¡Buenos días estrellitas, el planeta les dice hola!

Sdfghjsj Este... no se que decir, solo que ojalá disfruten de este primer capitulo de esta hermosa pareja, me anime a escribir de ellos porque son sumamente sensuales y porque la idea surgió luego de terminar de leer un libro, además de que me encanta esta pareja pero no he visto muchos fics de ellos en español.

Aclaro que la historia no es un AU pero si hay cosas que suceden en el anime que aquí no sucederán y cosas que aquí sucederán pero que no suceden en el anime kajdhadjas ustedes me entienden :D Mas notas al final, me gusta hablar demasiado, lo sé xD

¡Por último! Free! no me pertenece y tampoco quisiera que me perteneciera ya que está muy bien como está.

¡Disfruten de su lectura bellas criaturas!

Era una tarde tranquila en el pueblo costero de Iwatobi, las hojas de los árboles se mecían en son al viento cálido que corría a esas horas, el sol ya estaba diciendo adiós, escondiéndose en una hermosa puesta de sol. Las luces de los locales comenzaban a prenderse y se empezaba a escuchar el cantar de los grillos en las partes más silenciosas. Todo normal.

Mientras tanto en Samezuka.

—¡TE DIJE QUE NO ES NECESARIO! —Unos ojos aguamarina miraban molestos a unos de color escarlata.

—¡Y YO TE DIGO QUE SÍ LO ES! —Se cruzó de brazos— De verdad Sousuke, no seas orgulloso te digo que no es una molestia para mí y ya te dije que no es por lástima.

—Rin —Sousuke lo llamó con un tono molesto y lo siguió viendo con esos ojos penetrantes.

El pelirrojo abrió un poco sus ojos sorprendido al ser mirado así.

—Tsk —No quiso insistir más. Sabía que Sousuke no escucharía— Has lo que quieras —Se dio media vuelta y se acercó al escritorio donde se encontraban sus audífonos, se los enredó en el cuello y conectó su reproductor de música, dejó la habitación dando un portazo y se dirigió al patio. Iría a trotar para despejarse un poco.

Como siempre estiró un poco sus músculos para luego comenzar sus ya acostumbradas sesenta vueltas de trote antes de acostarse. Encendió el reproductor y echó a trotar. Siempre era así para Rin, los primeros quince minutos se concentraba en su trote y los restantes se ponía a pensar en cosas mundanas, aunque claro, hace un tiempo no pasaba esto ya que Sousuke lo había estado acompañando. Y jamás lo admitiría en voz alta, pero le gustaba trotar con el moreno al lado, no hablaban mucho ya que quedarían mas cansados, pero aún así le gustaba. El tiempo se pasaba mucho más rápido al lado de Sousuke.

-Hmph.

¿Qué le pasa? Estúpido Sousuke, aún cuando trato de que esté cómodo es así de orgulloso. Debería haberle retado al Jan Ken Poh así hubiera ganado y le hubiera obligado. No, su mirada… era como si le hubiera pasado algo.

—Tsk maldición.

Era entendible que Rin estuviera un poco confundido con la actitud de Sousuke, ese día habían llegado de vuelta a Samezuka luego del torneo. Estaban más que cansados y Sousuke además, había nadado con su hombro hecho pedazos. Rin sólo quería hacerle las cosas un poco más sencillas, por eso había ofrecido cambiarle de litera. Aún así el pelinegro lo había rechazado muy pesadamente, fue por eso que se enfadó y comenzó una pelea ¿Por qué estaba teniendo esa actitud? Era como si quisiera hacerse el fuerte delante de él. Entendía su orgullo, el también era orgulloso y tal vez hubiera tenido la misma actitud que Sousuke, claro, si fuese un desconocido o una persona no tan cercana a él, pero vamos que eran mejores amigos desde pequeños, no entendía como Sousuke no le tenía esa confianza para dejar de lado su orgullo, el lo haría en su situación por su bien estar, claro, si fuera Sousuke.

Luego de que Rin saliera de la habitación el pelinegro se había quedado mirando la puerta por un momento, fue un idiota y lo sabía. Lo que no sabía era porque había actuado tan pesado, de hecho, habría aceptado sin cuestionar a Rin, ya que sabia porque lo estaba haciendo. Sin embargo su cabeza no dejaba de decirle que era un lisiado y por eso le cambiaba de lugar. Era obvio que su mente le jugaba una mala pasada, puesto que Rin jamás pensaría así. No era de los que sentían lastima por el otro, muy por el contrario si a alguien le ocurría algo malo, Rin los seguía tratando igual que antes, para que justamente no se sintieran así, como él. Se sentó en la litera del pelirrojo y apoyó los codos sobre sus muslos, pasó sus manos por detrás de la cabeza y se quedó así por un rato, mirando a la nada. Quiso ir tras el pelirrojo en el momento que cerró la puerta, pero no lo hizo, porque no sabía como disculparse una vez que se dio cuenta de su reacción, después de todo había sido él quien la había cagado, Rin solo quiso ser amable y lo sabía, es solo que andaba con un humor de los mil demonios por lo de antes.

El equipo de Samezuka iba de camino al bus que los llevaría devuelta a la institución después de una ajetreada tarde. Sousuke iba conversando con Nitori, más bien, el más bajo le iba diciendo lo maravilloso que había estado, y lo fuerte y valiente que era por haber nadado en esas condiciones, él solo iba haciendo como que le prestaba atención después de haber escuchado decir al pequeño lo mismo más de diez veces. Por supuesto, agradecía que el pequeño pensara así. Como si hubiera sido un héroe, no era para tanto, aunque le hacia sentir bien y su dolor de hombro había sido nada luego de escuchar ese elogio. Aunque luego de diez veces…. Bueno, entendía en parte la emoción de Nitori. Rin iba más adelante siendo arrastrado por Momo quien no hacía más que hablarle de Gou y de cómo –Según el– Le había mirado luego del relevo.

Sousuke, en un momento de frustración máxima, –Ya que Nitori repetía y repetía lo mismo– Miró por los alrededores en busca de una maquina expendedora, cuando encontró su objetivo, se disculpó con el menor diciéndole que iba a por una soda, que no tardaba. Para su suerte Nitori no insistió en acompañarlo. Apretó el botón y cogió una lata roja con la marca "Cola" era su preferida desde niño, la abrió y tomó un sorbo, cuando sintió una mano posarse en su hombro.

—Así que tenemos a Yamazaki Sousuke de nuevo en el mundo de la natación.

Sousuke se giró de inmediato para encontrarse con un hombre de unos cincuenta años, regordete y algo calvo. Recordó de inmediato quien era, se trataba del reclutador que tiempo atrás había estado interesado en él.

—... —Evitó la mirada del hombre, esquivando su pregunta, no sabía muy bien que responder.

—Vamos Yamazaki-kun no necesitas ser tan tímido después de todo.

—¿Qué se le ofrece? —No quería seguir conversando con ese hombre, nunca le simpatizó después de todo.

—Soy un reclutador ¿No es obvio lo que quiero?

Sousuke se sintió un poco confundido por esa respuesta, ese hombre sabía que se había lesionado el hombro y que ya no rendía como antes, no entendía, había sido muy insistente tiempo atrás en querer reclutarlo, pero él se había negado siempre.

—Lo siento, pero ya le he dicho que no estoy interesado en ir con usted —Creyó que se refería a que fuera con el nuevamente, por lo que trato de negarse respetuosamente.

—No te preocupes, no te busco a ti —Sousuke alzó una ceja— No estoy interesado en juguetes rotos.

Tragó seco, sus ojos se abrieron mostrando sorpresa y luego ira. Cuando le iba a contestar al hombre, este ya se había girado y con una mano arriba le dijo —Dile a ese pelirrojo que contacte conmigo, él si tiene un futuro en la natación.

Sousuke apretó sus manos con mucha fuerza, e hizo rechinar sus dientes, se sintió herido, frágil ¿Y quién no? Le habían dicho juguete roto, luego de estar casi de rodillas ante el.

—¡SOUSUKE! ¿NO VES QUE YA NOS VAMOS? QUIERES VENIR LUEGO AQUÍ MALDICIÓN, TODOS QUEREMOS VOLVER LUEGO —Rin le estaba gritando parado en la puerta del bus más que enojado por retrasarlos, con un Momo colgándose de su cuello.

—Ya voy —No quiso preocupar a Rin, así que decidió actuar lo mas normal posible.

Suspiró y se echó para atrás, acostándose de medio cuerpo en la litera, apoyó el antebrazo en su frente. La había cagado por no haber podido contenerse respecto a sus emociones, Rin no sabía nada de eso y aun así se había desquitado con el. Se prometió olvidar lo que le había dicho ese viejo y tampoco mencionarlo con nadie. Más que nada, aunque se había sentido pésimo por se llamado juguete roto, le dolió más el pensar nuevamente que ya no podría nadar nunca más con Rin, ni menos competir con él profesionalmente, cuando había sentido una pequeña luz de esperanza luego de las palabras que el pelirrojo le había dicho y de lo bien que se había sentido emocionalmente luego del relevo. Ya lo tenía asimilado y dado por hecho fue por eso que le dolió aún más que esa pequeña luz fuera tapada con oscuridad tan rápidamente. Cerró los ojos un momento. Dejaría de lado su orgullo e iría a disculparse con el pelirrojo como el joven maduro que era -Según él- Ya que con Rin al lado y sus constantes retos infantiles se ponía en duda su madurez a veces. No quería pasar estas últimas semanas enojado con el pelirrojo, sobretodo si él había sido el culpable, lo sabía; había mirado feo a Rin y por eso éste desistió y se fue así, aunque no había sido su intención, solo impulsos del momento. Era él quién debía dar el primer paso, Rin no lo haría y tampoco le correspondía. Bostezó y sus ojos ya se estaban acostumbrando a estar cerrados, era demasiada la tranquilidad que habia en el cuarto, sino se paraba ahora se quedaría dormido en la cama que había rechazado hace un rato. Se apoyó sin querer con su brazo derecho, lo que le causó una fuerte punzada en el hombro, rápidamente llevó su mano izquierda a este y se quedó así un momento. "Maldición" Se daría un baño antes de dormir, sí; así podría relajarse un poco, lo necesitaba.

Se dirigió a las duchas, sólo llevaba una pequeña toalla, el pantalón y una camiseta sin mangas que ocupaba para dormir. Rápidamente se desvistió y dejo la ropa bien doblada en la banca. Se dirigió a una de las últimas duchas de la primera fila. Abrió la llave dejando correr el agua, se aseguró de que estuviera templada y se metió bajo el rociador. La cristalina agua, recorría todo su cuerpo, se paseaba por su corto pelo negro, su cara, sus hombros, su ancha y fuerte espalda, para así perderse en su redondeado trasero y bajar por sus largas piernas hasta el suelo.

Entró en su cuarto, estaba sudado y con un humor que era mejor no acercársele. Solo trotó treinta vueltas de las sesenta que le gustaba hacer. Se quitó los audífonos y junto al reproductor de música los puso en su escritorio. Miró en el cuarto buscando al pelinegro. No lo encontró, tampoco estaba en la litera de arriba— Hmph —Rin se recostó un momento con los brazos por detrás de su cuello, mirando hacia arriba. Aún se sentía confundido con la actitud de Sousuke, no era que se molestara con el pelinegro por no aceptar el cambiar de literas, si Sousuke decía que estaba bien era porque habría de estarlo. Lo que le molestó fue el tono en que se negó y esa mirada… ¿Qué habia sido esa mirada? Se había sentido muy incomodo, como si por un momento Sousuke le mirara con… Definitivamente le había pasado algo, no sabia qué, ni el porqué de su reacción pero se haría de rogar un poco más que otras veces cuando se enojaban, ya que ésta no había sido una riña más, Sousuke realmente le había mirado feo, sin embargo el pelinegro siempre le hacia olvidar rápido el por qué estaban enojados. Con que el moreno le retara a una competencia de cualquier cosa, se le pasaba; sabía que Sousuke ocupaba siempre esa técnica y eso le irritaba, pero era así como el pelinegro siempre conseguía lo que quería, después de todo Rin jamás de los jamases se negaría cuando alguien lo reta a una competencia. Estaba absorto en sus pensamientos hasta que se sintió pegoteado, si; recordó que venía de trotar y aún no se duchaba.

Tomó su toalla y lo que usaba para dormir, se daría una ducha corta, estaba cansado y quería dormir, además no quería toparse con Sousuke por hoy, si lo veía no le podría ignorar porque estaba seguro que el pelinegro se disculparía y aunque era una actitud infantil, Rin quería ignorarlo hasta que Sousuke le rogara al menos un par de veces. Caminó en silencio a las regaderas, no quería que lo descubrieran duchándose a esta hora, aunque no era problema, el señor que vigilaba sabía que a Rin le gustaba trotar antes de dormir, por lo que se acostaba un poco más tarde. Entró a lo que era el vestidor, se quitó los pantalones y la camiseta ya sudados, colgó la toalla cerca de la ducha; no quería que se le mojara, así que no la llevó directamente, después de todo no había nadie cerca que lo pudiera ver desnudo, aunque claro, a él no le importaba ya que siempre le elogiaban el buen físico que tenía, y eso le subía el ego. Estaba tan ensimismado en lo que estaba haciendo –nada excepcional, solo prepararse para un baño- que no se había percatado que una de las duchas ya estaba abierta, probablemente era alguien de los del club de básquet, últimamente se estaban quedando a entrenar hasta tarde por las competencias.

Sousuke estaba por acabar de darse una larga ducha, que lo había relajado por completo -Se había demorado más de lo propuesto, pero había valido la pena- Cuando se dio cuenta que alguien había abierto una regadera al lado, más exacto a dos espacios más allá por la misma fila de duchas. Sinceramente no le interesó mucho, hasta que se dio cuenta de que probablemente era Rin. Cerró la regadera y tomó su pequeña toalla para secarse la cara y un poco el pelo, la puso sobre sus hombros y comenzó a caminar para llegar a su ropa. La persona que se estaba duchando había escogido una ducha más cerca del vestidor por lo que no vio que él también se encontraba ahí. No le importó caminar sin taparse, si sus suposiciones eran correctas era Rin el que estaba ahí. Se acercó un poco más, y tal como había predicho, era el pelirrojo el que se estaba tomando una ducha -Bien caliente por lo demás- Ya que el vapor que salía era impresionante y exagerado según el pelinegro, que era de dejar correr el agua a temperatura templada. Sousuke se paró afuera de la ducha y se cruzó de brazos. Una idea cruzó por su mente. Aunque estaban "enojados" disfrutaba el burlarse de Rin, y su humor había cambiado un poco al imaginarse la cara de este si lo viera parado detrás de el, desnudo, como si nada. No era como si no se hubieran visto desnudos, lo hacían siempre cuando se duchaban; y no se apenaban para nada, se conocían de críos, pero Rin le descubriría mirándole en la ducha y seguramente se sonrojaría o algo, como era Rin a veces.

Sonrió ladinamente y miró como el pelirrojo dejaba correr el agua por su pecho, se frotaba los hombros con las manos, tocaba delicadamente la parte de atrás de su cuello y acariciaba su pelo. Sousuke dejó de sonreír y le prestó aun más atención a Rin –Sin darse cuenta, claro- de haberlo hecho, se habría girado para no mirarle. Rin ahora había pegado su frente a la pared, por lo que el agua caía directamente en su cuello y bajaba por su espalda. Sousuke tragó duro, por un momento se imagino a él tras de Rin, aprisionándole las manos en la pared y respirando en su cuello, sometiéndolo bajo sus fuertes brazos. Recordó cuando eran pequeños, el aroma de Rin era dulce y travieso, lo tenía grabado en su memoria ¿Cómo sería su esencia ahora? ¿Seguiría siendo dulce o…? Un muy leve sonrojo apareció en las mejillas de Sousuke al darse cuenta de sus pensamientos, giró inmediatamente su vista hacia la banca. Quería provocarle un sonrojo a Rin pero fue al revés y Rin ni siquiera lo sabía. Esto le dio una idea, en un futuro próximo retaría a Rin a una competencia para ver quien le provocaba un sonrojo primero al otro. Pero eso lo vería luego, ahora tenia que disculparse primero. Dejo pasar lo de la broma, por evidentes razones; el pelirrojo aun no salía y él no quería seguir mirándolo; las sensaciones que tuvo recién le resultaron un tanto incomodas, sobre todo porque no era primera vez que le pasaba, aunque ya hace un tiempo de eso. Decidió caminar hasta el vestidor y esperar a Rin allí, quería disculparse hoy.

El adolescente de hebras rojas empezó a sentir su cuerpo relajado, por lo que supo que era suficiente. Cerró la regadera y deslizó las manos por su pelo hacia atrás, quitando las gotas que caían a su rostro. Apretó un poco las mechas de atrás para dejar escapar el agua que sobraba y con una mano en su hombro estiró un poco el cuello moviéndolo hacia los lados, provocando así que sonara y se relajara por completo. Sintió el aire frío, por lo que el vapor que había alrededor se estaba disipando -Sí que era mucho- pero las duchas de Rin eran como un ritual de relajación, por ende necesitaba de algo caliente; aunque antes de esto, si se dejaba tocar por el agua fría, ese era el principio de su ritual, primero se quitaba el calor del momento y el sudor con el agua fría, para luego dejar su cuerpo en manos del mejor masaje que podría recibir alguien; el agua caliente, así podría sentir como si estuviera en un onsen. Caminó hasta el vestidor soltando un bostezo en el camino, estaba exhausto.

Sus ojos se abrieron sorprendidos al ver la figura esbelta e imponente de Sousuke apoyado en la pared, mirándolo ¿Cómo no se dio cuenta antes? Las cosas que estaban en la banca eran del pelinegro y el no lo había notado. Por eso las prendas se le habían hecho familiares, sin embargo no lo pensó mucho ya que estaba agotado. Esquivó rápidamente su mirada de la mirada del pelinegro y actúo como si no estuviera allí.

—Rin.

Ignorado.

—Oi Rin.

Nuevamente ignorado.

—Tsk.

Podría simplemente haberle pedido disculpas y salir de ahí, pero a Sousuke no le gustaba hacer eso, Rin debía de mirarlo a los ojos, sino no se sentiría una verdadera disculpa. Así que lo siguiente que hizo fue aproximarse al pelirrojo que le había dado la espalda. Posó suavemente su mano en el hombro del otro. Sorprendiéndole.

Rin estaba poniéndose los pantalones que usaba para dormir, por lo que sólo estaba apoyado con una pierna, y al sentir repentinamente la mano de Sousuke en su hombro giró tan rápido que perdió el equilibrio, llevándose al pelinegro con él directo al suelo.

—¡Tú! ¡No solo asustes a alguien así! —Decía el pelirrojo enfadado levantándose del piso. Se cruzó de brazos y giró para encarar a Sousuke, pero no se esperaba eso— So-Sousuke… —Sus ojos se abrieron a más no poder.

—No es nada.

—N-no… puede ser ¡Oi! ¿Te hiciste daño verdad?

Y solo una mirada bastó para hacer preocupar a Rin.

¿Qué les parecio? ¿Bueno, malo, largo, corto, aburrido? Bueno, ojala lo hayan disfrutado.

Lo que viene ahora esta tal cual como lo puse el dia que lo terminé ;DD

"Uff al fin lo termine, tenia empezado este fic de hace ya muchos, muchos dias pero no sabia como seguirle a esto y hubieron partes que me costaron lo suyo. Creo que lo mas difícil es terminar un capitulo, no saben cuantas veces estuve tentada a dejarlo como un solo capitulo y hacerlo largo de una sola vez, pero no lo quiero asi, ya que los fics que yo amo, los amo, porque los personajes se van enamorando de a poco o bien les cuesta darse cuenta de sus sentimientos o lo otro es que no pueden estar juntos altiro.. askdhasdj me gustan las historias largas, se nota(?

Bien lo último para no aburrirles, siempre pensé que mi primer fic seria MakoHaru o RinMako pero fue SouRin estaba sorprendida akjdhasdj uno termina de leer libros y se le vienen un montón de ideas a la cabeza, en este caso fue para estos bellos tórtolos, me alegra cooperar con el Sourin ya que no veo mucho movimiento con esta pareja, lástima :c"

PD: Si les gusto la historia, si la odian, si tengo faltas ortográficas, o bien no les pareció algo, déjenlo en un review :33 son muy bien recibidos ¡Ah! y se me olvidaba solo aceptaré criticas constructivas, es mi primer fic y no quiero irme hacia abajo tan pronto :D

See You Next Caballa Time (¬/¬)/