Doble espiral

Nuevamente me he quedado dormida, por lo que está más que claro que será una mañana de carreras extremas.

A pesar de dejar una muy conveniente alarma, mis ojos no se abrieron, después de mil vueltas en mi cama, antes de simplemente dejarme caer al suelo, solo el golpe me pudo despertar.

Siendo honesta gran parte de mis atrasos son de mi completa responsabilidad, ya que antes de dormir cada noche, tengo que ver un capitulo (siempre son más de uno) de mi drama del momento ya que he visto muchos , a veces pienso en la gran cantidad de horas de vida que he perdido gracias a ellos, pero actores tan apuestos se merecen completamente mis horas sin dormir.

Mi nombre es Yuko 17 años, cursando 3° medio, alumna promedio, especialidad "múltiples atrasos", sin mayor orgullo recalco esto de mi persona ademas de mi extraña obsesión por los dobles espirales, para muchos una tontería para mí algún tipo de respuesta.

De ser hija única y extremadamente protegida por mi padre, he tratado de llevar una vida en lo posible normal, de pequeña solo vi a un mundo moverse frente a mí, lo intangible que se volvía día a día mi entorno, rogando por un punto de escape.

Después de muchas preguntas, me decidí a buscar las respuestas, enfrente a mis padre y sin poder darme una respuesta clara le exigí un poco de libertad, mi padre muy enojado no tubo otra mas opción que aceptar, y así al paso del tiempo, pude conocer a otras personas con las que comparto una profunda amistad hasta el día de hoy.

Realmente ni siquiera el clima me acompaña, el viento a desordenado por completo mi cabello, lo que es realmente molesto (mueca), solo espero que no llueva, de lo contrario podría perder la cabeza, luego de unos minutos en el paradero, puedo subir al autobús , ya mas relajada solo me queda observar el paisaje, mientras rezo por que el viaje sea lo más corto posible, un atraso mas y mi padre tendría que presentarse nuevamente en el colegio, teniendo que soportar después un interminable sermón.

Llegando al último tramo antes de llegar a mi colegio, puedo ver las orillas del mar que rodean la ciudad donde vivo, y los pequeños botes que navegan sobre él, si hay algo que no puedo evitar cada vez que lo veo, es traer desde el pasado un momento el cual me marco para siempre.

En uno de los primeros viajes que realice, llegamos a un enorme lago, el lugar era hermoso me sentí tan atraída a aquellas orillas, jamás vi algo igual debía disfrutar cada segundo.

Y así basto un pequeño descuido, para caer a esas heladas aguas, en esos tiempos ya siendo otoño, me vi como una completa idiota.

Solo fueron unos segundos bajo el agua, pero en uno de ellos el tiempo pareció detenerse y mostrarme una imagen realmente singular.

Mirando hacia abajo mientras me dejaba flotar a la superficie, algo llamo mi atención en lo profundo, una especie de burbuja despedía una tímida luz, al mirar de mejor manera pude ver una extensa cabellera negra que se dispersaba en su interior.

Bajo ella pude ver un rostro, mi corazón casi explota de la impresión y mientras la salida a superficie parecía tornarse mas y mas lenta, espere que el momento sea solo un sueño o algo similar, pero a pesar del miedo no deje de mirar.

Para cuando ya imágenes de mi muerte desbordaban mi cabeza,esa persona abrió los ojos y tímidamente extendió su mano hacía mí, en ese instante desperté, con esa mirada clavada en mi mente, fue como mirar un espejo y ver que tú propio reflejo pareciese otra persona diferente, digno de película de terror, luego de esto el mar o estar bajo el agua significan un gran misterio en mi vida, y al contrario de eso, mi corazón siente una sensación cálida al recordarlo.

En aquella oportunidad regrese a casa y en uno de mis bolsillos empapados encontré un pequeño resorte con doble espiral ,me causo sorpresa pero aun así lo conservo con recelo desde ese día.