Advertencias: Creo que OOC y nada más. No creo que esto pueda ser considerado slash...

Disclaimer: South Park y todo lo que abarca no me pertenece.


1

Echado en el piso, con un pequeño montículo de tierra encima de su pecho, con la mirada pegada al cielo. Sin moverse un solo centímetro. Así estaba Tweek la tarde que Clyde decidió ir a visitarlo solo para molestarle un poco.

Por un momento pensó que estaba inconsciente o algo, pues no salió de su trance ni para saludarlo, aún cuando se había inclinado sobre él, mirándole con obvia preocupación. Solo supo que seguía con vida gracias a su respiración, delatada por el sube y baja de su pecho. La situación tenía poco o nada de normal.

Tweak estaba como una cabra, lo sabía de sobra, pero igualmente no se había esperado la situación actual.

—Ehmm. ¿Estás vivo?— Preguntó, pasando la mano por encima de su cara, tratando de llamar su atención.

—Sí...— Contestó, sonriéndose por la cara de absoluta confusión en su amigo. —Cu-cuando quiero relajarme porque siento m-mucha presión, vengo acá... y, erk, finjo que soy una zanahoria, o a-algo parecido.—

—...¿Por qué?...

—No sé. Ngh. Me relaja. Se me ha acabado el café.

Eso explicaba por qué cuando le habló comenzó a temblar como una gelatina. Tenía incluso más tics de lo normal. Clyde decidió no pensar mucho la situación y echarse a su lado. (Si no puedes con ellos, úneteles.)

—Bueno... yo seré un tomate.

—E-está bien.— Aguantando las ganas de reírse, y de arrancarse el cabello por la falta de café, regresó su mirada al cielo. Estaba contento de tener compañía. Así podría distraer un poquito más su mente. —Comenzamos... ahora.

Ambos vegetales pasaron un largo rato ahí tirados. Aunque Donovan al principio pensó que era una estupidez, al cabo de unos momentos, comenzó a sentirse muy calmado. Como si hubiese hallado una paz interior que ni siquiera sabía que buscaba. Se sumergió por completo, navegando por el universo de su propia mente en una corriente marina hecha de sus propios pensamientos.

¿Quién diría que ser un tomate le ayudaría a explorar un poco más su psiquis?

—Wow... siento... que entiendo el universo.

—¡Ack! Y e-e-eso que solo llevas acá diez minutos.— Nuevamente, al salirse del papel, Tweek comenzó a temblar.

—Bien, sabiduría, acá voy.— Declaró, antes de volver a echarse y continuar su extraño viaje astral-vegetal junto a su deschavetado amigo que si bien estaba enloqueciendo aun más por la falta de cafeína, se quedó a su lado para, juntos, alucinar en colores.


Notas/Extras: Tonterías, tonterías... creo que Tweek y Clyde serían cool juntos. Bueh, esto es todo menos cool (?).