Disclaimer: La historia esta basada en la película Push. Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer.

Capitulo 1. División

Hay personas especiales en el mundo, no pedimos ser especiales, solo nacimos así, pasamos a tu lado en las calles todos los días, nos ves, pero no sabes lo que somos.

Todo empezó en 1945, los nazis dirigían experimentos psicométricos, tratando de crear habilidades mentales en los soldados, muchos murieron y las guerras terminaron, pero los experimentos nunca se detuvieron, otros gobiernos alrededor del mundo crearon lo que ellos llamaron divisiones, tratando de lograr lo que los nazis no pudieron, transformarnos en armas.

Los agentes de la división están entrenados para rastrearnos y cazarnos como animales, separarnos de nuestras familias y amigos, nos hacen pruebas y nos clasifican. Soy lo que llaman un vidente, podemos ver el futuro, incluso si eso no siempre es tan simple como suena, otros son llamados trasladores, una manera mas fácil de decir telekineticos, los mentalistas ponen pensamientos en tu cabeza y hacen que cualquier mentira que digan sea absoluta verdad, tambien hay rastreadores, ilusionistas, sónicos, la lista sigue. Para división solo somos ratas de laboratorio, solo hay un problema, seguimos muriendo, nadie ha nunca sobrevivido a la droga que incrementará nuestros poderes, mi nombre es Bella Swan, División alejó a mi novio de mi, ahora mismo el futuro no se ve muy bien para nosotros, la buena noticia es que el futuro siempre esta cambiando, ellos han ganado muchas batallas, ahora es nuestro turno de ganar la guerra.

RENESME P.O.V

Abrí los ojos a mitad de la noche, parpadeé un par de veces tratando de acostumbrarme a la penumbra. Suspiré, esto se estaba volviendo repetitivo. Llevaba varios días en lo mismo, despertando a mitad de la noche, siempre en el mismo sueño, o más bien siempre que veía el mismo rostro. Un chico de cabellos cobrizos y ojos verdes que me miraba intensamente. Hacia una semana me había empujado accidentalmente cuando lo sacaban del dormitorio. Solo que yo sabia que no había sido accidental, su mirada fue demasiado directa y significativa como para no entender que estaba dirigida a mí. Sea lo que sea, estaba demasiado enferma y agotada para estar segura, solo sabia que su rostro se me aparecía en los sueños y me despertaba, eso debía significar algo.

Me llamo Renesme, tengo 19 años y soy una prisionera CBE, "Cautiva Bajo Experimentación". ¿Por qué prisionera? El gobierno dice que soy demasiado peligrosa para estar en libertad, la División de Experimentación Genética, toda una sección de operaciones secretas perteneciente al gobierno de los Estados Unidos, o como muchos lo llaman, simplemente División, habían decidido que mientras pudiera controlar a mi gusto la mente de las personas, no podía seguir respirando el aire libre. Pero no solo soy yo, habían muchas clases de personas, con este tipo de… poderes por así decirlo.

Los videntes tienen la capacidad de prever el futuro en diversos grados. Como el conocimiento de lo que va a suceder esta sujeto a variaciones, la directa influencia de un vidente puede ocasionar que pueda observar los diferentes desenlaces de un solo escenario. No conocía muchos videntes, pero si sabía que en División tenían al mas poderoso del mundo entre sus manos. Obligado a decirles todo lo que iba o era posible que sucediera.

Existen también trasladores, pueden identificar las frecuencias atómicas de cualquier objeto y alterar el campo de gravedad a su alrededor, lo que en resumidas cuentas quiere decir que pueden mover cualquier cosa, si tienen gran control de su habilidad. Los trasladores avanzados pueden incluso usar su habilidad a nivel molecular, creando campos de fuerza a su alrededor o dar un golpe usando su poder, lo que equivale a tres veces un golpe normal. Solo conozco dos trasladores, uno realmente poderoso que es la mano derecha de Aro, el jefe de División, Felix. Y… él. Que no se donde pueda estar ahora mismo, que me abandonó cuando mas lo necesitaba.

Luego están los sónicos, emiten agudas vibraciones sonoras que causan roturas en los vasos sanguíneos de la persona a la que están atacando. Son realmente sádicos y no se detienen hasta que mueras. Los he visto.

También existen ilusionistas, sanadores, sombras, rastreadores y otros mas. Eso me deja a mí. Soy la coacción y el control mismo, o mentalistas como nos llaman. Puedo controlar la mente de una persona, implantar recuerdos, pensamientos y emociones, todo con el fin de manipular. Se dice que de acuerdo a cuantas personas puedas controlar a la vez eres un mentalista poderoso o simplemente no lo eres. Creo que yo lo soy, solo tengo que hacer que miren el color negro que se esparce sobre mis ojos. Por eso estoy aquí. Atrapada. Porque hice que un grupo de 5 hombres de la División se mataran entre sí antes de caer inconsciente.

¿Y que era lo que nos hacían? Nos mataban. Eso hacían. Experimentan con cada uno de los prisioneros inyectándoles un suero que se supone mejorara las habilidades que cada uno posee y convertirnos en armas. Pero hasta ahora ninguno ha sobrevivido al suero. Es demasiado para nuestro cuerpo, no lo soporta. Intenta retenerlo, asimilarlo, hasta que lo hace. Y luego muere.

Tenia que escapar, sabia que era la siguiente, y no quería, simplemente no podía morir. Pero estaba demasiado débil para intentarlo. Todos los días recibía una dosis de algo, pero lo que sea que fuera se aseguraba de que no pudiera dar dos pasos consecutivos. Recordé de nuevo al chico de ojos verdes, desde que él había "tropezado" conmigo no dejaba de mirar a la puerta esperando que entrara el equipo de asesinos con la jeringa de liquido color negro. Sabía que eso era. Un aviso de que era la siguiente. Él debía ser un vidente. Y no solo uno cualquiera, el vidente más poderoso que tenia la División.

Escuche ruido fuera. Me entró el pánico y trate de soltar las correas que tenia en las muñecas. No siempre estaba amarrada. Generalmente podía moverme con limitada libertad alrededor de la habitación en la que me encontraba. Era una habitación especial, habían hecho un buen trabajo para mantenerme atrapada. Tenia 3 camillas, cuatro paredes y ni una ventana. Una persona como yo no podía tener acceso a los ojos de otras. De eso se habían encargado. Aunque de igual forma si las tuviera no pudiera controlar a nadie, la estúpida droga se encargaba de mantenerme débil. Me amarraban cada noche, para que al día siguiente pudieran inyectarme la droga sin que ofreciera resistencia.

La puerta metálica realizó un ruido y se movió mecánicamente a la derecha. Tampoco tenía puertas normales. Estas dejaban un orificio por el cual podía mirar al exterior. Y eso no era probable para mí. Por eso tenia puertas automáticas y con sistemas de alarma. Algunos dirían que era exagerada tanta seguridad para una chica escuálida como yo. Pero, dentro de mi sabia que lo tenia merecido. Había matado a 5 personas a voluntad. Ellos acababan de matar a mis padres. La voluntad estaba allí. Soy culpable.

-Renesme querida. Espero que hayas dormido bien-Dijo Aro mirándome cariñosamente. Solo desvié la mirada. Aro también era como yo. Un mentalista. Pero su poder era tal, que nadie se atrevía a contradecirlo.

-Vamos Renata cariño quítale las amarras. No es necesario. Renesme tiene toda la intención de cooperar no es así?-Preguntó. Permanecí en silencio y sentí como la chica que tenia un atuendo de enfermera me quitaba las correas de los tobillos y las muñecas.

-Estas lista?-Preguntó con expresión de culpabilidad.

-No-Dije con voz débil.

-Lo está-Dijo Aro saliendo de la habitación y observando desde la puerta.

La chica tomó una jeringa de un maletín negro. La sustancia era pastosa y negra. Cerré los ojos esperando la muerte. Sentí el pinchazo en mi brazo derecho y luego dolor. Todo el cuerpo me temblaba y escuchaba a lo lejos numerosos pitidos producidos por las maquinas. Luego todo se detuvo.

-No funcionó señor-Dijo Renata.

-Que desperdicio-Dijo Aro alejándose.

Fue como un golpe en el estomago. Boté todo el aire bruscamente abriendo los ojos y me levante rápidamente de la cama empujando a Renata. Tomé la jeringa que quedaba en el maletín y salí corriendo con toda la velocidad que me permitían las piernas.

-Cierren todos los accesos. Que no escape-Escuché a lo lejos mientras atravesaba una puerta a toda velocidad.

JACOB P.O.V.

Me desperté totalmente sobresaltado. Alguien tocaba la puerta. Me levanté de golpe y me dirigí al cajón donde guardaba un arma. La cogí y la metí en el cinturón del pantalón. Respiré profundo y abrí la puerta.

-Vaya Jacob. Has crecido-Dijo Demetri. Endurecí la mandíbula.

-Nos invitaras a pasar o tenemos que ponernos groseros?-Peguntó Alec.

-Que quieren?-Dije secamente haciéndome a un lado.

-Oh vamos. Así nos recibes después de que te dejamos caminar libremente?-Preguntó Alec.

-Ya. Gracias-Dije cerrando la puerta. Los observe toqueteando y oliendo todo lo que encontraban en mi departamento.

-Puedo ayudarlos en algo?-Pregunté.

-Ese es el espíritu-Dijo Demetri sentándose.

-Veras Jacob. No entiendo porque insistes en esconderte. Ves esto que tengo aquí?-Preguntó enseñándome un cepillo de dientes guardado en una bolsa. Hice una mueca.

-Si-Dije simplemente.

-Bueno. Ese cepillo de dientes, de cuando tenias 7 años, nos sirve para saber donde estas cada vez que lo queremos, entiendes? O todavía no tienes claro que somos?-Preguntó Alec.

-Si. Lo sé-Dije. Eran rastreadores de la División. Solo necesitaban un minúsculo objeto que haya tocado para saber que hice con el, donde he estado y como lo hice. Mi esencia queda impregnada en el permanentemente así que también sabrán donde estaré. Solo con tocarlo y olerlo. Simplemente genial.

-Bueno. Me alegra que sepas como funciona esto. Así que solo queremos saber una cosa, además de asegurarnos que estas bien claro-Dijo Demetri alegremente. Si claro.

-Y eso seria?-Pregunté.

-Estamos buscando a una chica, que creemos tu conoces-Dijo Alec.

-Si? Y porque creen eso?-Pregunté.

-Rumores-Soltó Demetri.

-Mmm lo siento. No puedo ayudarlos-Dije simplemente.

-No te hemos dicho quien es amigo-Dijo Alec dándome una palmada en el hombro con cara de sabelotodo. Apreté los puños.

-No es necesario que lo hagan. Desde que entraron y olisquearon mis pertenencias saben a quien a estado aquí recientemente así que ya deben saber la repuesta a su pregunta. Últimamente he estado solo-Dije secamente.

-Wow. Siento un poco de mal humor en ti Jake. Me equivoco?-Preguntó Alec mirándome amenazadoramente. Analicé las cosas. No quería problemas, solo tenia que sacarlos e irme. De nuevo.

-Te equivocas-Dije.

-Buena respuesta-Dijo Demetri. Luego miró a Alec quien negó con la cabeza.

-Bien. Gracias por la hospitalidad Jake. Por cierto, me llevaré esto-Dijo tomando mi cepillo de dientes actual. Contuve un juramento y apreté los puños.

-Tengo un poco de papel higiénico usado que te puede servir-Dije con odio. Demetri sonrió.

-Ya lo sabes. No te molestes en huir, te encontraremos-Dijo pasando por mi lado. Alec me sonrió burlonamente y salieron del departamento. En cuanto se cerró la puerta me apresuré a tomar una mochila y guardar rápidamente algunas prendas. División no podía saber donde estaba. En cualquier momento decidirían que era peligroso y me encerrarían. O peor, requerirían alguien como yo y si decía que no, acabaría como todo el que se negaba. Muerto. Eso había pasado con mi padre.

Estaba a punto de salir cuando sonó el teléfono. Me dirigí a él con la mochila en el hombro.

-Si?-Contesté.

-Hola Jacob. No deberías jugar con armas-Dijo una chica del otro lado. Fruncí el ceño.

-Que?-Solté confuso.

-Abre la puerta-Dijo. Indeciso lo hice y me encontré con una chica de cabello castaño y ojos chocolates que sostenía un celular en su oído. Se metió cortando la llamada.

-Para ti-Dijo entregándome un cepillo de dientes nuevo. La miré mientras tomó una fruta de mi nevera murmurando.

-Wow disculpa-Dije quitándole la fruta de la mano.

-Oye! Así es como tratas a tus invitados?-Preguntó tomándola de vuelta y dándole un mordisco.

-Así es como trato a una extraña que se mete en mi casa sin invitación-Dije.

-Como los rastreadores de la División que acaban de irse?-Preguntó. La miré.

-Debo suponer que eres una vidente-Dije.

-Duh!-Dijo sonriendo con cara de "eso es obvio".

-Disculpa. No tengo tiempo para juegos-Dije volviendo a colgarme la mochila y tomándola del brazo mientras abría la puerta para echarla. Se soltó y le dió una patada a la puerta para cerrarla.

-Crees que si te vas de nuevo, los rastreadores que se acaban de ir no te encontraran?-Preguntó haciéndome detener.

-Sé que lo harán. No soy estúpido. Solo tomo ventaja-Le dije.

-Te engañas. Solo necesitan el cepillo de dientes que se llevaron para saberlo. Yo puedo ayudarte-Dijo.

-Tu? Que te hace pensar que necesito tu ayuda?-Pregunté. Se tocó la cien con expresión de suficiencia.

-Vidente recuerdas?-Dijo. Rodé los ojos.

-Soy Bella por cierto-Dijo tendiéndome la mano. La estreché.

-Jacob-Dije.

-Lo se Jacob Black y justo ahora nuestro futuro no se ve bien-Dijo. Algo en su tono de voz me hizo recordar a mi padre.

-Jacob mírame-Dijo Billy tomándome por los hombros.

-Papá que esta pasando?-Pregunté.

-Escúchame hijo. Tienes que irte. Escóndete y espera-Dijo.

-Porque? A quien tengo que esperar?-Dije llorando.

-Solo espera. No se cuando será. Pero alguien tocará tu puerta y te ofrecerá ayuda. Tienes que aceptarla Jacob, tienes que hacerlo y tienes que ayudarla a ella, si la ayudas nos ayudaras a todos-Dijo zarandeándome.

-Esta bien-Dije abrazándolo.

-Vete ya-Dijo empujándome. Salí corriendo y me metí debajo de unas escaleras al mismo tiempo que escuchaba una explosión. Vi como unos hombres se metían donde estaba papá y luego salían volando. Un hombre alto de piel clara y expresión seria ordenó algo y se escucho otra explosión. Luego nada. Ese día perdí a mi padre.

-Bien Bella. Puedes decirme exactamente que pasa?-Pregunté.

-Eres un traslador de segunda generación. No practicas mucho y por eso eres pésimo en ello, te he visto-Dijo.

-Gracias-Dije sarcásticamente.

-Yo soy una vidente también de segunda generación. Veo el futuro pero eso no significa que siempre tengo razón, el futuro puede cambiar todo el tiempo, por eso trato de plasmarlo en dibujos, aunque no soy muy buena en ello, soy una artista de poco talento por así decirlo-Dijo tranquilamente.

-Y que es lo que se supone que tenemos que hacer?-Pregunté. Ella sacó un block de su bolso y me enseñó.

-Tenemos que encontrar a esta chica. Ella tiene algo importante que necesitamos para acabar con División. Ves?-Preguntó enseñándome el dibujo. Había una silueta de una mujer, un maletín y una taza de café.

-Que se supone que significa la taza de café?-Pregunté.

-No lo se. Pero la vi muy grande. Como la de los parques de diversiones-Dijo encogiéndose de hombros.

-Porque estás tan segura de que nosotros debemos hacer algo?-Pregunté.

-Si no la encontramos, esto es lo que va a pasar-Dijo pasando la hoja del block. Me mostró un dibujo de dos caras rodeadas de manchas rojas. Asumí que eso significaba que estaban muertas. Bella no era una gran artista.

-Quienes son?-Pregunté.

-Tu y yo-Dijo. La miré seriamente.

-Estas segura?-Pregunté. Rodó los ojos.

-Como lo estoy de que no te has bañado y tienes una pistola en el cinturón de tu pantalón Jacob-Dijo seria.

-Está bien lo siento. Voy a ducharme y enseguida regreso-Dije. Ella asintió sentándose en un sillón.

Me metí a la ducha pensativo. No sabia porque, pero estaba seguro de que Bella era la persona a la que se refería mi padre. Y si él lo decía, era porque era necesario. Tenia la certeza de que lo que nosotros hiciéramos iba a resultar en un cambio importante en nuestras vidas. Pensé en ella. En hace cuanto no la veía desde que me había dejado sin decir una palabra. No la había buscado porque era peligroso. Tanto para ella como para mí. Y no quería ponerla en peligro. Cada noche soñaba con ella y podía ver su rostro sonriente. La amaba. Y la extrañaba con todas mis fuerzas. Pero mientras División existiera no podíamos estar juntos.

Salí rápidamente y me cambie con unos jeans y una camiseta negra. Agarré mi chaqueta de cuero y la mochila.

-Sigo viendo a la chica. Esta en todas partes-Dijo mientras dibujaba rápidamente. Aunque eso no significaba lo mismo que talentosamente.

-Alguien que se pasa la vida dibujando debería ser experta en ello-Dije como si nada.

-Oye! Dibujo bien! Bueno… algo bien!-Dijo ofendida mientras volvía a guardar el block en su bolso.

-Claro-Dije riéndome.

-Debemos ir al centro. Nos vi comiendo allá-Dijo sonriente. Rodé los ojos.

-Esta bien-Dije parando un taxi y subiéndome con ella. Ella dejó el bolso en sus piernas y lo mire tratando de moverlo. Levanté la mano derecha y el bolso se levantó unos cuantos centímetros para luego caerse.

-Eres patético. Deberías practicar un poco. Estaremos muertos si tu papel en esto va a depender de tu habilidad con el traslado-Dijo haciendo una mueca.

-Eso fue ofensivo-Dije.

-Ja!-Dijo sonriendo muy pagada de si misma. Rodé los ojos. Claro. Solo porque le dije que no era buena dibujando. Era totalmente cierto pero no iba a insistir.

-Escucha. No vamos a ser los únicos buscándola. Hay una familia completa de Sónicos que tienen una vidente entre ellos y también quiere acabar con la División. Pueden darnos problemas-Dijo.

-Y por que no dejamos que lo hagan?-Pregunté.

-Porque son malos, serian como una nueva División-Dijo como si fuera obvio. Ya. Claro.

-Los has visto?-Pregunté.

-Si. Aunque no mucho. Su vidente es mejor que yo. Ella los ha enseñado a actuar deliberadamente. Para que yo no lo vea-Dijo frunciendo el ceño.

-Suena a que tienes competencia-Dije.

-Es una maldita zorra-Dijo. Solté una carcajada mientras el taxi aparcaba. Bajamos y entramos un restaurante mientras Bella refunfuñaba por lo bajo, en su mayoría palabrotas.

-Ya cálmate. Pensaran que estas loca-Dije. Ella rodó los ojos.

-No te metas conmigo Jacob. No es buena idea-Dijo sarcásticamente. Vaya, que susceptible.

-Está bien. Lo siento-Dije mostrando las palmas. Ordenamos y comenzamos a comer. Estaba nervioso. No sabía porque teníamos que haber venido acá. Era un lugar demasiado abarrotado. Cualquiera podría esconderse entre la multitud. Y atacar. Iba a abrir la boca para decirle a Bella lo que pensaba cuando ella desenfoco los ojos. Luego me miró asustada.

-Mierda. Sónicos, están aquí. Vámonos-Dijo poniéndose de pie. Deje unos billetes en la mesa y comenzamos a caminar tratando de salir de ahí. Supe que no lo habíamos logrado cuando Bella me agarro sorprendentemente fuerte de la muñeca mirando un punto del lugar.

Justo a la derecha había dos hombres mirándonos directamente. Uno era rubio de piel pálida y otro de piel oscura y cabello negro. Ambos tenían lentes oscuras. En medio de ellos había una mujer pelirroja de mirada burlona.

-Son ellos-Dijo Bella.

-Donde esta la chica?-Preguntó la pelirroja apuntándonos con una pistola.

-Ya les he dicho a División que no conozco a ninguna chica-Dije. Bella puso su mano en mi espalda y sacó el arma que tenia el pantalón.

-Estúpida niña, ya vi como mueres-Dijo la pelirroja a Bella.

-Entonces Victoria ya sabes que no es aquí y no es hoy-Dijo arrojándole el arma. Ella la esquivo y esta dio contra un vidrio haciéndolo explotar.

-Estas loca?-Grité a Bella. Los hombres se aproximaron a nosotros y yo alcé mi mano haciendo que salieran despedidos hacia atrás rompiendo la vidriería de una tienda.

-Mierda! Genial-Dijo Bella. Hice una mueca y la jalé del brazo para salir corriendo.

Los hombres se quitaron las gafas y abrieron la boca. Pero no salió ninguna palabra. Lo que salió fue un grito como si estuviera amplificado cientos de veces. Los vidrio de los locales explotaron de inmediato y Bella y yo caímos al piso mientras nos tapábamos los oídos. Pero eso no funcionó.

Los hombres se acercaron provocando que el sonido aumentara. Mire a Bella y ella tenia la cara pintada de dolor mientras se tapaba los oídos.

-Deténganse! Por favor!-Gritó con lágrimas en los ojos mientras me miraba. Sentí que me iba a desmayar de un momento a otro. Mire a Bella y use mi don para meterla debajo de un contenedor.

-Vete!-Grite.

-Deténganse. Si lo matan perderemos a la chica-Dijo la chica a lo lejos. Luego todo se volvió negro.

XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX

Buenas! Volví con esta historia. Es mas corta que las anteriores pero me gusto mucho esta película y quise cambiarla usando algunos personajes de la saga. Recibo todo tipo de criticas!