-Quinn mueve tu gran y hermoso trasero, no tengo todo el día.

Si, esa loca gritona que solicita mi atención es mi mejor amiga, Santana, nos conocimos desde que comenzamos el instituto, al principio nos llevábamos realmente mal, ella siempre quiso ser la capitana de las animadoras, pero ese lugar ya estaba ocupado por mí, pero luego, cuando nos vimos obligadas a unir fuerzas para acabar con una chica nueva que amenazaba con quedarse mi lugar, nos hicimos las mejores amigas.

Q: -Podrías dejar de gritar?

S: -No, no puedo, estas lista? No quiero llegar tarde, Brittany debe estar esperándome.

Q: -ya, podemos irnos- dije mientras salía de mi habitación hacia el salón principal donde me esperaba una impaciente Santana. Ella vestía unos pequeños shorts y una holgada blusa azul, debajo se dejaba notar los tirantes de su bikini, he de decir que se veía muy sexy.

Yo vestía un hermoso y largo vestido amarillo con flores, al mejor estilo veraniego. Nos dirigíamos a la gran fiesta de final de verano que daba Puck cada año en su casa. Y realmente no íbamos tarde, solo que Santana está desesperada por ver a quien es la tercera en nuestro grupo (en el instituto nos conocen como la Unholy Trinity), Brittany, pero no es solo nuestra amiga, también es la novia de Santana, llevan seis meses juntas, pero Santana siempre ha estado enamorada de ella, el miedo al que dieran no le permitía estar con quien, para mí, es el amor de su vida. Me sentí muy orgullosa cuando Santana se decidió a dar el paso, aunque a veces quiera matarlas por ser tan asquerosamente adorables.

Salimos de mi departamento hacia el auto de Santana que estaba estacionado a las afueras del edificio, bajamos por las escaleras como hacemos siempre, con lo que no esperábamos encontrarnos era con varios hombres trasladando cajas hacia uno de los departamentos de la quinta planta, que estaba justo debajo de la mía, que era el pent-house del edificio, el resto estaba constituido por hermosos y cómodos lofts y aquel que estaba comenzando a ser amueblado nuevamente había estado vacío por al menos un año.

S: -Se están mudando en el 501, y ahora donde nos esconderemos de tu madre?- dijo mi amiga con fingida nostalgia en sus palabras

Q: -Este edificio es lo suficientemente grande, además, mi madre casi nunca esta- y era cierto, mi madre solo vivía para su country club, sus amigas del BlackJack, y sus obras sociales con las que esperaba comprar el cielo, alguien debería decirle que la escalera al cielo no se compra, pero bueno, ya eso es otra historia.

S: -Como sea, me gustaba entrar a ese departamento, es tan espacioso que podríamos hacer una acampada, amo estos lofts, hey pero no me quejo de tu maravilloso pent-house- decía mientras subía y bajaba sus cejas con sorna –Ese es el gran privilegio de ser los dueños de este edificio.

Sí, hay comienzan sus burlas acerca de que soy la heredera de este edificio, de todo el dinero que tenemos, bla bla bla, ya estoy más que acostumbrada a escuchar sus comentarios sarcásticos y sus burlas injustificadas.

Q: -Ya no nos íbamos?

S: -No vas a dar la bienvenida a tus nuevos inquilinos?- hay está de nuevo ese sarcasmo, así que no me quede a escucharla y seguí caminando hasta llegar a su auto, lo abrí y me senté en el asiento del copiloto, esperando la llegada de mi amiga para finalmente irnos a la dichosa fiesta.

Todo el trayecto estuvo en silencio, el cual solo era roto por el sonido del estéreo del auto y Santana murmurando la letra de cualquier canción que sonaba.

You shout it loud (Gritas fuerte)

But I can't hear a word you say (pero no puedoescuchar nada de lo que dices)

I'm talking loud not saying much (Hablo fuerte, sin decir mucho)

I'm criticized but all your bull is brick of shame (Me criticas pero todo tu 'toro' es sólo un bloque de deshonra)

You shoot me down, but I get up (Me disparas, pero me levanto)

S: -Creo que esta canción sería perfecta para las seccionales

Q: -Si, estaría bien, hay que comentárselo a Mr. Shue –Dije mientras mi amiga ya estacionaba el auto frente a la casa de Puck y nos disponíamos a bajar del auto.

S: -Si, pero… Oye Quinn, cuidado!

Muy tarde, al abrir la puerta se estrelló contra ella una chica que venía montando un skate, y que al parecer no nos vio estacionar el auto, reaccione rápidamente para ofrecerle mi ayuda.

Q: -Te encuentras bien?- extendí mi mano para ayudarla a levantar, la cual tomo sin problemas –De verdad lo siento, no te vi venir

-Al parecer yo a ustedes tampoco- Sonrió, lo cual me hizo sonreír instantáneamente, no se por qué, pero su hermosa sonrisa era contagiosa

Q: -Te encuentras bien?- Repetí -No te has hecho daño al caer?

Me miro, su rostro, tenía dos hermosos y enormes ojos marrones rodeados de unas largas y crespas pestañas, una peculiar nariz, y unos enormes y carnosos labios, no pude evitar notar que llevaba un piercing en su ceja derecha, y su cabello negro y largo caía prodigioso sobre sus hombros. Luego comenzó a examinar su cuerpo, buscando algún indicio de haberse hecho daño por culpa de la caída, primero miro sus brazos, los cuales estaban descubiertos porque portaba una pequeña blusa de tirantes, luego miro sus largas y tersas piernas descubiertas gracias a su corto short de jean del cual colgaban algunas cadenas, acompañando su sencilla vestimenta calzaba unas zapatillas converse negras.

-No, al parecer todo está bien- nuevamente sonrió agachándose para tomar su skate –Bueno, me voy, estoy algo retrasada- regalo una pequeña mirada a Santana que había permanecido en silencio en todo momento, solo observando la escena atreves de sus gafas aviador con sus brazos cruzados y apoyada en el auto, se dedicó a asentir mientras aquella desconocida ya disponía a marcharse –Pues… Adiós

Q: -Adiós- dije mientras la observaba marcharse, solo la voz de Santana logro sacarme de mis pensamientos

S: -Que esperas? Deja de babear por la skater y entremos, Brittany ya debe estar dentro- dicho esto comenzó a caminar hacia la puerta bajo mi fulminante miraba provocada por su comentario y me dedique a seguirla aunque aún seguía metida en mis pensamientos.

Volvería a ver a esa peculiar chica? No lo sé, Tal vez… si el destino hace de las suyas.