una Sherlock Holmes los terrenos inaccesibles para mi edad. Antes de partir a mi gran expedición (que obviamente yo creía que era muy lejos, pero como saben cuando una es pequeña, todo es lo bastante grande) y junto con ello pedir el perrmiso de mis padres, mi sabia madre me dijo:
-Mi pequeña Bella, por favor ten cuidado con los caballos que están pasando el río, recuerda que patean, así que evita pasar detrás de ellos ¿Si?.
-Si mami.- dije poniendo mi mejor carita de convencimiento, sabía como manejar a mis padres desde que nací, era toda un joven manipuladora.
Me fui a mi habitación y saqué mi pequeña mochila, el cual estaba con un jarro de agua, instrumentos para observar como lupas, pinzas y cajitas para introducir los animales exóticos; también un paquete de galletas y una chaqueta por si comenzaba a llover desprevenidamente.
Caminé lentamente cruzando el puente, con mi cámara de juguete favorita colgando de mi cuello, sacando fotos a todo lo que se me cruzara como hormigas "gigantes", rocas "extraterrestres", entre otras cosas. Pero mi expedición no duró mucho tiempo, al llegar al otro lado sin siquiera darme cuenta, pasé detrás de uno de todos los caballos que pastaban por el sector, lo que causó que su patada llegara directamente a mi ojo izquierdo. No fue nada grave, ya que la distancia no fue corta.
Inmediatamente después del accidente un hermoso niño de orbes verdes y disfrazado de doctor, llegó inmediatamente a mi rescate, me huntó sobre el ojo la sabia de una planta que llevaba dentro de su bolso de médico, lo que produjo que la hinchazón no durara demasiado. Pero esa acción de parte de él no impidió que quedara con un morado hematoma alrededor de mi ojo, un castigo de dos semanas sin ver televisión (imaginense que eran vacaciones) y lo más doloroso de todo, la pérdida de mi adorada cámara fotográfica de juguete favorita.
Después de doce años de aquel fatídico accidente, aquí estoy, en el mismo lugar pero sólo con mi padre (producto de su separación hace cinco años con Reneé), discutiendo como siempre sobre ir a cabalgar a las montañas y yo, claramente me niego rotundamente, desde los cinco años que le tengo un poco de temor a los caballos, independiente de que sea una amante de los animales.
-Vamos Bella, eso pasó hace mucho tiempo, no seas exagerada.- contestó sin ninguna preocupación.- Es hora ya que lo superes, solo fue un golpe en tu ojo por un descuido tuyo.
-Charlie, de verdad que no quiero, ni siquiera recuerdo como cabalgar.- dije ya perdiendo los estribos, mi padre era igual de terco que yo, solo que no lo tenía tan asumido.
-Es por eso que conseguí inscribirte en un curso aquí mismo. Ya las pagué asi que no tienes excusa e irás si eso es lo último que haga en mi vida.- dijo cruzándose de brazos, mientras yo estaba sentada en un caluroso sillón de cuero.
El lugar donde estamos, es frío la mayoría del año y justo ayer llegamos, y el sol estaba en su mayor esplendor. Aquel caluroso día no ayudaba a aclarar mis pensamientos.
- ¡Ash! ¡Entonces para qué demonios preguntas!.- casi grité dentro de la cabaña, la cual había estado cerrada toda la mañana y con el sol frente a él, se había convertido en un horno literalmente.
- Cuida tus palabras, Bells.- dijo Charlie desinteresadamente sonriendo un poco, nunca me habia retado, no que yo recordara, asi que a los 17 años dudo que lo hubiera hecho.
-Como quieras- dije encongiéndome de hombros. Me dirigí a la habitación que me correspondía dentro de la cabaña, recogiendo mi bolso con mi MP3, mi celular por si me llamaba Reneé, mi libro favorito que llevaba a todos lados y finalmente una toalla para tenderme sobre el pasto junto al río, eso si rociándome repelente de insectos sobre mi cuerpo.
Salí sin siquiera contarle a Charlie, ya que él estaba pegado a la televisión. Caminé hasta llegar junto al río, el cual quedaba justamente detras de un edificio donde se cenaba por las noches. Tendí la toalla sobre el césped y junto a un arbol, el cual utilicé como respaldo para leer; me puse mis audifonos el cual bañaron mis oidos de mi hermosa música favorita. Luego de varios minutos, y varios capitulos leidos de mi libro, lentamente fui quedándome dormida, hasta que quedar tendida totalmente sobre la toalla, llegando a los brazos de morfeo.
Sentí un pequeño movimiento en mi cuerpo, y lo único que pude hacer fue quejarme, lo que causó que un hermosa risa traida de los ángeles sonara en mis oidos. Pensé que soñaba por lo que ni siquiera quise abrir mis ojos, causando que mi cuerpo convulsionara nuevamente sin quererlo. De un momento a otro escuché mi nombre de la boca de un extraño, por lo que inmediatamente abri mis ojos, encontrándome con unas orbes verde esmeralda. Me puse de pie rápidamente tomando mis cosas, no sé por qué motivo. Mientras lo hacía el extraño me dijo:
-Bella, cálmate, no te haré daño.- miró mi rostro asustado y me tomo el brazo para que no hiciera una estupidéz.
-Disculpa ¿Te conosco?.- dije mirándolo más detenidamente. Su rostro me era familiar, pero no sabía quién era, en mi vida lo había visto. Pero dicha pregunta sería las más importante de lo que pensaba en ese momento.
.
..
...
¡Fin del capi!
Hola, esta es una nueva historia para un nuevo año que cumpli :D... es que ayer estuve de cumpleaños... asi que si ... qué mejor regalo que darles a ustedes una loca idea de mi imaginación y como dice en el principio, es basado en hechos reales xD.
Denme sus aprovación o tirenme tomates si quieren, pero sé que les gustará. Ademas sigo celebrando mi cumple asi que sean considerados... 22 años no se cumplen dos veces xD
Si se dan una idea, serán como 6 capitulos :)
Bye!
Nacha Malfoy (en su semana cumplañera xD)
